Estilo de vida Víctor y Linda texto POR josé luis galar• FOTOGRAFÍA POR daniel mordzinski El Instituto Cervantes es un institución creada en España en 1991 para promover, enseñar y difundir la cultura española y de los países hispanohablantes. La sede central de esta fundación se encuentra en Madrid y en Alcalá de Henares, ciudad de nacimiento del escritor Miguel de Cervantes. En la actualidad, el Instituto tiene presencia en los cinco continentes con más de 70 centros. Entre sus labores, destaca la preparación de los exámenes para el Diploma de Español como Lengua Extranjera (DELE), así como expedir los certificados y diplomas oficiales para los participantes de dichos cursos. Víctor Andresco es su director en Milán. 54• www.spend-in.com E mpecemos por el final. Milán está brumoso. Vamos juntos, codo con codo, camino del bimotor que me devolverá a mi casa y yo le digo: «Louis (aunque sé perfectamente que se llama Víctor), este es el comienzo de una gran amistad». 24 horas antes. Aterrizo en el aeropuerto de Bérgamo, voy invitado por Instituto Cervantes de Milán a pronunciar una conferencia enmarcada en el ciclo de Agentes Secretos, «Génesis de una novela: el caso de Angelitos Negros». No negaré mi inmensa satisfacción por el hecho de que el prestigiosísimo Cervantes me considere digno de conferenciar en uno de sus centros en el extranjero. Además, me apresuro a confesar sin rubor que esta satisfacción contiene cierta dosis de vanidad, homeopática, no hipertrofiada y cabemos los dos juntos en el mismo ascensor. El director del centro de Milán se llama Víctor Andresco. Su nombre me suena cuando hace su primera llamada telefónica para proponerme esta aventura. Cualquier agente secreto de campo sabe que antes de ir a una misión es conveniente recopilar toda la información acerca del terreno en donde va a operar, y eso es lo que hago: investigo a Andresco. Finalmente, descubro el motivo del eco que su apellido provoca en mi cabeza: es uno de los críticos literarios más leídos en los suplementos culturales de ABCD y Babelia. También un extraordinario traductor del ruso, entre otras muchas cosas de una ‘Resurrección’ de Tolstoi que guardo en casa. Prosigo mi investigación y tirando de buscadores en la Red también descubro que es un novelista y un cuentista, lo que me lleva al siguiente escalón en mi pesquisa: voy a una librería y compro sus obras completas, ‘Los clavos del cielo’, ‘A buenas horas cartas de amor’ y ‘El rey del mundo’. Las dos primeras son novelas y el tercero un pequeño volumen de deliciosos cuentos rusos. Ya estoy en Milán, magnífica ciudad, es la Semana de la Moda y el glamour de la calle Montenapoleone se ha derramado por toda la ciudad. Hieráticas como esfinges las modelos desfilan sobre stilettos imposibles en pasarelas populares levantadas en plena www.spend-in.com estilo de vida calle, ajenas en apariencia a la expectación que despiertan en la clase mortal. Víctor Andresco me recibe con la cordial hospitalidad de un tuareg. Intuyo que la necesidad de tratar con gran cantidad de personas a lo largo de su carrera lo ha convertido en un experto observador y rápido analista de quien tiene enfrente. Tampoco yo soy un mal observador —fuerza de la costumbre o hábito de supervivencia, quizá ambas cosas—, así que no es necesario cruzar muchas palabras ni grandes protocolos para llegar a la conclusión de que vamos a sentirnos muy cómodos durante mi estancia. Justo antes de la conferencia, Víctor Andresco me presenta a su mujer, Linda Bassegio, periodista cultural y narradora con varios Víctor Andresco es uno de los críticos literarios más leídos en los suplementos culturales de ABCD y Babelia 55 • estilo de vida premios de relatos, como el editado por Terre di Mezzo «11-M » galardonado con el «Premio Nacional La stazione» en 2005. Ahora Linda está enfrascada en la revisión de una novela que tiene una buenísima pinta, según lo que nos cuenta. Es una pareja de «letraheridos» como le gusta decir a Víctor y detesta Linda, pero debe de ser el único desacuerdo entre esta pareja unida por la lengua española: se conocieron en el salón de actos del Cervantes milanés de la céntrica Vía Dante en una conferencia sobre el Camino de la Lengua Castellana… y ya no se separaron. Mientras hablamos y Víctor me cuenta cosas de sus cuatro años al frente del Cervantes del Moscú antes de dirigir el centro de Milán, se me antoja que podría escribir alguna reseña para SPEND IN sobre esta pareja literaria. Así que provoco una conversación en ruso (el lector habrá adivinado o al menos intuido a estas alturas que Andresco es hijo de padre ruso) aunque, evidentemente, no estoy a su altura porque mi ruso —aceptable en otro tiempo, en otra vida— está un poco oxidado debido al desuso. Pero no puedo evitar que me brote un satisfecho recuerdo en forma Pont des Arts Víctor y Linda, su mujer, se conocieron en una conferencia sobre el Camino de la Lengua Castellana Cementerio de Montparnasse 56• www.spend-in.com estilo de vida sonrisa torcida y maliciosa mientras me cuenta cosas del Viejo Moscú. Desfilan por nuestra tertulia una caravana de temas: gigantescas librerías del centro moscovita, reconocimiento de que Moscú es uno de los epicentros del arte de vanguardia y del teatro. Y de pronto surge uno de nuestros asuntos: el espionaje. Me cuenta que ha estado en el cementerio de Kuntsevo a los pies de la tumba de Kim Phillby; ya saben, el espía británico del Círculo de Cambridge que actuó de agente doble junto con otros cuatro más, entre ellos el conservador de la pinacoteca real y amigo personal del la Reina de Inglaterra, Sir Anthony Blunt. Y también en Kuntsevo ha estado en la tumba de otro no menos célebre agente doble español Ramón Mercader, el que asesinó a Trotsky clavándole un piolet en la cabeza… También veo que hay satisfacción en Andresco por el trabajo bien hecho durante sus cuatro años en Moscú, al frente de una buena labor de aproximación entre culturas —las dos suyas— rusa y española, participando en el legado de herencias como el Año Dual recientemente celebrado. A estas alturas tengo más que decidido proponer un reportaje a la revista. Cuando me lamento de no ser un buen fotógrafo capaz de ilustrar este pequeño artículo me encuentro con una respuesta sorpresa: ¡son íntimos amigos de Daniel Mordzinski!, el fotógrafo de los escritores, y me prometen que el genial Mordzinski en persona va a remitirme unas cuantas fotografías de ellos dos en alta resolución. Mientras tanto, como aperitivo, me muestran un adelanto de esas fotografías en la pantalla de su móvil. Están sensacionales bajo el Pont des Arts o captados cenitalmente en el hall de L’Hôtel que Borges frecuentaba… o en el cementerio de Montparnasse rindiendo homenaje ante de la tumba de Cortázar o de Gainsbourg, polifacético y polémico artista que junto a Jane Birkin interpretó, escandalizando a la buena sociedad de entonces retomando el concepto rebelde de épater le bourgeois, canciones como ‘La décadence’. El tiempo transcurre deprisa como siempre que uno se siente a gusto y tengo que dejar Milán. Mientras embarco pienso: la conferencia ha salido a pedir de boca con el salón repleto de gente, he conocido a dos personas muy interesantes y además conoceré a Mordzinski enseguida, hay días en que los astros se alinean para que todo salga bien… ¡qué más se puede pedir! L’Hôtel des Beaux Arts No negaré mi inmensa satisfacción por el hecho de que el prestigiosísimo Instituto Cervantes me considere digno de conferenciar en uno de sus centros en el extranjero José Luis Galar y Víctor Andresco www.spend-in.com 57 •