Templo romano

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Évora
 Información general
POBLACIÓN: 56.500 habitantes (eborenses)
ALTITUD: 250 m.
Región: Alentejo.
Fiesta local: 29 de Junio, San Pedro y San Pablo.
ano
rom
Templo
Évora está sobre una suave colina en medio de
la gran llanura del centro del Alentejo. Los alrededores reúnen las características más típicas de la
región con amplios campos de cereales y bosquecillos de alcornoques y olivos. Se encuentra también
en el cruce de dos importantes ejes viarios, el que
une Lisboa con Madrid y el Norte con el Sur. Es una
ciudad de tamaño medio con un gran conjunto monumental y un centro histórico bien conservado declarado Patrimonio de la Humanidad en 1986. Visitarla
nos permite apreciar la auténtica vida de la región,
tranquila y sosegada pero a la vez adaptada a los
tiempos actuales con una activa vida administrativa
y universitaria.
Durante su estancia no debe dejar de ver el Templo Romano ni la Catedral pero también es agradable pasear sin rumbo por las tranquilas calles entre
casas encaladas y rincones encantadores de la ciudad antigua.
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HISTORIA
En los alrededores de Évora se han encontrado
restos prehistóricos muy importantes. La ciudad es
también muy antigua, pues hace más de 2000 años
ya existía un asentamiento celta con el nombre
de Ebora. La ubicación en un cruce de rutas comerciales que unen la costa con el interior y el norte
con el sur determinaron su importancia a lo largo
de la historia para la mayor parte de los pueblos
que han pasado por estas tierras. Con la llegada
de los romanos en el año 59 se convierte primero en un centro militar importante y luego en una
próspera ciudad debido a la abundancia de trigo y
plata. Quedan pocos restos visibles de ese periodo, están ocultos bajo construcciones posteriores
y aparecen con cierta frecuencia cuando se hacen
trabajos de rehabilitación.
Tras la caída del imperio romano, con las invasiones bárbaras de suevos y visigodos la ciudad
vive un periodo de decadencia. El resurgimiento llega con la ocupación musulmana entre los siglos
VIII y XII. Alrededor del año 1000 los musulmanes
dividieron el califato en pequeñas ciudades estado
y Évora fue una de ellas. Su posición como ciudad
comercial y encrucijada de caminos se reafirma.
De ese momento queda sobre todo cierto aire de
ciudad morisca con sus casas blancas y calles tortuosas y estrechas
Los cristianos la reconquistan por sorpresa en
1165 con la ayuda del caballero Geraldo “sem
Pavor”. Este curioso y legendario personaje se
convirtió así en uno de los símbolos de la ciudad
apareciendo en el escudo de la misma a caballo y
empuñando la espada. Se cuenta que era un noble
de carácter difícil que abandonó las tierras cristianas del norte para probar fortuna en las luchas
contra los moros. Vivía fuera de la ley liderando un
grupo de salteadores en los alrededores de Yeborath. Con el fin de restablecer su honor y conseguir
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el perdón
real se ofreció a D. Afonso Henriques
para conquistar Évora y otras ciudades vecinas.
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Sobre como lo hizo hay varias versiones más o menos fantasiosas, más o menos sangrientas, pero
todas coinciden en que entró solo en la ciudad (en
una noche sin luna, claro) y se apoderó de las llaves para abrir las puertas a sus hombres. Al día
siguiente ofreció la ciudad al rey que agradecido
le nombró Alcaide perpetuo de la misma. Cuatro
años más tarde fracasó en la toma de Badajoz y
finalmente murió en Ceuta a manos de los almohades cuando le descubrieron espiando con el fin de
tomar la ciudad.
La conquista de Évora, con su situación estratégica camino del sur fue importante para el éxito final de la Reconquista pero la ciudad en sí no
interesó a los reyes de la casa de Borgoña. Ellos
preferían Coímbra o Leiria. Prácticamente hasta el
siglo XIV no volvió a llenarse de vida. Los reyes de
la dinastía de Avis sí estuvieron muy vinculados a
la ciudad. Don Manuel I construyó un magnífico
palacio del que apenas quedan restos, allí nacieron
infantes y proyectos, sobre todo se le otorgó a Vasco de Gama el mando de la primera flota que llegó
a la India. Era la Edad de Oro portuguesa y no deja
de ser curioso que en un momento de expansión
marítima se gobierne desde una ciudad que tan
poco tiene que ver con el mar. Don Joao III instaló
su corte durante más de 30 años en un palacio
situado en la Plaza del Giraldo, donde ahora está
la oficina de turismo. No todo fueron fiestas y lujos,
hubo también momentos terribles. Este rey era un
ferviente defensor de la inquisición y durante esos
años quemaron en la hoguera a cientos de personas. En 1540 se convierte en Sede Arzobispal
(una de las tres que hay que Portugal) lo que incrementa notablemente la importancia religiosa de la
ciudad, se construyen iglesias y atrae a las órdenes
monásticas.
En 1559 el Cardenal Don Henrique, primer arzobispo de la ciudad, fundó la Universidad y la
encomendó a la Orden de los Jesuitas con el nombre de Colegio del Espíritu Santo. D. Henrique que
era también Gran Inquisidor terminó siendo Rey
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tras la muerte de su sobrino nieto Don Sebastián
en el norte de África. Reinó únicamente dos años
y fue el último de la casa de Avis. Tras su muerte el trono pasó a Felipe II de España. Este hecho
marca el inicio del declive de Évora que se quedó
suspendida en el tiempo. Como ocurre en tantos
sitios fue precisamente esa decadencia la que
ha preservado el centro histórico de los cambios
y nuevas construcciones. Un nuevo golpe para la
ciudad procede del Marqués de Pombal cuando en
1759 cierra la Universidad. Su desconfianza hacia
el poder y la riqueza de los Jesuitas le hace abolir
la orden y confiscar sus riquezas. En julio de 1808,
Évora es atacada por tropas francesas de Napoleón
que masacran a los defensores. A esto le siguen
años de atraso y oscuridad.
En 1973 la Universidad reabre sus puertas lo
que supone un renacimiento para la ciudad ya que
atrae a más de 8000 estudiantes que aportan gran
vitalidad. Desde de que Évora fue proclamada en
1986 Ciudad Patrimonio de la Humanidad el
casco antiguo ha sido escrupulosamente conservado. Se ha trabajado para conseguir una ciudad
atractiva para el turismo pero intentando mantener
la autenticidad. Uno de los retos más importantes
ha sido la lucha contra el despoblamiento del centro histórico, rehabilitando edificios y equipándolo
de los servicios necesarios. Es una lucha que continúa….
VISITA
El centro histórico está claramente delimitado
por las murallas que tienen una longitud de más de
3 km. Fuera de ellas se expande la ciudad nueva
no demasiado atractiva. En el interior encontramos
un conjunto de calles estrechas, plazas, casas blancas y los monumentos de la ciudad. Es una zona
pequeña y por tanto fácil de recorrer a pie. Será útil
contar con un plano que puede conseguirse en la
oficina de turismo. En días de mucho calor entrará
la tentación de dejar la visita para el final de la
tarde pero hay que tener en cuenta el horario de
cierre de los monumentos, la mayoría sobre
las 17 hrs. Dicen que en el Alentejo no hay sombra, pero en Évora los interiores de las Iglesias son
frescos, hay soportales y algunos jardines donde
los árboles de Jacarandá procedentes de Brasil sí
dan sombra además de embellecer con sus flores
la primavera.
*En la mayor parte de los monumentos se cobra
una pequeña entrada que suele estar entre 1,5 y
3 euros.
Casi todos los lugares que hay que visitar se
encuentran como mucho a cinco minutos a pie de
la Plaça do Giraldo, considerada el centro de la
ciudad, por lo que la visita puede empezarse ahí.
Otra opción es empezar el recorrido en sentido ascendente desde que penetramos en la muralla. Con
frecuencia se entra en el centro histórico a través
de la Rua da República puesto que en el lado exterior está el parking para autobuses.
La Muralla actual data del siglo XIV aunque
fue fortalecida en el siglo XVII durante la guerra
de independencia con España. Utilizando la entrada mencionada a la izquierda está el Jardim
Público. En el quedan restos del Palacio Real del
siglo XVI y hay un pequeño quiosco en el que se
puede tomar un café o una ligera comida a base de
sándwiches. También es un buen lugar para hacer
un picnic sobre todo teniendo en cuenta que está
muy cerca el Mercado municipal. Es agradable
dar una vuelta y ver como los vendedores están
orgullosos de sus productos que se pueden probar
antes de comprar.
Al lado está la Iglesia de San Francisco (Rua
da República) que mantiene el sencillo estilo franciscano. El pórtico tiene arcos de estilo mudéjar y
el interior se compone de una ancha nave rodeada
de capillas. En el siglo XVIII se hizo común entre
las familias más adineradas comprar capillas, decorarlas y darles su nombre. A la derecha de la
entrada de la iglesia está la famosa Capela dos
Osos (Capilla de los Huesos) con la leyenda “nosotros los huesos que aquí estamos por los vuestros
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esperamos”. Es un lugar bastante lúgubre y macabro pero muy visitado. Se hizo en el siglo XVI con
huesos traídos desde cementerios de diversas iglesias de la ciudad. No se hace un lugar como esté
porque sí, tiene un sentido y una finalidad. Hay que
situarse en el contexto de una ciudad floreciente
y enriquecida y el escándalo que provocaba en los
franciscanos con su voto de pobreza y sencillez.
Quisieron hacer pensar sobre la poca importancia
de los bienes materiales ante la presencia continua
de la muerte. Para entrar hay que pagar una pequeña cantidad y algo más si se quiere hacer fotos.
Horario de 9 a 13 hrs y 14,30 a 17,30 hrs
Continuando por la Rua da República por una pequeña calle a la derecha se llega a la Iglesia da
Graça. Es una de las obras más significativas del
Renacimiento portugués. Se hizo con el fin de servir
de panteón a D. Joao III. Encima del pórtico de la
entrada hay cuatro estatuas de gigantes o atlantes
que cargan con las cuatro partes del mundo donde
estaba establecido el gran imperio portugués.
Siguiendo hasta el final la Rua da República se
llega a la Praça do Giraldo. Este es el escenario
principal de la vida de la ciudad, lugar de paso y
punto de encuentro de gente de todas las edades
y condiciones. En el pasado desempeñó un papel
parecido. Ha sido el escenario de momentos dramáticos como la ejecución de Fernando Duque de
Braganza en 1483 y la quema de condenados por la
inquisición en el siglo XVI. Hace menos se debatieron aquí las reformas agrarias de los años 70. Hoy
hay cafeterías bajo las arcadas neoclásicas y es un
buen lugar para sentarse a tomar el sol y un café.
Desde aquí por la Rua 5 de Outubro, calle comercial desde tiempo de los romanos, se llega
directamente a la Catedral de Santa María de
Évora. Posiblemente está en el mismo lugar donde se encontraba la mezquita y antes una capilla visigoda. Con sus dos sólidas torres de granito
tiene apariencia de fortaleza y un estilo inspirado
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en las catedrales
francesas del siglo XII. Las obras
se empezaron en 1186 y se dieron por concluidas
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60 años más tarde. Está construida en un estilo de
transición entre el románico y el gótico muy fácil
de apreciar si se comparan las dos torres. La de la
derecha más baja y robusta con aspecto de torre
de fortaleza es románica, la de la izquierda gótica,
más ligera y con más ventanas. Se entra por un portal del siglo XIV con estatuas de los apóstoles. En
el interior se aprecia una mayor influencia gótica.
El altar mayor es neoclásico del siglo XVIII, el órgano del XVI todavía está en funcionamiento. El coro
es barroco de madera de roble tallada con escenas
de la vida cotidiana.
El claustro se añadió en el siglo XIV. En él se
ven sarcófagos de arzobispos y una pequeña escultura de la virgen embarazada. En las esquinas
están las esculturas de los evangelistas. Se puede
subir a la parte alta de los muros desde donde se
tienen sorprendentes vistas tanto de los tejados de
la catedral como de los campos del Alentejo.
En la Catedral se encuentra también el Museo
de Arte Sacro de aspecto sobrio pero con riquezas que reflejan el poder de la iglesia. Una de las
piezas estrella es la Virgen del paraíso, un tríptico
con miniaturas de marfil. Hay relicarios con esmeraldas, diamantes y oro, en uno se guarda un trozo
del Lignum Crucis (como en tantos sitios).
Para entrar hay que pagar una pequeña entrada, se puede sacar también una entrada conjunta
para visitar la iglesia, el claustro y el museo de
aproximadamente 3 euros. El horario de apertura
es de 9 a 12 hrs y de 14 a 17 hrs, (última entrada
a las 16,30). Para entrar sólo a la Catedral se paga
1 euro.
Junto a la Catedral, en el antiguo Palacio episcopal, está el Museo de Evora. Expone obras romanas, mudéjares y medievales, también pintura
flamenca y el políptico de la Vida de la Virgen del
siglo XV. Horario de 9.30 a 12.30 y de 14 a 18
A un corto paseo, ya en el límite de la ciudad
monumental se encuentra la Universidad. Fundada en 1559 es la segunda Universidad más antigua
de Portugal tras la de Coímbra. Aunque los colegios
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y edificios del campus están repartidos por toda
la ciudad la construcción central es esta fundación jesuita del siglo XVI. Se trata de un edificio
de dos plantas con fachada exterior renacentista.
Un portal flanqueado por dos columnas da acceso
al Claustro de los Estudios, de mármol y con un
incipiente estilo barroco. Lo más llamativo son las
aulas que tienen las paredes recubiertas de azulejos con escenas relacionadas con las asignaturas
impartidas. Se puede ver la historia de la medicina,
episodios de “As Lusiadas “de Camoens y otras
que hacen de cada sala una obra de arte única.
Actualmente en este edificio sólo se imparten algunas clases magistrales.
Regresando por el mismo camino llegamos al
punto más alto de la ciudad donde está la plaza
que engloba algunos de los monumentos más importantes:
Templo romano, conocido también como templo de Diana, aunque no hay evidencia de que estuviera dedicado a esta diosa. En realidad se cree
que estaba dedicado al Emperador. Se conservan
14 columnas corintias de granito coronadas por capiteles del mismo estilo en mármol de Estremoz.
Es de finales del siglo II d.C. y se considera el mejor monumento romano conservado en Portugal.
Durante la edad media fue tapiado lo que protegió
las columnas a pesar de ser usado como matadero.
Se redescubrió en el siglo XIX. Actualmente se celebran aquí conciertos y otros eventos. Este es un
buen lugar para ver la puesta de sol y también es
bonito ver el templo iluminado por la noche.
Pousada dos Loios es un monasterio del siglo
XV reconvertido en lujoso hotel en 1965. Cuenta
con elegantes claustros donde se puede tomar una
copa y un restaurante que está entre los mejores
de la ciudad.
Junto a la posada está la iglesia São João,
fundada en 1485 por el conde de Olivenza como
panteón familiar. Está construida en estilo gótico
–manuelino, con muros recubiertos de azulejos del
siglo XVIII. A través de una rejilla en el suelo se ve
una cisterna árabe y un osario lleno de huesos de
monjes. Es propiedad privada de la familia de los
Condes de Cadaval. Hay que pagar entrada para la
visita. Horario de 10 a 12.30 y de 14 a 17.
Sin salir de la plaza está el Palacio das Cinco Quinas con interesantes ventanas árabes.
También hay un edificio blanco usado ahora por
la universidad pero que fue sede del tribunal de la
Inquisición, enfrente hay una escultura de granito
en memoria de todos los que fueron ajusticiados y
perseguidos por el fundamentalismo de los fanáticos religiosos.
El camino más recto para regresar es tomar de
nuevo por la Rua 5 de Outubro, pero si dispone de
tiempo y no está cansado es mejor callejear un
poco para conocer algo más de la ciudad. Saliendo
de la plaza por el lado opuesto al de la Catedral se
entra en el barrio de Mouraria. Los musulmanes
continuaron viviendo en esta zona extramuros tras
la reconquista cristiana hasta el siglo XVI en que
fueron expulsados por la Inquisición. Atravesando
un arco que fue puerta principal de las murallas se
sale del barrio y se llega a la Rua de Dona Isabel
con restos en el pavimento de calzada romana. En
la Plaza de Sertorio está la Cámara Municipal y
bajo ella restos de unos baños romanos públicos.
Paseando por la calle porticada Joao de Deus llegamos hasta restos de la muralla romana y arcos
del acueducto, (algunos bastante integrados con
las fachadas de las casas). Esta calle nos lleva de
nuevo a la Praça do Giraldo. Hasta el siglo XVI el
barrio que está detrás de la oficina de turismo era
habitado por judíos (judería) que se dedicaban
sobre todo a ser prestamistas y mercaderes, de
ahí los nombres de algunas calles (Mercaderes y
Moeda).
Tras el completo recorrido uno se merece un
descanso, en la Praça do Giraldo y en la Rua 5 de
Outubro (fecha en la que Portugal en el año 1910
se convirtió en una república) encontrará tiendas,
bares y restaurantes.
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 Información Práctica
GASTRONOMIA
La cocina del Alentejo es muy rica a pesar de
que los ingredientes que utiliza son sencillos, tradicionalmente considerados pobres y propios de
una economía de subsistencia. Sin embargo tienen
gran calidad, son sanos y proceden directamente
del campo. Es una cocina de mercado que se adapta a los productos disponibles en cada momento
del año, condicionada por la estructura socioeconómica de la región con pequeñas poblaciones
rurales que viven de la agricultura y la ganadería.
Los ingredientes básicos son el aceite de oliva,
magnífico pan y las patatas. Después vienen toda
una serie de hortalizas y las legumbres. El pescado
se utiliza poco y las carnes más frecuentes son las
de cerdo y cordero además de las de caza. Se usan
mucho las hierbas aromáticas como el tomillo y el
romero que aportan un sabor fuerte e intenso. También se utiliza bastante el ajo.
Con estos ingredientes no demasiado variados
se han creado (a veces con bastante ingenio) platos
sabrosos y contundentes, apropiados para afrontar
las duras jornadas de los agricultores. Estos son algunos de los platos típicos que puede encontrar en
las cartas de los restaurantes dedicados a la cocina
regional:
- “ Porco à alentejana”, una rica combinación
de carne de cerdo con almejas y patatas.
- migas, llevan pan, tocino y ajo.
- “Cozido de grao ou de feijoada” un potaje
de garbanzos o de alubias.
- sopas de todo tipo, con liebre, con perdiz, de
tomate, de pescado e incluso gazpacho frio. Hay
que destacar
Évora la más típica la “açorda”, pan casero, huevo, ajo y agua caliente.
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- Jabalí de Cachafrito, que suele ir acompañado de migas con tomate.
- Dulces: de almendra, encharcada, sericá y bolo
rançoso.
No hay que olvidar el queso de oveja, el más
popular es el de Évora.
Los vinos tintos del Alentejo son muy apropiados
para acompañar cualquiera de estos platos. Proceden de Évora, Arraiolos, Avis, Borba, Estremoz
, Portalegre etc. Son posiblemente los vinos más
robustos del país.
RESTAURANTES
En Évora es fácil encontrar restaurantes que
sirvan los copiosos platos alentejanos. Estos son
sólo algunos:
Fialho. Travessa das Mascarenhas 16. Tel 351
266 703 079. Uno de los restaurantes más prestigiosos y caros de la ciudad En su carta destaca a
típica Açorda, sopa de pan con carne o pescado.
Adega do Alentejo.Rua Gabriel Pereira Tel
.266-744447. Situado en las bodegas de un antiguo
convento.
Restaurante 1/4 para as 9.Rua Pedro Simões
Tel 266-706774. Con amplios horarios : hasta las 16
hrs para comida y cena de 19 a 23 hrs
Tasquinha d’Oliveira : Rua Candido dos Reis
45. Tel 351 266744841.Pequeño restaurante con
una buena selección de quesos y vinos regionales.
Se puede probar el licor de Pueyo, un licor de hierbas que fue típico en el Alentejo.
Maçaroca: Rua 5 de Outubro, 61.Tel.: 266 744
809.Restaurante típico, con platos rápidos.
Café Arcada: está considerada como la mejor
pastelería de la ciudad con buen café y la especialidad de la ciudad queijada (con queso fresco).
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TRANSPORTE PÚBLICO
AUTOBUSES
Évora cuenta con una amplia red de autobuses públicos que unen los barrios periféricos con
el centro de la ciudad. El precio del billete sencillo, que se puede comprar al conductor es de 1,30
euros. El ticket de 10 viajes cuesta 5,20 euros, un
ahorro considerable pero no se compra en el bus
sino en los establecimientos autorizados.
TAXIS
Tel: 266 734 734. Hay paradas en la Praça do Giraldo y Largo da Porta de Moura.
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OFICINA DE TURISMO
Praça do Giraldo 73. Abierta de 9 a 19 hrs de
abril a octubre y hasta las 18 el resto de los meses. Aquí le darán un mapa de la ciudad. Ofrecen
visitas con audio guía.
TELEFONOS
Hospital. Rua do Valasco. Tel 266 740 100
Hospital do Espirito Santo. Largo Senhor da
Pobreza. Tel : 266740100
Policia. Rua Francisco Soares Lusitano. Tel 266
746 977
Correos: largo da Porta Moura Tel: 266 777 8570
Acceso a Internet. Hay numerosos lugares con
conexión a internet en el centro histórico. Algunos
de ellos: Cyber Centre en Rua dos Mercadores 42;
I.P.J. en Rua da República; Bar A Oficina en Rua
da Moeda; CTT en Rua da Olivença ;CME en Praça
de Sertório
Tambien hay varias áreas wi-fi que permiten la
conexión a internet de banda ancha: Praça de Sertorio, Praça 1º de Maio ( junto al mercado municipal) y Praça do Giraldo.
COMPRAS
Rua 5 de Outubro, ha sido una calle comercial
desde tiempos de los romanos. Hay tiendas de
artesanía típica del Alentejo como cerámica, azulejos, trabajos en corcho, sillas y otros muebles
pintados a mano etc….también las conocidas alfombras de Arraiolos
NOCHE
Bar del Teatro al final de la rua José Elia Garcia. Ofrece conciertos y espectáculos los fines de
semana. Abre todos los días hasta las 2.
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