En el curso del acto de entrega del “I Premio AOP de Periodismo” EL PRESIDENTE DE LA AOP DEFIENDE UN INCREMENTO DE LA PRODUCCIÓN POR PARTE DE LA OPEP EN LA REUNIÓN DEL PRÓXIMO MIÉRCOLES El ex secretario general de la OPEP manifiesta que dicha medida puede suponer un desplome de los precios Madrid.- 29 de marzo de 2004. Jorge Segrelles, presidente de la Asociación de Operadores de Productos Petrolíferos (AOP) manifestó hoy que de no incrementarse la producción por parte de la OPEP en la reunión prevista para el próximo miércoles, los precios del petróleo podrían elevarse a 37 ó 38 dólares, lo que conllevaría un incremento de las cotizaciones internacionales de los productos derivados y, en consecuencia, de los precios en España. Añadió que el mantenimiento de unos precios del crudo altos podría generar una desaceleración del crecimiento del PIB de los países del G-7 de 0,3 puntos. Jorge Segrelles realizó estas declaraciones durante la entrega del “I Premio AOP de Periodismo”, organizado por AOP en la sede de la Asociación de Prensa de Madrid. El premio, que en su primera edición ha recaído en Javier Blas, redactor del diario Expansión, fue entregado en un acto presentado junto a Segrelles, por Fernando González Urbaneja, presidente de la APM. Por su parte, el ex secretario general de la OPEP y ex ministro de Petróleo de Venezuela, Alvaro Silva-Calderón, advirtió del riesgo de que un aumento de la producción junto a la contracción de la demanda prevista para el segundo trimestre supusiera un desplome de los precios. Silva-Calderón, participó en el acto de AOP con una ponencia sobre la “Situación actual y perspectivas del mercado mundial de petróleo”. Jorge Segrelles, presidente de AOP, advirtió de las consecuencias negativas de un recorte de la producción por parte de la OPEP, cuando en el primer trimestre de 2004 se ha producido un incremento de la demanda en 1,4 barriles de petróleo (por el crecimiento de la misma en China y en el resto de los países asiáticos menos en Japón), que coincide con la recuperación del consumo de gasolina en EEUU y unos ajustados stocks. Segrelles destacó que el diferencial de precios entre el Brent (referencia en Europa) y el barril West Texas (referencia en EEUU) se debe principalmente a la existencia de gasolinas con distintas especificaciones en EEUU, lo que complica la logística y da lugar a cuellos de botella, que afectan a los precios. Otros factores que afectarán a los precios en EEUU es la entrada de fondos especulativos (hedge funds), lo que puede incrementar los precios en unos 3 dólares, junto a la llegada de vacaciones (driving season). En caso de que existan sobre precios en EEUU, las refinerías europeas tendrán que suplir a las de EEUU con lo que se producirá un déficit de gasolina que elevará los precios en los mercados internacionales y por tanto, en España. El presidente de AOP advirtió de que los análisis de Goldman Sachs señalan que un incremento del 10% en el precio del barril a lo largo de este año podría generar una desaceleración del crecimiento del PIB de los países del G-7 de 0,3 puntos. Jorge Segrelles recordó que la sensibilidad del crecimiento económico a las variaciones del precio del petróleo ha ido en aumento, pasando de un nivel del 20 por ciento en el año 2000 a otro del 50 por ciento en 2004, lo que refleja una mayor dependencia energética de la economía mundial. El ex secretario general de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), Alvaro Silva-Calderón, manifestó que los elevados precios del petróleo no se deben a la falta de un suficiente suministro. Destacó que en la reunión que mantendrá la OPEP el próximo miércoles serán los factores reales del mercado los que orientarán la decisión, que podría decantarse por mantener el recorte de producción decidido el pasado febrero, o si por la influencia de otros factores tales como los actuales niveles de precios y el crecimiento de la economía, la OPEP se podría decantar por un aumento de la producción. Según Silva-Calderón, los actuales precios del petróleo (en torno a los 33 dólares en el caso del barril de Brent) no puede considerarse un precio alto de forma permanente. A su juicio, estos precios responde a elementos psicológicos y de incertidumbre con un carácter más o menos coyuntural, relacionados con los conflictos sociales, políticos y bélicos por los que atraviesan países productores como Irak, Nigeria o Venezuela. “Descontados estos efectos –afirmó Silva-Calderón- el precio del crudo se sitúa en los márgenes de la banda prevista por la OPEP para tiempos de normalidad, esto es, de 22 a 28 dólares por barril”. El ex ministro venezolano defendió la política de la OPEP destinada a garantizar el suministro de petróleo a los mercados y la estabilidad en los precios. Añadió que la OPEP ha representado un factor de equilibrio y seguridad durante la guerra de Irak, lo que supone un escenario bien distinto de la imagen que se ha querido dar desde algunos sectores. Silva - Calderón señaló que la fuente más importante de suministro sigue siendo el petróleo que representa el 42% del suministro de energía seguido por un 25% que representa el carbón. A juicio del ex secretario general de la OPEP, el petróleo mantendrá el liderazgo durante décadas, ya que se prevé que represente hasta un 38% de la energía mundial en el año 2020. Añadió que la OPEP ha representado un factor de equilibrio y seguridad durante la guerra de Irak, lo que supone un escenario bien distinto de la imagen que se ha querido dar desde algunos sectores.