Publicaciones Nutrientes y fertilizantes \ Nutrientes secundarios y microelementos La función de los Nutrientes Secundarios y Microelementos Por: Generalitat Valenciana. Consejería de Agricultura, Pesca y Alimentación. Extracto del artículo publicado en la revista "ASAJA".Nº 13. Febrero 2003. Pág. 19. El nitrógeno, fósforo y potasio , junto con carbono e hidrógeno del aire y del agua, son los nutrientes principales que precisa la planta para su buen desarrollo. Pero para que su absorción por ésta sea la esperada, consiguiendo una alta eficiencia, es preciso que estén presentes otros nutrientes, que son los denominados elementos secundarios y microelementos, que van a potenciar y mejorar dicha eficiencia, de tal forma que la carencia de alguno de ellos puede provocar desajustes fisiológicos y problemas nutricionales que puedan desembocar en anormalidades de crecimiento, floración, cuajado, engorde de los frutos, falta de calidad, etc. ELEMENTOS SECUNDARIOS Se consideran normalmente como elementos nutritivos secundarios el grupo formado por el azufre, magnesio y calcio. Para el azufre, las necesidades de la plantan rondan alrededor de 50 a 80 Kg/ha. para leguminosas y entre 10 y 30 Kg/ha en otros cultivos (cereales, leñosos, etc). Como consecuencia del arrastre de las capas más superficiales a las más profundas, debido a las lluvia o al riego, se pierde en los suelos agrícolas cantidades de azufre que pueden variar entre 20 y 40 Kg/ha, sin tener en cuenta las extracciones de las cosechas. Estas pérdidas se compensan por el aporte del agua de la lluvia, que se estima entre 10-20 Kg/ha y año en condiciones normales, siendo mayores en las proximidades de las zonas industriales y por aportes de estiércoles y abonos que los contienen. Para el calcio, las necesidades de las plantas varían entre 30 y 100 Kg/ha, y no suelen aparecer problemas de carencias, ya que muchos terrenos suelen contenerlo en cantidades suficientes. A veces el problema se presenta por exceso, al bloquear el calcio a otros elementos. Si hay problema de ausencia se corrigen con la práctica del abonado. Para el magnesio, las necesidades de las plantas varían entre 20 y 30 Kg/ha. Son muy sensibles a la falta de magnesio las cucurbitáceas, los frutales, agrios y viñedos. Es antagónico con el potasio, de tal forma que el exceso de un elemento provoca la carencia de otro. Las enmiendas de magnesio en suelo se realizan principalmente por el aporte de dolomitas (carbonadtos cálcicos-magnésicos) y mediante los abonos compuestos que lo contengan. LOS MICROELEMENTOS También llamados oligoelementos, son un grupo de sustancias químicas necesarias para el desarrollo de las plantas, pero éstas los absorben en cantidades muy pequeñas, del orden de algunos gramos o cientos de gramos por hectárea. Los microelementos esenciales son: Boro, Cobre, Hierro, Zinc, Manganeso, Molibdeno, Cobalto y Cloro. Las necesidades medias de las plantas oscilan entre 2Kg/ha y año para el hierro hasta 5-10 gramos por hectárea y año para el molibdeno o el cobalto. Fertiberia, S.A. Calle Joaquín Costa, 26. 28002 Madrid. Tel. 91 586 62 00 Publicaciones A veces la carencia de un microelemento puede ser provocada por el exceso de otro, que realiza sobre la planta una acción de bloqueo. Un pH alto puede provocar la ausencia de manganeso, cobre, zinc, hierro, boro, molibdeno y azufre en el suelo y originar carencias de algunos microelementos en las plantas, según sus necesidades. Un pH muy bajo puede provocar la ausencia de molibdeno. Los suelos muy arenosos pueden motivar la ausencia de manganeso, cobre, zinc, boro, molibdeno y azufre, al ser lavados dichos elementos con facilidad. Los suelos ricos en materia orgánica dificultan la retención del boro y azufre. El exceso de calcio puede provocar el déficit de magnesio, zinc, cobre, hierro, boro y azufre. Lo mismo sucede con el magnesio-potasio; nitrógeno nítrico-hierro, fósforo con manganeso, zinc, hierro y azufre, y también manganeso con cobre, zinc y molibdeno. LOCALIZACIÓN EN EL SUELO Los elementos secundarios y microelementos pueden aparecer en el suelo de las siguientes formas: 1. 2. 3. 4. 5. 6. En la solución de suelo Como iónes intercambiables ligados por cargas eléctricas a las partículas del suelo. Como compuestos con materia orgánica. Como precipitados. Aparecen frecuentemente el hierro y el manganeso, pudiendo de esta forma estar disponible para la planta. Como absorbidos por nuevas fases sólidas. Constituyendo los minerales del suelo. Se liberan durante la meteorización y su disponibilidad por las plantas está estrictamente limitada. La relación microelementos-suelo nos indica lo siguiente: Boro: Los suelos de textura gruesa (arenosa), pobres en materia orgánica, tienden a ser bajos en boro disponible. Cobre: La materia orgánica juega un papel importante para la presencia de cobre soluble en el suelo. Las necesidades son pequeñas y el contenido en cobre del suelo debe ser de 4 a 6 ppm para suelos minerales y de 20 a 30 ppm para suelos orgánicos. Como la lixiviación de este microelemento es insignificante, una sola aplicación al suelo, en su caso, podrá solucionar todas las necesidades de cobre a las plantas durante muchos años. Hierro: en suelos arenosos y turbosos el contenido de hierro en el suelo es muy bajo. Zinc: La deficiencia de zinc en las plantas va unida generalmente a los suelos ácidos, principalmente en el horizonte superficial. Manganeso: La deficiencia de manganeso se encuentra generalmente asociada a los suelos orgánicos y minerales de pobre drenaje. La reducción del manganeso a la forma divalente y la lixiviación son los responsables del bajo nivel del mismo en el suelo. Molibdeno: La deficiencia de molibdeno suele darse, generalmente en suelos arenosos y en suelos orgánicos y minerales ácidos, o sea, está muy influenciado por la acidez y la lixiviación. FACTORES QUE INTERVIENEN EN SU DISPONIBILIDAD Los factores que afectan a la disponibilidad y, por tanto, a la absorción de los microelementos por las plantas, siendo los más estudiados los siguientes: El pH del suelo. Influye directamente en la absorción ya que al disminuir la acidez disminuye la solubilización y absorción del cobre, hierro, zinc y cobalto, y especialmente la del manganeso, mientras que aumenta la del azufre y molibdeno. La textura del suelo. La cantidad de microelementos totales disminuye en suelos con textura gruesas (arenosas). Fertiberia, S.A. Calle Joaquín Costa, 26. 28002 Madrid. Tel. 91 586 62 00 Publicaciones La materia orgánica del suelo. El humus retiene los cationes metálicos di y trivalentes con más fuerza que los cationes metálicos alcalinos. El cobre forma complejos bastantes fuertes con compuestos orgánicos y es más apto que el manganeso para ser fijado por el humus. Otros factores. La actividad microbiológica de los suelos, su drenaje a las condiciones de oxidaciónreducción, las condiciones climáticas y las variaciones estacionales pueden ocasionar diferencias considerables respecto a la disponibilidad de oligoelementos para las plantas. Fertiberia, S.A. Calle Joaquín Costa, 26. 28002 Madrid. Tel. 91 586 62 00