Movimientos generales espontáneos como herramienta diagnóstica

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Curso pre-Videosimposium Murcia Noviembre2008
Curso sobre: Movimientos generales espontáneos como herramienta diagnóstica y
pronóstica en el recién nacido y lactantes
Los pasados días 13 y 14 de Noviembre, y como preámbulo al Video-Simposium en
Fisioterapia Pediátrica, se celebró en Murcia el curso sobre Valoración de los
Movimientos Generales espontáneos impartido por el profesor Andrea Guzzeta MD
perteneciente al Departamento de Neurociencia del desarrollo del Instituto Científico
Stella Maris de la Universidad de Pisa.
Prechtl, del cual el profesor Andrea Guzzeta es colaborador, ha propuesto un nuevo
abordaje para la valoración neurológica basado en la observación de la motilidad
espontánea
de
fetos
y
niños
prematuros
y
a
término.
Las consideraciones teóricas y empíricas en las que se basa el método son el gran
número de movimientos generados de forma endógena, y que dicha actividad
espontánea muestra de forma más sensible la disfunción cerebral que la reactividad
sensorial en las pruebas que estudian los reflejos.
De todo el repertorio de patrones motores generados de forma endógena el profesor
Andrea Guzzeta nos habló de los movimientos generales (MG) ya que al involucrar a
todo el cuerpo y poseer una alta complejidad, larga duración y frecuente
ocurrencia, son los más adecuados para la evaluación clínica.
A través de diferentes estudios y numerosos casos clínicos nos demostró, que tanto en
niños a término como en prematuros y lactantes durante los primeros meses de vida, no
es tan importante la incidencia como la calidad de su ejecución, lo que se constituye
como
buen
indicador
del
estado
neurológico.
A lo largo del discurso se habló tanto del movimiento normal, las características del
mismo, como de los patrones de movimiento anormales y las herramientas de
valoración
de
los
mismos.
El movimiento normal lo divide en dos subtipos (fásico y tónico) y dependiendo de si
engloba a todo el cuerpo o a una de las partes dará lugar a otros tipos de movimiento.
(Anexo I)
(Anexo
I)
El origen de los mismos es antes del nacimiento, siendo continuos entre la vida
prenatal y postnatal, no habiendo diferencias significativas por el hecho del
nacimiento, y considerándose para la evaluación de los mismos la edad
postmenstrual. Estos movimientos generales son variables en secuencia y amplitud,
graduales de principio a fin y compuestos por rotaciones que fluyen elegantemente.
El desarrollo normal de los movimientos generales va a contar con dos periodos, el
periodo de “Writhing” (movimientos serpenteantes) y el periodo “Fidgety” (patrón
enredador) que tendrán una edad de inicio diferente a partir de la edad
postmenstrual y que cuenta con unas características y patrones de movimiento
diferentes. (Anexo II)
(Anexo
II)
El periodo de “Writhing Movements” engloba de la 10 a la 46-49 semana
postmenstrual, caracterizándose por movimientos de pequeños a moderados en
amplitud y de lentos a moderados en velocidad, fluyendo el mismo, de unas a otras
partes
del
cuerpo
del
bebé.
El periodo de “Fidgety Movements” engloba de la 45 a la 60 semana postmenstrua,l
habiendo por tanto un periodo con posible presencia de ambos esquemas de
movimiento. Este periodo se caracteriza sin embargo por movimientos de menos
amplitud y velocidad moderada, con aceleración del cuello, tronco y miembros en
todas direcciones. Estos movimientos denominados de “calibración del sistema” por
Andrea afectan a manos, pies, caderas y cuello y es cómo sicada articulación
explorara
cada
uno
de
los
movimientos
posibles.
Mediante diversos videos y la representación por parte del profesor Guzzetta de las
características de los diferentes movimientos pudimos observar las diferencias de ambos
periodos y valorar las principales características del movimiento en cada una de las
etapas
postmenstruales.
Tras la explicación teórica y práctica de los “movimientos normales” se pasó a la
explicación y valoración de las características de los patrones de movimiento anormales.
Movimientos menos complejos, de menor variabilidad y fluidez, en los que se hace
presente no sólo la menor cantidad del mismo sino también la menor calidad, son las
principales
características
de
estos
“movimientos
anormales”.
En el “Writhing Period”, estos “movimientos anormales”, pueden manifestarse
como un pobre repertorio de movimiento, siendo en este caso el movimiento
monótono y con una secuencia no completa, como un movimiento espasmódico
sincronizado, en el que los músculos del tronco y miembros realizan contracciones
y relajaciones de forma rígida y casi simultánea o como un movimiento caótico,
abrupto
y
rápido.
En el “Fidgety Period”, estos “movimientos anormales”, pueden manifestarse
mediante la ausencia del movimiento, no habiendo movimiento o no poseyendo el
carácter tridimensional del mismo, o mediante la anormalidad del movimiento,
siendo estos movimientos exagerados en amplitud y de poca calidad.
Tras esta amplia explicación, acompañada siempre de casos clínicos mediante los cuales
apreciamos las diferencias entre los diferentes periodos y la normalidad o no de los
diferentes movimientos que en el bebé aparecían, nos surgió la duda de cuál era el
mecanismo generador de dichos movimientos y qué factores influían en el mismo.
Así, como explicó el profesor Andrea Guzzetta, estos movimientos son generados por
la locomoción, la respiración o la succión y aunque son patrones generadores,
están modulados por estructuras craneales (reticuloespinales y corticoespinales).
Así en el mapa funcional se observa movilidad espontánea a nivel espinal y cortical
durante el desarrollo. Otra de las dudas resueltas fue si la cantidad o calidad del
movimiento dependía de factores como el peso, la gravedad y el ambiente, siendo la
respuesta que no. Sólo si el estímulo externo es muy intenso el patrón se puede
modificar o incluso parar. Así el profesor Guzzeta afirmó que y concluyó que en niños
sin corteza cerebral estos movimientos también se daban, ya que eran movimientos
espontáneos,
y
no
voluntarios
ni
dependientes
del
ambiente.
Para finalizar el profesor Andrea Guzzeta nos habló de la metodología a la hora de
utilizar los movimientos generales como herramienta diagnóstica y pronóstica. Para ello
se realizan grabaciones longitudinales entre el nacimiento y las 36 semanas postermino,
siendo la primera a la edad de término, la segunda entre la 1 y 6 semana postermino y
por último al final del “Fidgety Period”, sobre la 12 semana postermino. La grabación
se ha de hacer a 45º por encima del bebé y a una distancia de un metro sobre el mismo,
durando cada secuencia entre 10 y 15 minutos, grabándose al bebé despierto, en supino,
con pañal o desnudo y a ser posible entre tomas. Estas grabaciones deberán contener
varios movimientos generales, obteniéndose así una trayectoria longitudinal del bebé
que
va
ser
la
herramienta
con
valor
pronóstico.
Como nos comentó el profesor Guzzeta, en casos difíciles, es de gran importancia
recalibrar nuestra percepción con videos de patrones de movimiento normales para
observar
así
las
diferencias
entre
ambos.
Así, con esta magnífica introducción sobre Valoración de los Movimientos Generales,
el análisis de los diferentes periodos y la valoración de las diferencias más significativas
entre el movimiento normal y anormal finalizó el curso. Una exposición totalmente
participativa y biderecciónal, en la que el análisis de los movimientos expuestos
mediante los casos clínicos nos aportó una visión general de dicha herramienta, no
dándonos tanto las herramientas para la práctica clínica en nuestros centros, pero sí
amplitud de conocimiento y ánimo de seguir nuestra formación en esta línea en la que el
movimiento del neonato va a ser un clave indicador de su estado neurológico.
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