LA UNIDAD TRIBUTARIA Y NUESTRO BOLSILLO La unidad tributaria, es un elemento incorporado por el legislador en la reforma del Código Orgánico Tributario del año 1994, el cual fue creado como una unidad de medida a ser utilizada a fin de que se reconozca a efectos tributarios la inflación año tras año, todo ello en la búsqueda de que la determinación de los tributos de cada uno de los contribuyentes se ajuste a sus ingresos reales y no al aumento meramente nominal de sus ingresos por efecto de la inflación. Es así, como la legislación la ha considerado como una unidad de carácter objetivo y de simple aplicación aritmética que permite la actualización monetaria por inflación. Este ajuste anual de la unidad tributaria, se debe realizar de acuerdo al procedimiento establecido en el citado Código, el cual prevé que debe ser ajustada anualmente tomando como base o punto de partida la variación del Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC), cuyo valor recoge la variación inflacionaria durante un periodo de tiempo determinado en la economía venezolana. Es precisamente en el ajuste de la unidad tributaria donde quisiéramos llamar la atención, debido a que desde hace algún tiempo, no se ha realizado el incremento de esta unidad de medida considerando la variación del Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) o la variación del Índice de Precios al Consumidor (IPC) del Área Metropolitana de Caracas, publicados por el Banco Central de Venezuela, tal como se muestra a continuación. UT AÑO ANTERIOR UT AJUSTAD A % AUMENT O UT % Inflación según BCV (año anterior) Déficit del aumento de la UT 90 107 18,89% 19,53%1 -0,64% 2014 107 127 18,69% 52,66%1 -33,97% 2015 127 150 18,11% 68,54%2 -46,58% AÑO 2013 1- Inflación determinada en base al Índice de Precios al Consumidor del Área Metropolitana de Caracas, de acuerdo al Código Orgánico Tributario publicado en la Gaceta Oficial N° 37.305 de 17 de octubre de 2001. 2- Inflación determinada en base al Índice Nacional de Precios al Consumidor, de acuerdo al Código Orgánico Tributario publicado en Gaceta Oficial Extraordinaria N° 6.152 de fecha 18 de Noviembre de 2014. Ahora bien, ¿cuál es el efecto de esta situación sobre cada uno de nosotros? Dado a que la unidad tributaria es la base que permite se reconozca la inflación a efectos tributarios, al no ser ajustada de manera correcta cada una de las personas tendrá una mayor carga impositiva, ya que la velocidad en la que aumenta la cuantía de los ingresos de cada uno de los contribuyentes, debido a la inflación, es superior a la velocidad en que ha aumentado la unidad tributaria. Para colocar este punto en perspectiva, supongamos que una persona durante el año 2014, haya visto incrementado sus ingresos en un porcentaje igual a la inflación, esto representaría que sus ingresos anuales durante el 2014 aumentaron en alrededor de un 52,66% con relación a los ingresos recibidos en el año 2013, sin embargo la unidad tributaria sólo fue incrementada en un 18,11%. Esto lo que significa, es que la diferencia entre el 52,66% y el 18,11%, es decir un 34,55%, serán ahora ingresos que estarán sujetos al pago de impuesto sobre la renta a una tasa superior a la que realmente deben estar sujetos, o peor aún existe una porción de ingresos que está siendo gravado por el impuesto, sin tener que haber estado nunca sujeto a este gravamen. 1. De acuerdo al Código Orgánico Tributario publicado en Gaceta Oficial Extraordinaria N° 6.152 de fecha 18 de Noviembre de 2014. Con esta ejemplificación, se debe llamar la atención para que se vele por el fiel cumplimiento de lo establecido en las normas, ya que el desconocimiento de un factor de inflación real al momento de la determinación de la unidad tributaria, representa un incremento del impuesto sobre la base del aumento de los ingresos por efecto de la inflación, lo que va en detrimento de la capacidad contributiva de cada una de las personas naturales y jurídicas del país. Es importante mencionar que esta situación genera, que aquellos entes acreedores de tasas, contribuciones y sanciones, determinados de acuerdo al valor de la unidad tributaria, vean disminuidos sus ingresos en términos reales por estos conceptos. Así como también, los trabajadores sobre aquellos beneficios que se determinen en unidades tributarias, tal como es el caso del beneficio de alimentación, verán mermada su capacidad de compra. Rubén Zerpa Senior Manager / People Advisory Services