Liberalization’s Last Frontier: Canada’s Food Trade Resumen del documento de la Conference Board of Canada (Julio de 2013) Descargue el documento completo: Haga clic aquí (en inglés) Las ventajas del aumento del comercio internacional son ampliamente conocidas y aceptadas por todos, especialmente en industrias específicas, tales como la fabricación de aviones y la electrónica. El comercio con otros países permite a la producción nacional especializarse en bienes que se pueden fabricar de manera más eficiente, en base a los recursos disponibles del país (agua, condiciones del suelo, el clima, sus capacidades, tecnología, instituciones, etc.), y venderlos a otros países a precios competitivos, y al mismo tiempo, importar bienes que no se producen en el país, a precios más bajos. La gran ventaja del comercio internacional es que cada país puede beneficiarse de una mayor variedad de productos a un precio más bajo, lo cual eleva el nivel de vida tanto de los países importadores como de los exportadores. Esta lógica también se aplica a los productos alimenticios. Aprovechando las ventajas del comercio, Canadá puede concentrar sus recursos en la producción de aquellos alimentos que hacen un mejor uso de sus recursos disponibles, como canola, trigo, lentejas, soya y productos cárnicos, y exportar a otros países. El acceso a los mercados internacionales fortalece estas industrias y genera “fuerza exportadora”, así como mayores aportaciones a la economía. Hay muchos productos alimenticios que Canadá no puede producir eficientemente, o durante todo el año. Al concentrarse en la producción de algunos artículos, es necesario importar los productos alimenticios que no son producidos internamente. Esto le permite a Canadá escoger entre los países que son capaces de producir determinados bienes de manera más eficiente a precios más bajos, como frutas tropicales, verduras frescas, vino y azúcar. Los consumidores, incluyendo los sectores más pobres de la población, son los principales beneficiarios de una amplia gama de productos alimenticios a precios accesibles , sin pérdidas en la calidad o la nutrición. Además, contar con proveedores de alimentos esparcidos por todo el mundo reduce la vulnerabilidad de Canadá a situaciones climáticas internas adversas y eleva la seguridad alimentaria del país. A pesar de los claros beneficios del comercio de alimentos, las barreras comerciales han imposibilitado que los consumidores reciban mayor provecho del comercio. No fue sino en 1995 que finalmente se empezaron a tratar los temas de las barreras comerciales a la agricultura y la alimentación. La Ronda Uruguay de negociaciones redujo eficazmente las barreras comerciales para los productos alimenticios. Los países en desarrollo también han reducido gradualmente sus barreras a los productos agrícolas, ya que muchos países se han hecho miembros de la Organización Mundial del Comercio (OMC). Estos acontecimientos han dado lugar a que el comercio mundial entre 2001 y 2011 se haya triplicado. Para Canadá, un gran exportador neto, esos hechos también han influido en la reciente diversificación de los flujos comerciales más allá del mercado de Estados Unidos y hacia el resto del mundo, incluyendo países como China, México, Hong Kong, Rusia y la India. Trade Facilitation Office Canada / Bureau de promotion du Canada Page 2 A pesar de todos los beneficios que proporciona el comercio, las barreras comerciales a los alimentos siguen siendo muy altas en comparación con otros sectores. En la mayoría de los países desarrollados, especialmente aquellos con un déficit comercial de alimentos, los elevados aranceles de importación son reflejo fundamentalmente de la existencia de políticas de apoyo al sector agrícola. Por el contrario, los países exportadores de alimentos dan poco apoyo al sector agrícola, ya que la mayoría de sus productores son lo suficientemente fuertes como para competir en el mercado internacional. Canadá, sin embargo, a pesar de ser un gran exportador neto, cuenta con políticas agrícolas y aranceles de importación mucho más altos que otros grandes exportadores de alimentos, como Australia, Nueva Zelanda y Chile. Los productos afectados con aranceles de importación más elevados y restricciones de cuotas en Canadá son la carne de res, cereales y preparados, así como los productos regulados: leche, aves de corral y huevos. En sentido general, y si lo comparamos con sus socios comerciales actuales, Canadá se desempeña relativamente bien en cuanto a restricciones al comercio, que incluye tanto las barreras arancelarias como no arancelarias, pero no si Canadá desea expandir su comercio a los mercados de más rápido crecimiento, su desempeño no es idóneo. La poca posibilidad que la Ronda de Doha reanude sus negociaciones y el poco éxito de los acuerdos multilaterales en el futuro cercano, han dado origen a un auge de Tratados de Libre Comercio (TLC) bilaterales y regionales en todo el mundo. Entre muchas otras negociaciones comerciales, recientemente Canadá ha estado negociando dos TLC fundamentales, el Acuerdo Estratégico Trans-Pacífico de Asociación Económica (TPP, por sus siglas en inglés) que incluye 11 países, y un Acuerdo Económico y Comercial Integral (CETA, por sus siglas en inglés) con la UE. Estos acuerdos fueron seleccionados en este informe como estudios de caso para evaluar las implicaciones económicas de las reducciones en las restricciones comerciales de Canadá. En virtud de las negociaciones del TPP, se han debatido muchos temas tradicionales de comercio como el acceso al mercado para bienes y servicios, las barreras no arancelarias, así como también algunos temas sensibles como los textiles y prendas de vestir, los derechos de propiedad intelectual y el comercio de productos lácteos, carne, azúcar y arroz que habrá que resolver antes de que se logre el acuerdo. Otro acuerdo posterior y más completo, el Área de Libre Comercio del Asia Pacífico (FTAAP, por su sigla en inglés), con 21 países, se considera el objetivo máximo a alcanzar. El estudio proporciona escenarios tanto para el TPP como el FTAAP, y abarca 18 productos, de los cuales sólo tres son de interés para Canadá: trigo, otros productos agrícolas y alimentos procesados y bebidas. Los resultados muestran que la desviación comercial provocada por el TPP contribuiría a reorientar las exportaciones de Canadá de trigo a otros productos. No obstante, el sector de los alimentos y el país se beneficiarían enormemente con el FTAAP. El aumento de la producción y las exportaciones de estos sectores podrían aumentar de 8 a 18 por ciento o más. La diferencia en las ganancias entre el FTAAP y el TPP se debe a que con el FTAAP los exportadores se beneficiarían de un mayor acceso al mercado de países clave como China, Filipinas, Indonesia y Tailandia. El estudio sobre el CETA elaboró dos escenarios que incluyeron liberalizaciones comerciales en el sector de alimentos. El primero incluyó una liberalización limitada de productos sensibles para ambas partes y la eliminación de aranceles de otros productos agrícolas, productos industriales y servicios mientras que el segundo incluyó la eliminación de aranceles en todos los sectores de bienes y servicios. Los resultados muestran que la liberalización parcial reduciría el PIB y las exportaciones en sectores industriales canadienses claves (trigo, aceite de Page 3 semillas, ganado y carne de ganado), ya que Canadá no estaría aprovechando las ventajas de un mayor acceso al mercado para sus productos cárnicos, mientras que a la carne importada de Europa no se le impondría ningún arancel. Con la liberalización total, todos los productos alimenticios tendrían mayores rendimientos, con excepción de la leche y los productos lácteos; pero las pérdidas derivadas de la leche y los productos lácteos serían compensadas con las ganancias en todos los demás sectores. Las ventajas más importantes del comercio de alimentos para Canadá son la expansión del sector de alimentos que trae el mayor acceso a los mercados de rápido crecimiento, así como una mayor seguridad alimentaria. Además, le permite a los canadienses beneficiarse de una mayor variedad de alimentos a precios más bajos, lo cual eleva el nivel de vida y la prosperidad económica. Sin embargo, las ventajas podrían ser aún mayores ya que Canadá sigue manteniendo altas barreras al comercio en algunos sectores de alimentos. Existen grandes oportunidades potenciales de mayores ventajas si Canadá adoptara liberalizaciones comerciales que enfrenten menor resistencia, dando pasos graduales, a través de TLC bilaterales o regionales, pero lo más importante sería replantearse las políticas sobre productos regulados que están en vigor actualmente.