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SALUD
PUBUCA
de MEXICO
EpOCA
V. VOLUMEN
XXI.
NÚMERO
1•
ENERO-FEBRERO
DE
1979
Dialéctica sobre evaluación de la salud
SALVADOR PALMA
GARCÍA •
T!zOc AGUILAR LARA ••
EN el último capítulo del documento PoLÍ-
TICAS PARA LA SALUD, editado por la OPSOMS, se indica lo siguiente:
"El componente final del esquema general
de un plan, está constituido por la elaboración del diseño de un sistema de información,
que permite conocer el logro de las realizaciones de las acciones propuestas, resultados
obtenidos y beneficio y efecto alcanzado para
la solución de los problemas de salud, y permite al mismo obtener conocimientos de interés político para la aceptación e impulso
de los programas por la comunidad; asimismo, permite valorar el funcionamiento de los
programas, los productos y servicios dados a
la población, revisar, controlar, evaluar la
orientación técnica y política en la implantación y su conducción."
Una evaluación nos pennitirá conocer la
imagen-objetivo o imagen-horizonte; lo que
deseamos y lo que es probable alcanzar en
salud; el diseño de una estrategia viable, factible y coherente, que oriente la política,
•
Jefe del Departamento de Planeación y Con-
••
Asesor del Departamento de Planeación y
trol de la Subdirección
Control
Médica del ISSSTE.
de la Subdirección
Médica del ISSSTE.
objetivos, programas, actividades y metas.
Todo ello debe estar presente y definido en
un plan a largo. mediano y corto plazo; estos
elementos deben ser motivo continuo de evaluación, tanto en su diseño, elaboración, implantación y desarrollo.
Este enfoque con sentido macroglobal considera al sector salud como sistema que forma parte de los sectores sociales y económicos, que deben propiciar el desarrollo integral
de una sociedad en busca de bienestar y en
consecuencia de mejores niveles de salud.
Deben valorarse los problemas o daños de
la salud, en cuanto a magnitud o número
de muertes o de enfennedades, cuantificación
estadística, estudio y análisis de su tendencia histórica, su situación actual y su proyección durante los siguientes diez años.
Deben evaluarse, asimismo, los factores
condicionantes de tipo social, cultural, político, económico, geográfico y ecológico que
afecten a la salud. Es importante la evaluación de los recursos como unidades de producción de servicios de salud llamados instrumentos de salud o recursos nucleares y su
organización conforme a complejidad, de lo
sencillo a lo especializado.
Un sistema de evaluación que comprenda
el tipo de personal para la salud, desde su
formación en cuanto a tipo y clase de programas de estudio, tendencias, criterios y enfoques de la enseñanza en sus distintas ramas y especialidades, tomando en cuenta que
en la enseñanza o capacitación la enfermedad o la salud es multifactorial y multicausal, que se genera en el medio social y comunitario y se adentra hasta los microfactores
de orden endógeno, etiológico, patológico y
genético.
En un mundo consumista en el cual los valores monetarios son de importancia primordial, es importante evaluar los recursos físícos y el equipamiento necesario en los programas de inversión, ya que frecuentemente
nos dejamos llevar por el espiritu cientificista, extralógico, a imitación de países más rlcos, adquiriendo equipos caros, sofisticados,
para mantener a personas en forma vegetativa; y, por otra parte, hacernos a un lado técnicas más sencillas y económicas que benefician la salud de mayor número de población,
como con justa razón decia PARETO
al hablar
de la irracionalidad racional del hombre,
cuando se deja manejar o se deja llevar por
emociones e imitaciones, aparentando ser lógicos y racionales.
Por otro lado, el principio de justicia distributiva señala ética, política, técnica y racionalmente que la última opción parecería
ser la aceptable, y cuántas veces, tratando
de ser modernistas, procedemos con el criterio anteriormente anotado, encareciendo los
servicios de salud. .
Frecuentemente, cuando hacemos una evaluación, aceptamos el formulismo administrativo de tipo estructural o anatómico, preocupándonos de auditorias administrativas, en
las que actuamos "científicamente" evaluando organigramas, fluxogramas, jerarquías,
tramos de control, subdivisiones equilibradas,
funcionales o no, con agregación coyuntural
de .nuevos órganos o entidades, haciendo crecer la organización en forma tumoral, que
anquilosa, anemiza y entorpece el fin para el
cual fue creado, en lugar de hacer una evaluación con sentido sistemático, flexible, dí8,'
cambiante y funcional, que dé importancia a los programas sustantivos, o sean
aquellos que propicien o mejoren la salud y
no se vean entorpecidos o retardados por los
órganos de apoyo logístíco, administrativos
o de servicios generales, falla frecuente, ya
que su fin es hacer más expedita la prestación de la salud; por ello, en la evaluación de
la estructura administrativa debe cuidarse un
enfoque dinámico, valorando y rectificando
estructuras y funciones para dar el producto o servicio para cumplir con el objeto y las
metas para los cuales fue creado, o sea, dar
mayor atención para la salud.
La evaluación de la atención de la salud
determinará y analizará el proceso de la producción en su eficiencia, como se está impartiendo en cuanto a eficacia para promover,
prevenir, curar y rehabilitar y en su efectividad para lograr más salud, para mayor número de población; esto es, lograr la máxima
cobertura y abatir aquellos daños conforme
a recurso optimizado.
Todo ello debe ser motivo de evaluación en
cuanto a politica, estrategia, objetivos, alternativas y decisiones factibles, programas, actividades, metas, unidades de medida, costo y
producto final con un sentido racional y programático.
En otro sentido, en la evaluación de unidades operativas de salud, hay todo un acervo
de experiencias en cuanto a su grado de utilización, rendimiento o productividad, concentración de servicios por persona, metros
cuadrados por cama-hospital, modelos médico-arquitectónicos, equipamiento, costos unitarios, etc., que todo especializado en administración de hospitales conoce y es motivo
de evaluación; a pesar de ello, cuántas veces
encontrarnos fallas trascendentales que encarecen la atención, retardan el tratamiento,
hipertrofian servicios, renglón en el cual no
nos extenderemos por la brevedad de este
articulo y ser ampliamente conocido por quienes se dedican al estudio de planeación, organización y dirección de unidades hospitalarias.
Con frecuencia efectuamos evaluaciones
como médicos en los aspectos médicos; en
námíco,
SALUD PÚBLICA DE MÉXlOO
enfermeria, en cuidados de enfermeria, de
farmacia o de laboratorio o de equis servicio
en forma individual y parcial; una unidad
médica hospitalaria es compleja; por tal motivo estas evaluaciones son parciales, amañadas, puesto que casi siempre todo está bien;
por ello es importante desprenderse del sectarismo egolátrico médico y efectuar evaluaciones por grupos multidisciplinarios que conozcan el fenómeno salud, las técnicas y recursos para su uso, que esa evaluación se
baga con enfoque multifactorial y multicausal dentro de la comunidad, comprendido en
una área programática, dentro del contexto
ecológico, social y politico.
En cualquier esquema de la salud es importante considerar los sistemas de comunicación, las unidades de estadistica para la salud
y las de contabilidad de costos; la formación
de supervisores con criterio de eficiencia, eficacia y calidad en el proceso productor de la
salud; la formación gerencial de directivos
sin perder el marco sociopolitico y la apreciación valorativa y técnica del fenómeno
salud.
Por tanto, es necesario analizar y evaluar
la investigación para la salud, con criterio
práctico y no como entelequia epistemológica. La evaluación de la investigación debe
tomar aquellos criterios en que se señala el
propósito de la misma, el programa y los fines que se persiguen, y que en todo caso sea
útil para incrementar la curiosidad innata en
el hombre, en la salud y de su propia felicidad.
La misión de quien dirige consiste en traducir las decisiones politicas en acción, señala F. F'RISCHKNECHT, Y su función es convertir intenciones en criterios que orienten y
coordinen las decisiones rutinarias de ejecución; transformar la estrategia en planes que
sean regulados por las acciones tácticas; es
la adaptación de la organización de la empresa para el logro de sus fines.
Cuántas veces los ejecutivos se resisten a
planificar y ser evaluados, porque su particular ambiente es impredictible, y siguen actuando a ciegas, con ojo clínico, sobrellevando
crisis que pudieron preverse,
evitarse.
planificarse
y
La planificación, la administración, su control y evaluación deben ser realistas y tener
una lógica interna; ser efectiva o eficaz, para
lograr el propósito para el cual fueron creadas (programada y organizada) mediante el
empleo de los recursos disponibles, para lograr el propósito final; pero esto reclama
gran capacidad para reaccionar y relacionar
las causas y efectos, o sea, actitud para pensar, analizar, evaluar; en resumen, razonar y
predecir la evolución del ambiente; planificar
la acción humana y lograr las situaciones elegidas como deseables, cumplir los fines; para
ello debe medirse la eficiencia y eficacia de
la organización para alcanzarlos, y esto depende de la consistencia, de la validez, de la
valoración del sistema de información-comunicación.
El tradicional proverbio que p r e cisa b a,
identificaba, la administración hacer que se
hagan las cosas, es obsoleto; hoy en día la
administración (y la planificación, control y
evaluación) se centra en la decisión, puesto
que de administrar cosas se ha pasado a
administrar personas, y de ahí a administrar
símbolos; es decir, analizar, controlar y evaluar la información-comunicación.
Los administradores y planificadores controlan, analizan y evalúan la información;
por ello es necesario describir, clasificar, codificar, analizar y estructurar los procesos y
los productos de la organización administrativa; puesto que ésta resulta del análisis histórico, presente y proyectado, por tanto es
prescriptiva, programada y predictible (probabilistica) y coordinada hacia metas selectivas. Quien desconozca esto y trate de evaluarse, sólo es presuntamente tautológico; en
otras palabras: justifica lo que quiere pretender demostrar, aunque sea irracional e ilógico. En politica y en ciencia, así como en la
aplicación tecnológica del conocimiento a
la actividad administrativa o del propio quehacer del hombre, quien se estanca se entropiza, empieza a desorganizarse y a morir
sin haber vivido plenamente.
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En otro sentido, la evaluación debe estudiar la existencia de las partes del todo
organizativo como partes de un sistema, y
estas partes a su vez se interactúan, se retroalimentan, se relacionan, autorregulan y controlan; es decir, son sistemas cibernéticos
que mediante esa red de comunicaciones, a
semejanza del sistema nervioso humano, son
ejemplo óptimo de información-comunIcación.
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Toda organización es cuantificable, cualíflcable, medible, sensible y susceptible
de
accionar, adaptarse y alcanzar metas; de ahí
que el control y la evaluación se operan, alimentan, retroaccionan mediante la información, a partir de puntos estratégicos, discernibles y seleccionados, para que los centros
de decisión señalen y orienten la politica, los
programas y las acciones de toda organización, sencilla o compleja, humana o social.