226 ANALES DE HISTOEA NATURAL. (2) como de mera curiosidad, y de ningún ó escaso interés en las determinaciones de la Paleontología estratigráfica. No es posible desconocer ciertamente que la dificultad en la determinación de los vegetales fósiles, y sobre todo en los per­ tenecientes á los terrenos de sedimento superiores, no ha de­ jado de contribuir en algún modo á la menor importancia á los mismos concedida por los geólogos paleontologistas, pero debe tenerse presente que la Geología estratigráfica necesita para poseer el carácter de ciencia verdaderamente sólida, fundarse en la Paleontología del reino orgánico en conjunto y no sola­ mente en las determinaciones efectuadas mediante los fósiles animales, á los que hoy se acude por lo general de una manera completamente exclusiva. La distribución de las floras en las diversas capas terrestres, coincide en un todo con la de los fósiles animales, y resultando por consiguiente, como aplicación de las leyes á que obedecen los últimos en esa distribución, la sucesión ordenada de las floras en la superficie de la tierra; la identidad ú homología de las floras correspondientes á terrenos contemporáneos ó forma­ dos en la misma época, y la recíproca identidad ú homología de terrenos que contengan floras idénticas ú homologas (hechas las salvedades consiguientes por lo que se refiera á la flora de la época terciaria á causa de las mayores diferencias climatológi­ cas) (1), dicho se está que no sólo cada terreno tiene en virtud de estas leyes sus plantas características, sino que muchos h o ­ rizontes pueden llegar á reconocerse mediante la ausencia ó presencia de una especie determinada, consecuencia de la m a ­ yor importancia por lo que se refiere al terreno carbonífero en que con tanta frecuencia se presentan las dislocaciones carac­ terísticas del mismo, y no menos preciosa para llegar á deter­ minar con exactitud la edad de algunos depósitos de carbón que no pocas veces se presentan, ya en las margas irisadas, ya en algunas formaciones de los terrenos jurásico y cretáceo. Prescindiendo de las aplicaciones de la Paleontología vegetal á la Geología, aplicaciones que por sí solas bastan seguramente (1) Sabido es que el estudio comparativo de los terrenos terciarios mediante sus fósiles vegetales, reconoce como base previamente necesaria, la determinación de la sucesión de las floras subterráneas en relación con las actuales, en unas mismas lon­ gitudes y latitudes.