sociedades de garantía reciproca

SOCIEDADES DE GARANTÍA RECIPROCA
Dr. Rafael García Martínez
I. INTRODUCCION
La reciente Ley de Urgencia (Ley No. 17.243, publicada en el D.O. del 6 de julio de 2000) ha creado un
nuevo tipo societario, las Sociedades de Garantía Recíproca (SGR).
Esta Ley, a través de la creación de las SGR, brinda a las micro, pequeña y medianas empresas un
instrumento para facilitar el acceso al financiamiento necesario para la efectiva realización de sus
actividades.
Las SGR tienen como objeto principal otorgar garantías a sus socios partícipes (que únicamente podrán ser
micro, pequeñas y medianas) constituyéndose de esta forma en un instrumento que dinamiza el crédito, la
inversión y la generación de empleo.
II. REGULACION DE LAS SRG EN LA LEY DE URGENCIA
1. CONCEPTO Y OBJETO DE LAS SGR
Los artículo 16 y 17 de la Ley de Urgencia crean en nuestro derecho positivo las denominadas Sociedades
de Garantía Recíproca (SGR) fijando su objeto exclusivo en "el otorgamiento de garantías en beneficio de
sus integrantes y para respaldar obligaciones correspondientes al giro habitual de sus actividades".
Asimismo, estas sociedades podrán "prestar a sus socios servicios de asesoramiento", el cuál podrá
abarcar temas económicos, financieros, técnicos y de cualquier otra índole vinculada a las diversas
actividades desarrolladas por las micro, pequeñas y medianas empresas.
2. ESTATUTO JURÍDICO
La Ley de Urgencia permite crear las SRG tanto bajo la forma de Sociedades Anónimas como de
Cooperativas.
En el primer caso deberán denominarse "Sociedades Anónimas de Garantía Recíproca" (SAGR), quedando
regulada en todo lo no previsto por las previsiones de la Ley de Sociedades Comerciales (Ley No. 16.060).
En el segundo caso deberán denominarse "Cooperativas de Garantía Recíproca" (CGR), y en lo no previsto
por la nueva norma deberán atenerse a lo dispuesto por la ley 10.761 de fecha 15 de agosto de 1946, ley
madre de las cooperativas de producción y de consumo.
El Ministerio de Industria, Energía y Minería será la autoridad de aplicación y control de las SGR cualquiera
sea la forma jurídica que estas adopten.
2.1. Sociedades Anónimas de Garantía Recíproca previstas en la Ley No. 17.243
Las SAGR se rigen por las normas de la Ley de Sociedades Comerciales No. 16.060, tanto en su parte
general (art. 1 a 198), como específica de las sociedades anónimas (art. 244 a 473).
La nueva Ley de Urgencia exige que sus acciones sean nominativas, y se les otorga la posibilidad de que su
capital sea variable en los términos que serán establecidos por la reglamentación.
En cuanto a los socios, la ley establece dos categorías: los socios partícipes y los socios protectores,
prohibiéndose la posibilidad de ostentar las dos categorías simultáneamente.
Los socios partícipes podrán ser "únicamente, micro, pequeñas y medianas empresas, ya sean personas
físicas o jurídicas, que reúnan las condiciones para ser categorizados como tales, por la autoridad de
aplicación".
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Por su parte, serán considerados socios protectores "todas aquellas personas físicas o jurídicas, públicas o
privadas, nacionales o extranjeras, que realicen aportes al capital social".
Los socios protectores no podrán tener una participación superior al 49 % del capital social y, por su parte,
los socios partícipes no podrán tener, una participación individual de mas del 5 % en el capital social.
2.2. Cooperativas de Garantía Recíproca
Como ya se expresara, las SGR también pueden constituirse bajo la forma de Sociedades Cooperativas.
La normativa aplicable a las mismas era, de acuerdo a lo dispuesto por la Ley de Urgencia "las normas
legales aplicables a estas sociedades".
La redacción del texto de la Ley de Urgencia planteaba el problema de determinar cual era la normativa
aplicable a este tipo de cooperativa, cuestión que fue solucionada claramente por el Decreto Reglamentario
al establecer que "las cooperativas de garantía recíproca se regirán por las normas contenidas en la Ley No.
10.761, de 15 de agosto de 1946 y su Decreto Reglamentario de 5 de marzo de 1948". Dicha normativa es
la que regula a las Cooperativas de Producción y de Consumo.
III. EL NUEVO DECRETO REGLAMENTARIO
Con fecha 18 de octubre de 2000 fue publicado en el Diario Oficial el Decreto No. 294/000 de fecha 11 de
octubre de 2000, que reglamenta los artículos 16 y 17 de la Ley de Urgencia (Ley No. 17.243).
El decreto se divide en tres capítulos, a saber:
a) normas aplicables en común tanto a las SAGR como a las CGR.
b) aspectos particulares y exclusivos de las SAGR.
c) disposiciones transitorias.
1. NORMAS COMUNES A LAS SAGR Y A LAS CGR
1.1. Del Capital de las SGR
El artículo 4o. del Decreto Reglamentario establece que el capital de las SGR, cualquiera sea el tipo
adoptado, podrá variar de acuerdo al ingreso y egreso de los socios, aunque siempre se deberá respetar el
capital mínimo (art. 5). El capital mínimo de las SGR es el establecido para las sociedades anónimas por el
art. 279 de la Ley 16.060 (actualmente fijado en $ 599.973,00), debiéndose integrar el mismo "totalmente en
el acto de constitución de la sociedad". (art. 5)
1.2. Del monto de las operaciones
El Decreto Reglamentario, en sus artículos 6o. a 9o. establece los límites de monto de las operaciones que
pueden realizar las SGR, estableciendo topes máximos para el conjunto de operaciones avaladas, topes
máximos de garantías a sus socios, así como topes máximos de contratación con los acreedores
individualmente considerados.
1.2.1. Límite máximo de las operaciones avaladas por las SGR
El artículo 6o. establece que las SGR no podrán avalar operaciones que superen en más de cinco veces el
patrimonio de la sociedad, deducida la responsabilidad patrimonial mínima (que será igual al capital social
mínimo).
1.2.2. Operaciones de la SGR en referencia a los socios y a los acreedores
Las SGR no podrán asignar a un único socio garantías superiores a un 5 % del máximo de garantía, que
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equivale a cinco veces el patrimonio de la sociedad, deducida la responsabilidad patrimonial mínima.
Se les prohibe a las SGR contraer obligaciones con un mismo acreedor por un monto que supere el 20 %
del máximo de garantías.
1.3. El activo de las SGR
1.3.1. Valor de los activos
El artículo 7 establece que a los efectos de la evaluación de los bienes de la sociedad, el valor de los activos
puestos en garantía de las obligaciones de los socios no podrá diferir del valor otorgado por quien aceptó la
garantía. De esta forma se establece un efectivo control sobre la realidad del valor de los bienes aportados
a la SGR.
1.3.2. Mínimo de Liquidez
El activo de las SGR deberá tener un mínimo de liquidez (ML) equivalente a un 15% del monto de las
garantías otorgadas. Este ML deberá esta constituido por dinero en efectivo, depósito a la vista o a plazo fijo
o títulos de deuda pública emitidos por países con calificación libre de riesgo especulativo, por parte de dos
calificadoras internacionales, como mínimo (art. 9).
1.4. Del Fondo de Garantía
Las SGR deben constituir un Fondo de Garantía Recíproca (FGR) que integrará su patrimonio, que tiene por
objeto exclusivo el pago de las garantías otorgadas (art. 13).
El FGR estará constituido por los siguientes aportes (art. 14):
i. Aportes de los socios cuyas deudas sean garantizadas por la sociedad.
ii. Asignaciones de utilidades aprobadas por la Asamblea General.
iii. Recuperos por parte de las SGR de las sumas pagas en cumplimiento de los contratos de garantía
asumidos a favor de sus socios.
iv. Rendimiento financiero proveniente de la inversión del propio FGR.
v. Donaciones, subvenciones u otros aportes que reciba
1.5. Otras normas del Decreto Reglamentario
El Decreto Reglamentario establece que el estatuto social fijará las condiciones de ingreso y egreso de los
socios (art. 4).
Asimismo, establece que las participaciones sociales necesariamente deberán ser nominativas y su
transmisión se regirá por la legislación que corresponda al tipo adoptado y a lo previsto por el contrato social
(art. 10).
Las SRG además de los registros contables exigidos para las sociedades anónimas y cooperativas según el
caso, deberán llevar un registro de garantías otorgadas (art. 12), donde deberá constar:
i. las operaciones avaladas
ii. el monto de la operación
iii. la institución con la cual se realizó el contrato
iv. la fecha, plazo, tasa de interés y todo otro dato relevante.
2. NORMAS EXCLUSIVAS PARA LAS SAGR
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Como ya se adelantara el Decreto Reglamentario establece normas que regulan exclusivamente las SAGR
(Capítulo II, artículos 16 a 20). Éstas refieren principalmente a la regulación de la categorización de los
socios, al relacionamiento entre los mismos y de éstos con la SAGR.
2.1. Categorización de los socios
El nuevo Decreto Reglamentario reitera la solución legal categorizando a los socios de las SAGR en socios
protectores y socios partícipes.
La norma reglamentaria establece que la categorización de micro, pequeña y mediana empresa, condición
esencial para adquirir la calidad de socio partícipe, estará a cargo de la "Dirección Nacional de Artesanías,
Pequeñas y Medianas Empresas -DYNAPYME- del Ministerio de Industria, Energía y Minería.".
2.2. Relación entre los socios y la SGR
El artículo 17o. del Decreto Reglamentario reitera los límites de participación de los socios protectores y
partícipes en el capital social, así como el máximo porcentual a contratar con un mismo acreedor.
También reitera en el artículo 16 in fine, la prohibición de ser simultáneamente socio protector y socio
partícipe.
2.3. Otras normas del Decreto Reglamentario en relación a las SAGR
Por último, y en referencia al proceso de formación de las SAGR se establece que el procedimiento será el
establecido en la Ley 16.060 para las sociedades anónimas cerradas.
Con anterioridad a la constitución se deberá obtener la categorizacion de los socios partícipes,
presentándose el proyecto de estatuto ante la autoridad de aplicación.
También se establece que las sociedades anónimas o cooperativas existentes a la fecha de promulgación
de la Ley de Urgencia, contarán con un plazo de doce meses desde la publicación del decreto reglamentario
para dar cumplimiento a su reglamentación.
IV. CONSIDERACIONES FINALES
Descrito el régimen legal de las SGR recientemente implantado en nuestro derecho positivo, corresponde
realizar algunos comentarios de evaluación sobre el mismo. Tal como señalara el Dr. Eugenio Xavier de
Mello, resultan destacables los siguientes aspectos positivos del nuevo régimen legal:
* En primer lugar, es destacable la introducción por vía legal de este nuevo instrumento dinamizador de
nuestra economía, dirigido, a un amplio grupo de empresas que presenta grandes dificultades en el acceso
al crédito.
* En segundo lugar, la posibilidad de brindar asistencia en aspectos técnicos, financieros, estratégicos,
legales, etc., por parte de las SGR a sus socios resulta también loable, como forma de crear agrupaciones
especializadas que brinden este servicio a las micro, pequeñas y medianas empresas.
* En tercer lugar, esta forma de agrupamiento, con el mayor poder de negociación que el propio
agrupamiento implica, permitirá al pequeño empresario la obtención de un crédito más beneficioso,
mediante la negociación directa de la SGR con las instituciones financieras.
En contrapartida, puede señalarse como aspecto negativo principal el siguiente:
* La falta de incentivos fiscales perjudica significativamente la viabilidad de este nuevo tipo de sociedades.
En efecto, las complejidades para su creación y funcionamiento (controles administrativos, fondos de
garantías, categorización de socios con límites cuantitativos, limitaciones en el objeto, etc.), no se ven
compensadas con el otorgamiento de exenciones tributarias u otro tipo de incentivos fiscales.
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Ésta falta de incentivos especiales hace que la constitución de este tipo especial de sociedades (sujetas a
mayores controles y limitantes) pueda no resultar lo suficientemente atractiva para los interesados en su
creación.
En efecto, los eventuales interesados en constituir un fondo de garantía podrían optar por organizar el
mismo bajo cualquiera de los otros tipos societarios conocidos en nuestra legislación (Sociedad Anónima,
Sociedad de Responsabilidad Limitada, etc.) a través de los cuales podrían cumplir las mismas funciones
sin quedar sujetos a las controles y limitaciones especiales aplicables a las SGR.
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