DE LA INCREIBLE HISTORIA LA HOJA TERMÓMETRO MIOCENO % hojas con borde entero PRESENTE % hojas con borde aserrado O cómo la temperatura y la historia evolutiva determinan el margen de las hojas La temperatura ambiental es uno de los factores que determina la forma de las hojas de las plantas leñosas. En general, ambientes tropicales (cálidos) tienen más especies con hojas de borde entero que ambientes templados (más fríos). Esto tiene que ver con compromisos existentes entre la fotosíntesis y el transporte de agua. En un determinado ambiente, el área de las hojas (que disminuye cuando los bordes son aserrados en vez de enteros) ha evolucionado de modo de permitir una adecuada fotosíntesis (hoja grande), y la menor pérdida de agua posible vía transpiración (hoja chica). ¿Influirá también la herencia de sus ancestros? Por ejemplo, una planta que vive en un ambiente frío (que favorece hoja aserrada) podría haber conservado el borde entero que tenían sus antepasados que habitaban lugares cálidos. Las temperaturas de eras geológicas pasadas en Sudamérica han sido tradicionalmente estimadas usando modelos de temperaturas y borde de hoja calculados a partir de floras de otros continentes y hemisferios. Pero la interrogante mencionada sobre la historia evolutiva motiva a preguntar cuál es la relación exacta entre temperatura y borde de hoja en las plantas de los bosques templados del sur de Chile. Para determinar la influencia de la historia evolutiva los investigadores estudiaron las relaciones históricas de parentesco entre 158 especies de plantas chilenas, y sobre esta genealogía se mapearon las características de la hoja. Efectivamente, los resultados mostraron que las plantas tienen una cierta inercia histórica: especies emparentadas tienden a compartir el mismo tipo de borde de hoja (aserrado o entero). Para establecer si los modelos usados anteriormente para estimar las temperaturas del pasado en Chile eran adecuados o no, los investigadores utilizaron datos de 30 localidades chilenas. En ellas se registró la actual temperatura media y la proporción de plantas con hojas de borde aserrado versus borde entero. Con estos datos se construyó una relación matemática que se comparó con otras obtenidas a partir de floras de otros continentes. Los datos corroboran la tendencia conocida: el porcentaje de hojas con borde entero aumenta con la temperatura. Sin embargo y como se esperaba, los modelos calculados con datos de Asia, Norte y Centro América y Australia, no pudieron predecir las temperaturas Chilenas actuales, como sí pudo un modelo surgido a partir de datos de Chile más Sudamérica tropical. Por lo tanto, para lograr estimaciones más precisas de las temperaturas del pasado es mejor usar modelos locales, o del mismo continente. Además de entregar una herramienta para lograr mejores estimaciones de paleotemperaturas de Chile, lo que ofrece una ventana para comprender el clima y sus cambios pasados y presentes, este estudio demuestra la importancia del legado histórico. En este caso demuestra cómo el parentesco entre especies de plantas determina en cierta medida (en conjunto con la temperatura), el tipo de borde de hoja. A otros investigadores les corresponderá estudiar si este también es el caso de las floras de otros lugares del mundo. Lo aislado del territorio chileno causa que su biodiversidad sea tan única como aquella de islas remotas. Esta investigación nos muestra el peso de la historia compartida por nuestras especies, y nos ayuda a comprender por qué la flora chilena es tan especial. REFERENCIA ¿Qué otros factores determinan la forma de la hoja? Ilustradora: LAURA HURTADO Gracias a la preservación de hojas fósiles que nos permiten conocer la flora de hace millones de años, la correlación entre forma de hoja y temperatura ha sido ampliamente utilizada en todo el mundo como herramienta para estimar el clima de tiempos remotos. Luis Felipe Hinojosa, Fernanda Pérez, Aurora Gaxiola, Isabel Sandoval | 2011 “Historical and phylogenetic constraints on the incidence of the entire leaf margins: insights from a new South American model.” Global Ecology ang Biogeography 20: 380-390 FINANCIADO CON FONDOS DEL ICM, MINISTERIO DE ECONOMÍA, FOMENTO Y TURISMO