Demanda de Adopción 2011-00290-01 Oscar Andrés Morales Melgar ADOPCIÓN / Admisión de la demanda – Requisitos: Prueba de convivencia no inferior a dos años. Como se extrae del texto de la norma transcrita, a la demanda de adopción, el interesado en ser declarado adoptante, deberá allegar entre otros documentos, El registro civil de matrimonio o la prueba de la convivencia extramatrimonial de los adoptantes. Precisamente, el legislador, en el parágrafo de la misma norma, consagró dos formas de probar la convivencia extramatrimonial, para efectos de la adopción. Nótese que estas dos posibilidades de prueba provienen de actos o manifestaciones de la pareja o de uno de sus miembros, por ello se condicionan o cualifican, así, para el caso de la declaración notarial de convivencia se exige que tenga antelación no inferior a dos años y, en el caso de la inscripción del compañero o compañera permanente en las Cajas de Compensación Familiar o en las entidades de seguridad social, se entiende que debe ser como beneficiario, no como aportante. (…) Sin pretender que la mención que hace el parágrafo del artículo 124 del Código de la Infancia y la Adolescencia, de dichas dos formas de probar la convivencia es taxativa o que, allí, se está consagrando una tarifa legal del prueba, lo real, en el caso concreto, es que ni de la manera que indica la norma ni de ninguna otra legalmente permitida, que aporte certeza sobre tal convivencia de por lo menos dos años, se acredita, ab initio, como lo exige la norma en comento, la convivencia ininterrumpida de por lo menos 2 años que prevé el numeral 5º del artículo 68 ibídem, entre la madre o padre biológicos del menor a adoptar y su compañero o compañera permanente. REPÚBLICA DE COLOMBIA RAMA JUDICIAL TRIBUNAL SUPERIOR DISTRITO JUDICIAL DE NEIVA SALA CIVIL LABORAL FAMILIA Neiva, dos (2) de septiembre de dos mil once (2011). Magistrada Sustanciadora: MARÍA AMANDA NOGUERA DE VITERI Referencia: 41001-31-10-005-2011-00290-01 Asunto: Demanda de adopción de la menor María Camila Sánchez Lozano. Demandante: Óscar Andrés Morales Melgar. Procedente: Juzgado Quinto de Familia del Circuito de Neiva. Motivo: Apelación de Auto. Resuelve este Despacho judicial, el recurso de apelación interpuesto por el demandante contra el auto proferido el 9 de junio de 2011 por el Juzgado 5º de Familia del Circuito de Neiva, dentro del asunto de la referencia. 1 Demanda de Adopción 2011-00290-01 Oscar Andrés Morales Melgar ANTECEDENTES Del expediente remitido para que se surta el recurso se extraen los siguientes: 1. Por conducto de mandatario judicial1 el señor ÓSCAR ANDRÉS MORALES MELGAR, mayor de edad e identificado con cédula de ciudadanía No. 7.714.203 expedida en Neiva, Huila, el día 6 de mayo de 2011, formuló demanda de jurisdicción voluntaria ante el referido Despacho para que en sentencia de mérito se decrete en su a favor, la adopción plena de la menor MARÍA CAMILA SÁNCHEZ LOZANO, y se ordenen las respectivas anotaciones en el registro civil de nacimiento de la mentada menor.2 2. Por auto de fecha 19 de mayo de 2011, el Juzgado Quinto de Familia del Circuito Neiva (H), inadmitió la demanda de adopción propuesta por el demandante al observar que no se cumplen “los presupuestos probatorios del parágrafo único del Art. 124 de la ley 1098 de 2006 ( Código de la Infancia y la Adolescencia), debido a que esta norma consagra que la inscripción de convivencia que haga la pareja, en la notaria de su domicilio “debe tener una antelación no menor de dos años”, y el documento aportado, no cumple la obligatoriedad del tiempo de dos (2) años”. Se refiere a la escritura pública No. 453 de 11 de marzo de 2011, otorgada en la Notaría 4ª, de esta ciudad de “DECLARACIÓN DE EXISTENCIA DE UNIÓN MARITAL DE HECHO” entre el demandante y la señora NATALY TATIANA LOZANO REY, madre de la referida menor. Así también precisa, que la parte demandante allegó copias de los carné de la EPS, sin que con ellos se acredite la convivencia que exige el parágrafo antes citado, por ello, indicó que, el demandante debe anexar para probar tal hecho, la certificación por parte de la entidad promotora de salud en donde se indique cuál de los integrantes de la pareja es el cotizante y si éste tiene afiliado al otro como beneficiario, en calidad de compañero (a) marital. Para que fuera subsanada la demanda concedió el término de 5 días, so pena de rechazo. 1 2 Fl. 6, Cuaderno del Juzgado. Folios 1-6, ibídem. 2 Demanda de Adopción 2011-00290-01 Oscar Andrés Morales Melgar 3. En dicho término, el demandante, mediante escrito de fecha 30 de mayo de 20113, allegó certificación laboral de la señora NATALY TATIANA LOZANO REY, compañera permanente y madre de la menor que se pretende adoptar, quien se encuentra vinculada laboralmente a la empresa COFISAM, como también certificado de semanas de cotización de la E.P.S CAFESALUD, donde se acredita que se encuentra afiliada a dicho sistema, como cotizante y en el que figura como beneficiaria la menor MARÍA CAMILA SÁNCHEZ LOZANO. Igualmente anexó certificado de semanas cotizadas en su condición de trabajador independiente agremiado, desde el 1º de agosto de 2009. 4 Informa que, debido a que ambos compañeros se desempeñan laboralmente, no pueden aparecer como beneficiario el uno del otro, en el Sistema de Seguridad Social. Empero, advirtió que “el estado de compañeros permanentes” se logra comprobar con la declaración extrajuicio que realizaron los señora NATALY TATIANA LOZANO y ÓSCAR ANDRÉS MORALES y la escritura pública No. 453 del 11 de marzo de 2011, sobre declaratoria de existencia de la unión marital de hecho. AUTO APELADO De fecha 9 de junio de 20115, mediante el mismo, la señora juez a quo rechazó la demanda de adopción propuesta por el señor ÓSCAR ANDRÉS MORALES MELGAR, al considerar que ésta no fue debidamente subsanada, por cuanto el actor “no aportó la certificación de la EPS” de acuerdo con lo previsto en el parágrafo único del mentado artículo 124. Por lo tanto, ordenó devolver sus anexos sin necesidad de desglose y dispuso el archivo de las diligencias. EL RECURSO Contra tal decisión, la parte actora interpuso recurso de apelación, y, pretendiendo su revocatoria, adujo, en síntesis, que con la demanda y con el memorial presentado a raíz de la inadmisión, se presentaron los documentos 3 Fls. 46-48, ibídem. Fls. 49-52, ibídem. 5 Folio 54, ibídem. 4 3 Demanda de Adopción 2011-00290-01 Oscar Andrés Morales Melgar necesarios para demostrar la convivencia que señala el artículo 124 de la ley 1098 de 2006, tales como la declaración extrajuicio rendida por los compañeros ante el Notario 5º de Neiva y el Informe Psicológico en el que la profesional de esa área refiere la convivencia de la pareja durante más de 2 años, desde cuando la niña MARÍA CAMILA contaba con apenas 4 meses de edad y los demás aportados con la demanda y su corrección. Alega que la funcionaria de primer grado no puede exigir un requisito que va en contravía del derecho al trabajo de la pareja conformada por NATALY TATIANA LOZANO REY y el señor ÓSCAR ANDRÉS MORALES MELGAR, por cuanto su situación laboral les impide aparecer alguno de los dos como beneficiario del otro en las entidades d e seguridad social. El recurso se concedió en el efecto suspensivo, y, agotadas las etapas de esta instancia, se entra a resolver previa las siguientes: CONSIDERACIONES 1. De acuerdo con lo previsto en el artículo 29 del C. de P.C, modificado por el artículo 4°de la Ley 1395 de 2010, es competente la suscrita Magistrada Sustanciadora, para proferir la presente providencia. 2. Tal como viene planteada la controversia, corresponde, en esta oportunidad, definir si las exigencias de la señora Juez a quo para admitir a trámite la demanda impetrada por el señor ÓSCAR ANDRÉS MORALES MELGAR y su posterior rechazo, al considerar que el actor no las satisfizo, encuentran sustento jurídico. Para dar la solución al problema jurídico planteado, es necesario recordar, delanteramente, que en la definición de los conflictos en los que se encuentre involucrado un menor, debe prevalecer la protección del interés superior de éste. El legislador colombiano, mediante la Ley 1098 de 2006, expidió el Código de la Infancia y la Adolescencia, que tiene por objeto, según se expresa en el artículo 2º “establecer normas sustantivas y procesales para la protección integral de los niños, las niñas y los adolescentes, garantizar el ejercicio de sus derechos y libertades consagrados en los instrumentos internacionales de Derechos Humanos, en la Constitución Política y en las leyes, así como su 4 Demanda de Adopción 2011-00290-01 Oscar Andrés Morales Melgar restablecimiento”, advirtiendo que “Dicha garantía y protección será obligación de la familia, la sociedad y el Estado. A propósito de la “ Relevancia del principio de protección del interés superior del menor en el caso de la adopción”, la H. Corte Constitucional, en Sentencia C-840 de 2010, sostuvo que: “De este modo, la adopción es concebida fundamentalmente como una institución establecida en beneficio del menor adoptable y para su protección. Y si bien permite que personas que no son padres o madres por naturaleza lleguen a serlo en virtud del parentesco civil, posibilitándoles a ellos el ejercicio de varios derechos como el conformar una familia, el del libre desarrollo de la personalidad, etc., no persigue prioritariamente este objetivo, sino el de proteger al menor de la manera que mejor convenga a sus intereses, aplicando en ello el artículo 44 de la Cart. Esto ha permitido concluir a la Corte que “dada su naturaleza eminentemente protectora, el proceso de adopción debe estar orientado ante todo por la búsqueda del interés superior del menor el cual se debe aplicar como parámetro de interpretación de todas las normas aplicables. 5.6. En suma, el principio del interés superior del menor constituye una norma ampliamente aceptada por el derecho internacional, la jurisprudencia y el ordenamiento jurídico colombiano, que representa una valiosa guía hermenéutica orientadora de las decisiones judiciales que resuelvan conflictos que involucren a menores de edad. De acuerdo con este principio al menor debe dispensarse un trato preferente, acorde con su caracterización jurídica como sujeto de especial protección constitucional, en procura de garantizar su desarrollo integral y armónico y su bienestar físico, mental, espiritual y social. La adopción es concebida como un mecanismo orientado primordialmente a satisfacer el interés superior del menor adoptable, a través de la posibilidad de garantizarle el derecho a tener una familia originada en vínculos civiles, cuando la natural no le brinde el cuidado que su condición de menor reclama.”. En armonía con dicho principio, el artículo 68 del Código de la Infancia y la Adolescencia establece los requisitos que deben reunir los adoptantes, además de las condiciones de idoneidad física, mental, moral y social que éstos tienen que acreditar, para garantizarle al menor que pretende ser adoptado “la estabilidad en todos los órdenes, que deben mostrar los aspirantes a adoptar constituye un presupuesto esencial en la valoración de la mejor alternativa familiar”6, en efecto, la mentada norma legal establece: “ARTÍCULO 68. REQUISITOS PARA ADOPTAR. Podrá adoptar quien, siendo capaz, haya cumplido 25 años de edad, tenga al menos 15 años más que el adoptable, y garantice idoneidad física, mental, moral y social suficiente para suministrar una familia adecuada y estable al niño, niña o adolescente. Estas mismas calidades se exigirán a quienes adopten conjuntamente. Podrán adoptar: 1. Las personas solteras. 2. Los cónyuges conjuntamente. 3. Conjuntamente los compañeros permanentes, que demuestren una convivencia ininterrumpida de por lo menos dos (2) años. Este término se contará a partir de 6 Sentencia citada 5 Demanda de Adopción 2011-00290-01 Oscar Andrés Morales Melgar la sentencia de divorcio, si con respecto a quienes conforman la pareja o a uno de ellos, hubiera estado vigente un vínculo matrimonial anterior. 4. El guardador al pupilo o ex pupilo una vez aprobadas las cuentas de su administración. 5. El cónyuge o compañero permanente, al hijo del cónyuge o compañero, que demuestre una convivencia ininterrumpida de por lo menos dos (2) años. del cónyuge o compañero permanente respecto del hijo de su cónyuge o compañero permanente o de un pariente dentro del tercer grado de consanguinidad y segundo de afinidad. PARÁGRAFO 1o. La existencia de hijos no es obstáculo para la adopción. PARÁGRAFO 2o Si el niño, niña o adolescente tuviere bienes, la adopción se hará con las formalidades exigidas para los guardadores. Por su parte, el artículo 124 ibídem, dispone que a la demanda de adopción se acompañaran los siguientes documentos: “1. El consentimiento para la adopción, si fuere el caso. 2. La copia de la declaratoria de adoptabilidad o de la autorización para la adopción, según el caso. 3. El registro civil de nacimiento de los adoptantes y el del niño, niña o adolescente. 4. El registro civil de matrimonio o la prueba de la convivencia extramatrimonial de los adoptantes. 5. La certificación del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar o de una entidad autorizada para el efecto, sobre la idoneidad física, mental, social y moral de los adoptantes, expedida con antelación no superior a seis meses, y la constancia de la entidad respectiva sobre la integración personal del niño, niña o adolescente con el adoptante o adoptantes. 6. El certificado vigente de antecedentes penales o policivos de los adoptantes. 7. La certificación actualizada sobre la vigencia de la licencia de funcionamiento de la institución donde se encuentre albergado el niño, niña o adolescente, expedida por el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar. 8. La aprobación de cuentas del curador, si procede.”. En tanto que, de conformidad con lo dispuesto en el PARÁGRAFO de la misma norma: “Para los fines de la adopción, la convivencia extramatrimonial podrá probarse por cualquiera de los medios siguientes: 1. Inscripción del compañero o compañera permanente en los registros de las Cajas de Compensación Familiar o de las instituciones de seguridad o previsión social. 2. Inscripción de la declaración de convivencia que haga la pareja, en la Notaría del lugar del domicilio de la misma, con antelación no menor de dos años. (…) (Negrilla y subrayado fuera de texto original) Interpretando las normas transcritas, en especial, las exigencias probatorias contenidas en el artículo 124, de modo que ofrezca el más estricto cumplimiento de las garantías al interés superior del menor, forzoso resulta 6 Demanda de Adopción 2011-00290-01 Oscar Andrés Morales Melgar concluir que tales exigencias son insoslayables y que es deber de los funcionarios judiciales verificar, con el mayor celo, su cumplimiento. Como se extrae del texto de la norma transcrita, a la demanda de adopción, el interesado en ser declarado adoptante, deberá allegar entre otros documentos, El registro civil de matrimonio o la prueba de la convivencia extramatrimonial de los adoptantes. Precisamente, el legislador, en el parágrafo de la misma norma, consagró dos formas de probar la convivencia extramatrimonial, para efectos de la adopción. Nótese que estas dos posibilidades de prueba provienen de actos o manifestaciones de la pareja o de uno de sus miembros, por ello se condicionan o cualifican, así, para el caso de la declaración notarial de convivencia se exige que tenga antelación no inferior a dos años y, en el caso de la inscripción del compañero o compañera permanente en las Cajas de Compensación Familiar o en las entidades de seguridad social, se entiende que debe ser como beneficiario, no como aportante. Le asiste razón al apelante cuando expresa que, tratándose de dos personas que laboran y están en capacidad de aportar a los sistemas independientemente el uno del otro, resulta imposible probar la convivencia por ese medio, más, ello no lo releva de hacerlo por otros medios legalmente permitidos. Sin pretender que la mención que hace el parágrafo del artículo 124 del Código de la Infancia y la Adolescencia, de dichas dos formas de probar la convivencia es taxativa o que, allí, se está consagrando una tarifa legal del prueba, lo real, en el caso concreto, es que ni de la manera que indica la norma ni de ninguna otra legalmente permitida, que aporte certeza sobre tal convivencia de por lo menos dos años, se acredita, ab initio, como lo exige la norma en comento, la convivencia ininterrumpida de por lo menos 2 años que prevé el numeral 5º del artículo 68 ibídem, entre la madre o padre biológicos del menor a adoptar y su compañero o compañera permanente. En efecto, la declaración notarial de convivencia, mediante escritura pública No. 453 otorgada en la Notaría 4ª, de esta ciudad, la hicieron los referidos señores, apenas, el 11 de marzo del presente año, mientras que la 7 Demanda de Adopción 2011-00290-01 Oscar Andrés Morales Melgar declaración extrajuicio rendida por ellos ante el Notario Quinto de Neiva tuvo lugar el 16 de octubre de 2010, es decir que, ningún acto data de 2 años anteriores a la presentación de la demanda (06 de mayo de 2011). Tampoco están en condiciones de acreditar la inscripción de uno de los compañeros como beneficiario del otro en las entidades de seguridad social. Por otra parte, el informe psicológico, cuya valoración echa de menos el recurrente, recoge la información suministrada por los mismos compañeros y, una prueba emanada de ellos sí requiere reunir las condiciones que impone dicho parágrafo, pues mal se haría en desechar la escritura que contiene dicha declaración de convivencia o la declaración extrajuicio, y, en cambio, acoger una manifestación realizada en otra forma por los interesados. En tales condiciones, no es viable acoger los planteamientos del recurrente, por consiguiente, se impone la confirmación del auto apelado. Por lo expuesto, la Sala Civil Familia Laboral del Tribunal Superior del Distrito Judicial de Neiva, administrando justicia en nombre de la República y por autoridad de la ley RESUELVE PRIMERO: CONFIRMAR el auto proferido dentro del presente asunto el nueve (9) de junio de dos mil once (2011) por el Juzgado Quinto de Familia del Circuito del Neiva. SEGUNDO: SIN COSTAS en esta instancia, porque no aparecer probada su causación (numeral 9° art. 392 C.P.C.). NOTIFÍQUESE MARÍA AMANDA NOGUERA DE VITERI Magistrada Sustanciadora 8