Micaela A. Marcano

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 Micaela A. Marcano
vs. la República de Sacayán
Caso Hipotético
Quinta Edición
♦
I.
S OBRE
LA
R EPÚBLICA F EDERAL
DE
S ACAYÁN
1. La República Federal de Sacayán (en adelante “República de Sacayán”, “Estado” o
“Sacayán”) es un Estado independiente ubicado en América, con una población de 9 millones
de personas y una superficie geográfica de 48.740 km cuadrados. Su capital, la ciudad Berkins,
alberga al 60% de la población. La economía de Sacayán está basada principalmente en la
exportación de minerales y otros recursos naturales. Asimismo, Sacayán es uno de los
principales exportadores de cacao y café de la región. Sacayán se ubica geográficamente con un
único país limítrofe, el Estado de Cáceres, considerado uno de los países más pobres de la
región.
2. El Estado está clasificado por el Banco Mundial dentro de los países de ingreso alto, con
un Producto Interno Bruto (PIB) de 15.000 dólares per cápita. Sin embargo, tiene una de las
inflaciones más altas de la región, ubicándose en el 68% anual. La población de Sacayán es
esencialmente joven, donde el 65% de la población se ubica en el grupo etario de 0 a 28 años.
Según datos oficiales, Sacayán tiene 50.5% de mujeres y 49.5% de hombres. Asimismo, el 30%
de la población es migrante, proveniente de Cáceres. La expectativa de vida promedio de las
mujeres sacayanas es de 78 años y de los hombres sacayanes es de 76 años.
3. La República Federal de Sacayán tiene un sistema presidencialista y federal de gobierno.
La República Federal de Sacayán adquirió su independencia en 1811, y ha tenido desde
entonces 19 constituciones federales. Entre 1955 y 2005, la República de Sacayán estuvo
dirigida con alternancia en el poder de dos grandes partidos políticos. Sin embargo, en 2005
fue elegida una presidenta proveniente de un nuevo partido de corte liberal, el Partido Nueva
República. Este partido promovió una nueva constitución, adoptada en 2008, con un alto
contenido garantista en materia de derechos humanos.
Caso hipotético elaborado para la Competencia sobre Derechos Humanos Sergio García Ramírez de la UNAM, Quinta Edición, 2016, por
Fanny Gómez-Lugo, especialista en derechos humanos de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). Las opiniones aquí
expresadas son únicamente atribuibles a la autora del caso, y no reflejan la posición de la CIDH o de su Secretaría Ejecutiva. La autora desea
agradecer los valiosos comentarios y observaciones brindados por Elizabeth Abi-Mershed, Luc Athayde-Rizzaro, Oscar A. Cabrera, Paulina
Corominas Etchegaray, Matías Matilda González Gil, Jorge H. Meza, Mariel Ortega y Luis Felipe Yañez.
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República de Sacayán
4. Desde el año 2005, se adoptaron en Sacayán una serie de reformas legislativas y en
materia de políticas públicas en favor de los derechos humanos que han sido, de manera
general, celebradas por las organizaciones que defienden derechos de personas lesbianas, gays,
bisexuales, trans e intersex (LGBTI). Por ejemplo, en 2007 se aprobó una ley que reconoce el
matrimonio entre personas del mismo sexo, con todos los derechos y obligaciones que reconoce
para el matrimonio entre personas de distinto sexo. Por otra parte, en el 2012 el Ministerio de
Salud adoptó una directiva que prohíbe las intervenciones quirúrgicas médicamente
innecesarias en bebés recién nacidos cuyos cuerpos no se ajustan físicamente a los estándares
culturalmente definidos para el cuerpo femenino o masculino.
5. En el año octubre de 2010 se adoptaron reformas al Código Civil que permiten la
rectificación del nombre y del componente sexo en los documentos de identidad de las
personas trans. Asimismo, en diciembre de 2010 el Ministerio de Salud adoptó la Resolución
13A/2010 que establece que el sistema público de salud cubre las operaciones de afirmación de
género (también conocidas como cirugías de reasignación sexual), otras transformaciones
corporales, y los procesos de terapia hormonal para personas trans, a partir de los 18 años de
edad y lo largo de la vida de las personas trans, siempre y cuando se presente un certificado de
“disforia de género” otorgado por un médico psiquiatra especialista en el tema. Sin embargo,
dado a un importante recorte presupuestario y un gran déficit que afectó al gobierno, en 2016,
se emite la Resolución 11C/2016 que establece que los procesos de terapia hormonal con
supervisión médica estatal únicamente se cubrirían por espacio de dos años, en consonancia
con el período de dos años al que se refiere el Código Civil, con las modificaciones introducidas
en 2010.
6. En 2007 el Estado constituyó la Comisión Nacional contra la Discriminación
(CONADI), entidad dependiente del gobierno federal, con el objetivo de velar por los derechos
humanos de todas las personas sacayanas, y que ha adoptado importantes iniciativas a favor de
los derechos de personas LGBTI. En el año 2012, el Instituto Federal de Estadísticas, en
conjunto con la CONADI llevaron a cabo una encuesta dirigida a personas trans, con el
objetivo de recibir información que permitiera al Estado la redacción de políticas públicas
efectivas para la garantía de sus derechos. El informe producido se hizo sobre la base de 1.000
entrevistas. Según los resultados de la encuesta, se conoce que: el 88% de las personas trans
encuestadas han sido enfrentado discriminación en sus hogares; 75% ha sufrido violencia a
manos de su pareja; el 93% indica haber sido víctima de violencia o abuso por parte de policías
y otros agentes de seguridad estatales; y el 85% sufre violencia o discriminación en las escuelas.
Asimismo, que el 95% de las personas trans que no han rectificado sus documentos de
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identidad para reflejar su nombre y sexo fueron discriminados en la última elección realizada.
Por su parte, una organización de la sociedad civil llamada Resistencia y Liberación Trans
(RLT) documenta que entre el 90 y el 92% de las mujeres trans en Sacayán ejercen
prostitución y que la expectativa de vida de las mujeres trans en el país, al igual que en América
Latina, es de 30 a 35 años de vida.
7. No existen estadísticas oficiales que permitan contabilizar el número de personas trans
en el país, ya que el último censo realizado en 2010 no incluyó esta variable. Sin embargo,
organizaciones de la sociedad civil estiman que existen en Sacayán entre 6.000 y 7.000 personas
trans. Desde noviembre de 2010, 750 personas trans han solicitado la rectificación del nombre
y del componente sexo en sus documentos de identidad, y se ha otorgado el cambio de nombre
y sexo a 420 personas, y sólo el cambio de nombre y no de sexo a 92 personas.
8. La República Federal de Sacayán es parte de la Convención Americana sobre Derechos
Humanos desde el 9 de septiembre de 1981, fecha en la cual aceptó también la jurisdicción de
la Corte Interamericana. Ratificó la Convención Interamericana para Prevenir, Sancionar y
Erradicar la Violencia contra la Mujer (Convención de Belém do Pará) el 15 de enero de 2006.
Ratificó el Protocolo Adicional a la Convención Americana sobre Derechos Humanos en
materia de Derechos Económicos, Sociales y Culturales (Protocolo de San Salvador) el 21 de
mayo de 2011. Finalmente, firmó pero aún no ratificó la Convención Interamericana contra
Toda Forma de Discriminación e Intolerancia el 6 de diciembre de 2013.
II.
LA
VIDA DE
M ICAELA A. M ARCANO
9. Micaela Alejandra Marcano nació en Capé, una localidad rural al este de Sacayán, en la
zona fronteriza con Cáceres, ubicada a dos horas de la capital de Sacayán. Micaela es de
nacionalidad sacayana. Su madre y su padre emigraron de Cáceres cuando eran jóvenes, en
búsqueda de mejores oportunidades económicas. Micaela nació el 6 de diciembre de 1994, en
una familia de clase media, siendo la hija más pequeña, con tres hermanos mayores.
10. Desde pequeña, Micaela sabía que era diferente de sus hermanos y sus compañeros de
escuela. Cuando nació, su padre y madre le pusieron Pablo, y fue criada como varón en su casa.
A los 5 años, Micaela comenzó a decir que no le gustaba la ropa que le ponían, y decía que
quería vestirse con prendas de vestir tradicionalmente asociadas a las niñas (vestidos, faldas, y
prendas accesorias) y se ponía toallas en la cabeza pretendiendo que tenía el cabello largo. Al
principio, su padre y madre creían que era una etapa, que “se le pasaría” y que lo hacía para
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“buscar llamar la atención”. Sin embargo, a medida que fue creciendo, Micaela fue
demostrando más firmemente que era una niña. Cuando tenía 10 años, su madre y padre
comenzaron a prohibirle que saliera “disfrazada de niña” en público. Le decían que era por su
bien, para que no le fueran a atacar en la escuela o en la calle. A pesar de las prohibiciones en
casa, y las constantes burlas y actos de violencia por parte de sus hermanos, Micaela nunca
ocultó su identidad de género diversa.
11. Micaela enfrentaba situaciones de violencia en la escuela pública a la que asistía, a
manos de sus compañeros y de sus maestros y maestras de escuela. A pesar de ello, Micaela era
una niña y adolescente que le gustaba mucho estudiar, obtenía muy buenas calificaciones, y
quería continuar asistiendo a la escuela. Micaela había sufrido acoso escolar durante toda la
escuela primaria, el cual se intensificó en secundaria, a los 13 años, cuando comenzó a expresar
su identidad femenina con accesorios, maquillaje, llevando el cabello largo y faldas a la escuela.
La directora de la escuela la amonestó en dos oportunidades por violar el manual de
convivencia y buena conducta de la escuela, al llevar maquillaje, utilizar falda y llevar el cabello
largo, ya que Micaela estaba “registrado como varón, y debía seguir las reglas de uniforme y
atuendo de los varones”. La directora de la escuela dijo que “gente como él no era aceptable en
el colegio” y pidió que Micaela se viera con un psicólogo para poder “tratar su condición”.
Luego de dos semanas, la directora le dijo a Micaela que continuaba demostrando una actitud
desafiante ante los distintos llamados de atención de no presentarse a la escuela “como si fuera
mujer”. Micaela es expulsada de la escuela a los 14 años (cuando cursaba segundo año de la
secundaria) por “mala conducta”, al haber quebrantado las disposiciones establecidas en el
manual de convivencia.
12. El padre de Micaela, Gregorio Marcano, decía que no entendía bien “lo que le pasaba a
su hijo”, pero “lo quería igual”. La madre de Micaela decía que les había costado mucho que les
aceptaran en la comunidad, por ser originalmente de Cáceres, y que las conductas que tenía
Micaela empeoraban la situación. La madre de Micaela insiste que es necesario llevarla con un
psicólogo para que “le ayude”. La madre de Micaela ha visto varios anuncios por diversos
medios que buscan “curar a las personas de la homosexualidad”, y que eso es lo que necesita.
Micaela vivía constantemente en situación de conflicto con su madre y sus hermanos por
negarse a renunciar a ser quien era. Finalmente, cuando Micaela tiene 15 años, no soporta más
la hostilidad en su hogar y se va de su casa, a vivir a casa de una amiga muy cercana, también
una adolescente trans.
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13. Micaela decide luego ir a vivir con su novio (un hombre de 25 años que había conocido
en una fiesta), y los dos se van a vivir a la ciudad capital. Desde el principio de su relación,
Micaela enfrentó situaciones de violencia psicológica y abuso verbal a manos de su novio.
Luego de dos meses de vivir juntos en la ciudad de Berkins, Micaela comienza a experimentar
violencia física. Como resultado de uno de esos episodios de violencia, Micaela fue severamente
golpeada por su novio. Esa noche, mientras su pareja dormía, Micaela fue a la comisaría a
presentar la denuncia, pero indica que no le quisieron recibir la denuncia. Decidió acudir a un
albergue para mujeres víctimas de violencia intrafamiliar. A pesar que hubo una resistencia
inicial de la directora del albergue de admitirla por tratarse de una mujer trans, Micaela la
convence de hacerlo. Así, Micaela vive unas pocas semanas en el albergue, pero termina
yéndose pues las mujeres que ahí se encontraban (todas mujeres cisgénero) hacían constantes
comentarios despectivos hacia ella y se quejaban que Micaela utilizara su mismo baño.
14. Micaela decide irse del albergue e irse a vivir a casa de una mujer trans que conocía en
Berkins y que, como ella, se había venido de Capé a Berkins, y que ejercía trabajo sexual. La
amiga de Micaela le cuenta que la prostitución no está prohibida en el país, pero que el
problema es que no está regulada, entonces se presta a muchos abusos por parte de la policía.
Micaela se queda poco tiempo en esa casa, y para no caer en situación de calle, comienza a
ofrecer sexo a cambio de comida y lugares donde dormir. Luego, Micaela conoce a otras
mujeres trans y personas travestis que también vienen de las zonas rurales de Sacayán, y quienes
están en situación de prostitución en la conocida zona de trabajo sexual de Berkins (la Avenida
Libertador). Así, Micaela comienza a ejercer la prostitución en enero de 2011, cuando tenía 16
años. Micaela, al igual que las mujeres trans que frecuentaban la Avenida Libertador por las
noches han sido atacadas, violentadas, y agredidas en numerosas oportunidades por agentes de
la policía, los vecinos de la zona y sus clientes. Es por eso que, Micaela, y sus amigas mujeres
trans y travestis decidieron fundar una organización -la Asociación por los Derechos de las
Personas Trans, ADPT- para documentar y denunciar los abusos que enfrentaban.
15. Micaela había querido cambiar su apariencia física desde que era muy pequeña. En
junio de 2011, Micaela no tenía la edad mínima para acceder a los beneficios de la Resolución
13A/2010 emitida por el Ministerio de Salud, entonces, por referencia de otras mujeres trans,
comenzó a tomar pastillas anti-conceptivas por las hormonas femeninas que contienen.
Asimismo, comenzó a acudir a la casa de una mujer trans que llamaban “la doctora”, que era
conocida en la comunidad por lograr transformaciones corporales sin supervisión médica, por
medio de la inyección de hormonas, y de aceites como aceite de cocina, Johnson, aceite de
avión, silicón líquido, entre otros, obteniendo “buenos resultados”, es decir, sin ocasionar
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muertes. Micaela había escuchado de numerosas historias de mujeres trans que habían quedado
con graves afectaciones a su salud por acudir a estos procedimientos artesanales de
transformaciones corporales, e incluso de la muerte de varias de sus amigas, pero entendía que
era la única forma para poder conseguir modificar su apariencia de manera que ella quería para
que estuviera acorde con su identidad de género. Micaela mantiene sus genitales con los que
nació y siempre ha dicho que no desea cambiarlos mediante una operación de reafirmación de
género.
16. El 7 de diciembre de 2012, es decir el día siguiente de cumplir 18 años, Micaela acudió
a su primera cita con un médico psiquiatra con el objetivo de ser “evaluada” y poder obtener el
certificado médico-psiquiátrico de “disforia de género”, y así poder recibir tratamiento
hormonal suministrado y supervisado por el Estado, de conformidad con la Resolución
13A/2010 emitida por el Ministerio de Salud. Luego de varias citas y evaluaciones con el
psiquiatra durante varios meses, se le entregó su certificado de “disforia de género” el 19 de
julio de 2013. Al día siguiente Micaela acude a un centro de salud dependiente del sistema de
salud pública para acceder al programa de atención integral a personas trans, establecido por el
Ministerio de Salud que incluye la administración de hormonas para personas trans, en
procesos de administración supervisados por médicos especialistas. Ese mismo día comienza el
tratamiento hormonal bajo supervisión médica. Micaela tiene recursos económicos limitados, y
la única opción para que ella pueda obtener las terapias hormonales de una manera segura y
que no represente un riesgo para su salud, integridad personal o su vida, es a través del sistema
público de salud.
17. En abril de 2014, Micaela intenta volver a registrarse en una escuela pública para
terminar la preparatoria pero le niegan la inscripción. Micaela pide una reunión con el director
de la escuela para que le explique las razones de la negativa. Luego de varios intentos, logra
reunirse con el director, quien le indica que no podían corroborar que se tratase de la misma
persona que aparecía en su cédula, siendo que “el nombre, el sexo y el aspecto de [Micaela] en
su documento de identidad [era] masculino”, pero que personalmente Micaela era una persona
muy femenina, y que ello podría ser un trámite muy complicado para explicar al Ministerio de
Educación al momento de emitir el título. Micaela le explica al director de la escuela que ella es
una mujer trans, a lo que el director respondió que él no tenía ningún problema con que “fuera
así”, pero que además no iba a “encajar en la escuela”, y que los otros alumnos podrían “ser
muy crueles con [ella]”.
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18. El 9 de diciembre de 2014 Micaela acude a su centro de votación para ejercer su
derecho al voto en las elecciones parlamentarias. Cuando llegó al centro electoral, se percató
que habían dos filas diferenciadas de personas que asistían para votar: una fila marcada con el
letrero para hombres y la otra marcada con un letrero para mujeres. Micaela se puso en la fila
de mujeres. Cuando llegó su turno y presentó su cédula de identidad, el oficial de la mesa,
llamándola por su nombre masculino y haciéndolo con un tono de voz exageradamente alto de
manera que escucharon todas las personas que estaban alrededor, le dice “usted es un hombre y
tiene que venir como tal, de lo contrario le podemos acusar de suplantar a otra persona y
terminar detenido”. Micaela se molestó ante el trato recibido, comenzó a quejarse en voz muy
alta, gritando que se trataba de una injusticia, y acto seguido, fue sacada del centro de votación,
pues “representaba un peligro para las demás personas”. Micaela no pudo votar en las
elecciones parlamentarias.
19. Ante estas circunstancias, el 17 de enero de 2015, Micaela y su abogada presentaron
una solicitud de medidas cautelares ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos
(CIDH o Comisión Interamericana), con base en el artículo 25 del Reglamento de la CIDH.
En dicha solicitud, Micaela y su abogada requirieron a la CIDH que ordenara al Estado de
Sacayán “tomar todas las acciones políticas o legales que sean necesarias para que Micaela
Alejandra Marcano pueda ejercer sus derechos políticos, su libertad de expresión y su derecho
al libre desarrollo de la personalidad”. Tomando en consideración que dentro de los dos meses
siguientes, es decir, el 20 de marzo de 2015, se realizarían las elecciones presidenciales, la
Comisión Interamericana otorgó las medidas cautelares solicitadas mediante decisión de 31 de
enero de 2015. En este sentido, a través de su resolución pública, la CIDH requirió
específicamente al Estado de Sacayán que:
a. “Adopte las medidas necesarias para garantizar el pleno goce de los derechos de Micaela
Alejandra Marcano (registrada al nacer como Pablo Alejandro Marcano), de acuerdo a
estándares internacionales; e
b. informe sobre las acciones adoptadas a fin de investigar los hechos que dieron lugar a la
adopción de las presentes medidas cautelares”.
20. Luego de varias semanas, la Comisión decide remitir una solicitud de medidas
provisionales a la Corte Interamericana de Derechos Humanos, considerando el
incumplimiento con las medidas cautelares por parte del Estado. No obstante, el 17 de marzo
de 2015, la Corte Interamericana rechazó la solicitud de medidas provisionales, al considerar
que la situación presentada por la CIDH no reunía el requisito de extrema gravedad, de
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acuerdo a lo contemplado en el artículo 63.2 de la Convención Americana sobre Derechos
Humanos.
21. El 20 de junio de 2015, como resultado de una queja que había sido interpuesta por los
vecinos que viven en la Avenida Libertador el 8 de mayo de 2015, se inició una averiguación
previa en contra de Micaela (averiguación registrada oficialmente en contra de Pablo Alejandro
Marcano), por atentar contra las buenas costumbres y la moral pública, de conformidad con la
Ley de Policía y Tranquilidad Ciudadana. El 15 de agosto de 2015, se emite una orden de
captura en su contra, la cual para el 2 de septiembre de 2016 aún no había sido posible
ejecutar, ya que cuando se acudió al domicilio de la persona denunciada, no se encontró a un
hombre que respondiera al nombre de Pablo Alejandro Marcano.
III.
S OLICITUD
DE RECTIFICACIÓN DEL NOMBRE Y DEL COMPONENTE SEXO
EN LOS DOCUMENTOS DE IDENTIDAD
22. El 31 de marzo de 2015 Micaela contacta a la organización de derechos de personas
trans (RLT, Resistencia y Liberación Trans) que presta asistencia jurídica a las personas trans
sobre el procedimiento de rectificación del nombre y del componente sexo en los documentos
de identidad, establecido en el Código Civil. A partir de esa reunión con RLT, Micaela
empieza a recopilar todos los recaudos para presentar su solicitud. El 5 de octubre de 2015,
Micaela, con el acompañamiento de la organización que fundó (ADPT), y la asesoría de la
organización RLT, presentó su solicitud de rectificación de nombre y del componente sexo en
sus documentos de identidad, bajo las disposiciones establecidas en el artículo 135 bis y
siguientes del Código Civil, según las reformas de 2010, ante la Oficialía del Registro Civil
correspondiente a su domicilio. Micaela presentó los siguientes recaudos:
a. Solicitud por escrito de cambio de nombre a Micaela Alejandra, y de sexo (de
masculino a femenino), con la explicación de las razones que la fundamentan;
b. Copia certificada de la partida de nacimiento (que demuestra que es mayor de
edad) y copia del documento de identidad;
c. Comprobante médico de disforia de género por un médico psiquiatra,
certificado para ejercer en la República Federal de Sacayán y con especialidad en
disforia de género;
d. Comprobante médico que certifica que ha estado en proceso de administración
de hormonas desde hace más de dos años;
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e. Prueba de la estabilidad y persistencia de su identidad de género femenina,
desde los 16 años, a través de su declaración jurada, las declaraciones de cuatro
testigos y numerosas fotografías y videos, que comprueban su identidad
femenina; y
f. Oficio emitido el 8 de julio de 2015 por el Departamento de Policía donde se
indica que se le había iniciado una averiguación previa por atentar contra la
moral pública y las buenas costumbres.
23. A los 10 días de la presentación de su solicitud, la Oficialía del Registro Civil cita a la
solicitante a una entrevista. Durante la entrevista, celebrada el 4 de noviembre de 2015, el
Director del Registro Civil le pregunta directamente a Micaela si ella se ha sometido a una
operación de reasignación de sexo o de afirmación de su género femenino, a lo que Micaela
responde que quiere mantener sus genitales intactos. Micaela afirma durante su declaración que
es una mujer con pene, y que asume su identidad como mujer trans, y solicita que el Estado la
reconozca como tal, alegando los numerosos obstáculos que le genera en su vida no tener un
documento de identidad que la reconozca plenamente como quién es.
24. En la entrevista ante la Oficialía del Registro Civil Micaela reitera las razones por las
cuales necesita de manera urgente que el Estado le reconozca su identidad de género en sus
documentos, incluyendo (1) la afectación a su salud mental e integridad psíquica pues en
cualquier trámite administrativo que tiene que hacer las distintas entidades y autoridades siguen
refiriéndose a ella con su nombre y sexo masculino, y que además siempre es tratada como si
tuviera una patología o trastorno; (2) en los últimos dos procesos electorales no pudo votar; y
(3) se le ha negado también su registro en la escuela, razón por la cual no ha podido terminar
sus estudios de preparatoria. Micaela agrega que si bien la rectificación del nombre y del
componente sexo en sus documentos de identidad no solucionaría toda la situación de
discriminación, marginación y exclusión sistemática que enfrenta ella, como otras mujeres
trans, le permitiría acceder a algunos de sus derechos que están siendo violentados.
25. Tres días después de la entrevista, la Oficialía del Registro Civil solicita al departamento
de policía y a los juzgados penales información sobre “el estado actual de la investigación
abierta en contra de Pablo A. Marcano”. De acuerdo a la información que recibe la Oficialía se
evidencia que existe una orden de captura en su contra que no ha podido ser ejecutada.
26. El 6 de diciembre de 2015, la Oficialía del Registro Civil emite una resolución negando
la solicitud de rectificación del nombre y del componente sexo del documento de identidad
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presentada por Micaela, afirmando que “no podía llegar a la convicción definitiva que Pablo A.
Marcano quisiera vivir como mujer, considerando que si realmente lo quisiera, procedería a
hacer todo lo necesario para modificar su cuerpo de manera “completa” (sometiéndose a una
operación para construir una vagina), más aún si se trataba de una operación cubierta por el
sistema público de salud.” Asimismo, el Registro Civil indicó que en algunas de las fotos y
videos, “Pablo A. Marcano se encontraba sin maquillaje, con sombra de barba, con el pelo
corto y vestido de una manera que era consideraba a todas luces masculina”. En su resolución,
el Registro Civil también indicó que esto, aunado a la existencia de una investigación en su
contra, así como de una orden de captura sin ejecutar, le hacía pensar al Director de la Oficialía
del Registro Civil que “Pablo A. Marcano lo que quiere es evadir el sistema de justicia”.
27. A los dos días, Micaela interpone recurso de reconsideración ante la misma autoridad
que emitió la resolución, el cual le es negado el mismo día que es solicitado. Seguidamente
interpone un recurso de impugnación ante la Dirección General del Registro Civil, el cual es
negado dos días después de interpuesto, con base en los mismos argumentos esgrimidos en la
primera resolución. Agotada la vía administrativa, Micaela y su abogada de la organización
RLT, interponen el 15 de diciembre de 2015 un amparo contra la Dirección General del
Registro Civil, ante el Juzgado de Primera Instancia en lo Civil, por alegada violación de su
derecho a la vida privada, a la dignidad, a la integridad personal, al nombre, a la educación, a
sus derechos políticos, y el derecho a la no discriminación, pues el Estado no le había
reconocido su identidad de género. En su recurso, Micaela reiteró el impacto altamente
perjudicial en su vida, salud mental y bienestar que le ocasionaba la negativa estatal de
reconocerla como mujer.
28. El 5 de febrero de 2016, la Dirección General del Registro Civil presenta oposición al
amparo interpuesto por Micaela y su abogada, indicando que (1) el recurso es inadmisible pues
la recurrente contaba con la vía contencioso-administrativa; (2) que no se había configurado
violación alguna de sus garantías constitucionales, ya que la negativa de rectificación el nombre
y del componente sexo se había hecho luego de una evaluación de los elementos aportados para
el caso en cuestión, considerándose que no se cumplían con los requisitos establecidos en la ley;
y (3) que no existe en la Constitución ni en el derecho internacional de los derechos humanos
una obligación estatal de reconocer la identidad de género de las personas transgénero o
transexuales que no se han sometido a una operación de reasignación de sexo.
29. En su sentencia del 20 de julio de 2016, el Juzgado de Primera Instancia en lo Civil
declara parcialmente con lugar el recurso de amparo, otorgando la rectificación del nombre de
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Pablo Alejandro a Micaela Alejandra pero no el cambio del componente sexo en sus
documentos de identidad, al no estar suficientemente acreditado que Micaela “quiera ser
mujer, siendo que conserva sus genitales masculinos”. En su decisión, el juez desarrolla de
manera amplia el concepto del sexo como un componente biológico e inmodificable. El
Juzgado ordenó al Registro Civil que, además de la anotación en el Libro del Registro Civil
correspondiente, tachara el nombre “Pablo Alejandro” en su partida de nacimiento y colocase
encima de dicha tachadura el nombre “Micaela Alejandra”, haciendo referencia al número de
sentencia expedida. Micaela apela esta decisión, en tiempo y forma, la cual es luego conocida
por el Tribunal Constitucional.
30. Paralelamente, es importante resaltar que el 10 de agosto de 2016, el Ministerio de
Salud emite la Resolución 11C/2016 que indica que ha habido un recorte presupuestario y que
si bien las cirugías de afirmación del género continuarían estando cubiertas por el sistema
público, las terapias de administración de hormonas para personas trans ya no estarían cubiertas
de manera ilimitada, sino que pasarían a estar cubiertas por un período de dos años,
considerando el requisito relacionado establecido en el “Reglamento que Regula el
Procedimiento de Rectificación del Nombre y/o Componente Sexo Por Motivos De Identidad
de Género Diversa” modificado en 2010 para el reconocimiento de la rectificación de nombre
y del componente sexo en los documentos de identidad. El 15 de agosto de 2016 el centro de
salud pública al que acudía Micaela le indicó que ya no podría continuar cubriendo estos
servicios, ni su administración o supervisión médica. En virtud de ello, el 20 de agosto de
2016, Micaela, junto con su abogada, interponen una solicitud de medidas cautelares ante la
CIDH por la afectación a su salud e integridad personal que le ocasiona esta medida estatal. La
solicitud de medidas cautelares se encuentra pendiente de decisión por parte de la Comisión
Interamericana.
31. En ejercicio de las facultades atribuidas por el artículo 15 de la Ley de Amparo, la
Defensoría del Pueblo solicitó al Tribunal Constitucional que conociera del recurso de amparo
en vista de su interés y trascendencia. La Presidencia del Tribunal Constitucional decidió
aceptar el recurso y abrió a trámite el juicio de amparo, en apego al tiempo y forma establecidos
en el ordenamiento jurídico interno. Tras haber recibido los escritos de la Dirección General
del Registro Civil y de la organización RLT, representante legal de Micaela, el Tribunal
Constitucional convocó a las partes a participar en la audiencia pública, la cual tendrá lugar
entre los días 29 de agosto y 2 de septiembre de 2016.
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