Orientaciones generales para hacer la cuestión 2 b) del examen de selectividad Platón Tened en cuenta que el texto hay que comentarlo. Esto es para indicar que dominas el contexto de cada autor. La República, es el Diálogo donde Platón expone su filosofía política a través de cuestiones como ¿qué es la justicia?. Su redacción se cree que se prolongó durante 20 años, del 390 a.c. a 370 a.c. Está dividida en 10 libros según la temática. En los libros II al IV expone el proyecto político, el origen del Estado y la organización ideal del mismo. En los libros V al VII retoma las doctrinas sobre el conocimiento, con el mito de la caverna y el símil de la Línea. Hemos de contar con la amplitud de la obra platónica, que durante unos cincuenta años va componiendo sus diálogos con una sutil e inigualable habilidad literaria y con un extraño rigor metódico. Platón significa una culminación y un relanzamiento de la teoría filosófica. El diálogo de la República es del periodo de madurez donde desarrollan sus principales teorías. De algún modo reasume críticamente lo anterior-no imparcialmente, claro está, sino desde su propio enfoque, como luego hará Aristóteles incluyendo al propio Platón_ y avanza desde esa superación crítica. (La de los Sofistas). La mentalidad propia de la de una tradición oral es criticada y rechazada por Platón. La tradición poética y la religiosidad, resultan censuradas con rigor en la república platónica; y el saber trágico sobre la condición humana, reflejada en el teatro es también rechazada. El mito de la caverna, es una metáfora de la condición humana y la vida en la polis. Tiene dos exigencias: una, onto-epistemológica y la otra, éticopolítica. Esta tarea la cumple la Educación. Se trata de liberar al hombre y la polis (ético-político) de la opresión, y de una falsa concepción de la realidad que obstaculiza la verdad (onto-epistemológico). El mito presenta una simbología. Caverna vs exterior. Es el dualismo mundo sensible-mundo inteligible; doxa-opinión. Hay una iconografía explícita: sombras, luz, cadenas, fuego, prisioneros. Cadenas. Lo que nos ata al mundo material; los deseos, el cuerpo y los sentidos. Camino. En la expresión camino del alma, simboliza el método para ascender hasta las Ideas. Este método lo representa la Dialéctica con sus dos fases: • Ascendente. Es la liberación y el conocimiento en todos sus ámbitos. • Descendente. Es el retorno del prisionero. Se trata de conocer la comunicación de las Ideas con lo particular. Tiene un ámbito ético-político. Empinada cuesta. Es el difícil camino del conocimiento y la educación. Exterior. Mundo inteligible. Liberación. La educación es la herramienta liberadora: ’’ ubi sapientias ibi libertias.’’. También nos liberamos de las ataduras de los sentidos para alcanzar la verdad. Luz del fuego. Es la analogía del sol y la Idea del Bien. Al igual que el sol nos permite ver, la Idea de Bien nos permite inteligir. Prisioneros. Es la condición humana atada al error, la ignorancia y la opresión política. Sombras. Son las proyecciones de los objetos. Es la realidad inferior, se corresponde con la Doxa y la Eikasía, que son las copias de la realidad natural o artificial. Muro o tabique. Frontera e impedimento entre la ignorancia y la verdad. Hay que adaptarse al texto concreto. Y se incluye el comentario de la parte que corresponda. LOS CUATRO SIGNIFICADOS DEL MITO DE LA CAVERNA. 1) ONTOLÓGICO. Antes de nada, los distintos grados ontológicos de la realidad, es decir los géneros del ser sensible y suprasensible, junto con sus subdivisiones: las sombras de la caverna son las meras apariencias de las cosas y las estatuas son las cosas sensibles. El muro es la línea divisoria entre las cosas sensibles y las suprasensibles. Más allá del muro, las cosas verdaderas, simbolizan el verdadero ser y las Ideas y el sol simbolizan la Idea de Bien. 2) EPISTEMOLÓGICO. En segundo lugar el mito simboliza los grados del conocimiento, en sus dos especies y en sus dos grados. La visión de las sombras simboliza la eikasía o imaginación y la visión de las estatuas es la pistis o creencia. El paso desde la visión de las estatuas hasta la visión de los objetos verdaderos y la visión del sol- primero mediata y luego, inmediata- representa la dialéctica en sus diversos grados y la pura intelección. 3) ÉTICO. En tercer lugar, el mito de la caverna simboliza el aspecto ascético, místico y teológico del platonismo. La vida en la dimensión de los sentidos y de lo sensible es la vida de la caverna, mientras que la vida en la dimensión del espíritu es vida a plena luz. El pasar desde lo sensible hasta lo inteligible está específicamente representado como una liberación de las ataduras, una conversión. La visión suprema del sol y de la luz en sí es la visión del Bien y la contemplación de lo divino. 4) POLÍTICO. No obstante, el mito de la caverna también manifiesta una concepción política, refinadamente platónica. En efecto, el filósofo nos habla de un regreso a la caverna, por parte de aquel que se había liberado de las cadenas, y tal regreso tiene como objetivo la liberación de las cadenas que sujetan a quienes habían sido antes sus compañeros de esclavitud. Dicho regreso es sin duda el retorno del filósofo-político, quien –si se limitase a seguir sus propios deseos- permanecería contemplando lo verdadero. En cambio, superando sus deseos, desciende para tratar de salvar también a los demás. El verdadero político, según Platón, no ama el mando y el poder, sino que usa el mando y el poder como un servicio, para llevar a cabo el bien. ¿Qué sucederá, por cierto, con el que vuelve a bajar a la caverna? Al pasar desde la luz a la sombra, dejará de ver, hasta acostumbrarse otra vez a las tinieblas. Le costará readaptarse a los viejos hábitos de sus compañeros de prisión, se arriesgará a que estos no le entiendan y, considerado como un loco, quizás se arriesgue a ser asesinado. Esto fue lo que le sucedió a Sócrates y podría acontecerle lo mismo a cualquiera que actúe igual que él. Sin embargo, el hombre que haya “visto” el verdadero Bien tendrá que correr este riesgo y sabrá hacerlo, ya que es el que otorga sentido a su existencia.