CONGRESO INTERNACIONAL DE INVESTIGACION ISSN 1946-5351 Online 1948-2353 CD Rom celaya.academiajournals.com Vol. 4 No.3 412 EL CONCUBINATO JURÍDICA UNA REALIDAD SOCIAL Y Dra. Martha Lourdes Camarena Rivera1, Dr. Eduardo Fabián Herrera Olmeda2 Resumen— El presente proyecto de investigación plantea un panorama general y amplio de la institución familiar conocida como el concubinato que se encuentra establecido dentro del Código Civil para el Estado de Sinaloa, fundamentalmente desde el punto de vista social y jurídico, sin soslayar la parte formal y material, es decir, abordando el estudio y análisis de sus características en una realidad social y jurídica como es el caso de Sinaloa.Se abordarán los diferentes puntos de vista que establecen los diversos doctrinarios, tomando como base los referentes teóricos que aportan como perspectiva acerca de la construcción subjetiva del concubinato en el derecho familiar y en la sociedad, es decir, considerando al concubinato como fuente generadora y formadora de familias, al igual que el matrimonio, claro, todo esto desde un enfoque contextual, conceptual y con conceptos operacionales, así como una investigación de campo. Introducción El Concubinato es una forma de familia, es la unión de un hombre y una mujer que en su calidad de pareja viven y cohabitan como esposos con el propósito de formar una familia, libres de matrimonio y sin impedimento legal para contraerlo, creando lazos familiares de afecto y ayuda mutua. El Concubinato en Sinaloa es una realidad social y jurídica, fuente generadora y formadora de familias al igual que el matrimonio; ya que actualmente existen parejas constituidas en unión por hombres y mujeres que son reprochados y discriminados socialmente por encontrarse en el desamparo de nuestra legislación civil, pues este tipo de unión es regulada a medias en sus mas elementales derechos como son: el derecho a una familia, a los alimentos entre concubinos, el derecho a heredar como en el matrimonio con las reglas que se establecen en nuestra legislación, etcétera. En este sentido trascendental fuimos dando pauta a tales conocimientos para encontrar la verdadera esencia del concubinato, o sea, su naturaleza jurídica como un hecho jurídico, un acto jurídico y una institución; así mismo nos abocamos al estudio del marco conceptual del concubinato; explicando diversos conceptos jurídicos de autores tanto nacionales como extranjeros, complementándolo con su concepto etimológico, sociológico y gramatical. Por otra parte, se analizaron los conceptos de matrimonio, sociedad de convivencia y amasiato para establecer las diferencias entre estos y el concubinato; de igual forma dedicamos un subtema al estudio de diversas posturas doctrinales y legislativas en relación al concubinato; así como una investigación de campo. EL CONCUBINATO COMO UNA REALIDAD SOCIAL La sociedad mexicana ha estado por mucho tiempo influenciada por la religión católica, razón por la cual el matrimonio era considerado la única forma moral y legal de constituir una familia, y cualquier tipo de relación que no fuera constituida de esta forma era mal vista, pues se consideraba que estaba basada en un trato carnal, y por tal motivo fue ignorada social y jurídicamente. Es importante determinar las causas que generan el concubinato, no es posible calificarlo de moral o inmoral sin conocer la realidad de un país en un momento determinado. Tampoco es conveniente hacer 1 La Dra. Martha Lourdes Camarena Rivera, es profesora e investigadora en la Facultad de derecho Culiacán de la Universidad Autónoma de Sinaloa e integrante del Cuerpo Académico de Derecho Constitucional UAS-187-CA Culiacán, Sinaloa, México, correo [email protected](autor corresponsal). 2 El Dr. Eduardo Fabián Herrera Olmeda, es Profesor e Investigador de la Universidad Autónoma de Sinaloa y colaborador del Cuerpos Académico de Derecho Constitucional UAS-187 CA, correo eduardoherrera [email protected] CONGRESO INTERNACIONAL DE INVESTIGACION ISSN 1946-5351 Online 1948-2353 CD Rom celaya.academiajournals.com Vol. 4 No.3 referencia a legislaciones extranjeras, porque éstas no regulan las situaciones humanas semejantes a las de nuestro país. Muy frecuentemente se ha calificado al concubinato de inmoral sin mayor investigación sociológica; sin conocer la realidad social que llevó a conformar esa unión. Con el paso del tiempo y la transformación del comportamiento social, esta figura ha sido reconocida por nuestros ordenamientos jurídicos, dejando a un lado la influencia de la iglesia católica. El legislador tuvo que reflexionar sobre la necesidad social, al darse cuenta que cada día eran más las parejas que fincaban una familia en concubinato. Sin embargo, para la iglesia católica este tipo de uniones sigue siendo reprobado, pues considera que significa un desequilibrio para el matrimonio, y por ello ha tratado de intervenir indirectamente en las decisiones de los legisladores a nivel mundial, pues el Vaticano, en el año 2000, a través del Pontificio Consejo para la Familia, expidió un documento denominado: “Familia, matrimonio y uniones de hecho”, en el cual se aprueba toda unión de hecho y exhorta a los legisladores a no equiparar la institución del matrimonio con este tipo de uniones, señalando: “…. el presente documento, en cuyas páginas se aborda una problemática actual y difícil, que toca de cerca la misma entraña de las relaciones humanas, la parte más delicada de la íntima unión entre familia y vida, las zonas más sensibles del corazón humano. Al mismo tiempo, la innegable trascendencia pública de la actual coyuntura política internacional, hace conveniente y urgente una palabra de orientación, dirigida sobre todo a quienes tienen responsabilidades en esta materia. Son ellos quienes en su tarea legislativa pueden dar consistencia jurídica a la institución matrimonial, o por el contrario, debilitar la consistencia del bien común que protege esta institución natural, partiendo de una comprensión irreal de los problemas personales...”3 Como se puede apreciar, la iglesia católica descalifica totalmente cualquier unión que no sea la del matrimonio, a pesar de que la religión que más se profesa en nuestro país es la católica, lo que no ha sido impedimento para que este tipo de uniones se establezcan, lo cual quiere decir, que la iglesia no ha dejado de influir al menos en este aspecto, en las decisiones de las parejas que han decidido unir su vida en concubinato. Los motivos por los cuales una pareja decide unirse en concubinato, y no en matrimonio, pueden ser económicos o ideológicos. Económicos, porque en muchas ocasiones la pareja es joven y no cuenta con los recursos suficientes para solventar una boda;4porque como es sabido, se acostumbra hacer una fiesta e invitar a familiares y amigos, razón por la cual se unen en concubinato. Otro motivo por el cual la pareja decide unirse en concubinato y no en matrimonio puede ser ideológico, porque hay parejas que consideran varios aspectos para hacerlo, como puede ser “conocerse mejor antes de casarse”, con la finalidad de poder decidir si su pareja es compatible o no y evitar a futuro un posible divorcio, o las parejas que no consideran necesario casarse, pues sólo desean compartir la vida juntos y formar una familia; para ello no es esencial realizar todas las formalidades que implica el matrimonio, pues consideran que su valor no se basa en un papel firmado ante un juez del Registro Civil. Pero el motivo principal de las parejas que se unen en concubinato, es el amor que se tienen entre sí, independientemente de los motivos económicos o ideológicos. Otra causa que se menciona es la cultural, derivada de la ignorancia en cuanto a la reglamentación que el Estado hace del matrimonio y de los derechos que se adquieren con ello; y también tomando como referencia la tradición cultural que a través del tiempo se ha formado desde la época indígena hasta nuestros días. En este aspecto cultural, es de suma importancia la investigación realizada en el Municipio de Culiacán dando cuenta que se encontró que se desconoce por las parejas que viven en concubinato sus derechos y obligaciones. Observamos, que ante la unión concubinaria,existe evidentemente poca aceptación social, CONGRESO INTERNACIONAL DE INVESTIGACION 3 www.vatican.va/index.htm. Octubre 20, 2007. Véase Chávez Asencio Manuel, la familia en el derecho, relaciones jurídicas conyugales,3ª, ed., México, Porrúa, p. 280. 4 ISSN 1946-5351 Online 1948-2353 CD Rom celaya.academiajournals.com Vol. 4 No.3 Pues la investigación de campo arrojó que las concubinas están siendo discriminadas en su trabajo y socialmente son rechazadas. ASPECTOS QUE DETERMINAN LAS DIFERENCIAS DEL CONCUBINATO CON OTRAS UNIONES DE PAREJA En este apartado analizamos al matrimonio, sociedad de convivencia y amasiato ya que consideramos que es de vital importancia su estudio, con la intención de dejar claras las diferencias que existen entre estas instituciones familiares. El matrimonio Sara Montero Duhalt menciona que “El matrimonio es la unión legal de constituir a la familia a través de la unión de dos personas de distinto sexo que establecen entre ellas una comunidad de vida regulada por el derecho”.5 Esta definición no es completa del todo; ya que sí es un vínculo jurídico, pero también un acto bilateral donde debe existir el consentimiento para que se dé la institución, además de los elementos que ya mencionó la autora. Para Ramón Sánchez Medel el matrimonio es: “la familia legítima que se funda en la unión natural y legal de un hombre y una mujer, de carácter estable y conforme a las buenas costumbres y que crea siempre relaciones jurídicas con respecto a los hijos provenientes de dicha unión.” 6 Este autor no menciona la voluntad entre las partes, en cuanto a que, crean siempre relaciones jurídicas con respecto a los hijos provenientes de dicha unión, por lo que su definición está incompleta, ya que no nada más es con respecto a los hijos sino también con la pareja, que al contraerlo adquiere derechos y obligaciones. Rafael De Pina Vara considera que el matrimonio es: “la unión legal de dos personas de distinto sexo, realizada voluntariamente, con el propósito de convivencia permanente, para el cumplimiento de todos los fines de vida”.7 Sin embargo no establece ninguna solemnidad o formalidad. En este mismo sentido Juan Antonio González, establece que: “el matrimonio es la unión de un solo hombre con una sola mujer, para perpetuar su especie y ayudarse mutuamente, a sobrellevar el peso de la vida”,8 mas no menciona que el matrimonio es un acto jurídico bilateral, por lo que su concepto está incompleto, ya que, para que se dé la institución del matrimonio debe estar presente la autoridad, que en este caso sería el juez del Registro Civil. Amasiato Julián Güitrón Fuentevilla nos dice que: “El amasiato es una unión de hecho fundada en la relación sexual, y que no produce consecuencias jurídicas, se da entre un persona casada o entre personas casadas, que tienen relaciones sexuales con otras distintas a su cónyuge”.9 Este concepto es acertado, sólo le falta mencionar que puede darse o no la cohabitación, es decir, no es requisito fundamental que puede darse o no la cohabitación en la misma morada. Para el Diccionario Jurídico de José Ignacio Raymundo Fonseca, “… adulterio es la relación entre persona casada y otra ajena al matrimonio, la fidelidad es una de las obligaciones que impone el matrimonio, y la infidelidad conyugal es causa de la separación matrimonial”.10 Según el diccionario para juristas, amasiato significa:“Amasiato. De amasia. En México y Perú. Concubinato. Amasia, (sio).- Latín Amasia, de amasius. Querido o amante. Adulterio.- Latín adulterium. Ayuntamiento carnal voluntario entre una persona casada y otra de distinto sexo que no sea su cónyuge. // Der. Delito que comete una mujer casada y que yace con varón que no sea su marido y él yace con ella sabiendo que es casada”.11 Con los conceptos anteriores se confunde amasiato y concubinato, porque existe una gran diferencia entre estos puesto que el amasiato se da cuando uno o ambos están impedidos para contraer matrimonio, teniendo relación de pareja, y en el segundo se exige como requisito que sean libres. 5 Montero Daule Sara, Derecho de familia, Madrid, 1989, p. 11. Sánchez Medel Ramón, Los grandes cambios en el derecho familiar, México, Porrúa, 1979, p. 93. 7 De Pina Vara Rafael, Diccionario de derecho, México, Porrúa, 1965 8 González Juan Antonio, Elementos del derecho civil, México, Trillas 1976, p.73. 9 Güitrón Fuentecilla Julián, ¿Qué es derecho familiar?, Promociones Jurídicas y Culturales, 3a. ed., México, 1987, p. 22. 10 Fonseca José Ignacio Raymundo, Diccionario jurídico, Madrid, Colex, 1999, p. 118. 11 Palomar de Miguel Juan, Diccionario para juristas, México, Porrúa, 2000, t. I, pp. 53, 92-93. 6 CONGRESO INTERNACIONAL DE INVESTIGACION ISSN 1946-5351 Online 1948-2353 CD Rom celaya.academiajournals.com Vol. 4 No.3 En libros y diccionarios es difícil encontrar el concepto de amasiato. Muchos autores no lo mencionan y manejan el concepto de adulterio, lo cual es lo mismo, sólo que al amasiato, en derecho familiar, como causa de divorcio y en derecho penal como delito no se le conoce como amasiato, sino con el nombre de adulterio. Rafael de Pina lo define así: “Adulterio es la relación establecida entre personas de distinto sexo, cuando una de ellas, al menos, se encuentra unida a otro por el vínculo matrimonial, constituye causa de divorcio en el Código Civil para el Estado de Sinaloa, artículo 267, fracción I. ”12El concepto expresado, define al adulterio como la unión de un hombre y una mujer, realizada voluntariamente sin formalización legal, pero impedidos para unirse en vínculo matrimonial entre sí por estar uno de ellos ligado por el vínculo matrimonial a otra persona distinta de la pareja. Los anteriores autores definen el adulterio y nos dan una visión del amasiato. Entendiendo al amasiato como la relación sexual de un nombre y una mujer que viven en unión libre con su pareja, no importa si cohabitan en el mismo domicilio o no, se encuentra impedido para legalizar dicha unión libre, en virtud de que se encuentra unido por el vínculo matrimonial a otra persona distinta a su pareja, lo cual le impide contraer otro nuevo matrimonio, mientras no se disuelva el matrimonio civil contraído con anterioridad. Sociedad de convivencia La sociedad de convivencia es una nueva figura que se ha establecido dentro del ordenamiento jurídico del Distrito Federal,13 entró en vigor el 17 de marzo del 2007; esta ley tiene como objetivo principal definir y regular un tipo de sociedad entre dos personas, llamada “sociedad de convivencia”, misma que en su exposición de motivos señala: “Hemos sido testigos en las últimas décadas del surgimiento y desarrollo de nuevas formas de convivencia, distintas a la familia nuclear tradicional. En todo el mundo, los modelos de convivencia están pasando por profundas transformaciones debido, en gran medida, a la redefinición de las relaciones entre los géneros, y la conquista de desarrollos civiles y sociales.”14 Considero que si bien es cierto resulta necesario legislar sobre todos y cada uno de los fenómenos a los que la familia debe enfrentarse, esta figura no es una forma de constituirla. Pues el Código Civil para el Distrito Federal en su artículo 138 quintus, señala que las relaciones jurídicas familiares generadoras de deberes, derecho y obligaciones, surgen entre las personas vinculadas por lazos de matrimonio, parentesco o concubinato. Es por lo anterior que considero erróneo que el artículo 5 de la Ley de Sociedad de Convivencia, establezca que: “se regirá, en lo que fuere aplicable, en los términos del concubinato…”, pues como se analizará en el presente tema, son figuras distintas. Podemos señalar qué es la sociedad de convivencia es la sociedad voluntaria que se constituye exclusivamente entre dos personas, que pueden ser de diferente o del mismo sexo. El objeto de esta asociación es establecer un “hogar en común”, con voluntad de permanencia y ayuda mutua.15 De lo anterior y en relación a la exposición de motivos que analizamos en esta ley, permite inferir que su naturaleza jurídica esta conceptuada dentro de la teoría general de los contratos privados sea de las asociaciones o de las sociedades,16 ya que partiendo de su objetivo principal, explica que éste es el de crear o transmitir derechos y obligaciones de contenido patrimonial entre los individuos sujetos a esta ley; así como de manera secundaria permitirles buscar el sentido de la fidelidad a través de la libre elección de sus parejas amorosas y de libre compromiso, amorosos o compromisos libres , así como la satisfacción de 12 De Pina Rafael, Diccionario de derecho, México, Porrúa, 1965, p. 24. Ley de Sociedad de Convivencia para el Distrito Federal, Gaceta Oficial Federal de 16 de Noviembre de 2006. y entrara en vigor el día hábil siguiente de haber concluido un plazo de 120 días naturales posteriores a la publicación de la ley, es decir el 17 de marzo de 2007. 14 Exposición de motivos de la Ley de Sociedad de Convivencia. 15 Artículo 2 de la Ley de Sociedad de Convivencia. 16 Magallón Gómez María Antonieta, Revista de Derecho Privado, novena época, número 3, septiembre a diciembre de 2002, pp. 143-159. 13 CONGRESO INTERNACIONAL DE INVESTIGACION ISSN 1946-5351 Online 1948-2353 CD Rom celaya.academiajournals.com Vol. 4 No.3 afectos. Sin embargo, estimamos que resulta contradictorio lo dispuesto en el artículo 1º de la citada ley, que afirma aventuradamente que: “Las disposiciones contenidas en la ley son de orden público e interés social, y tienen como objetivo establecer la base para regular las relaciones derivadas de la Sociedad de Convivencia. Pues al respecto, señala Maurice Hauriouque : El orden social de los pueblos es un individualismo a la ley moral, porque es individualismo desfalleciente. La ley moral, apoyada en un conjunto de ideas religiosas y filosóficas, es un factor integrante del orden social, con los mismos títulos que la conciencia individual y que el instinto gregario. El orden social individualizado es un equilibrio de tres elementos. Si no fuese más que un equilibrio de dos elementos, la conciencia individual y el instinto gregario, podría vacilarse al determinar cuál de ellos predomina sobre el otro. Pero en el tercer elemento, la ley moral, arroja su peso en la balanza a favor de la civilización, en el platillo individualismo. El orden social de los pueblos civilizados será, pues, individualista, con la reserva de un freno moral reforzado con un freno jurídico. 17 Dentro del estilo del autor en cita, encontramos un tercer elemento antes considerado; se determina o define a sí mismo como “ley moral o como institución”, en virtud de que el mismo designa a la institución como “todo elemento de la sociedad cuya duración no depende de la voluntad subjetiva de individuos determinados…”18 El mismo Hauriou agrega que la teoría de la institución se aplica tanto a una regla de derecho consuetudinario como a una organización corporativa, lo que explica que la corona inglesa sea una institución, tanto como lo es el Estado francés. Asimismo advierte que su concepción resulta aplicable a las instituciones más abstractas como la familia o la propiedad; así como a las más concretas, como resulta la del soldado desconocido, cuyos restos reposan en París, bajo el Arco del Triunfo. El mismo autor añade que el carácter común de las instituciones reside en el hecho de que su duración no depende de la voluntad subjetiva de determinados individuos; apreciando que destruir una institución resulta imposible, dado que es un cuerpo espontáneo que surge y renace como la hidra mitológica del Lago de Lerma; ejemplificando lo anterior como las congregaciones o los sindicatos profesionales.19 De ahí que refiere que el orden moral institucionalizado también llamado institución moral o moral social no reside en la voluntad subjetiva de los individuos ni en los legisladores o en la de determinados individuos conformados en grupos minoritarios, ya que una institución lo es porque es aceptada voluntariamente por la mayor parte de los individuos que integran una sociedad; mediante el sometimiento y convencimiento propios; razón por la cual, la ley moral o institución se manifiestan jurídicamente en un medio social. De lo antes considerado, resulta que las normas de orden público tienen como fundamento un factor moral de interés (de una mayoría), por esto comprenden entre otras la limitación al régimen de autonomía de voluntad en materia de contratos, la determinación del bien común y de las buenas costumbres. El cuerpo normativo se integra con veintiséis artículos y tres transitorios, en lo que erróneamente se le considera de orden público e interés social, ya que en realidad las relaciones jurídicas derivadas de la misma vienen de un acto jurídico bilateral de dos sujetos mayores de edad y con capacidad jurídica, que determinan vivir en un hogar común para ayudarse mutuamente y de manera permanente. Consideramos que todavía quedan muchas interrogantes en esta Ley de Sociedad de Convivencia; como si los convenientes tienen derecho adoptar, es un matrimonio disfrazado, ante la muerte de los convenientes puede el otro convertirse en heredero legítimo, que opinará al respecto la familia biológica de quien vive en esa unión, desde el punto de vista de las prestaciones económicas y sociales del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales para los Trabajadores del Estado y del Instituto Mexicano del Seguro Social, tienen algún derecho los convivientes. Como podemos observar, la Ley de Convivencia tiene grandes fallas jurídicas para regular las uniones de homosexuales o lesbianas. Podemos decir que no fue elaborada por expertos en derecho familiar, ni civil. 17 Hauriou Maurice, Principios de derecho público y constitucional, Reus, Madrid, p. 82. Ibid., p. 83. 19 Ibid., p. 84. 18 CONGRESO INTERNACIONAL DE INVESTIGACION ISSN 1946-5351 Online 1948-2353 CD Rom celaya.academiajournals.com Vol. 4 No.3 LOS ANTECEDENTES DEL CONCUBINATO Los antecedentes más antiguos en México se constituyen en la época prehispánica y la Colonia, pasando así los primeros indicios del concubinato a el derecho positivo en los Códigos Civiles de 1859, 1870 y 1884, las Leyes de Relaciones Familiares de 1917 hasta llegar al Código Civil de 1928. Observando la evolución que ha sufrido en cada una de las etapas históricas de nuestro país, así como la regulación jurídica que se le ha otorgado. Todo ello con la finalidad de conocer sus orígenes así como su trascendencia y repercusión en la sociedad actual. La regulación actual del Concubinato en el Código Civil para el Estado de Sinaloa Enel Código Civil para el Estado de Sinaloa se detallan los requisitos de temporalidad, procreación, diferencia de sexo en la pareja, ausencia de impedimento para constituirlo, así como la singularidad. Sin embargo, no contempla una definición de concubinato, como sí lo hace el Código Civil para el Estado de San Luis Potosí 20 , por tomarlo como ejemplo; más bien trata de explicar cuándo hay concubinato, a través de determinar ciertas características que debe reunir. Considerando que esa ausencia de definición es lo que hace que en la mayoría de los casos la relación concubinaria sea confundida con otro tipo de relaciones, ya sean pasajeras, momentáneas o circunstanciales. Ahora bien, si existiera una definición de concubinato, así como una adecuada regulación del mismo, no se dejaría su interpretación al albedrío de quien ejerce los derechos que de él derivan, ni de quien está facultado para dirimir las controversias que de dicha relación se susciten. Tan es así, que por ello nuestra legislación ya sea federal, local o estatal, en la mayoría de los casos si no es que en todos, habla del concubinato porque es una realidad social y por lo tanto le otorga ciertos derechos y obligaciones, pero dada la confusión que existe en cuanto a la figura como tal, es que especifica que si hubiera varias concubinas o concubinos ninguno tendrá derechos. Por otro lado, el concubinato es una fuente de la familia, porque así lo han establecido los códigos civiles estatales y nuestro propio Código Civil para el Estado de Sinaloa, al establecer que las relaciones jurídicas familiares generadoras de deberes, derechos y obligaciones surgen entre las personas vinculadas por lazos de matrimonio, parentesco o concubinato, y que además éstas constituyen el conjunto de deberes, derechos y obligaciones para las personas integrantes de la familia, siendo difícil entender que no exista una definición;por lo cual propongo la siguiente definición: “El concubinato es la unión de una sola mujer con un solo hombre, que cohabitan en el mismo domicilio, de forma continua, sin que tengan ningún impedimento que marca el artículo 156 del Código Civil para el Estado de Sinaloa; el término contara a partir que empiezan a vivir juntos tengan o no hijos del concubinato; deben permanecer libres de matrimonio al momento de formar el concubinato, durante él y hasta la terminación.” Resumen del resultado Lasmujeres y hombres que viven en concubinato desconocen la institución familiar, sus derechos y deberes que se generan al vivir en concubinato, nuestro Código Civil no da seguridad jurídica a los concubinos, concubinas y sus hijos, además son discriminadas las concubinas en el ámbito social y laboral. 20 “Artículo 252.1.- El concubinato es la unión de hecho de un sólo hombre y una sola mujer, libres de impedimentos de parentesco y ligamen matrimonial, con el propósito tácito de integrar una familia a través de la cohabitación doméstica y sexual, el respeto y protección recíprocos, así como la eventual perpetuación de la especie. Si una misma persona establece varias uniones del tipo antes descrito, en ninguna se reputará concubinato.” CONGRESO INTERNACIONAL DE INVESTIGACION ISSN 1946-5351 Online 1948-2353 CD Rom celaya.academiajournals.com Vol. 4 No.3 CONCLUSIONES Como conclusión podemos decir que los resultados demuestran que existe un alto nivel considerable de mujeres y hombres que no saben lo que es la figura del concubinato, sus derechos con respecto a su pareja por el hecho de no estar casados. Por otro lado sólo las mujeres argumentan ser señaladas en la calle y ser criticadas por motivo de su relación con su pareja. En este mismo sentido, tenemos que existen personas dijeron ser discriminadas en su espacio laboral por motivo de su estado de unión libre, pero ninguna argumentó que alguno de sus hijos hayan sido discriminados por tener progenitores no casados. Por lo cual es indispensable la intervención estado para que lleve información a los ciudadanos y ciudadanas en relación a cuando viven en concubinato, ya que la ausencia de esta información hace que las parejas que viven en concubinato desconozcan su situación legal. Recomendaciones El estado debe implementar políticas públicas para informarsus derechos y obligaciones a la familia que actualmente viven en concubinato, con el fin de abatir la ignorancia o desinformacióny brindarlesuna regulación jurídica adecuada para así darles la certeza jurídica que tanto requieren. Referencias bibliográficas Chávez Asencio Manuel, la familia en el derecho, relaciones jurídicas conyugales, 3ª, ed., México, Porrúa. De Pina Rafael, Diccionario de derecho, México, Porrúa, 1965. Fonseca José Ignacio Raymundo, Diccionario jurídico, Madrid, Colex, 1999 González Juan Antonio, Elementos del derecho civil, México, Trillas 1976. Güitrón Fuentecilla Julián, ¿Qué es derecho familiar?, Promociones Jurídicas y Culturales, 3a. ed., México, 1987 Hauriou Maurice, Principios de derecho público y constitucional, Reus, Madrid. Magallón Gómez María Antonieta, Revista de Derecho Privado, novena época, número 3, septiembre a diciembre de 2002. Magallón Ibarra Jorge Mario, Instituciones del Derecho Civil, México, Porrúa, 1987. Montero Daule Sara, Derecho de familia, Madrid, 1989. Palomar de Miguel Juan, Diccionario para juristas, México, Porrúa, 2000. Sánchez Medel Ramón, Los grandes cambios en el derecho familiar, México, Porrúa, 1979. Leyes Ley de Sociedad de Convivencia para el Distrito Federal, Gaceta Oficial Federal de 16 de Noviembre de 2006. y entrara en vigor el día hábil siguiente de haber concluido un plazo de 120 días naturales posteriores a la publicación de la ley, es decir el 17 de marzo de 2007. Código Civil para el Estado de Sinaloa. Código Civil para el Estado de Tabasco. Pagina de Internet www.vatican.va/index.htm. Octubre 20, 2007. www.scjn.gob.mx, 12 de octubre del 2009. Grafico 1. ¿Sabe usted lo que es el concubinato? 70% 60,6% 58,8% 60% 41,2% 39,4% 50% 40% 30% 20% 10% 0% MUJERES HOMBRE CONGRESO INTERNACIONAL DE INVESTIGACION ISSN 1946-5351 Online 1948-2353 CD Rom celaya.academiajournals.com Vol. 4 No.3 Al preguntarle a la MG sobre si saben lo que es el concubinato, encontramos que el N= 30 (60%) dijo que no, desglosamos esta muestra por sexo tenemos los siguiente: el N=20 (20.6%) de las mujeres encuestadas dijo que no sabia lo que era la figura del concubinato y el resto que corresponde a N= 13 (39.4%) manifestó si saberlo. Por lo que respecta a los hombres, tenemos que la mayoría N=10 (58.8%) argumentó que no sabían lo que es el concubinato y contrario a esto tenemos que el N= 7 (41.2%) manifestó si saberlo.