Jornada Cláusulas Abusivas LA REFORMA DEL PROCEDIMIENTO CIVIL DE EJECUCIÓN DINERARIA DE TÍTULOS NO JUDICIALES NI ARBITRALES PARA LA PROTECCIÓN DE LOS CONSUMIDORES EN MATERIA DE CLÁUSULAS CONTRACTUALES ABUSIVAS LA LEY 1/2013, DE 14 DE MAYO Jesús Riesco - Abogado Socio director de RIESCO ABOGADOS y PROADCON (sociedad profesional para la administración concursal). 1. INTRODUCCIÓN. LA LEY 1/2013, DE 14 DE MAYO. El Capítulo III de la Ley 1/2013, de 14 de mayo, de medidas para reforzar la protección a los deudores hipotecarios, reestructuración de deuda y alquiler social, que entró en vigor el día 16 de mayo pasado (BOE, de 15 de mayo de 2013) introduce varias modificaciones en el procedimiento de ejecución dineraria ordinaria e hipotecaria de títulos no judiciales o arbitrales regulado en la Ley de Enjuiciamiento Civil con el fin de garantizar, según explica en su Introducción, que, de oficio o a instancia de parte, el órgano judicial competente pueda apreciar la existencia de cláusulas abusivas en el título ejecutivo y, como consecuencia, decretar la improcedencia de la ejecución o, en su caso, su continuación sin aplicación de aquéllas consideradas abusivas. Esta modificación se adopta como consecuencia de la sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea1 de 14 de marzo de 2013, por la que se resuelve la cuestión prejudicial planteada por el Juzgado de lo Mercantil n.º 3 de Barcelona en auto de 19 de julio de 2011 respecto a la interpretación de la Directiva 93/13/CEE del Consejo, de 5 de abril de 1993, sobre las cláusulas abusivas en los contratos celebrados con consumidores2. De acuerdo con el fallo de la sentencia dictada por el Tribunal de Justicia de la Unión Europea, la Directiva 93/13 “debe interpretarse en el sentido de que se opone a una normativa de un Estado miembro, como la controvertida en el litigio principal, que, al mismo tiempo que no prevé, en el marco del procedimiento de ejecución hipotecaria, la posibilidad de formular motivos de oposición basados en el carácter abusivo de una cláusula contractual que constituye el fundamento del título ejecutivo, no permite que el juez que conozca del proceso declarativo, competente para apreciar el carácter abusivo de esa cláusula, adopte medidas cautelares, entre ellas, en particular, la suspensión del procedimiento de ejecución hipotecaria, cuando acordar tales medidas sea necesario para garantizar la plena eficacia de su decisión final”3. 1 Desde su creación en 1952, el Tribunal de Justicia de la Unión Europea tiene por misión garantizar «el respeto del Derecho en la interpretación y aplicación» de los Tratados. En el marco de esta misión, el Tribunal de Justicia de la Unión Europea y, entre otras funciones, interpreta el Derecho de la Unión resolviendo las cuestiones prejudiciales planteadas por los jueces nacionales. 2 No es la única cuestión prejudicial que un Juez español ha planteado sobre esta materia. En similares términos, y solicitando la acumulación a la anterior, el titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción núm. 1 de Catarroja en auto de fecha 15 de noviembre de 2012 planteó otras cuestión de prejudicialidad ante el TJEU. Sobre los efectos de dicha sentencia en nuestro ordenamiento jurídico: “Conclusiones de la Jornada sobre las repercusiones de la doctrina del TJUE en materia de cláusulas abusivas en ejecuciones hipotecarias», celebrada el 8 de mayo de 2013 en un Curso de Formación de jueces y magistrados organizado por el CGPJ; ACHÓN BRUÑEN, M.ª, J. en «Adecuación del procedimiento judicial hipotecario a la normativa europea : sentencia del TJUE de 14 de marzo de 2013», en Diario La Ley, núm. 8065, 2013; CARLOS SÁNCHEZ MARTÍN, “Comentario a la Sentencia del Tribunal de Justicia (Sala Primera) de 14 de marzo de 2013, en el asunto C-415/11”, Diario La Ley, Nº 8, 2013, La Ley 2227/2013; JOSÉ MANUEL 3 riescoabogados.com │proadcon.com página 2 de 10 A mi juicio, la reforma impuesta en la Ley 1/2013 cuando sólo habían transcurrido dos meses desde la fecha de la sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea, además de apresurada, es imprecisa, lo que propiciará una nueva controversia en esta materia, absolutamente judicializada, que dilatará aún más un procedimiento concebido como sumario y tasado, neutralizando la eficacia de los contratos mercantiles que llevan aparejada ejecución y la seguridad en el tráfico, que es uno de los pilares del sistema legal de un país que aspire a ser competitivo(4). La reforma afecta al procedimiento de ejecución dineraria de títulos no judiciales ni arbitrales, tanto al procedimiento hipotecario, como al ordinario, cuyas normas son de aplicación supletoria al primero (art. 681.1 LEC), permitiendo al órgano judicial competente para despachar la ejecución apreciar de oficio o a instancia de parte la existencia de cláusulas abusivas en el título ejecutivo y decretar la improcedencia de la ejecución o su continuación, no aplicando en este caso aquéllas cláusulas que considere abusivas. Este trabajo se únicamente se refiere a los aspectos procesales de la reforma en el procedimiento de ejecución, es decir, no será objeto de análisis el estudio del ejercicio de las acciones de ineficacia (nulidad, no incorporación y cesación) de las cláusulas abusivas por el procedimiento ordinario y el estudio de la validez de las y YOLANDA DE LUCCHI LÓPEZ-TAPI, “El debido tratamiento de las ejecuciones hipotecarias a la luz de la reciente jurisprudencia del TJUE”, Diario La Ley, Nº 8139, Sección Doctrina, 2 Sep. 2013, Año XXXIV, Ref. D-290, Editorial La Ley, 3459/2013. RICO RUIZ 4 M.ª JOSÉ ACHÓN BRUÑÉN, “La Ley 1/2013, de 14 de mayo, deficiencias y problemas prácticos”, La Ley 2989/2013; JOSÉ MARTÍN PASTOR, “La Ley 1/2013 de medidas para reforzar la protección a los deudores hipotecarios, reestructuración de deuda y alquiler social”, La Ley 2928/2013. riescoabogados.com │proadcon.com página 3 de 10 que están incluidas habitualmente en los contratos bancarios y sujetas a revisión como consecuencia de la jurisprudencia comunitaria y de la reciente sentencia del Pleno de la Sala Primera del Tribunal Supremo de 9 de mayo de 2013 (aclarada en virtud de auto de 3 de junio de 2013). 2. ASPECTOS ESENCIALES DE LA REFORMA El objeto de la reforma es, como decimos, permitir al juzgado competente para despachar la ejecución verificar o controlar si las cláusulas incluidas en el título ejecutado son abusivas, lo que se procura por dos vías: o En primer lugar, permitiendo al juez competente para despachar la ejecución un control de oficio la existencia de cláusulas abusivas en el titulo (art. 552.1 de la LEC). o En segundo lugar, incluyendo como nueva causa de oposición por motivos de fondo y a instancias del ejecutado el carácter abusivo de las cláusulas incluidas en el título (art. 557.1, 7.ª -ejecución ordinaria- y 695.1, 4.ª de la LEC –ejecución hipotecaria-). 2.1. EL CONTROL DE OFICIO De acuerdo con lo dispuesto en el art. 552.1, párrafo segundo, de la Ley de Enjuiciamiento Civil, una vez presentada demanda de ejecución por títulos no judiciales o arbitrales, si el tribunal aprecia que alguna de las cláusulas incluidas en riescoabogados.com │proadcon.com página 4 de 10 los mismos puede ser calificada como abusiva, dará audiencia por quince días a las partes(5). Aunque la ley no establece el plazo en el que el juez puede incoar este incidente previo, entiendo que tiene que ser antes de despachar ejecución, interpretación que es acorde con lo dispuesto en el art. 561.1, 3.ª de la Ley de Enjuiciamiento Civil, que habla de “despachar ejecución” y no de “proseguir o continuar con la ejecución despachada”6. Tampoco se regula en este nuevo incidente la celebración de vista por lo que entiendo que se puede aplicar por analogía el art. 560 de la Ley de Enjuiciamiento Civil, que se refiere a la oposición a la ejecución planteada por el ejecutado, permitiendo a las partes solicitar su celebración, lo que acordará el juzgado si considera que con los documentos aportados en ese momento no se puede resolver la controversia, lo cual sólo parece posible cuando se discuta la condición de consumidor del ejecutado en la concreta contratación (ajena a una actividad empresarial o profesional), requisito subjetivo imprescindible para que se declare el carácter abusivo de una cláusula contractual (art. 8.2 de la Ley 7/1998, de 13 de abril, sobre Condiciones Generales de la Contratación, en relación con el art. 3, 4, 82 y 85 a 90 y siguientes del Real Decreto Legislativo 1/2007, de 16 de noviembre, por el que se aprueba el Texto Refundido de la Ley General para la Defensa de Consumidores y Usuarios). Con posterioridad a la entrada en vigor de la Ley 1/2013 se ha dictado la Ley 8/2013, de 26 de junio, de rehabilitación, regeneración y renovación urbanas, que entró en vigor el 28 de junio pasado, que modifica nuevamente en su Disposición Adicional 4.ª los arts. 552 y 695 de la Ley de Enjuiciamiento Civil con el fin de introducir mejoras técnicas en su redacción (Preámbulo, IX), y, entre otras, se concreta ese plazo para las alegaciones en 15 días. 5 6 En el mismo sentido: “Conclusiones de la Jornada sobre las repercusiones de la doctrina del TJUE en materia de cláusulas abusivas en ejecuciones hipotecarias», celebrada el 8 de mayo de 2013, citada en la nota 2. riescoabogados.com │proadcon.com página 5 de 10 Una vez precluido el plazo de alegaciones y celebrada la vista, en su caso, el juzgado resolverá mediante auto en el plazo de cinco días hábiles conforme a lo previsto en el artículo 561.1.3.ª de la Ley de Enjuiciamiento Civil, es decir, si aprecia el carácter abusivo de una o varias cláusulas, “determinará las consecuencias de tal carácter, decretando bien la improcedencia de la ejecución, bien despachando la misma, pero sin aplicar aquéllas cláusulas que considere abusivas” (referido a la ejecución ordinaria), precisando el art. 695.3 (referido a la ejecución hipotecaria) que, de estimarse la causa 4.ª del art. 695.1, esto es, que el título contiene una cláusula abusiva “que constituya el fundamento de la ejecución o que hubiese determinado la cantidad exigible”, acordará el sobreseimiento de la ejecución “cuando la cláusula contractual fundamente la ejecución”. No se alcanza a comprender el motivo por el cual el legislador no ha utilizado una misma redacción sobre la nueva causa de oposición en ambos tipos de procedimiento, es decir, porqué en la ejecución ordinaria no se precisa, como sucede en la hipotecaria, que la cláusula no sólo tiene que ser considera abusiva, sino también debe de constituir el fundamento de la ejecución o haber determinado la cantidad reclamada. No parece discutible, que lo relevante para que se deniegue la ejecución o la no aplicación de las cláusulas no es que puedan considerarse abusivas en abstracto, sino que afecten a la ejecución despachada, es decir, incidan en la determinación de la cantidad por la que se despacha ejecución, ocasionando algún perjuicio al deudor ejecutado. De un lado, si el juzgado puede despachar ejecución ordinaria sin aplicar determinadas cláusulas contractuales por considerarlas abusivas es porque no afectan a la determinación de la cantidad reclamada o no constituyen el fundamento de la ejecución. De otro lado, esta interpretación se sustenta en la riescoabogados.com │proadcon.com página 6 de 10 Directiva 93/13/CEE, en el art. 82.3 de la Ley General para la Defensa de Consumidores y Usuarios, en la sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea de 4 de junio de 2009 (asunto C- 243/08 [Pannon GSM Zrt contra Erzsébet Sustikné]), y en el criterio mayoritario de nuestros tribunales (sentencias de la Sección 3.ª de la Audiencia Provincial de Les Illes Baleares, de 20 de marzo de 2013 [La Ley 35036/2013]; de la Sección 5.ª de Les Illes Balears, de 22 de marzo de 2013 [La Ley 445205/2013]; de la Sección 1.ª de la Audiencia Provincial de Ciudad Real de 16 de mayo de 2013 [La Ley 87978/2013]; del Juzgado de 1.ª Instancia n.º 4 de Ourense, de 21 de mayo de 2013 [La Ley 52365/2013]; y auto del Juzgado de 1.ª Instancia n.º 2 de Tafalla de 1 de julio de 2013). La Ley no regula expresamente la posible imposición de las costas de este incidente, por lo que, en principio, cada parte deberá de asumir las propias al haberse incoado de oficio, si bien cabe la posibilidad de que se impongan al ejecutante, si declara improcedente la ejecución (art. 561.1, 1.ª, párrafo segundo, en relación con el art. 394, ambos de la LEC), o al ejecutado, si estima que el título no contiene cláusulas abusivas y formula alegaciones defendiendo lo contrario (art. 561.1,2.ª de la LEC). En el supuesto de que el tribunal aprecie que alguna de las cláusulas no son se aplicación por ser abusivas y ordene continuar la ejecución sin aplicarlas entiendo que no deberá de imponer las costas del incidente a ninguna de las partes. Contra el auto que deniegue el despacho de la ejecución se podrá interponer recurso de apelación en el plazo de 20 días, sustanciándose el recurso sólo con el acreedor. También podrá el acreedor, a su elección, interponer en el plazo de 5 días recurso de reposición previo al de apelación. riescoabogados.com │proadcon.com página 7 de 10 Según la redacción literal del art. 557.2 de la Ley de Enjuiciamiento Civil sólo el acreedor está legitimado para interponer el recurso de apelación y además únicamente cuando el auto deniegue la ejecución, lo cual resulta contradictorio con lo dispuesto en el art. 561.3, que dispone, sin limitaciones subjetivas u objetivas, que contra el auto que resuelva la oposición podrá interponerse recurso de apelación. La interpretación literal de la norma podría ser contraria al principio pro actione que emana del derecho a la tutela judicial efectiva. Si el auto ordena seguir adelante la ejecución declarando inaplicables por abusivas alguna de las cláusulas del contrato las partes no tendrá derecho a una segunda instancia para solicitar la revisión de ese pronunciamiento (el acreedor para defender que no son abusivas y el ejecutado que constituyen fundamento de la ejecución o determinan la cantidad que se le reclama). Además, el ejecutado no podrá fundar su oposición a la ejecución despachada en relación a aquellas cláusulas que el auto no consideradas abusivas por el tribunal. Una vez firme el auto que deniegue el despacho de la ejecución, el acreedor sólo podrá hacer valer sus derechos en el proceso ordinario correspondiente, si no obsta a éste la cosa juzgada de la sentencia o resolución firme en que se hubiese fundado la demanda de ejecución. Es decir, el acreedor podrá ejercitar la acción personal de resolución o cumplimiento del contrato, pero sin aplicar aquellas cláusulas que hayan sido declaradas abusivas en el procedimiento de ejecución, pronunciamiento que tiene a mi juicio la eficacia de la cosa juzgada formal y material, pues no parece posible que una ulterior reclamación de la deuda derivada del contrato en un procedimiento ordinario pueda basarse en una liquidación que haya aplicado esas cláusulas invalidadas en el proceso previo de ejecución. riescoabogados.com │proadcon.com página 8 de 10 2.2. EL CONTROL A INSTANCIA DEL DEUDOR EJECUTADO Además del control de oficio del carácter abusivo de las cláusulas del contrato que es objeto de ejecución, la Ley 1/2013 incluye como una nueva causa de oposición a la ejecución de títulos no judiciales o arbitrales que éstos contengan cláusulas abusivas (art. 557.1, 7.ª), añadiendo el art. 695.1, 4.ª, la precisión, ya comentada, de que esas cláusulas deben de constituir además el fundamento de la ejecución o haber determinado la cantidad que se reclama. La oposición a instancias del ejecutado suspenderá la ejecución y se sustanciará por los trámites establecidos en los arts. 557 y siguientes de la Ley de Enjuiciamiento Civil, referidos a la ejecución ordinaria, y en el 695, referido a la ejecución hipotecaria, con la novedad introducida en el art. 561.1.3.ª, al que ya me he referido. Entiendo que cuando el juzgado, ejerciendo un control de oficio de las cláusulas del título, haya dictado auto ordenando que la ejecución siga adelante, el ejecutado no podrá basar su oposición en el carácter pretendidamente abusivo de aquellas cláusulas que hayan sido validadas o que no hayan sido aplicadas de acuerdo con dicha resolución. 2.3. RÉGIMEN TRANSITORIO. EL INCIDENTE EXTRAORDINARIO DE OPOSICIÓN La Ley 1/2013 es de aplicación a los procesos judiciales o extrajudiciales de ejecución hipotecaria que se hayan iniciado tras su entrada en vigor, el 16 de mayo de 2013, en los que no se haya ejecutado todavía el lanzamiento (DT 1.ª), y riescoabogados.com │proadcon.com página 9 de 10 únicamente respecto a aquellas actuaciones ejecutivas pendientes de realizar (DT 4.ª.1). En los procedimientos ejecutivos en curso a la entrada en vigor de la Ley que no haya finalizado con la puesta en posesión del inmueble al adquirente (DT 4.ª.2, III) y ya haya transcurrido o ya se haya iniciado el período de oposición de diez días previsto en el art. 556.1, los ejecutados disponen de un plazo preclusivo de un mes a contar desde dicha entrada en vigor, que finalizó el 16 de junio pasado, para formular un incidente extraordinario de oposición fundamentado única y exclusivamente en el carácter abusivo de una cláusula contractual que constituya el fundamento de la ejecución o que hubiese determinado la cantidad exigible La incoación de este incidente suspenderá el procedimiento de ejecución hasta su resolución de acuerdo con lo contemplado en los arts. 558 y siguientes y 695 de la Ley de Enjuiciamiento Civil (DT 4.ª,2, II). En cuanto al procedimiento para sustanciar este incidente, al no establecerse ninguno concreto, entiendo que será de aplicación el de oposición a la ejecución ordinaria o hipotecaria en cuanto a traslados, alegaciones, vista, resolución y recursos. riescoabogados.com │proadcon.com página 10 de 10