ARBITRAJE: MEDIO DE SOLUCION DE CONTROVERSIAS El

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ARBITRAJE: MEDIO DE SOLUCION DE CONTROVERSIAS
El arbitraje es un medio HETERONOMO de solución de controversias que encuentra su
basamento en la autonomía de la voluntad de las partes
de darse a sí mismas,
libremente, un camino de solución de su patología de la controversia; alterno, es decir,
al margen de la tradicional justicia ordinaria de los jueces estatales, de manera que por
medio de uno o más sujetos denominados árbitros, se decida a través de un laudo, la
controversia, laudo que tiene todos los efectos de cosa juzgada y de ejecutoriedad, con lo
que las partes garantizan la efectividad de los derechos que les sean reconocidos. Pero
esa autonomía de la voluntad de las partes descansa en la libertad que tienen las partes
de decidir su futuro, y el de sus conflictos o controversias, es decir, antes que nada debe
reconocerse que los derechos de los hombres –entre ellos la libertad de decidir y actuarles son inherentes a su condición humana, pero que a efecto de reconocerla, garantizarla
y a veces, adecuarla, dicha libertad debe ser amparada por el ordenamiento jurídico a
través de la ley, a efecto de que no sea coartada arbitrariamente; de lo que deriva que es
la norma suprema del ordenamiento jurídico “la constitución” la que viene en su art.23 Cn
a consagrar esa libertad y la vuelve blindada, de tal suerte que la sola voluntad de las
partes, suficiente para decidir el destino de sus controversias, se halla amparada, además,
en el respaldo que le da su reconocimiento por medio de la ley . Es decir, esa autonomía
de la voluntad de las partes basada en su libertad, no la concede la ley, sino que es la ley
la que la reafirma, pues la persona humana ya cuenta con ella por el solo hecho de serlo.
Entonces, un medio heterónomo de arreglo de controversias, es aquel instrumento legal
del que se valen las partes para dar curso y solución a una controversia, de manera que
son las mismas partes las que hallándose en medio de un conflicto o previendo en el
futuro su posible surgimiento, en lugar de acudir a la autocomposición, (o solución por
ellas mismas) éstas confían su solución a un tercero, a quien como en el caso del
arbitraje, pueden incluso indicarle las reglas de procedimiento a seguir, y a cuyas
disposiciones se someten y cuyos resultados deberán acatar. Esa heteronomía de arreglo
de controversias, bien pudiera ser el simple hecho de acudir a la jurisdicción ordinaria,
pero en el caso del ARBITRAJE, consiste en decidir por convenio expreso, escrito, entre las
partes, que sus controversias que hayan surgido o lleguen a surgir derivadas o no de un
contrato, se sometan a la decisión de uno o mas terceros (árbitros) cuyo fallo están
obligados a acatar.
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