RITOS INICIALES Canto de Entrada: Tiene Jesús una mirada que cautiva sin remedio, El que frente a Él se para ya rendido cae preso. Debajo de una corona brillan sus dos ojos negros, Que me dicen si le canto lo que le escribo me va dictando y soy cautivo ya de sus versos. Tu mirada, dice tanto Tu mirada; Es que no sé porqué razón me llegas hasta el corazón. Esa mirada no entiende nadie porqué, El que lo mira su pasión derrama en él. Tu mirada, me hizo volver otra vez… Me has contado muy bajito que desde el cielo veías Como de color “morao” ya las calles se vestían. Los que están ahí contigo ya preparan tu venida Y estarán aquí conmigo porque tú sabes Mi Nazareno que cada año vuelven a verte. Y volverá a salir cuando la primavera traiga ese aroma de jazmín, de “morao” entero se han vestido todas las calles de Alhaurín, Y esperaré otro Jueves Santo para verme junto a Ti MONICIÓN AMBIENTAL Hermanos y Hermanas de fe en Jesús Nazareno: Abrid vuestros corazones a la alegría y a la esperanza, el Día de Jesús ha llegado. Su Dulce Nombre da sentido al júbilo que nace desde nuestros más profundos sentimientos de fe. Hemos sido convocados para celebrar y compartir todos juntos este momento tan importante como es la Eucaristía. Jesús, manifestando públicamente su amor, se nos entrega hoy sin condiciones, para convertirse en 2 alimento de salvación. Su sacrificio, que a todos nos reúne en este sacramento de amor, como Iglesia que somos en Cristo Jesús. A punto estamos como Iglesia de clausurar el Año Paulino. Año dedicado a redescubrir la figura del misionero por excelencia Pablo de Tarso. Su encuentro con Jesús fue decisivo y radical para toda su vida. A Pablo le preguntó: “¿Paulo, por qué me persigues?” Hoy Jesús nos reclama a todos para seguir sus pasos; nos llama a la conversión desde la aceptación plena de que Él es nuestro salvador. La eucaristía debe ser para todos nosotros ese punto de partida junto a Jesús. Él nos convoca al compromiso y a la misión de propagar la verdad. SÍMBOLOS Hoy traemos ante la venerada Imagen de Nuestro Padre Jesús Nazareno y su Santa Madre, Nuestra Patrona la Virgen de Gracia, una serie de símbolos que quieren reforzar esa realidad de Iglesia que, como a Pablo, nos llama al compromiso vivo de la evangelización, nos hace enviados de la verdad del amor de Jesús, convirtiendo nuestras vidas en instrumentos de misión. Cruz Símbolo de la redención y salvación del mundo, cruz de la misión, cruz del sufrimiento, que se convierte hoy en entrega a la causa de Jesús vivo. Cruz de Jesús Nazareno, que cargada sobre sus hombros nos invita a la conversión y a descubrir al mismo Jesús Resucitado, para que descubramos que la cruz nos hace a todos misioneros. Ciriales La luz que rompe con toda tiniebla; la que marca nuestro camino de luz que se abrió en aquella mañana de Pascua y que nos muestra el sendero a seguir junto a Jesús, como Iglesia que nace del Fuego Santo del Espíritu, la que proclama sin parar que Jesús vive entre nosotros. 3 Túnica de Jesús La túnica de Jesús, de Nuestro Padre Jesús Nazareno, que lo reviste de Rey, para remarcar su majestuoso sacrificio. Un Jesús penitente de túnica de terciopelo morado y mil y una puntadas de fino oro, que como paño cubre el altar más preciado para celebrar el acto más sublime de una vida entregada por amor. Mística casulla, símbolo de la caridad, haciendo dulce y suave el yugo de Jesús. Cíngulos Los cíngulos que ciñen a la cintura de Nuestro Padre Jesús su sagrada túnica, simbolizan la fuerza de su amor, su castidad, su entrega sin medida, firme y universal, y también nos recuerdan el látigo con que azotaron a Jesús. Hoy hacen presente nuestro compromiso con la Iglesia de Cristo. Corona de Espinas “Los soldados le llevaron dentro del palacio, es decir, al pretorio y llamando a toda la cohorte, le visten de morado y, trenzando una corona de espinas, se la ciñen. Y se pusieron a saludarle: « ¡Salve, Rey de los judíos!» Y le golpeaban en la cabeza con una caña, le escupían y, doblando las rodillas, se postraban ante él.”, del evangelio de Marcos 15, 17-19. Trenzada corona de espinas. Dolor y sufrimiento para el Hijo del Hombre, que hoy se torna Rey de Reyes, con la victoria sobre el pecado coronando su regia cabeza, corona de humildad para ser entre nosotros el más manso de todos. Paños Morados Jirones morados para nuestros balcones, paños de fastuoso símbolo, para quienes están de fiesta, que abren sus puertas al paso de la imagen de Nuestro Padre Jesús Nazareno. 4 Corazones que se rinden en tan magno acontecimiento de un fervor popular que postra sus raíces en el mismo ser cristiano de un pueblo que vive y se siente hermano en Jesús Nazareno. Padres e hijos de la banda De padres a hijos se transmite la fe; de padres a hijos el paso de tradiciones para que éstas se mantengan vivas; de padres a hijos la historia y el quehacer de nuestra Banda de Cornetas y Tambores con Escuadras de Gastadores y Guiones en su XXX Aniversario. Ellos con el lenguaje musical, con sus instrumentos, enseres y galas, se encargan de alegrar este jubiloso encuentro; ellos son ejemplo de cómo se hace día a día Hermandad. Hermanos y hermanas en Jesús Nazareno: todos estos símbolos son imagen viva de la vida de Jesús y toman su real importancia y significado en lo que a continuación vamos a celebrar, el Sacramento de la Eucaristía. Aclamemos juntos que hemos sido redimidos por Jesús Nuestro Señor. Sentid que Jesús está con nosotros, que compartimos con Él la misión de toda la Iglesia. Que como Pablo, figura central en este año litúrgico, nos sintamos llamados a ser y sentirnos verdaderos misioneros de Jesús. Sólo así podremos hacer que cada día de nuestras vidas sea un Día de Jesús, pues Él se convierte en nuestra mayor alegoría. ACTO PENITENCIAL Canto del Ten Piedad: “Ten Piedad Señor del que camina por Tu senda, Y perdona los pecados que cometen en la Tierra; Ten Piedad Señor de mis hermanos que cantando te suplican; Ten Piedad, Cristo Ten Piedad, Señor Ten Piedad; Piedad.” Himno del Gloria 5 LITURGIA DE LA PALABRA En estos momentos damos comienzo a la Proclamación de la Palabra. El ambón pasa ahora a ser el centro de la celebración. La Palabra de Dios va a ser proclamada. Por eso vamos al realzar el ambón con un paño, y delante ponemos un ramo de flores, clara invitación a la vida, como la misma palabra de Dios. • LECTURA DEL LIBRO DE JOB 38,1.8-11 “Aquí se romperá la arrogancia de tus olas” • SALMO RESPONSORIAL “Dad gracias al Señor, porque es eterna su misericordia” • LECTURA DE LA SEGUNDA CARTA DEL APOSTOL SAN PABLO A LOS CORINTIOS 5, 14- 17 “Lo antiguo ha pasado, lo nuevo ha comenzado” Acabadas las dos lecturas y el salmo, vamos a vivir el momento más importante de esta Liturgia de la Palabra. El Evangeliario se llevará en procesión hasta el ambón, la Palabra viva de Jesús, porque es Él mismo quien se envía a nosotros. Encendemos los cirios, con ellos simbolizamos que la Palabra de Dios es Luz, es la fuente de vida para el cristiano. Ella nos marca el camino a alcanzar. Y el Incienso para la palabra diligente que emana de la voluntad de Dios, hará que nos embriague con su perfume y penetre en nosotros, para que nos transmita actitudes para las buenas obras que son como el humo y el buen olor, que Dios acepta complaciente. Todos nos ponemos de pie en señal de respeto y atención. Estamos en una actitud de total escucha. Canto del Aleluya • LECTURA DEL SANTO EVANGELIO SEGÚN SAN MARCOS 4, 35-41. ” ¿Quién es éste? ¡ Hasta el viento y las aguas le obedecen ¡” 6 ORACIÓN DE LOS FIELES • Te pedimos por la Santa Madre Iglesia, con el Papa Benedicto XVI, los Obispos, sacerdotes y demás fieles de Dios; para que como Pablo sean verdaderos transmisores del Evangelio y manifiesten la misión de los cristianos en su fuerza salvadora. Escúchanos Padre. • Por todos los dirigentes y gobernantes que tratan de solventar la “crisis”; para que no olviden que las personas están por encima de lo material y basen el nuevo orden económico en el respeto, la honradez, la tolerancia y la solidaridad con los más débiles. Escúchanos Padre. • Te pedimos Jesús, por los padres y madres; para que fieles a Tu Palabra, inicien a sus hijos e hijas en su formación cristiana y que les ayuden a construir un mundo mejor, de manera que sus valores humanos y cristianos crezcan y den pleno sentido a sus vidas. Escúchanos Padre. • Por todos los enfermos y necesitados; para que no caigan en el desánimo ni en la desgana, y puedan recorrer este duro caminar con ilusión, fe y esperanza. Escúchanos Padre. • Te pedimos por nuestros seres queridos que ya no se encuentran a nuestro lado; para que los acojas en tus brazos y disfruten de un descanso eterno lleno de paz y felicidad. Escúchanos Padre. • Finalmente te pedimos por todos los que hoy nos hemos congregado en Tu presencia, para que llenos de Tu gracia, seamos auténticos receptores de Tu mensaje; para que lo vivamos fielmente desde la Fe, y transmitamos nuestro compromiso de tenerte como único Dios y Padre en todos los actos que en Tu nombre se celebran. Escúchanos Padre. 7 LITURGIA EUCARÍSTICA Damos comienzo ahora a la Liturgia Eucarística. Lo hacemos con la presentación de los dones: la colecta, que es la aportación económica comunitaria para el mantenimiento de la parroquia y sus actividades pastorales, además de una aportación económica que la Hermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno hace a la comunidad parroquial como señal de su compromiso con las necesidades de la Iglesia Local. Durante los días del Triduo, esta Hermandad ha estado recogiendo alimentos para ayudar a Cáritas Parroquial en su labor social. Hoy, nuestros jóvenes comprometidos con esta labor, traen hasta este altar una representación de todo lo recogido. Queremos como Hermandad dejar constancia de este “Año Santo Paulino”, en el 2000 aniversario de su nacimiento, ofreciendo a la Parroquia este cuadro con la imagen de San Pablo, apóstol de los gentiles, y máximo símbolo de una Iglesia misionera. Pablo pasó de perseguidor a fiel seguidor, queremos que su transformación sea reflejo en nuestras vidas. Nuestra Parroquia, por ser de primer orden, fue nombrada bajo la advocación de Santa María de la Encarnación. Hoy ofrecemos a nuestra Parroquia este cuadro que recoge el Anuncio del Arcángel Gabriel a María, que recibió en su seno al hijo de Dios para ser Madre de Jesús y Madre nuestra. Con ello queremos resaltar la importancia que tiene el Misterio de la Encarnación y que celebramos cada 25 de Marzo. Y finalmente presentamos los dones del Pan y el Vino; signos de la eucaristía. A continuación vendrá la Plegaria Eucarística, cuyo punto culminante es la Consagración, siguiendo después los Ritos de la Comunión. Canto del Ofertorio: “Quédate” 8 Plegaria Eucarística Aclamación del Santo Rito de la Comunión Canto del Padrenuestro Canto del Cordero de Dios Canto de Comunión: “Una espiga dorada” “…Acércate al altar con tus hermanos, Y comparte este pan con todos ellos, Que él es toda nuestra fe y nuestra vida, Que si él nada tiene ningún sentido…” RITO DE CONCLUSIÓN DESPEDIDA Hemos terminado nuestra celebración. En oración íntima sentimos su presencia en nuestro mismo ser. Alimentados por su cuerpo y sangre, Jesús nos llama a seguir siendo fieles a su mandato; a compartir con Él la misión evangelizadora que como Iglesia que somos tenemos la obligación de ampliar, desarrollar y defender. Los misterios pascuales aquí celebrados nos abren las puertas a un camino de luz, de experiencias, de encuentros con ese Jesús que nos llama al igual que llamó a San Pablo a la conversión. Nos pide que no lo persigamos, que no nos dejemos llevar por los grandes ídolos de la sociedad. Jesús vive en cada uno de nosotros. Él quiere que manifestemos con su ejemplo de vida el amor que siempre mostró por los que le rodearon. Jesús es el Camino de Luz que va marcando el día a día en nuestras vidas de cristianos. Hoy queremos comprometernos en ese caminar cristiano. 9 Simbolizando ese camino de luz y esperanza del encuentro con Jesús, este grupo de mujeres, Hermanas de Jesús, que en santa promesa, siguen los pasos de Jesús, llevando el reflejo de la luz salvadora. Acompañados por el son del Himno de Nuestro Padre Jesús Nazareno, harán el recorrido de vuelta a su ermita, mientras a hombros de sus portadores su Bendita Imagen se pasea por nuestras calles, en un reguero de velas encendidas que nos van indicando por dónde va ese camino de salvación. Hermanas de Jesús, que tuvieron cada una su encuentro particular con nuestro Redentor y que a la sazón, sus vidas se han llenado de esperanza e ilusión. Desde la sencillez y la humildad, junto a Jesús Vivo, van creando Iglesia. Éste es el legítimo pueblo de Dios. Canto de Acción de Gracias: Himno a Ntro. Padre Jesús Nazareno “…Y los hermanos con amor te llevamos, hombro con hombro como llevas tu cruz, humildemente tu trono paseamos, por estas calles de mi pueblo andaluz, y los rosales quedaron ya sin flores, porque en tu trono todas las llevas tú, sus pétalos llovieron de los balcones, al paso de la imagen de Padre Jesús” Hermanas, hermanos: como en cada Eucaristía, salgamos a la calle llenos de gozo y traslademos lo vivido aquí a nuestras vidas. Seamos misioneros de Jesús Nazareno. Tras escuchar el cántico de despedida y tras la bendición final, se hará entrega de la Insignia de Oro de la Hermandad a D. Manuel Bonilla Pérez, en señal de respeto y reconocimiento a quien por su labor y dedicación ha sido y debe ser referente para un buen Hermano de Jesús. Esperemos en nuestro asiento a que termine el acto de entrega de tan valioso símbolo y festejemos con él y su familia este agasajo. 10 Después recibiremos un recordatorio de la Exaltación de este día. Jesús, se nos vuelve a presentar como guía en nuestras vidas. Él nos servirá una vez más para marcar nuestro camino. Con esta oración, marcaremos el comienzo de una esperanza, que siempre ponemos en Jesús Nazareno. Canto Final: En una pequeña ermita de centro un altar dorado, Entre el patrón de tu pueblo, María y El Resucitado. Allí “bajao” del cielo, está Jesús Nazareno desde que en Abril llegara, Para darle El Grande a tu pueblo con esa bendita cara. Las despedidas del día son de atardeceres malva, De buganvillas y lirios, de violetas y jacarandas. Y desde Abril hasta Junio, desde la noche hasta el día, de la tarde a la mañana, le regalan sus colores y así es su ropa morada. Y te pusieron Jesús, nombre digno de alabanza, El que salva al que conoce, por el que hasta el cielo canta. Tu Santa Madre María, te dio ese nombre, mi guía, mi Hermandad te proclama, y que no impidan decirlo; haces grande al que te llama. Haces grande el Viernes Santo cerrando la tarde clara, de blanco pinta la luna tu ropa morada. Y no hay día más grandioso que cuando sales glorioso y veo tu trono de nuevo, y ya se escucha en la plaza ¡Viva Jesús Nazareno¡ Entrega de la Insignia de Oro de esta Hermandad al hermano D. Manuel Bonilla Pérez. 11 Hermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno Comisión de Liturgia www.nuestropadrejesusnazareno.com