ENSAYO LA PROFESIÓN DE ARQUITECTO Introducción

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ENSAYO
LA PROFESIÓN DE ARQUITECTO
Integrantes:
Felipe Pérez
Paulina carriel
Darío Saavedra
Introducción
La arquitectura es una profesión bastante variada en sus aplicaciones y se
despliega en un amplio campo laboral en distintas áreas de especialidad como en
urbanismo, la construcción y el diseño. A su vez el arquitecto es un profesional
versátil, adaptable, práctico y dinámico que puede desempeñarse en múltiples
funciones relacionadas con su carrera, ya que durante su formación se le prepara
para poder trabajar y entenderse con todos los demás profesionales con los que
se involucrará para llevar a cabo sus proyectos.
En éste ensayo buscaremos desarrollar una visión más completa del
ejercicio de la profesión de arquitecto, las áreas en las que se desempeña, sus
relaciones profesionales, el contexto en el que desarrolla su trabajo, entre otros
temas, enfocándonos particularmente en el área del diseño
Desarrollo
Uno de los ámbitos del desarrollo de la profesión de arquitecto como
señalamos inicialmente es el diseño. El arquitecto es el quien a partir de la
interpretación de los deseos y requerimientos del cliente, imagina y concibe el
proyecto, para luego representarlo en el papel. Sin embargo su responsabilidad no
se limita solamente a esto, púes debe estar involucrado en el desarrollo de su obra
durante todo el proceso constructivo, con el fin de supervisar y asegurarse de su
correcta ejecución, estando presente para resolver junto a un ingeniero u otros
profesional cualquier problema que pudiese surgir durante este proceso, situación
bastante común, pues no se pueden prever todas las complicaciones.
Independientemente de la especialidad que escoja el arquitecto, éste puede
optar por desempeñarse en distintos aspectos de la profesión, como; el área
administrativa, ya sea en reparticiones estatales como privadas, en agencias
locales o internacionales, en el área de tasaciones, en conservación de
patrimonios, sustentabilidad y docencia en establecimientos de educación
superior, entre otros. Esta última opción es vista por algunos arquitectos como una
forma de complementar su profesión y contribuir al desarrollo
de nuevos
profesionales, con su experiencia. Todas estas actividades ponen en evidencia la
gran gama de ámbitos laborales que constituyen el campo de la arquitectura, pues
los profesionales a lo largo de su formación adquieren conocimientos,
herramientas y competencias versátiles que no restringen su desarrollo y
potencialidad en determinados límites de acción.
Asimismo, el arquitecto diseñador no trabaja en forma aislada, sino
formando asociaciones con otros profesionales y en algún momento de su carrera,
cuando ya cuenta con cierto prestigio y experiencia, puede elegir con quienes se
relacionará a través de un equipo de trabajo, dentro del cual el intercambio de
ideas y percepciones se torna crucial y va en beneficio de los proyectos. En éste
punto también puede seleccionar estos mismos, de acuerdo con la búsqueda de
aquél que le entregue mayor satisfacción y pueda aportar a su crecimiento
profesional y humano, si es posible.
El trabajo en equipo genera una variedad de relaciones, donde es necesario
que exista y se mantenga un clima laboral positivo y armónico, para que las ideas
confluyan y sean acordadas. Lo mismo ocurre en relación con los distintos
profesionales con los que debe trabajar codo a codo, durante un proyecto, ya sean
estos ingenieros, electricistas, jefes de obra o jornales. El arquitecto debe
desenvolverse en su profesión de manera tal, que sea capaz de entender y darse
a entender tanto con un colega, como con un trabajador de menor formación.
En esta área, los proyectos deben incluir una complementariedad entre lo
social, lo funcional y lo artístico, sin embargo el primer componente adquiere
mayor importancia, ya que por sobre el estilo y la estética de las obras, debe
ponerse atención en la contingencia, es decir, en los requerimientos actuales de la
sociedad, y en especial los sectores más necesitados. Aquí es donde aparece el
concepto de responsabilidad social del arquitecto, su compromiso son la sociedad
que apunta a dar respuesta a los problemas reales de las personas, por sobre la
magnificencia o belleza de una obra.
La arquitectura también busca solucionar problemas funcionales y
espaciales, donde la creatividad y la asertividad juegan un rol importante. La
solución efectiva a estos problemas se traduce en la satisfacción de las
necesidades de las personas, o bien a clientes, puesto que se trata de proyectos
que entregan habitualidad y un sentido de identidad con el estilo de la vida, en el
caso de encargos de casa y departamentos particulares, por ejemplo.
Un buen arquitecto debe lograr confianza y cercanía con sus clientes, con el
objeto de interpretar adecuadamente lo que éstos desean o necesita y así
concebir el proyecto de acuerdo a sus exigencias. Además sus obras siempre
deben tener presente el contexto, el ambiente urbano en el que se insertan pues
generalmente se busca adaptarse a él para encajar en un determinado sistema y
estar en armonía con el entorno.
No obstante lo señalado anteriormente, así como también existen
diferencias en términos de especialidad en la arquitectura, también existen
distinciones en cuanto al criterio o los propósitos que persiguen los arquitectos a
la hora de emprender un proyecto. Dichos criterios se basan en la concepción que
tiene éstos acerca de su profesión, si la ven como un hecho social o como un
lenguaje, como una expresión de su desarrollo interno. De este modo pueden
existir fines personales y sociales. Dentro de los primeros se incluye la búsqueda
de la satisfacción personal, la comunicación del sentir y el pensamiento, pero
también pueden ir ligados a la búsqueda del éxito, fama y poder adquisitivo, lo
cual no es negativo, pero en cambio el fin social se refiere a generar un efecto
positivo en la sociedad, contribuyendo en la solución de los problemas de esta.
Conclusión
A través de éste ensayo hemos analizado aspectos importantes en la
profesión del arquitecto, para lograr una visión más acabada que ayude a
orientarnos y prepararnos de alguna manera para nuestro futuro profesional en
esta carrera.
Podríamos decir que un arquitecto es un profesional integral y completo,
pues combina sus conocimientos técnicos con sus percepciones y emociones para
desarrollar su trabajo, y despliega todas sus habilidades en los diversos ámbitos
en los que ejerce su profesión, para ser un efectivo interprete de los
requerimientos que se le encarguen y un gran constructor y modelador del
pensamiento de la sociedad en que vivo a través de un poderoso instrumento de
expresión, que es la arquitectura.
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