24+25+26+27 25/4/10 12:10 Página 2 Meditación Espacio Humano ofrece a sus lectores una guía para la meditación de la mano del Centro internacional de Yoga Sivananda Vedanta de Madrid. Desde una óptica práctica iremos analizando, mes a mes y paso a paso, los conceptos fundamentales de esta maravillosa experiencia, para que todos podamos incorporar la meditación y mejorar nuestra forma de aproximarnos a la Vida. “Ejercicios suaves de pranayama, la práctica de asanas y una dieta ligera permiten superar los obstáculos de la meditación, facilitando así el camino hacia el silencio”. Swami Sivananda, de su obra catorce lecciones de Raja Yoga. Cómo superar C las dificultades de la meditación ontinuamos con el análisis de las dificultades u obstáculos que aparecen cuando practicamos la meditación. Para que, de esta forma, nuestra mente penetre en los espacios de calma física y mental y de silencio. Si los conoces es más fácil evitarlos, sortearlos o superarlos. Saber donde solemos tropezarnos facilita siempre la experiencia. Sabemos que hay muchos. Puede que tantos como practicantes, por eso sólo hablamos de los más significativos. Puede que te sientas identificado con alguno o algunos de ellos y una breve reflexión te ayudará a superarlos. MIEDO Es el estado afectivo del que ve ante sí un peligro o ve en algo una causa posible de padecimiento o molestia. El miedo es una emoción que minora la fuerza necesaria para meditar, debilitando nuestra capacidad para concentrarnos. Si el miedo se hace sistemático en nuestras vidas se genera una preocupación y una ansiedad que minora nuestra capacidad de discernimiento y de obtener los objetivos del aprendizaje de la meditación. La práctica sistemática de la meditación te ayuda a reconocerlos, a observarlos y a superarlos. Hay tantos o más miedos como personas: a la soledad y a la pérdida de relaciones, al exceso de compañía, a la falta de reconocimiento, a la enfermedad, al dolor y a la muerte. Si practicas la meditación en un entorno en el que no existe el hábito de esta técnica para silenciar la mente, no es extraordinario recibir pequeñas burlas. Incluso críticas de amigos y familiares. Acoge las críticas con cariño y mantén tu sistema y tus horarios para meditar. Revisa las técnicas de concentración (visualizaciones en objetos externos como la llama de una vela -tratak-, imágenes, ideas o centros energéticos internos –chakras-. Ver Espacio Humano 134 y 135) para centrar tu mente en un único pensamiento y la agitación derivada del miedo se desvanecerá poco a poco. 24 espacio HUMANO 24+25+26+27 25/4/10 12:10 Página 3 IRA Es un estado en el que se pierde el control de sí mismo y pueden cometerse actos de violencia de palabra, de pensamiento o de obra. La ira es uno de los obstáculos principales para la meditación. Nuestra mente no cesa de crear pensamientos generando constantemente deseos que no se satisfacen o no lo hacen plenamente. Si los deseos no se cumplen, esta emoción que denominamos ira, genera un impulso violento que altera nuestra deseable calma mental. La ira distorsiona la realidad, confunde a la mente y ralentiza la compresión y el entendimiento disminuyendo nuestra concentración y nuestra memoria. Los estados de ira debilitan cada una de nuestras células, tejidos y órganos ralentiza el funcionamiento de nuestra mente y por tanto el discernimiento. Genera por tanto tensiones físicas y mentales que no sólo nos afectan a nosotros sino a las personas que nos rodean. La ira perjudica notoriamente a los sistemas anatómicos pero especialmente al sistema respiratorio, al cardiovascular y al nervioso. ¿Quién no recuerda este tipo de alteraciones en un ataque de ira? Quien controla la ira domina el resto de sus emociones fortaleciendo su voluntad poco a poco. De esta forma la concentración en el objeto o idea en el que estamos fijando la mente es más fácil. Como siempre la observación de los signos de debilidad que desencadenan el arrebato de ira es nuestro primer trabajo. Observa tu mente constantemente para evitar la ira dice Swami Sivananda. Observa la posibilidad de irritación anticipándote a ella generando paciencia. La paciencia es la esencia de la meditación. Ante la irritación física o mental el silencio evita que la emoción crezca, se desarrolle y perdamos el control. Habla poco. Si vislumbras la posibilidad de la irritación en una conversación lleva la atención a otro tema. No continúes hablando. Si existe la más mínima posibilidad de alterarte, silencia tu mente. Swami Sivananda recomienda incluso salir de la habitación, si tu tendencia es a la irritabilidad constante y beber un vaso de agua fresca. Puedes caminar un rato para evitar que la ira se desarrolle. Mantener una dieta natural y vegetariana permite, con el tiempo, generar ahimsa mental, la no violencia de pensamiento, palabra y acción y controlar, de esta forma, la ira. Experimentarás la meditación con más facilidad. PERMANECER EN EL PASADO No te extrañes cuando los recuerdos y las experiencias del pasado asentadas en el subconsciente afloren en la meditación. El pasado tiene mucha fuerza en nuestro presente y no es fácil evitarlo, especialmente a medida que pasan los años. En ocasiones aparecen vivencias del pasado remoto que dificultan nuestra concentración. En otras ocasiones las vivencias recientes no dejan que el silencio y la calma llenen nuestro presente. Respira profundamente, concéntrate en la inhalación y en la exhalación consciente, repitiendo tu mantra personal o el mantra om y el pasado se irá disolviendo poco a poco. Swami Sivananda en sus pensamientos sobre las doce virtudes nos recuerda: “Ten paciencia, voluntad diamantina e incansable perseverancia. Los obstáculos son innumerables en este gran viaje pero si te aplicas diligentemente al Yoga lograrás la calma y la paz mental”● CENTRO INTERNACIONAL DE YOGA SIVANANDA VEDANTA DE MADRID. www.sivananda.org/madrid espacio HUMANO 25