Quito - Lunes 15 de febrero de 2010 Los teléfonos públicos fueron desplazado por los celulares | EL COMERCIO | CUADERNO 2 | Â Â Â Â QUITO 15 Quito y su historia Vladimir Serrano/ Politólogo Las procesiones que se realizaban en Quito COMUNIDAD Redacción Quito [email protected] os teléfonos públicos en la ciudad parecen ser un vestigio de un tiempo pasado, donde todavía no existían los celulares. Pero en barrios como La Mariscal, aún están presentes. Por ejemplo, en la esquina de las calles Juan León Mera y Veintimilla existen estos aparatos de comunicación. Y dentro de una sola cuadra en la av. Amazonas, entre la Jorge Washington y18 de Septiembre, hay cinco pero no son utilizados con frecuencia. El tarjetero ubicado delante de la farmacia Metropolitana, en la Amazonas y Jorge Washington, fue utilizado una sola vez, entre las 08:30 y 09:30, del martes 9 de febrero. Durante ese período, pasaron varias personas, algunas hablando en su celular. Amable Pilahuisín, lustrabotas quien está todo el día en La Mariscal, dijo que la frecuencia del uso de los teléfonos públicos es baja. “No se ve mucha gente utilizándolos”. Él tampoco usa los monederos o tarjeteros, porque tiene su propio celular. Por la misma razón, la mayoría de la gente interrogada por este Diario ese mismo martes, explicó que no es dependiente de los teléfonos públicos. Muchas personas dijeron que solo utilizan uno cuando han olvidado el móvil en la oficina o en su casa. Otra de las razones por las cuales los transeúntes no usan los teléfonos públicos es por la falta de conocimiento del número al que l traslado de las imágenes sagradas de un lugar de culto a otro, es una tradición muy antigua en la cultura humana. La practicaban los egipcios entre los templos de Karnak y Luxor; y en Roma que se convirtió en un verdadero panteón, es decir, un lugar para todos los dioses y las procesiones se realizaban a diario. El cristianismo heredó esta costumbre, sobre todo, cuando se admitió la veneración de imágenes y reliquias. También en las celebraciones más notables del año, como la Pascua y la Navidad. Una vez proclamado en el siglo XIII, el dogma de la transubstanciación, es decir, que Cristo se encuentra presente de manera concreta en el pan y en el vino consagrados en la misa, las procesiones del Corpus Christi cobraron gran fuerza. De esta manera, cuando los españoles llegaron a América trajeron estos ritos, los cuales se realizaban con mucha frecuencia, más allá de las conmemoraciones anuales, debido a los fenómenos telúricos que las poblaciones asentadas en los diversos lugares del continente debieron enfrentar. Así cuando hubo terremotos y erupciones volcánicas en la propia Quito, se paseaba a la Virgen de La Merced, a fin de que intercediera frente a la ira divina, que intentaba destruir a los pecadores. Sin embargo, la procesión más connotada en la ciudad se relacionaba con el Viernes Santo. En horas de la mañana se iniciaba el ceremonial con un paseo interior de caballeros que llevaban banderas rojas, entregaban las hostias consagradas y luego regresaban a los asientos. Mientras que a las doce se iniciaba el sermón de las siete palabras, que por cierto constituye una contribución al rito de Semana Santa por parte de los E Los monederos ya no se usan. Las personas prefieren los móviles. La Corporación Nacional de Telecomunicaciones tiene 1 200 teléfonos públicos en toda la ciudad. L Fotos: Isidro Ponce /EL COMERCIO En La Mariscal. Los teléfonos de la calle Juan León Mera y Pinto están pintados y en mal estado. ciudad es difícil encontrar teléfonos monederos. Por ejemplo, el lunes pasado, una empleada del Quicentro Shopping, en el norte, explicó a un cliente que en ese centro comercial no existen teléfonos públicos. En el centro comercial El Jardín, hay cuatro teléfonos ubicados en la puerta principal, pero funcionan solo con tarjetas prepago. El lunes 8 de febrero, entre las 17:00 y las 17:30, nadie utilizó esos aparatos. Walter Andrade, de la Corporación Nacional de Telecomunicaciones (CNT), explicó que no hay rentabilidad con los teléfonos monederos. Esto se debe a que hay mucha competencia con las cabinas telefónicas y los celulares. La CNT mantiene aproximadamente 1 200 teléfonos públicos en la ciudad. Según la CNT, una persona puede solicitar a esa institución la instalación de un teléfono público frente a su tienda, solo debe acercarse y hacer el pedido. Los tarjeteros no se usan. La mayoría de personas habla por celular. Los monederos o tarjeteros no se usan con frecuencia. quieren llamar, ya que está guardado en la memoria de su celular, pero no en su mente. Para María Sánchez, por el contrario, es importante que en la urbe haya acceso a la telefonía pública. “No tengo un celular y cuando necesito hacer una llamada urgente, busco un teléfono”. Los aparatos públicos, según ella, también son útiles en casos de emergencia. Las llamadas a la Policía, a los Bomberos, a emergencia, a la Defensa Civil y a la Cruz Roja son gratis. Pero en algunos sectores de la criollos americanos. A las tres de la tarde, arrancaba la procesión, luego de realizada una pintoresca ceremonia del descendimiento. Lo singular del hecho es que las mujeres volvían a sus casas adoloridas y contusas, con los rostros enrojecidos por los golpes que se daban en la cara, asumiendo la culpa de la muerte de Jesús. En nuestros días sobreviven algunas de estas tradiciones, en la procesión de Jesús del Gran Poder, que se inició allá por los años sesenta, coincidiendo con las fiestas de Quito, aunque en aquellos tiempos se celebraba a las primeras horas del Viernes Santo y no al mediodía. Con estos antecedentes, me pregunté ¿y qué ocurre hoy con las procesiones? La única forma de responderse era asistiendo a una de ellas, para lo cual escogí a la iglesia de Santa Teresita. A fines de noviembre del año anterior se celebró la terminación de las Cuarenta Horas en ese templo. Pero las cosas no habían cambiado mucho; el sacerdote con capa pluvial, portando la custodia en sus manos y bajo palio, que fue sostenido por cuatro asistentes, inició la procesión. El rito partió de la calle Robles, entrando por la av. 9 de Octubre, pasó por la Carrión a la Amazonas y volvió a la Robles. Pero todo esto en medio de esmog, chivas y presidida por un grupo de bicicleteros que vestían traje deportivo, mientras con voces inaudibles por tanto ruido se escuchaba el ‘Corazón santo, tu reinarás’. Hasta que por fin, ingresamos al interior de esta iglesia, lo cual resultó un bálsamo, para el ruido que se escuchó en la calle. De todas maneras fue muy grato encontrar la supervivencia de una tradición religiosa, que llama al recogimiento y la interiorización, en medio del caos de la estrepitosa modernidad. Los desfiles continúan hoy as ofertas para disfrutar del feriado de Carnaval continúan. Así por ejemplo, en los sectores de San Antonio y Pomasqui se abrirán los balnearios de manera gratuita. Asimismo, en el valle de Los Chillos existen espacios recreacionales para que los turistas disfruten del clima cálido. Allí hay los balnearios de: El Tingo, Guangopolo y La Moya. Los precios para ingresar a estos lugares varían entre los USD 1,50 hasta L los 4. Los niños y adultos mayores tienen preferencia en las entradas a estos sitios. Además, en los sectores de Gualo y Calderón, continúan los desfiles y los festivales de juegos tradicionales como el trompo, los cocos y otros más. Los espacios verdes que existen en el Distrito, como Las Cuadras, La Carolina, Itchimbía, Parque Lineal de Solanda, El Ejido, La Alameda y Metropolitano, también son una opción para quienes no dejaron la ciudad. En esos espacios existen ciclovías, lugares para hacer pic-nic y am- plias áreas verdes para realizar caminatas y ejercicios. Otras opciones son visitar El Panecillo y la Mitad del Mundo. Pese a que el Municipio presentó una agenda sobre los actos que se cumplirían en este feriado de Carnaval, algunos no se cumplieron. Por ejemplo, según el cronograma del Cabildo en Calderón, Amaguaña y Carapungo, se tenía previsto realizar desfiles y comparsas desde el sábado. Pero ese día, en un recorrido realizado por este Diario, se constató que no hubo ningún programa previsto para ese día. 0200010032256 Redacción Quito 0200010032265 FERIADO