Tras la Estrella de Belén Alejandro Vidal Crespo Director de Estrategia de Mercados de Banca March INFORME MENSUAL DE ESTRATEGIA Enero 2016 Informe mensual de estrategia. Enero de 2016 Tras la Estrella de Belén Cuenta la tradición cristiana que tras el nacimiento de Jesús, tres Reyes Magos fueron guiados hasta el portal por una luminosa estrella, que se detuvo sobre el Nacimiento. Ese acontecimiento es el que celebraremos, especialmente con los más pequeños de la familia, en estos próximos días. ¿Pero realmente existió un evento celeste en las fechas de la Navidad original, o se trata de una hermosa historia sin fundamento empírico? Dice el evangelio según San Mateo “Después de oír a Herodes, los Magos partieron. La estrella que habían visto en el este les precedía, hasta que se detuvo en el lugar donde estaba el Niño”. Dos datos importantes podemos extraer de este verso de la Biblia. En primer lugar, Mateo se refiere a los Reyes simplemente como Magos. De hecho, no se les menciona como reyes hasta trescientos años después, ni aparecen nombres propios hasta bien entrada la Edad Media. Así que el primer dato a analizar, es que son Magos. Entendido en el contexto de la época, la traducción actual más plausible es que serían hombres educados en la ciencia, probablemente astrónomos o eruditos muy acostumbrados a buscar presagios en el cielo, algo por otra parte muy habitual en la historia. El segundo elemento importante, es que la estrella se movía, no era un elemento estático en el firmamento en un principio, sino algo dinámico, que señalaba un camino a seguir para luego mutar a algo estático. ¿Pudo ser entonces un cometa, como muchas veces se representa la estrella de Belén? Difícilmente, porque un evento tan significado y visible a simple vista se habría documentado extensamente en los registros de otras culturas, como por ejemplo en China, donde los astrónomos registraban cometas y otros elementos astronómicos desde siglos antes del nacimiento de Cristo. Así que posiblemente, lo que estemos buscando sea algo más refinado, sólo al alcance de la observación de astrónomos expertos. La tarea se centra entonces en escrutar los registros científicos en busca de elementos que pudieran encajar, y para eso, se necesita precisar al máximo la fecha del Nacimiento. El nacimiento de Jesús debe situarse antes del año cero, puesto que coincide con el censo de población ordenado por el emperador romano César Augusto, entre los años 8 y 6 A.C. Además, tuvo que ser previo a la muerte del rey Herodes, acontecida en el 4 A.C. Por tanto, lo más probable es que Jesús naciera entre los años 7 y 6 A.C, algo que también encajaría con la matanza de niños planeada por Herodes, acontecida poco antes de su muerte, y en la cual ordenó ejecutar a todos los niños menores de dos años. Situándonos pues en esas fechas, descubrimos que entre el año 7 A.C. y el 6 A.C. tuvo lugar una rara conjunción planetaria. Júpiter se situó exactamente frente a Saturno, y por el efecto visual desde la Tierra, pareció adelantarse y retrasarse con respecto al planeta anillado hasta en tres ocasiones. Además, lo hizo en la constelación de Piscis, el pez, símbolo judío y de los cristianos primitivos. Recordemos que Júpiter es el Dios principal, el Rey, y Saturno es su padre. De modo que en la constelación del Pez, los judíos, un Rey paseaba orgulloso frente a su padre, desplazándose hacia el Oriente primero, y al Occidente después. ¿Pudo ser motivo suficiente como para que tres hombres de ciencia se desplazaran hacia Judea para comprobar si se había cumplido una vieja profecía judía, la del nacimiento del Mesías? Además, en el año 6 A.C., el planeta Marte se unió al evento, colocándose exactamente entre Júpiter y Saturno en una triple alineación planetaria, y siempre en la constelación de Piscis. Marte, el dios romano de la guerra, añadiría el elemento de conflicto al presagio. Y para terminar de rematar la historia, en el año 5 A.C. se produjo una potente Nova, un evento estelar importante, en el que una estrella incrementa su luminosidad de forma muy ostensible, destacando muy claramente en el firmamento durante semanas. Informe mensual de estrategia. Enero de 2016 De nuevo San Mateo relata que “Herodes entonces, viéndose burlado por los Magos, se llenó de ira, y mandó matar a todos los niños de dos años para abajo que había en Belén y en todos sus alrededores, conforme al tiempo que había inquirido de los sabios”. ¿Qué tiempo podrían haber inquirido? ¿Pudieron contar los Magos a Herodes que llevaban casi dos años observando la conjunción de Saturno y Júpiter en Piscis, y que ellos interpretaban eso como el nacimiento del nuevo Rey de Judea? ¿El movimiento de Júpiter de este a oeste era la estrella que marcaba el camino? ¿Fue la Nova estática en el cielo el elemento definitivo? ¿La entrada de Marte en la escena, y el conflicto que eso presagiaba, fue lo que hizo a los Magos desconfiar de Herodes y no regresar por su palacio, desencadenando la matanza de los niños? ¿O nada de lo anterior? Sea lo que sea, desde el Equipo de Estrategia de Banca March les deseamos un muy feliz día de Reyes, y como no, les transmitimos nuestros mejores deseos para este 2016 recién estrenado.