Guatemala, septiembre 2013, AÑO 3, No. 5 EXALTACIÓN DEL 192 ANIVERSARIO DE NUESTRA INDEPENDENCIA DISCURSO DEL MAGISTRADO HÉCTOR HUGO PÉREZ AGUILERA PRESIDENTE DE LA CORTE DE CONSTITUCIONALIDAD EN EL CONGRESO DE LA REPÚBLICA AVE INDIANA QUE VIVE EN TU ESCUDO El Ministerio de Educación (1973), con la poderosa ayuda de Salvador Aguado-Andreut, uno de sus ilustres asesores, publicó los cuadernos El Quetzal; hermosos por su contenido: la monografía escrita por Carlos Samayoa Chinchilla, las fotografías hechas por David G. Allen, y siete de las mejores poesías sobre el ave símbolo. Primorosos esos libritos por su artesanía editorial, realizada por Aquiles Pinto Flores, director entonces de la hoy impunemente asesinada “Pineda Ibarra”. Alejandro Maldonado Aguirre l, de udicia y subj o s roce rdinario órgaun p ...es al, extrao o por un cuyo “ , o par uelt nte, cion El am constitu do y res ermane gún sea a p e s o it o g r, m l n a a a de r r r ra io, t l, tempo o restau entales fren r ia m r u sid ia a a s c d v os er un spe no e o es pres rechos f los mism lneración e t obje aso los d s cuando nte de vu ersonas el c ticulare inmine os por p ”. d co a ar los p aza ciert sido viola der públi O COM n o n e p a l RO, DIO DE m h e a MPA E ando jercicio d EL A ESTE M u N c E o DE AS OST en e USO IONAL. DE C EL AB C N AR TITU CIO IDA RA EVIT N CONS IQU LA L SIVO PA TECCIO O A R U P DIS Los textos que se publican en INFOCC son de la exclusiva responsabilidad de sus autores y no expresan necesariamente el pensamiento de la Corte de Constitucionalidad. Guatemala, septiembre 2013, AÑO 3, No. 5 EXALTACIÓN DEL 192 ANIVERSARIO DE NUESTRA INDEPENDENCIA DISCURSO DEL MAGISTRADO HÉCTOR HUGO PÉREZ AGUILERA, PRESIDENTE DE LA CORTE DE CONSTITUCIONALIDAD EN EL CONGRESO DE LA REPÚBLICA C on ocasión de la sesión solemne del 13 de septiembre del Congreso de la República para conmemorar el 192 aniversario de la Independencia Patria, el Presidente de la Corte de Constitucionalidad, Magistrado Héctor Hugo Pérez pronunció en el hemiciclo un interesante discurso en donde hizo un llamado a la unidad nacional y a fortalecer cada día más la libertad y proteger la independencia nacional y la autodeterminación de los pueblos. Estuvo presente la Junta Directiva del Congreso de la República, magistrados de la Corte Suprema de Justicia y de la Corte de Constitucionalidad, miembros del Cuerpo Diplomático y Consular y de la Comunidad Internacional, diputados y diputadas, miembros de la prensa nacional e internacional, representantes de los diversos colectivos nacionales e invitados especiales. Recordó con mucho entusiasmo el acta de independencia en donde en el artículo 16 de perpetuó por los siglos la memoria del 15 de septiembre de 1821. Quiso relacionar esta fecha con las de otros estados del plano internacional. Se refirió a que la independencia como concepto político aparece con la declaración de la independencia de los Estados Unidos en 1776, la cual ha quedado como guía para posibilitar la independencia total del resto de los estados para una mejor convivencia e igualdad en todas las relaciones. Se refirió a la independencia en el plano internacional e interno. Señaló que estas ideas aparecen también íntimamente vinculadas con la noción del término de 2 www.cc.gob.gt no intervención, para reafirmarse que la independencia internacional se ha traducido en el deber de no ingerencia entre unos estados y otros, lo cual implica la afirmación que todos son iguales ante el derecho internacional y que la desigualdad política no puede justificarse legalmente hacia los estados más débiles. Esta independencia es conocida como independencia política y se define como la facultad que detenta cada estado de ejercer su potestad de decisión como otro ordenamiento jurídico estatal ajeno. Agregó el Presidente de la CC que a nivel internacional se reconoce ampliamente la independencia de los Estados y se exige ésta como un requisito de cada uno para el ingreso a la comunidad internacional. Así, a nivel internacional, al revisar la Carta de las Naciones Unidas, suscrita el 26 de junio de 1945 y en vigencia desde el 24 de octubre de ese mismo año, se señala dentro de los propósitos establecidos en el artículo 2, que “los miembros de la Organización, en sus relaciones internacionales, se abstendrán de recurrir a la amenaza o al uso de la fuerza contra la integridad territorial o la independencia de cualquier otra forma incompatible con los propósitos de las Naciones Unidas. Por otro lado, el Magistrado Héctor Hugo Pérez recordó que la Carta de la Organización de los Estados Americanos, para lograr un orden de paz y de justicia, tiene como propósito el hecho de fomentar la solidaridad, robustecer su colaboración y defender la soberanía, la integridad territorial y su independencia. Asimismo, desde el punto de vista interno, la independencia es Guatemala, septiembre 2013, AÑO 3, No. 5 objeto de estudio de la ciencia política y el derecho político constitucional, llevando internamente la idea de que cada gobierno propio debe tener la condición del poder o potestad que regula el ordenamiento jurídico de estado, con un elemento esencial como sería la división de poderes y su independencia entre ellos. E n el ámbito interno, mencionó que nuestra constitución de 1985 regula numerosas instituciones autónomas con funciones independientes, cuyo principal objetivo es lograr la plena vigencia del orden constitucional, así como mantener esa independencia entre los órganos estatales. La misma constitución vigente desde 1985, reconoce la Ley Electoral y de Partidos Políticos, así como al Tribunal Supremo Electoral como la máxima autoridad en la materia, independiente y no superditado a organismo alguno del Estado, surge también con mucho acierto la figura del Procurador de los Derechos Humanos como un comisionado del Congreso de la República en la defensa de los derechos humanos, con absoluta independencia para sus actuaciones. Concluyó su intervención, refiriéndose a la creación de la Corte de Constitucionalidad como un tribunal autónomo e independiente, regido por las normas constitucionales. El artículo 268 de la Constitución prevé que la “Corte de Constitucionalidad es un tribunal permanente de jurisdicción privativa, cuya función esencial es la defensa del orden constitucional; actúa como tribunal colegiado con independencia de los demás organismos del Estado y ejerce funciones específicas que asigna la constitución y la Ley de la materia”. No hay momento más oportuno, dijo, que el 192 aniversario de nuestra independencia para recordar que todos los guatemaltecos debemos luchar por la consolidación de la democracia y de nuestra verdadera independencia. Que Dios los bendiga y bendiga a Guatemala www.cc.gob.gt 3 Guatemala, septiembre 2013, AÑO 3, No. 5 AVE INDIANA QUE VIVE EN TU ESCUDO Alejandro Maldonado Aguirre E l Ministerio de Educación (1973), con la poderosa ayuda de Salvador Aguado-Andreut, uno de sus ilustres asesores, publicó los cuadernos El Quetzal; hermosos por su contenido: la monografía escrita por Carlos Samayoa Chinchilla, las fotografías hechas por David G. Allen, y siete de las mejores poesías sobre el ave símbolo. Primorosos esos libritos por su artesanía editorial, realizada por Aquiles Pinto Flores, director entonces de la hoy impunemente asesinada “Pineda Ibarra”. Se cuentan en plural, porque los cuadernos aparecieron en español, quiché, cakchiquel, mam, inglés y francés. El propósito de la publicación fue la necesidad de llevar a cabo una intensa campaña que defienda y salve a nuestro nahual el quetzal. En la introducción de la obra se decía: “Ornitólogos y ecólogos, así como los estudiosos del antiguo mundo maya, nos avisan, terriblemente alarmados, del peligro que se cierne sobre el quetzal y sobre su propio me- 4 www.cc.gob.gt dio físico. (...) Urge... (con urgencia espiritual y moral, mucho más que legal e impositiva), recordar a nuestro pueblo qué es y qué significa el quetzal; cómo nos liga al pasado profundo de nuestra más lejana historia y cómo nos habla desde el misterioso mundo de nuestros bosques.” El Himno Nacional, el Escudo de Armas y la moneda de Guatemala incorporan. como símbolo de libertad, el quetzal, frágil ave que, según los versos del J. Joaquín Palma, tiene el reto de competir con otras especies más poderosas físicamente. Significativo es que el ave “indiana” represente a los pueblos originarios en el canto y el blasón nacionales, en los que ocupa el lugar prominente. Pero este reconocimiento pudo haber sido más explícito, como en la letra de otros himnos americanos, que no dudaron en invocar a los pueblos autóctonos por su nominativo, sin necesidad del recurso metafórico para referirse a la base de la nacionalidad. Guatemala, septiembre 2013, AÑO 3, No. 5 A nuestro canto nacional le falta algo, ausencia que únicamente se nota comparando referentes de otros países, incluidos algunos en donde la población indiana es proporcionalmente mucho más reducida que en Guatemala. Así tenemos, para empezar las citas, a la República Argentina: “Se conmueve del Inca las tumbas/ y en sus huesos revive el ardor, / lo que ve renovando a sus hijos/ de la Patria el antiguo esplendor.” (Letra de Vicente López y Planes) Otra república predominantemente blanca, Uruguay, haciendo honor a un guerrero ajeno a su comarca, consigna en su extenso himno: “Al estruendo que en torno resuena / De Atahualpa la tumba se abrió, / Y batiendo sañudo las palmas / Su esqueleto...¡Venganza! gritó./ Los patriotas, al eco grandioso, / Se electrizan en fuego marcial, / Y en su enseña más vivo relumbra / De los Incas el Dios inmortal.” (Letra de Francisco Acuña de Figueroa) Otra nación del Sur, con letra de Eusebio Lillo, canta: “Con su sangre el altivo araucano / Nos legó por herencia el valor, / Y no tiembla la espada en la mano / Defendiendo de Chile el honor.” Ecuador, mitad criolla mitad indígena, recuerda sus raíces así: “Los primeros, los hijos del suelo / Que el soberbio Pichincha decora, / Te aclamaron por siempre señora / Y vertieron su sangre por ti. / Dios miró y aceptó el holocausto, / Y esa sangre fue el germen fecundo / De otros héroes, que atónito el mundo / Vio en su torno a millares surgir.” (Letra de Juan León Mera) Los peruanos no olvidaron sus ancestros incaicos para invocarlos en la letra, escrita por de la Torre Ugarte, de su himno patrio: “Lima cumple ese voto solemne, / y severa su ojo mostró / al tirano impotente lanzando / que intentaba alargar su opresión / A su esfuerzo, saltaron los hierros / Y los surcos que en sí reparó / Le atizaron el odio y venganza / que heredó de su Inca y Señor.” Decir quetzal es decir pueblo. Lo medita poéticamente Arce y Valladares: “...hay en tus ojos señoriales / --blasones de tu antigua aristocracia-- / un mucho de tristeza / velado suavemente por la gracia / del porte de tu olímpica realeza.”. Y otros bardos también: “sobre el acero que a Tecún hería / tendió un quetzal el iris de su cola” (Wyld Ospina). “En su augusto silencio se revela / la infinita tristeza de la raza” (Calderón Avila). “...renace en libertad y lumbre de Gucumatz” (Angelina Acuña). “..símbolo alado por su gesto de raza” (Santos Chocano). “... nostálgico zahorí” (Heliodoro Valle). Síntesis absoluta que expresó Flavio Herrera: “Es un río de esmeralda / con una antorcha por guía. / Nació en la mitología / y desemboca en el alma.” www.cc.gob.gt 5 Guatemala, septiembre 2013, AÑO 3, No. 5 LA LIQUIDACION DE COSTAS EN EL AMPARO, COMO DISUASIVO PARA EVITAR EL ABUSO DE ESTE MEDIO DE PROTECCION CONSTITUCIONAL E Francisco Omar Carrillo Calentti l amparo, según lo afirma el autor Martín Ramón Guzmán Hernández: “...es un proceso judicial, de rango constitucional, extraordinario y subsidiario, tramitado y resuelto por un órgano especial, temporal o permanente, cuyo objeto es preservar o restaurar, según sea el caso los derechos fundamentales de los particulares cuando los mismos sufren amenaza cierta inminente de vulneración o cuando han sido violados por personas en ejercicio del poder público”.1 Es pertinente, entonces, afirmar que dada la naturaleza de proceso judicial de este medio de protección constitucional, su tramitación genera, desde su inicio, gastos en que, obligatoriamente, deben incurren aquellas personas que acuden ante el órgano jurisdiccional competente, en demanda de satisfacción de sus pretensiones, como se desprende del contenido del artículo 21 literal j) de la Ley de Amparo, Exhibición Personal y de Constitucionalidad, que exige como requisito del escrito contentivo de amparo, que el mismo esté auxiliado por abogado colegiado activo. Dada la noble naturaleza de este mecanismo de protección constitucional, existen, en la ley de la materia, artículo 26, cuatro casos, en los cuales no es requisito el auxilio profesional, prestado por abogado colegiado activo, mismos que, en su orden, se refieren a: Personas notoriamente pobres, ignorantes, menores de edad o incapacitados, en cuyos casos el tribunal que conoce de dicha situación deberá levantar acta acerca de los agravios denunciados y remitir copia al Procurador de los Derechos Humanos para que aconseje, o en su caso , patrocine al interesado, en forma directa o por medio de alguno de los abogados que laboran en la institución.2 Luego de desarrolladas las distintas etapas procesales que genera el proceso constitucional de amparo, que abarca desde la primera audiencia a los interesados y que culmina con la emisión de la sentencia, el tribunal constitucional deberá decidir entre otros aspectos, sobre las costas procesales, cuya liquidación es competencia del mismo tribunal que conoció en primera instancia, misma que se resolverá en incidente. Las costas procesales, según el autor Mario Efraín Nájera Farfán, se “reduce a los gastos necesarios que son consecuencia directa de las exigencias del proceso y cada legislación se encarga de imputarlos y de tasarlos atendiendo a las diferentes concepciones que al respecto ha elaborado la doctrina.”3 El artículo 7 de la Ley de Amparo, Exhibición Personal y de Constitucionalidad, permite, en materia de justicia constitucional, la aplicación supletoria de las leyes comunes interpretadas en el espíritu de la Constitución, por lo que al tenor de lo dispuesto en dicha norma jurídica, el litigante favorecido con el cobro de costas, en un proceso constitucional de amparo, puede reclamar al tribunal competente, en la liquidación respectiva, los rubros contenidos tanto en el Código Procesal Civil y Mercantil, que incluyen, entre otros, honorarios del abogado director y procurador, así como los contemplados en el Arancel de Abogados, Árbitros, Procuradores, Mandatarios Judiciales, Expertos, Interventores y Depositarios, Decreto 111-96 de El Congreso de la República de Guatemala, respectivamente, que abarcan elaboración de escritos, alegatos, prestación de servicios fuera de la oficina y otros. La importancia de citar el arancel aludido, radica en que los honorarios profesionales, como parte 6 www.cc.gob.gt de las costas procesales, constituyen el rubro más oneroso que se incluye en el proyecto de liquidación de costas procesales a ser reclamados por el solicitante de dicha liquidación. Este mecanismo legal que permite al litigante recuperar, en muchos casos, en forma parcial, los gastos en que ha incurrido por la tramitación de un proceso, en materia constitucional, se ve mermado por el criterio, sostenido, hasta el día de hoy, por la Corte de Constitucionalidad, en el sentido de que el amparo, es un asunto de valor indeterminado y estando regulando en el arancel respectivo, un monto variable para dichos asuntos, se han aprobado, reiteradamente, los montos mínimos contenidos en ese cuerpo normativo, beneficiando de esa manera al condenado en costas procesales e incrementado la carga del máximo tribunal constitucional, que solo durante el período comprendido de enero de 1,994 a diciembre de 1, 996 , de un total de 1,315 amparos, declaró sin lugar, un setenta y nueve punto nueve por ciento (79.9%) de los mismos. El incidente de liquidación de costas procesales, en el proceso constitucional de amparo, es una oportunidad que no solo permite al litigante el justo reclamo de los gastos efectuados en la tramitación de un proceso; sino que, en el caso de la justicia constitucional, constituye una ventana abierta al juez para que por la vía de la jurisprudencia, cumpla con su función esencial, que es la defensa del orden constitucional, y mediante esa herramienta poderosa , basada en la ley, examine en forma minuciosa la liquidación de costas procesales, sujeta a su conocimiento, aprobando la misma según lo dispuesto en la normativa vigente; y cuando se evidencie el uso del amparo como un medio de entrampar la justicia constitucional, se haga uso de la potestad judicial aprobando los montos máximos a que se refiere dicho arancel. Dicha actitud tribunalicia, indudablemente, motivaría una drástica disminución de todos aquellos procesos constitucionales de amparo que buscan erosionar el postulado de una justicia pronta y cumplida y constituiría, además, un elemento disuasivo en contra de aquellos litigantes de mala fe. La postura sugerida en el presente ensayo, no busca colisionar con la gratuidad de los servicios públicos, particularmente en la obligación de administrar justicia; y con la posición asumida por el tribunal constitucional de considerar el amparo como un asunto de valor indeterminado; pero formula una posición más equitativa, ya que en la actualidad el Estado, mediante la tramitación y diligenciamiento de los procesos constitucionales de amparo fallidos incurre diariamente en costos administrativos que se reflejan en el pago de mobiliario, equipo y pago de operadores del sistema judicial para su resolución, desviando los recursos de la justicia constitucional que le son más valiosos para fortalecerse tales como la difusión de la cultura constitucional. 1 2 3 Guzmán Hernández, Martín Ramón. El Amparo Fallido, Publicación de la Corte de Constitucionalidad, Segunda Edición, Guatemala, 2004. Pág 27. Sentencia de la Corte de Constitucionalidad del 08-09-2008, expediente 1854-2008. Nájera Farfán, Mario Efraín. Derecho Procesal Civil, Volúmen I, IUS ediciones, Guatemala, 2006. Pág. 709. Guatemala, septiembre 2013, AÑO 3, No. 5 Síntesis de Jurisprudencia Constitucional INCIDENCIAS PROCESALES Carlos Alfonso Francisco Álvarez-Lobos Medrano Marco Tulio Jolón Monterroso Durante la dilación procesal, puede presentarse una serie de vicisitudes, por lo que resulta interesante dar a conocer algunos criterios que han decidido situaciones producidas durante su trámite L as garantías constitucionales de amparo, exhibición personal y de inconstitucionalidad regulan su trámite en primer término por las previsiones establecidas en la Ley de Amparo, Exhibición Personal y de Constitucionalidad, complementándose la normativa aplicable de conformidad con lo previsto en el artículo 7º del precitado cuerpo normativo, es decir aplicándose supletoriamente las leyes comunes interpretadas en congruencia con el espíritu de la Constitución. Durante la dilación procesal, puede presentarse una serie de vicisitudes, por lo que resulta interesante dar a conocer algunos criterios que han decidido situaciones producidas durante su trámite, por lo que a continuación se citan algunos de estos criterios. CRITERIO # 1 La petición inicial de amparo puede ser ampliada o modificada antes de que se reciban los antecedentes o el informe circunstanciado remitido por parte de la autoridad recurrida. “…En tal sentido, el artículo 110 del Código Procesal Civil y Mercantil que norma el término de preclusión para ampliar o modificar la petición inicial, indica que podrá ampliarse o modificarse ésta, antes de que haya sido contestada, por lo que debe entenderse que para el caso del amparo, la contestación de la demanda equivale a la remisión de los antecedentes o del informe circunstanciado por parte de la autoridad recurrida. De ahí que en el presente caso al haberse remitido los antecedentes el trece de marzo de dos mil trece y haber presentado el ocursante su ampliación el veintiuno de marzo del año en curso, se evidencia que se hizo cuando ya había operado la preclusión, de conformidad con el artículo precitado...” Expediente 1472-2013 (Auto de 09-05-2013) Expediente 93-2008 (Auto de 01-02-2008) Expediente 3765-2010 (Auto de 26-11-2010) CRITERIO #2 La fase procesal correcta para decretar la suspensión del proceso por falta de presupuestos procesales (temporaneidad, definitividad, legitimación activa y pasiva), es al recibir los antecedentes o el informe circunstanciado. “…de acuerdo a la secuela de hechos expuesta en el apartado específico del presente auto, se advierte que la actuación de la autoridad ocursada no causó lesión a los derechos del ocursante ni se emitió en contravención a la jurisprudencia sentada por este Tribunal, ya que, contrario a lo manifestado por este, los tribunales de amparo de primera instancia poseen la facultad para suspender en definitiva el trámite de las acciones constitucionales, siempre y cuando sea por falta de presupuestos procesales, y que la fase procesal correcta para decretarla es al recibir los antecedentes respectivos o el informe circunstanciado de mérito, tal y como sucedió en el presente caso.“ Expediente 1601-2013 (Auto de 06-5-2013) Expediente 2700-2011 (Auto de 29-07-2011) CRITERIO # 3 La autoridad impugnada en el amparo puede ofrecer sus medios de prueba al rendir el informe circunstanciado o al evacuar la primera audiencia por cuarenta y ocho horas. “…Conforme a lo señalado en la norma anterior, se entiende que el momento procesal oportuno para ofrecer los medios de prueba para dilucidar el caso objeto de discusión en la vía del amparo, es en la primera comparecencia, que para el caso del postulante del mismo constituye su escrito inicial y para los terceros interesados, lo será el momento de evacuar la primera audiencia por cuarenta y ocho horas. Ahora bien, respecto del caso bajo análisis, tratándose de la autoridad reprochada, aunque esta Corte ha sostenido que la audiencia por cuarenta y ocho horas que se concede a las partes, ya sea de los antecedentes o informe circunstanciado remitidos, no incluye a la autoridad impugnada, no debe www.cc.gob.gt 7 Guatemala, septiembre 2013, AÑO 3, No. 5 entenderse por ello que esta no pueda ser una oportunidad posible para que la referida autoridad pueda comparecer y ofrecer sus medios de convicción, puesto que al momento de rendir el informe circunstanciado, debe limitarse a informar lo ocurrido respecto del acto reclamado; sin embargo, resulta también válido que lo haga en dicha oportunidad…” Expediente 1122-2013 (Auto de 08-07-2013) CRITERIO # 4 No es motivo para acceder a enmendar el procedimiento cuando no se dio noticia de la decisión de admitir algunos medios probatorios, si otros sujetos procesales habían propuesto idénticos medios probatorios, ello según el principio de adquisición procesal. “Ahora bien, para determinar si la actuación de la Sala ocursada entraña vicio substancial en el procedimiento que amerite la anulación de las actuaciones, esta Corte estima pertinente realizar algunas acotaciones. De conformidad con lo regulado en los artículos 37 de la Ley de Amparo, Exhibición Personal y de Constitucionalidad, y 12 del Acuerdo 4-89 de este Tribunal, el otorgamiento de la segunda audiencia se encuentra condicionado, ineludiblemente, a la realización de la fase o período de prueba, extremo que permite determinar que, la finalidad de esa etapa procesal, radica en conferir audiencia a las partes del amparo para que se pronuncien en relación a los elementos de convicción aportados y que hayan sido admitidos por el Tribunal de conocimiento. En ese orden de ideas, esta Corte advierte en el presente caso, que si bien la Sala consultante, previo a otorgar la segunda audiencia, debió comunicar a los sujetos procesales la resolución por la que tuvo por admitidos los medios de prueba propuestos por la persona referida, su proceder no amerita la enmienda del procedimiento, pues los elementos de convicción aportados por esa parte, consistían, esencialmente, en actuaciones contenidas dentro del proceso subyacente al amparo y documentos que ya obraban en el expediente de primera instancia (cuyo conocimiento es obligatorio conforme lo regulado en la Ley de la materia), y que, además, fueron solicitados también por los demás sujetos que comparecieron a proponer sus elementos de convicción (folios doscientos sesenta y uno al doscientos sesenta y ocho de la pieza de primer grado). Por 8 www.cc.gob.gt consiguiente, al notificarse oportunamente las resoluciones que admitieron los medios de prueba propuestos por estos últimos, de conformidad con el principio de adquisición procesal –que establece que la prueba aporta al proceso y no a quien la propone–, los sujetos del amparo tuvieron conocimiento de la totalidad de pruebas aportadas a esa acción constitucional, quedando a salvo su derecho de realizar las argumentaciones que estimaran convenientes en la segunda audiencia, sin que les causara lesión alguna a sus derechos procesales la falta de notificación de la resolución mencionada.” Expediente 2160-2013 (auto de 11-06-2013) Expediente 2101-2009 (auto de 17-07-2009) CRITERIO # 5 En materia constitucional (Amparos e inconstitucionalidad de ley en caso concreto), los únicos medios de impugnación de las resoluciones son el recurso de apelación, ocurso de hecho, ocurso de queja y aclaración y ampliación, para una aplicación en forma armónica de la Ley de la materia y de las leyes ordinarias, en este caso, del código procesal penal “…Como cuestión preliminar, esta Corte ha sido del criterio reiterado que si bien el artículo 7° de la Ley de Amparo, Exhibición Personal y de Constitucionalidad, permite la aplicación supletoria de las leyes comunes en congruencia con el espíritu de la Constitución, tal disposición debe interpretarse de forma armónica y sistemática con los demás preceptos de dicho cuerpo normativo, pues este regula expresamente los medios de impugnación aplicables a cada uno de los procesos relativos a la justicia constitucional, siendo los específicos para el caso de las inconstitucionalidades de ley en casos concretos los previstos en los artículos 72, 127, 132 y 147 de la Ley ibídem –ocurso en queja (aplicable mutatis mutandi), apelación, ocurso de hecho y aclaración y ampliación–. De manera que cualquier impugnación que se interponga fuera de los medios antes señalados o con fundamento en otras leyes del orden común, resulta improcedente y, por ende, el órgano jurisdiccional deberá rechazarlo liminarmente. En atención a lo antes expuesto, la normativa aplicable al presente caso es la contenida en la Ley de Amparo, Exhibición Personal y de Constitucionalidad y no el Código Procesal Penal, como lo pretende el ocursante...” Expediente 2846-2013 (auto de 11-07-2013) Expediente 1637-2011 (auto de 20-05-2011) Expediente 4647-2012 (auto de 10 de enero de 2013)