COLEGIO FRANCISCANO DEL VIRREY SOLIS BOGOTÁ “Educamos para la Justicia, la Paz y las Nuevas Relaciones” 1ª LECTURA - CITOLOGÍA PRIMER PERIODO BIOLOGÍA ONCE DOCENTE: CRISTINA ACOSTA MATERIA: Biología__ FECHA: __________________________ NOMBRE DEL ESTUDIANTE: _______________________________________ CURSO: _______ INDICACIONES PARA LA LECTURA: LEE, atentamente la lectura y subraya las palabras que no entiendas. Debes estar atento a la explicación en clase y a las posibles preguntas generadas a partir de la siguiente lectura. Recuerda imprimirla y anexarla a tu carpeta. Calificación: Desempeño Intelectual (Participación). Fecha inicio: Febrero 06. Fecha socialización: (11A: Febrero 13) (11B: Febrero 13) (11C: Febrero 11) OBJETIVO: Describir la estructura y función celular a demás de su grado de complejidad. LECTURA: CITOLOGÍA: La citología es una rama de la biología que estudia la estructura y función de las células como unidades individuales, complementando así a la histología (que estudia a las células como componente de los tejidos). La citología abarca el estudio de la estructura y actividad de las diferentes partes de la célula y membrana celular, el mecanismo de división celular, el desarrollo de las células sexuales, la fecundación y la formación del embrión, las alteraciones de las células, como las que ocurren en el cáncer, la inmunidad celular y los problemas relacionados con la herencia. La vida a nivel celular existe en todas partes del planeta y no había sido descubierta hasta que Anton Van Leeuwenhoek a principios del siglo XVII inventó el microscopio a partir de las lupas que solía usar. Con varias de estas lentes de tipo esférico en una adecuada disposición y ubicación con respecto unas de otras, logró grandes aumentos mediante los cuales observando en una gota de agua describió el mundo microscópico que se hallaba contenido en esta. Sus descripciones despertaron el interés por este instrumento y motivaron a otras personas a experimentar con este invento. A mediados del siglo XVII, el inglés Robert Hooke construyó un microscopio compuesto que superó los que existían en su tiempo con los que pudo observar los poros o “celdas” del corcho a los cuales dio el nombre de célula. La citología tiene gran valor en la medicina actual, ya que ayuda a diagnosticar enfermedades mediante el análisis de las células extraídas de diversos fluidos corporales. La determinación del número y proporción de los diferentes tipos de células de la sangre (recuento celular), facilita el diagnóstico de infecciones agudas y otros procesos. La variación en el tamaño y forma de las células rojas de la sangre puede indicar la presencia de anemia de células falciformes (en la que los eritrocitos tienen forma de media luna), de anemia perniciosa (eritrocitos aumentados de tamaño), o de anemia por falta de hierro (eritrocitos de pequeño tamaño). La citología también permite distinguir los diferentes tipos de meningitis gracias al estudio de las células presentes en el líquido cefalorraquídeo. CÉLULA: La célula es la unidad mínima fundamental de la vida y hace parte de cualquier organismo capaz de actuar de manera autónoma. Todos los organismos vivos están formados por células, y en general se acepta que ningún organismo es un ser vivo si no consta al menos de una célula. Algunos organismos microscópicos, como bacterias y protozoos, son células únicas, mientras que los animales y plantas son Diseño: ACOSTA C., ROJAS F. “[email protected]” Bogotá (Año 2014) Lectura uno: Pág.3 COLEGIO FRANCISCANO DEL VIRREY SOLIS BOGOTÁ “Educamos para la Justicia, la Paz y las Nuevas Relaciones” organismos pluricelulares que están formados por muchos millones de células, organizadas en tejidos y órganos. Aunque los virus y los extractos acelulares realizan muchas de las funciones propias de la célula viva, carecen de vida independiente, capacidad de crecimiento y reproducción propios de las células y, por tanto, no se consideran seres vivos. La biología estudia las células en función de su constitución molecular y la forma en que cooperan entre sí para constituir organismos muy complejos, como el ser humano. Para poder comprender cómo funciona el cuerpo humano sano, cómo se desarrolla y envejece y qué falla en caso de enfermedad, es imprescindible conocer las células que lo constituyen. Con independencia del tamaño o de que sea una entidad autónoma o una parte de un organismo, todas las células tienen ciertos elementos estructurales comunes. Todas están encerradas por algún tipo de envuelta externa semipermeable que protege un interior fluido rico en agua, llamado citoplasma, y todas contienen material genético en forma de ADN (ácido desoxirribonucleico). CARACTERÍSTICAS GENERALES DE LAS CÉLULAS: Hay células de formas y tamaños muy variados. Algunas de las células bacterianas más pequeñas tienen forma cilíndrica de menos de una micra o µm (1 µm es igual a una millonésima de metro) de longitud. Las células vegetales tienen habitualmente más de 100 µm de longitud (pudiendo alcanzar los 2-5 cm en las algas verdes) y forma poligonal, ya que están encerradas en una pared celular rígida. Las células de los tejidos animales suelen ser compactas, entre 10 y 20 µm de diámetro y con una membrana superficial deformable y casi siempre muy plegada. Pese a las muchas diferencias de aspecto y función, todas las células están envueltas en una membrana, llamada membrana plasmática, que encierra una sustancia rica en agua llamada citoplasma. En el interior de las células tienen lugar numerosas reacciones químicas que les permiten crecer, producir energía y eliminar residuos. El conjunto de estas reacciones se llama metabolismo (término que proviene de una palabra griega que significa cambio). Todas las células contienen información hereditaria codificada en moléculas de ácido desoxirribonucleico (ADN); esta información dirige la actividad de la célula y asegura la reproducción y el paso de los caracteres a la descendencia. Estas y otras numerosas similitudes (entre ellas muchas moléculas idénticas o casi idénticas) demuestran que hay una relación evolutiva entre las células actuales y las primeras que aparecieron sobre la Tierra. COMPOSICIÓN QUÍMICA DE LAS CÉLULAS: En los organismos vivos no hay nada que contradiga las leyes de la química y la física. El 99% del peso de una célula está dominado por 6 elementos químicos: carbono, hidrógeno, nitrógeno, oxígeno, fósforo y azufre. El agua representa el 70% del peso de una célula, y gran parte de las reacciones intracelulares tienen lugar en el medio acuoso y en un intervalo de temperaturas pequeño. La química de los seres vivos, objeto de estudio de la bioquímica, está dominada por moléculas de carbono. La química de los organismos vivos es muy compleja, más que la de cualquier otro sistema químico conocido. Está dominada y coordinada por polímeros de gran tamaño (macromoléculas), moléculas formadas por encadenamiento de moléculas orgánicas pequeñas que se encuentran libres en el citoplasma celular. En una célula existen 4 familias de moléculas orgánicas pequeñas: azúcares (monosacáridos), aminoácidos, ácidos grasos y nucleótidos. Los tipos principales de macromoléculas son las proteínas, formadas por cadenas lineales de aminoácidos; los ácidos nucleicos, ADN y ARN, formados por nucleótidos, y los oligosacáridos y polisacáridos, formados por subunidades de monosacáridos. Los ácidos grasos, al margen de suponer una importante fuente alimenticia para la célula, son los principales componentes de la membrana celular. Las propiedades únicas de todos estos compuestos permiten a células y organismos alimentarse, crecer y reproducirse. TIPOS DE CÉLULAS: Células procariotas y eucariotas. Diseño: ACOSTA C., ROJAS F. “[email protected]” Bogotá (Año 2014) Lectura uno: Pág.3 COLEGIO FRANCISCANO DEL VIRREY SOLIS BOGOTÁ “Educamos para la Justicia, la Paz y las Nuevas Relaciones” Entre las células procariotas y eucariotas hay diferencias fundamentales en cuanto a tamaño y organización interna. Las procarióticas, que comprenden bacterias y cianobacterias (bacterias fotosintéticas), son células pequeñas, de entre 1 y 10 µm de diámetro, y de estructura sencilla; carecen de citoesqueleto, retículo endoplasmático, cloroplastos y mitocondrias. El material genético (ADN) está concentrado en una región, pero no hay ninguna membrana que separe esta región del resto de la célula. Las células eucarióticas, que forman todos los demás organismos vivos, incluidos protozoos, plantas, hongos y animales, son mucho mayores (entre 10 y 100 µm de longitud) y tienen el material genético envuelto por una membrana que forma un órgano esférico llamado núcleo. De hecho, el término eucariótico deriva del griego „núcleo verdadero‟, mientras que procariótico significa „antes del núcleo‟. Las bacterias y otras células procarióticas carecen casi siempre de muchas de las estructuras internas propias de las células eucarióticas. Así, el citoplasma de las procarióticas está rodeado por una membrana plasmática y una pared celular (como en las células vegetales), pero no hay núcleo diferenciado. Las moléculas circulares de ADN están en contacto directo con el citoplasma. Además carecen de mitocondrias, retículo endoplasmático, cloroplastos y aparato de Golgi. Aunque, en general, las células procarióticas carecen de estructuras internas delimitadas por membrana, las cianobacterias, como la ilustrada aquí, sí contienen numerosas membranas llamadas tilacoides, que contienen clorofila y pigmentos fotosintéticos que utilizan para captar la energía de la luz solar y sintetizar azúcares. Las células eucariotas, presentan un alto grado de organización, con numerosas estructuras internas delimitadas por membranas. La membrana nuclear establece una barrera entre la cromatina (material genético) y el citoplasma. Las mitocondrias, convierten los nutrientes en energía que utiliza la planta. A diferencia de la célula animal, la vegetal contiene cloroplastos, unos orgánulos capaces de sintetizar azúcares a partir de dióxido de carbono, agua y luz solar. Otro rasgo diferenciador es la pared celular, formada por celulosa rígida, y la vacuola única y llena de líquido, muy grande en la célula vegetal. BIBLIOGRAFÍA: Peinado Herreros, Mª Ángeles. Biología celular. Jaén: Universidad de Jaén, 2ª ed., 1996. Alberts, Bruce y otros. Biología molecular de la célula. Barcelona: Ediciones Omega, 3ª ed., 1996. Bautista Ballén, Mauricio; Williams de Eckhoff, Julie. Mundo vivo 9. Ciencias Naturales y Educación ambiental. Básica secundaria. Grupo Editorial Norma Educativa. Bogotá, Colombia. 2000. Diseño: ACOSTA C., ROJAS F. “[email protected]” Bogotá (Año 2014) Lectura uno: Pág.3