ARQUITECTURA DEL PAISAJE CONSTRUCCIÓN Y MEDIOAMBIENTE Un resumen de las ponencias desarrolladas durante la edición 2005 del Congreso Nacional de Parques y Jardines Públicos Elementos vegetales en la jardinería mediterránea Antonio Bonafont [email protected] El Jardín debe seducir al espectador y ubicarlo en un mundo donde el goce por la Naturaleza lo conduzca a su propia libertad La especie en flor amarillo intenso es el palaín (Genista spartioides). También se ven lentiscos (Pistacea lentiscus), olivos y acebuches (Olea europaea) y matas de esparragueras (Asparagus albus). 10 Nº 139 Para el paisajista chileno Juan Grimm, el Jardín es un nexo entre arquitectura y paisaje: "pienso que el Hombre, al construir, destruye el entorno; la labor del paisajista es recomponer esas heridas, uniendo la Naturaleza con esa obra de arquitectura". Al pasear por un jardín recordamos las sensaciones que percibimos más que su forma o estructura. Esta manifestación de arte es la única donde actúan todos los sentidos, reaccionando frente al perfume, humedad, colores, texturas y, por encima de todo, a la percepción de la vida. El jardín, ya sea abstracto o naturalista, debe tener un clima, una atmósfera, algo que pueda transportar a un espacio natural, que evoque algún lugar de la Naturaleza. Los huertos y bancales en monte alto mantienen testimonio de cultivos y arbolado de secano que alternaba con especies autóctonas. ARQUITECTURA DEL PAISAJE PARQUES Y JARDINES Por eso es importante que el jardín tenga lecturas claras de paisaje y no de colección de plantas. Además de tener una lectura espacial, debe responder al espíritu del lugar y a los requerimientos del mandante. No es una tarea fácil conciliar estos tres aspectos, pero sí fundamental para la concreción de una obra coherente y contundente, independiente a cual sea su tamaño o envergadura. En cuanto a las plantas, parece determinante conocer la dinámica de cada especie para intuir el espacio que con ellas seamos capaces de construir y prever en el tiempo la forma que proyectemos para un lugar. La evolución propia de cada especie vegetal y las relaciones que cada lugar tiene con la secuencia de su paisaje, son las orientaciones que definen las ideas sobre lo que hay que hacer en cada espacio. Si somos capaces de incorporar nuestra obra dentro de la secuencia del paisaje y ordenarla inspirados en su alma, lo que haremos es intentar tomar su esencia y aplicarla. Es imprescindible entonces para un paisajista comprender, conocer, amar y percibir ese orden que muestra el paisaje natural, valorar, respetar su identidad y trabajar con él, no contra él. El agua, ¿un factor limitante para la diversidad vegetal? Las prácticas más habituales en jardinería que conllevan problemas a las plantas adaptadas a la escasez de agua son las podas estivales, los riegos y abonados demasiado frecuentes en verano y la no zonación de las plantas según sus necesidades hídricas. Es importante permitir que las plantas desarrollen sus propias estrategias funcionales. Las plantas mediterráneas suelen presentar una parada vegetativa estival muy acusada. El exceso de agua circundante a las raíces de forma permanente durante esta época puede ser perjudicial. Un riego continuado, un mal drenaje, una poda de verano o una plantación en verano con sus consiguientes riegos para mantenerla son tareas cotidianas que no se adecúan a la biodinámica de la mayoría de las plantas adaptadas a la escasez de agua que podemos utilizar en los jardines mediterráneos. La jardinería efectuada en zonas con restricciones de agua podría basarse en especies autóctonas, adaptadas a la climatología y condiciones edáficas de una zona concreta y con reducidos requerimientos hídricos y nutricionales. Las plantas autóctonas llevan en su región el tiempo suficiente como para haber coevolucionado con los animales y tejer ecosistemas equilibrados. Atraen a insectos que se alimentan de ellas y a sus depredadores, evitando el peligro de plaga o invasión. Miquel Barceló apunta que, "no podemos caer en el tópico de que todas las plantas autóctonas son susceptibles de ser utilizadas en nuestros jardines". Ahora bien, existe un enorme abanico de especies en nuestro paisaje que pueden cubrir la mayoría de requerimientos de los jardines en formas, texturas, portes, épocas y colores de floración, así como desarrollar unos crecimientos y establecimiento adecuados a las condiciones particulares de los jardines. La posible combinación de estas especies con plantas de otras regiones del mundo con clima mediterráneo permite crear jardines extremadamente ricos. Aparte del entorno del mar Mediterráneo, existen en el mundo otras cuatro zonas con un clima y una vegetación natural del tipo mediterráneo. El esparto común (Stipa tenacissima) y el albardín o esparto basto (Ligeum espartum) las gramíneas más comunes de este Jardín Botánico del Albardinal. El hombre traza las líneas estructurales de un jardín… pero es la Naturaleza quien aporta la forma final, decidiendo sobre todo cuanto allí haya sido plantado por el hombre La comarca de Níjar presenta peculiaridades climáticas (subárido con alta humedad media y elevada evaporación y exposición solar) y edafológicas con suelos y relieve volcánico de escasa fijación, que condicionan la presencia de una débil vegetación capaz de aprovechar la pluviosidad (climatófila) y una vegetación edáfica de gran variedad y riqueza. Nº 139 11 ARQUITECTURA DEL PAISAJE CONSTRUCCIÓN Y MEDIOAMBIENTE Jardín botánico El Albardinal. Parque Natural del Cabo de Gata. Una propuesta para aproximar a la ciudadanía el patrimonio vegetal. Visita técnica al Parque el Boticario, naturaleza para la ciudad. Hay que abrir los ojos de los políticos encargados del verde urbano y de muchos de los técnicos municipales para que, con valentía, planifiquen la sustitución paulatina de todo el arbolado urbano antiguo y con un emplazamiento inadecuado 12 Nº 139 En el Hemisferio Norte están la región mediterránea y una parte de California, en EE.UU. En el hemisferio sur están la región del Cabo en Sudáfrica, la zona central de Chile y el suroeste de Australia. Por tanto, muchas plantas nativas de algunas de estas zonas se pueden cultivar con éxito en las otras. Esta vegetación a menudo presenta características similares, debido en ciertos casos a una evolución convergente. Algunas de las características morfológicas más comunes son la dominancia de especies perennifolias, hojas reducidas, con frecuencia lineares o aciculares, muchas veces coriáceas, presencia de aceites aromáticos, etc. En general son resistentes a las condiciones adversas, soportan la escasez de agua y el calor intenso de verano. No se han de excluir totalmente especies procedentes de zonas subtropicales, las cuales soportan a veces la climatología mediterránea, y que pueden combinarse con otras en los jardines en donde la aportación de agua sea un factor limitante. ¿Cuál es la diversidad del arbolado viario mediterráneo? El arbolado viario forma parte del ecosistema urbano de nuestras ciudades y su existencia proporciona una serie de beneficios bien conocidos y que nadie se atrevería a poner en duda. José Manuel Sánchez de LorenzoCáceres analiza los inventarios del arbolado urbano de las principales ciudades del mediterráneo español, especialmente el arbolado de aceras y formando alineaciones; llama la atención la poca diversidad en general y el que sean pocas las especies que predominan y se repiten en la mayoría de las ciudades, destacando Platanus x hybrida, seguida de otras como Celtis australis, Tipuana tipu, Sophora japonica, Robinia pseudoacacia, Citrus aurantium y Morus alba, con algunas variaciones en cuanto al orden de importancia según se trate de ciudades situadas más hacia el norte o hacia el sur de España. Esta pobre diversidad de especies se debe a razones como la dificultad de encontrar una oferta amplia en el mercado, la rapidez de crecimiento con la que se obtiene buena sombra a corto plazo, la facilidad de su propagación, el desconocimiento general de otras especies interesantes, e incluso las modas. Cada especie tiene sus cualidades intrínsecas en cuanto a velocidad de crecimiento, extensión del sistema radicular, forma de la copa o porte alcanzado en su edad adulta, y es el conocimiento de estas cualidades, además de los requerimientos climatológicos, edafológicos e hídricos de cada especie, lo que permite abordar con gran probabilidad de éxito las plantaciones urbanas. El congreso organizado por la AEPJP tuvo lugar en el auditorio Maestro Padilla (Almería). ARQUITECTURA DEL PAISAJE PARQUES Y JARDINES Hemos visto en nuestras ciudades, con más frecuencia de la deseada, las tremendas mutilaciones que sufren los árboles debido principalmente a una mala selección de especies. Sánchez de Lorenzo-Caceres pone como ejemplo la Tipuana tipu, árbol de rápido crecimiento y buena sombra cuyo cultivo se ha extendido en los últimos 30 años; esta especie se ha empleado de forma indiscriminada, sin tener en cuenta que adquiere proporciones notables y posee un sistema radicular algo agresivo. Como consecuencia, con el paso de los años origina problemas que se intentan solucionar acudiendo a podas muy severas, las cuales comprometen la estética y, lo que es más grave, la salud del árbol. Pero esas podas salvajes no ofrecen una solución definitiva del problema, que persiste año tras año y a veces con mayor gravedad. Hay que abrir los ojos de los políticos encargados del verde urbano y de muchos técnicos municipales para que planifiquen la sustitución paulatina de todo el arbolado urbano antiguo y con un emplazamiento inadecuado. Esta sustitución supondría un ahorro a medio plazo para las arcas municipales. Por ejemplo, la sustitución de Tipuana tipu, mal seleccionada para la anchura de la calle, por Citrus aurantium. Pero de nada serviría una gestión de este calibre si no se acompaña de una buena planificación del arbolado de nueva plantación, que implica una correcta selección de especies, un correcto marco de plantación y una correcta política de mantenimiento. Vista del paisaje natural del Cabo de Gata (Almería). Playa de los Genoveses al fondo. ¿Es necesario conservar? Según Hedwig Schwarzer, para la valoración del patrimonio vegetal es primordial que se establezca una relación afectiva entre las especies autóctonas y el usuario fundadas en el conocimiento de las mismas. En todos los espacios verdes urbanos se promueve el respeto hacia las plantas. Muchos jardines podrían ser verdaderas herramientas al servicio de la conservación de nuestra flora, a través de la utilización de especies autóctonas. La implantación de jardines didácticos que pusieran en valor la flora autóctona es una forma de aproximación a nuestra realidad vegetal; una forma adecuada de sensibilizar y concienciar a la ciudadanía de la importancia de la conservación a través del conocimiento y valoración de nuestro rico patrimonio vegetal. Pero, ¿es necesario conservar?. Las premisas planteadas desembocan en una implicación de la Administración. ¿Cómo es y en qué situación se encuentra nuestro patrimonio vegetal? La riqueza de la flora se debe a la diversidad de los elementos florísticos que la componen, motivada principalmente por la diversidad climática, su posición geográfica a caballo entre dos continentes y su participación en las peculiaridades florísticas del mundo mediterráneo y atlántico. El encuentro social e intercambio profesional, otro de los aspectos del congreso. No hay árboles perjudiciales, sino plantados en lugares inadecuados y, en principio, casi todas las especies de árboles que puedan adaptarse a las condiciones del clima mediterráneo son aptas para su cultivo en nuestras ciudades Mesa de presentación e inauguración del congreso. Conservación y jardinería. Un binomio imposible El desarrollo de nuestra sociedad construye espacios cada vez más urbanizados, áreas y espacios verdes que se han de adaptar a edificaciones e infraestructuras, no diseñándose en muchas ocasiones de forma autónoma y protagonista. El planteamiento y diseño de los jardines evoluciona permanentemente, introduciendo conceptos como los que interrelacionan jardinería con respeto por el medio ambiente. Términos como jardinería racional, sostenible o adaptada al medio son hoy en día habituales en foros de gestión de espacios verdes. Nº 139 13 ARQUITECTURA DEL PAISAJE CONSTRUCCIÓN Y MEDIOAMBIENTE Visita técnica y plantación del árbol conmemorativo en el Toyo (Almería). El progresivo cambio en el planteamiento de los espacios verdes ha provocado un cambio en la oferta de especies vinculado a la necesidad de introducción de especies seleccionadas bajo nuevos criterios. En este sentido, la "planta autóctona" cobra protagonismo El sistema de canales de agua, un elemento característico heredado del jardín árabe. Parque el Boticario (Almería). A pesar de estar asumidos por la mayoría de profesionales de este campo sorprende aún la cantidad de jardines públicos y privados diseñados y ejecutado lejos de esta corriente, dando lugar a ajardinamientos imposibles e inviables en su futura gestión. Obviando estos, se impone una jardinería sostenible y respetuosa con el medio ambiente que incide en el aprovechamiento del agua empleando especies de bajos requerimientos hídricos. Este progresivo cambio en el planteamiento de los espacios verdes ha provocado un cambio en la oferta de especies vinculado a la necesidad de introducción de especies seleccionadas bajo nuevos criterios. Deteniéndonos en el variado catálogo de especies para jardinería, vemos que la "planta autóctona" cobra protagonismo: especies, subespecies o variedades que crecen de forma natural en una región desde antes de la aplicación del hombre, o que ha llegado a ella sin su intervención debido a un cambio de su área de distribución natural. La descripción de región comprende un territorio ambiguo y es frecuente que bajo esa denominación encontremos especies que se ajustan al término de planta mediterránea. Esta denominación incluiría toda especie que crece en el clima mediterráneo, extendiéndose mucho más allá de nuestra región. Incluiría el amplio abanico de especies de origen australiano, sudamericano o sudafricano que, por sus buenos resultados agronómicos, están presentes en muchos espacios verdes. En este escenario, tanto plantas autóctonas en sentido estricto como especies mediterráneas se ajustan a la nueva demanda. Declinarse por la utilización de uno u otro tipo puede sumergirnos en un debate interesante. Desplazándonos a otros terrenos encontramos sutiles pero importantes diferencias entre ambas: el empleo de especies autóctonas evita la utilización de especies potencialmente invasoras que puedan generar problemas en el medio natural. Su adaptación a plagas y enfermedades puede disminuir los tratamientos fitosanitarios siempre y cuando se haga un buen uso de ellas. También evitan la contaminación genética; para ello es importante conocer el origen del material autóctono que se introduce, lo que requiere por parte de los viveros control sobre la procedencia del material reproductor. PARA SABER MÁS... www.aepjp.com www.arbolesornamentales.com www.bioriza.com El artículo completo en www.horticom.com?63299 14 Nº 139 Mª Rosa Mendoza, bióloga y asesora técnica de la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía acompaña a los congresistas en la visita al Parque el Boticario. ARQUITECTURA DEL PAISAJE PARQUES Y JARDINES Nº 139 15