GUÍA PARA SOLICITANTES DE LA CONVOCATORIA DE PROPUESTAS PARA LA RONDA 8 DEL FONDO MUNDIAL DE LUCHA CONTRA EL SIDA, LA TUBERCULOSIS Y LA MALARIA MINORÍAS SEXUALES Antecedentes: La Junta Directiva del Fondo Mundial de lucha contra el Sida, la Tuberculosis y la Malaria, en su XVI reunión celebrada en Kunming, China, en Noviembre de 2007, reconoció la importancia de abordar las cuestiones de género, poniendo de relieve la vulnerabilidad de las mujeres, niñas y minorías sexuales, en la lucha contra las tres enfermedades. Por consiguiente, decidió que para las Propuestas para la Ronda 8 los solicitantes deberían "enviar propuestas que trataran las cuestiones de género, con una atención especial a la vulnerabilidad de mujeres, niñas y minorías sexuales." Ya que la necesidad de satisfacer las necesidades particulares de los grupos vulnerables y las poblaciones más expuestas ha formado parte del proceso de propuestas desde la creación del Fondo Mundial, esta decisión reconoce la necesidad de dar un mayor protagonismo a este aspecto en la elaboración de propuestas. Para ayudar a los posibles solicitantes en la elaboración de propuestas para la Ronda 8, el ONUSIDA ha desarrollado la siguiente guía sobre las minorías sexuales. Minorías sexuales: En el contexto del riesgo de infección por el VIH, las minorías sexuales que requieren mayor atención son los hombres que tienen relaciones sexuales con hombres y las personas transexuales. Entre los hombres que tienen relaciones sexuales con hombres se incluyen tanto aquellos que se identifican a sí mismos como homosexuales como los que no. Las identidades y los roles sociales varían considerablemente en los diferentes contextos locales. Las personas transexuales también presentan una gran variedad de papeles e identidades sociales. Las personas encargadas de desarrollar las propuestas y los planificadores de programas deben analizar cada situación local para garantizar que la terminología utilizada no genere estigma, sea comprensible e inclusiva. Puede que sea adecuado utilizar los términos "hombres que tiene relaciones sexuales con hombres" o "transexuales" para presentar la propuesta, pero, siempre que sea oportuno, también se debería señalar y definir la terminología preferida localmente. 1 Todas las propuestas deben explicar claramente la relación entre la atención dedicada a las poblaciones identificadas como más preocupantes y la dinámica de la transmisión de la epidemia en el contexto local. Elementos que se deben tener en cuenta en el análisis de la situación (tanto de la epidemia como de la respuesta) El sexo entre hombres existe en cualquier cultura y sociedad, aunque su alcance y reconocimiento público varían de un lugar a otro. Es necesario evaluar empíricamente el papel que juegan las relaciones sexuales entre hombres en la epidemia nacional del VIH y adaptar las estrategias nacionales, estatales y locales destinadas a hombres que tienen relaciones sexuales con hombres a los datos sociales y epidemiológicos, teniendo siempre en cuenta la diversidad dentro de este grupo, las circunstancias socioculturales específicas y los riesgos a los que se enfrentan. Además, las personas transexuales han tenido que hacer frente en muchos contextos a una vulnerabilidad extrema al VIH como resultado tanto de su exposición a un alto riesgo de infección como de graves violaciones de sus derechos. Por ello, se deben tener en cuenta las situaciones a las que se enfrentan y evaluar empíricamente el papel que desempeñan en la epidemia las relaciones sexuales con personas transexuales. 1 Para consultar más orientaciones sobre terminología apropiada, véanse las Orientaciones terminológicas del ONUSIDA, disponibles en: http://www.unaids.org/es/KnowledgeCentre/Resources/PressCentre/default.asp y las UNESCO Guidelines on Language and Content in HIV- and AIDS-Related Materials http://portal.unesco.org/en/ev.phpURL_ID=35417&URL_DO=DO_TOPIC&URL_SECTION=201.html Draft 13.03.2008 Para acceder a más orientaciones sobre cómo identificar las necesidades y adaptar en consonancia los programas para hombres que tienen relaciones sexuales con hombres, véanse las Directrices prácticas del ONUSIDA para intensificar la prevención del VIH. La tabla 2.2 de la página 49 resume las necesidades de prevención del VIH específicas de este grupo. ((http://data.unaids.org/pub/Manual/2007/jc1274_practguidelines_es.pdf ) Otro documento de referencia de utilidad es el Informe de política del ONUSIDA: VIH y relaciones sexuales entre hombres (2006) http://www.unaids.org/es/KnowledgeCentre/Resources/PolicyGuidance/Techpolicies/men_men_sex_technical_po licies.asp), y para aquellos que trabajan en América Latina y el Caribe, véase el documento Derechos humanos, salud y VIH. Guía de acciones estratégicas para prevenir y combatir la discriminación por orientación sexual e identidad de género del ONUSIDA, Centro Internacional de Cooperación Técnica en VIH y Sida y Grupo de Cooperación Técnica Horizontal. (http://www.onusida.org.co/Derechos%20humanos%20salud%20y%20VIH.pdf). Fundamentos Los programas para el cambio de comportamiento dirigidos a las poblaciones más expuestas al riesgo de infección, como los hombres que tienen relaciones sexuales con hombres y las personas transexuales, son algunas de las intervenciones de prevención más rentables que existen y un componente esencial para cualquier programa nacional de prevención del VIH. Algunos de los motivos para incluir estos programas en la propuesta pueden ser los siguientes: o La infección puede difundirse rápidamente entre la población, especialmente si la tasa de relaciones sexuales anales sin protección es alta. o La gran capacidad de estos programas para ofrecer beneficios de prevención. Diferentes respuestas destinadas a reducir los comportamientos de riesgo y la vulnerabilidad al VIH de hombres que tienen relaciones sexuales con hombres han resultado un éxito en varios entornos. o Se puede producir un aumento de los comportamientos de riesgo si se desiste en los esfuerzos de prevención. Los programas y los servicios que satisfacen las necesidades y los derechos de los hombres que tienen relaciones sexuales con hombres y de las personas transexuales no son sólo valiosos intrínsicamente, sino que también constituyen medios esenciales para mejorar su salud y la de la comunidad general. ón destinataria Definir la poblaci En lugares con epidemias de nivel bajo las Directrices prácticas del ONUSIDA para intensificar la prevención del VIH señalan que los hombres que tienen relaciones sexuales con hombres deberían poder acceder a los servicios esenciales al menos en las principales áreas urbanas y a través de instalaciones seguras. En entornos de epidemias concentradas, generalizadas e hiperendémicas, es importante garantizar una alta cobertura en todos los lugares. También deben promoverse programas destinados dentro de estas poblaciones a aquellos que pueden ser especialmente vulnerables a la infección, tales como los profesionales del sexo, usuarios de drogas inyectables y aquellos que viven en entornos como instalaciones militares y cárceles donde la violencia y la coacción sexual pueden ser comunes. Es necesario realizar un esfuerzo especial para satisfacer las necesidades de información y servicios de las personas transexuales, quienes pueden no identificarse a sí mismas como hombres que tienen relaciones sexuales con hombres. Asimismo, se debería garantizar que las parejas femeninas de los hombres que tienen relaciones sexuales con hombres puedan acceder a la información y los servicios de prevención y atención. Principales actividades que se deben tener en cuenta y con las que se vinculan: Draft 13.03.2008 áreas de prestación de servicios Una respuesta integral a las necesidades de los hombres que tienen relaciones sexuales con hombres y de las personas transexuales abarca servicios de diferentes áreas de provisión de servicios, tanto de prevención como de un entorno favorable. Reconocer, en la legislación y en la práctica, los derechos de las personas cuyas identidades sexuales son diferentes y aumentar los programas del VIH sobre las necesidades de salud son componentes complementarios y necesarios para conseguir una respuesta eficaz. Los países pueden decidir dar prioridad a uno o a otro, pero ambos son esenciales para enfrentarse de manera eficaz a la epidemia por su vinculación con las relaciones sexuales entre hombres. Algunas de las actividades que se recomiendan para hombres que tienen relaciones sexuales con hombres y personas transexuales son las siguientes: Área de prestación de servicios: Prevención: Preservativos o Promover un uso sistemático y adecuado de los preservativos, y ofrecer un acceso adecuado a estos y a los lubricantes de base acuosa. Área de prestación de servicios: Prevención: Diagnóstico y tratamiento de las infecciones de transmisión sexual o Garantizar la disponibilidad de un tratamiento de calidad para las infecciones de transmisión sexual y la referencia para los servicios del VIH. o Promover la vacunación contra la hepatitis y garantizar su disponibilidad. Área de prestación de servicios: Prevención: Asesoramiento y pruebas o Garantizar la disponibilidad de servicios de calidad relacionados con el VIH. Área de prestación de servicios: Entorno favorable: Fortalecer el desarrollo de las capacidades institucionales y de la sociedad civil. o Capacitar a las comunidades homosexuales, lesbianas, bisexuales y transexuales para que participen en la vida política y social. Área de prestación de servicios: Prevención: Comunicación de cambio de comportamiento: Medios de comunicación: o Lanzar campañas de sensibilización pública para promover la aceptabilidad de las comunidades sexuales alternativas y reducir la homofobia. Área de prestación de servicios: Prevención: Comunicación de cambio de comportamiento: Divulgación a la comunidad o Garantizar la disponibilidad de información específica y dirigida sobre las estrategias de prevención y de reducción del riesgo diseñada para atraer a los hombres que tienen relaciones sexuales con hombres y satisfacer sus necesidades. o Divulgación inter pares en lugares (y sitios de Internet) donde socializan los hombres que tienen relaciones sexuales con hombres y otras medidas dirigidas por la comunidad o por ellos mismos dentro de su comunidad. o Garantizar la disponibilidad de espacios, virtuales o físicos, seguros (como los servicios de consulta telefónica o los centros de acogida) para que los hombres que tienen relaciones sexuales con hombres puedan buscar información y referencias de atención y apoyo. Área de prestación de servicios: Entorno favorable: Reducción del estigma en todos los entornos o Formar y sensibilizar a los proveedores de atención de salud para evitar la discriminación de los hombres que tienen relaciones sexuales con hombres. Áreas de prestación de servicios: Entorno favorable: Tanto de desarrollo de políticas (incluida la política en el lugar de trabajo) como de reducción del estigma en todos los entornos. o Eliminar los obstáculos jurídicos que impiden el acceso a la prevención y la atención, como las leyes que penalizan el sexo entre hombres. Draft 13.03.2008 Área de prestación de servicios: Fortalecimiento de los sistemas de salud: Prestación de servicios: o Fortalecer la referencia entre prevención, atención y tratamiento. o Facilitar el acceso a la asistencia médica y jurídica para los niños y hombres víctimas de la coacción y la violencia sexual. Asimismo, puede ser necesario evaluar la situación y las necesidades de los hombres que tienen relaciones sexuales con hombres y de las personas transexuales para conseguir información que pueda ser útil en otras actividades. Abordar las cuestiones de género, de derechos humanos y de igualdad La discriminación de los hombres que tienen relaciones sexuales con hombres y de las personas transexuales puede dificultar la ampliación de los programas. Si este es el caso, se deben realizar reformas legales y políticas para promover los derechos humanos y el acceso de los hombres que tienen relaciones sexuales con hombres y las personas transexuales a los servicios de salud. Se deben respetar, proteger y cumplir los derechos de estas personas y luchar contra el estigma y la discriminación tanto en la sociedad como en el lugar de trabajo. Para ello, es esencial enmendar aquellas leyes que penalizan las relaciones sexuales privadas y consentidas entre adultos, acabar con la discriminación, promover servicios de asistencia jurídica y campañas para hacer frente a la homofobia. Promover las asociaciones Se deben crear y/o ampliar los vínculos entre el ministerio de interior, las instituciones de bienestar social, la justicia y la policía para garantizar la prestación de servicios de programas integrales para hombres que tienen relaciones sexuales con hombres y personas transexuales. Ambos grupos, especialmente si viven con el VIH, deben participar en el diseño, aplicación y vigilancia de los programas, así como en los Consejos Nacionales del Sida. Las organizaciones no gubernamentales y las de base comunitaria, incluidas las organizaciones de hombres que se identifican a sí mismos como homosexuales, deben recibir apoyo para promover los programas de atención y prevención del VIH, y las organizaciones de personas que viven con el VIH, para abordar cuestiones relacionadas con las relaciones sexuales entre hombres. Deben forjarse alianzas entre epidemiólogos, científicos sociales, políticos, grupos de derechos humanos, abogados, médicos, periodistas, asociaciones de hombres que tienen relaciones sexuales con hombres, de personas transexuales y otras organizaciones de la sociedad civil. Draft 13.03.2008