FRASES DESTACABLES: “Con su sola presencia, aligeraba la pesadumbre del vivir” “Ella se hizo indispensable y no es fácil olvidarla” “Me sigo enamorando cuando la veo” “El artista no sabe quién le empuja, cuál es su referencia, por qué escribe o por qué pinta, por qué razón dejaría de hacerlo. En mi caso estaba bastante claro. Yo escribía para ella. Y cuando faltó su juicio, me faltó la referencia. Dejé de hacerlo, dejé de escribir, y esta situación duró años. En ese tiempo pensé a veces que todo se había terminado” "En el peor de los casos, yo he sido feliz 48 años; hay quien no logra serlo 48 horas en toda una vida". “Las mujeres como Ana no tienen derecho a envejecer” “En cualquier caso, yo deseaba ayudarla, aunque no dejara de advertir que era inútil tratar de restituir de golpe lo que uno ha recibido a lo largo de la vida.” “Todos pretendíamos imprimir un aire de cotidianidad al acto, cuando lo cierto es que existía tal tensión como si estuviéramos asistiendo a los preparativos para decapitarla” “Escuchaba a la puerta de su dormitorio circunstancial. No se oía nada; no rebullía, no roncaba, ni siquiera se la oía respirar. Una noche me asaltó la idea del suicidio y no me pude controlar; de una manera impensada, abrí la puerta y di la luz.” Una copa acartona el recuerdo, pero, al propio tiempo, convierte la onerosa gravedad de tu cuerpo en una suerte de porosidad flotante... pasado el trance, sobreviene el decaimiento. Es claro que son visiones producidas por el alcohol, pero me valen: ya no puedo vivir sin esas visiones; lo que nunca consiguió el alcohol es borrar el recuerdo de aquel beso de hielo sobre su frente muerta. “Entonces fue cuando descubrí la eficacia del alcohol ante el miedo insuperable. Pero había que dar con el punto, lo mismo que ahora, cuando me levanto. Yo sé que si bebo la dosis gusta, la veré ahí, con el vestido rojo del cuadro” “Intuyo que son visiones producidas por el alcohol, pero me valen: ya no puedo vivir sin esas visiones” “No hay que confundir la soledad con la falta de compañía. La primera la padezco como viudo fiel que he sido, pero no la segunda. Mi familia y mis amigos se desviven por atenderme. ¿Puedo quejarme yo de soledad?” “Yo mismo ignoraba como había solventado las dificultades que ahora veía resueltas en el cuadro. Me asombraba de mi propia maestría. Tan ajeno me sentía que de esas obras solía decir que las habían pintado los ángeles, que mi mano sólo había cernido de instrumento, de médium” “El estado de felicidad no existe en el hombre. Existen atisbos, instantes, aproximaciones, pero la felicidad termina en el momento en que empieza a manifestarse. Nunca llega a ser una situación continuada. Cuando no tienes nada, necesitas; cuando tienes algo, temes. Siempre es así. Total, que nunca se consigue”