Etapa del proceso de cobro en que se encuentra.

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Etapa del proceso de cobro en que se encuentra.
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El proceso de cobro se encuentra suspendido.
Si usted obtuvo una sentencia de nulidad para efectos, lo cual quiere decir que interpuso
un juicio de nulidad, el procedimiento de cobro que le había iniciado el SAT seguramente
fue suspendido con motivo de la interposición del medio de defensa, siempre que haya
otorgado la garantía del interés fiscal correspondiente en forma suficiente.
Usted debe saber que si obtuvo una nulidad para efectos, ésta no es la solución definitiva
de su problema, ya que es una solución parcial o temporal únicamente, pues el SAT no
tardará en reponer los procedimientos o actos que hayan quedado sin efectos, como le
explicaré más adelante.
¿Qué es una sentencia de nulidad para efectos?
Una sentencia de nulidad para efectos es una resolución emitida por el Tribunal Federal
de Justicia Fiscal y Administrativa, mediante la cual se deja sin efectos el acto impugnado,
pero a la vez se dejan a salvo las facultades de la autoridad para volver a determinar el
adeudo es decir, volver a generar el crédito.
Le voy a explicar paso a paso:
 Primero.- “Declarar la nulidad del acto” quiere decir que en la controversia se le ha
dado la razón a usted y ha quedado sin efectos el acto controvertido.
 Segundo.- “Dejar a salvo las facultades” significa que la autoridad que resuelve la
inconformidad llega a la conclusión que hubo algún vicio de procedimiento, es decir un
error cometido por el SAT en el procedimiento de revisión o en la determinación del
adeudo, pero que realmente el SAT está en posibilidad de reponer el procedimiento
viciado o erróneo. Es decir, que si la autoridad desea realizar nuevamente el acto que
quedó sin efectos, legalmente puede hacerlo.
En consecuencia de lo anterior, el SAT no tardará en reponer los procedimientos o actos
que hayan quedado sin efectos.
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Para determinar correctamente los alcances de una sentencia de nulidad para efectos, es
muy importante distinguir cuál fue el acto combatido, para ello le explicaré que hay dos
tipos de impugnaciones:
Impugnación que combate el fondo u origen del crédito.
Una impugnación que combate el fondo u origen del crédito, es aquél medio de defensa
que básicamente pretende demostrar que el documento determinante del crédito carece
de legalidad o que el procedimiento aplicado por la autoridad, para llevar a cabo la
determinación del adeudo, tiene algún vicio que invalida la determinación del adeudo.
Por ello, se dice que dichas impugnaciones son “de fondo” porque combaten el origen del
adeudo y se interponen en contra del documento determinante del crédito fiscal. Su
objetivo es echar abajo el documento que generó el crédito fiscal.
Impugnación de “forma” que combate únicamente el procedimiento de cobro.
Una impugnación que combate únicamente el procedimiento de cobro es aquel medio de
defensa cuya finalidad es demostrar que un acto administrativo que forma parte del
procedimiento seguido por la autoridad para llevar a cabo el cobro de un adeudo, no fue
realizado conforme a derecho, es decir, que al realizarlo, no se cumplió con algún
requisito de legalidad.
Los medios de defensa de este tipo atacan únicamente un acto dentro del procedimiento
de cobro y si se ganan, lo único que se logrará es que el procedimiento de cobro se
reinicie a partir del acto que quedó sin efectos. En consecuencia, si a través de un medio
de defensa se consiguió, por ejemplo, que un embargo quedara sin efectos, el SAT puede
reiniciar el procedimiento de cobro, reponiendo el embargo.
Si la impugnación que su abogado realizó sólo consiste en una inconformidad sobre el
requerimiento de pago, embargo, avalúo o remate, eso no resolverá su problema ni
extinguirá el adeudo.
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