¿Qué es la meningitis? ES LA INFLAMACIÓN DE LAS MENINGES. LAS MENINGES SON UNAS MEMBRANAS QUE CUBREN EL SISTEMA NERVIOSO CENTRAL, ES DECIR EL CEREBRO Y LA MÉDULA ESPINAL. LAS MENINGES ESTÁN BAÑADAS EN UN LÍQUIDO (LÍQUIDO CÉFALO-RAQUÍDEO) Y PROTEGEN EL CEREBRO. ¿Cuál es la causa? Las meningitis causadas por bacterias (meningitis bacterianas) son menos frecuentes. Las bacterias implicadas con mayor frecuencia en nuestro medio son: neumococo, meningococo (tipos B y C) y, menos, haemophilus influenzae tipo b. La meningitis bacteriana es una enfermedad extremadamente grave, de ahí los esfuerzos médicos en intentar por un lado erradicarla (por medio de vacunas incluidas en el calendario de vacuna: antihaemophilus influenzae tipo b, y, por otro, tratarla de manera agresiva una vez adquirida. Este tipo de meningitis es más frecuente en los meses invernales. ¿Cómo reconocer la meningitis? La presentación de la meningitis es diferente en función de que se trate de una meningitis viral o bacteriana, y también en función de la edad del niño. Hay que recordar, de todas maneras, que, en su fase inicial (las primeras horas) una meningitis es indistinguible de una infección viral sin importancia. * Un niño mayor con una meningitis viral suele referir dolor de cabeza intenso y presentar vómitos y fiebre, que generalmente suele ser moderada. Si es un niño pequeño, la cefalea es sustituida por una sensación de irritabilidad (llanto continuo). Los niños pueden estar así varios días? Un niño mayor con una meningitis bacteriana presenta dolor de cabeza, vómitos y fiebre generalmente elevada. En estas primeras horas puede ser indistinguible de un proceso gripal. En pocas horas, el estado del niño empeora de manera llamativa (decaimiento, tendencia al sueño), además de persistir los síntomas iníciales. En ocasiones, aparecen manchas en la piel. Un niño pequeño con una meningitis bacteriana presenta, en las primeras horas síntomas que similares a los que provocan otros procesos infecciosos sin importancia: fiebre, vómitos e irritabilidad. En pocas horas, comienza a predominar el decaimiento y el niño comienza a presentar mal aspecto, apareciendo, en ocasiones, manchas en la piel. ¿Qué hacer? Si pensamos que un niño puede tener una meningitis, debemos acudir rápidamente a un Centro de urgencia. No todos los niños que presenten un dolor de cabeza discreto, vómitos y fiebre deben acudir a un hospital. En la gran mayoría de las ocasiones se tratará de enfermedades banales (infecciones virales, procesos gripales,...) o enfermedades menos severas (neumonía, infección del tracto urinario,...) que pueden ser diagnosticadas por el pediatra habitual del paciente. En cambio, si el niño presenta un deterioro del estado general (tendencia al sueño, le cuesta responder o hablar espontáneamente,...) es recomendable consultar con rapidez en un Servicio de Urgencias. ¿Qué es lo que no debemos hacer? Sin consultar previamente con el pediatra, no administraremos al niño antibióticos. Si el niño presenta dolor de cabeza, vómitos y fiebre es bueno consultar, pero no administrar un antibiótico por nuestra cuenta. En el caso de que el niño padezca un proceso viral, el antibiótico no tiene ninguna utilidad y, si el niño padece una meningitis, un antibiótico por vía oral no cura jamás a un paciente y, en cambio, puede dificultar el llegar a un diagnóstico correcto. ¿Cómo se trata? * Meningitis viral: un niño con una meningitis viral requiere reposo, tomar líquidos abundantes y analgésicos (ibuprofeno o paracetamol). * En el caso de que un niño presente cefalea muy intensa o vómitos repetidos es necesario el ingreso transitorio en el hospital para administrar líquidos y/o analgésicos intravenosos. * Meningitis bacteriana: el tratamiento será siempre hospitalario. El niño debe ingresar en un Hospital para ser tratado y observado. Incluso, en ocasiones, los niños requieren permanecer las primeras horas en una Unidad de Cuidados Intensivos. ¿Cómo prevenir? * Vacunaciones: el desarrollo de ciertas vacunaciones ha conseguido prácticamente erradicar algunas enfermedades, no sólo algún tipo de meningitis bacteriana. Es el caso de la vacuna anti-haemophilus influenzae tipo b (anti-Hib). Esta vacuna fue introducida hace ya años en nuestro calendario vacunal habiendo disminuido dramáticamente la incidencia de meningitis por este germen.. Desgraciadamente aún no se dispone de vacuna frente a los gérmenes que ocasionan la meningitis bacterianas frecuentes en nuestro medio: meningococo tipo B. No existe vacunación frente a los virus causantes de meningitis virales. Ha llegado una revolucionaria vacuna para ayudar a proteger a su hijo contra la enfermedad Neumococica Invasiva. Consulte a su medico pediatra para su protección.