Ocupación del espacio desde la época de la colonia a nuestros días

Anuncio
Ocupación del espacio
desde la época de la colonia a nuestros días
Forclaz, Héctor - Macarrein, Omar - Silva, Norberto - Paredes, Hilda
Facultad de Cs. Agrarias - UNNE.
Sargento Cabral 2131 - (3400) Corrientes - Argentina.
Tel./Fax: +54 (03783) 427131
E-mail: [email protected]
INTRODUCCION
El proceso de ocupación del territorio correntino por parte de la colonización, no encontró otro obstáculo que
su propia naturaleza, ya que sus antiguos habitantes los guaraníes en la mayor parte del territorio, no ofrecieron mayor
resistencia al dominio territorial y la aculturación.
El espacio correntino fue conocido y ocupado desde las primeras épocas de las colonias, primero por las
misiones franciscanas y jesuitas, trabajando con los indígenas y luego por el "blanco"; como una zona de paso y
abastecimiento entre Asunción y Buenos Aires y luego para contener el avance portugués sobre el río Uruguay.
Las tierras quedaron en manos de grandes terratenientes, pertenecientes a las familias patricias, oficiales del
ejercito o blancos que se habían asentado en lo que quedaba de las antiguas misiones jesuíticas.
La propia geografía y el período de aislamiento que la región mesopotámica sufrió por la falta de vías de
comunicación, hasta la década del 60 del siglo XX, fueron elementos que colaboraron para mantener el status quo de la
región.
Y, finalmente la falta de corrientes inmigratorias, que efectivamente realizaran un proceso de colonización y
dieran a la agricultura un valor económico que no tuvo hasta la mitad del siglo, fueron los distintos factores que
modelaron la distribución de tierras en la provincia de Corrientes.
OBJETIVO
Realizar un análisis de la historia de la distribución, tenencia y uso de la tierra en la provincia de Corrientes,
para interpretar su situación actual y sugerir alguna propuesta de reordenamiento territorial.
MATERIAL Y METODO
En base a un trabajo realizado por los Ingenieros Moulín, Macarrein y Altamirano, para el Ministerio de
Agricultura, Ganadería, Industria y Comercio de la Provincia de Corrientes, en 1990 y el libro de Historia Correntina de
Mantilla, se realiza la mayor parte del trabajo.
La metodología es descriptiva y se intenta extraer de la información existente una síntesis que permita
interpretar la ocupación del espacio correntino.
RESULTADOS
El Proceso Histórico de ocupación y adjudicación
Desde el momento de la Fundación por Juan Torre de Vera y Aragón en 1588, con la distribución de los
solares de la planta urbana de Corrientes, a partir de la plaza mayor, hoy 25 de Mayo y en la repartición de chacras y
estancias en la periferia, concretada por sus sucesores hacia finales de ese siglo y comienzo del XVII, comienza la
ocupación del espacio.
A partir del siglo XVIII, se acelera el trámite de ocupación y la acción colonizadora se extiende hacia el sur de
la ciudad de Corrientes, siguiendo la línea de estancias, que en forma preponderante se ubicaban a la vera del río Paraná
y en zonas altas de los caminos reales, que unían las incipientes poblaciones.
En el siglo XIX, mas precisamente en 1810 Belgrano se da inicio al poblamiento del área central y desde Entre
Ríos se acelera el poblamiento de las riberas del Uruguay.
Es decir que a mediados del XIX, con estas tres corrientes poblacionales, de la capital hacia el sur, del centro
y del río Uruguay aceleran los procesos de apropiación privada de la tierra en las finales de ese siglo y, a ello debemos
sumarle una mayor y más variada producción y comercialización agropecuaria.
Esto incentiva al Estado Provincial y Nacional a utilizar la tierra pública para obtener divisas y disminuir la
deuda, acrecentando la superficie de propietarios territoriales ya establecidos e incorporar otros.
En 1869 se dicta una Ley de venta de tierras públicas, a precios de fomento y con facilidades de pago,
destacándose que las mejores tierras fueron compradas por estancieros ya existentes.
La venta de tierra pública continuó en años posteriores por falta de recursos en el erario público y por la propia
presión de los hacendados para acaparar mayores superficies y esto dio origen ha que el 90% de la superficie de la
provincia, fuera propiedad de no más de 100 familias. Esta tendencia indicó que para los comienzos del siglo XX, ya
era muy poca la tierra sin registro privado.
El Proceso Histórico de formación de colonias
La entrega de tierras fiscales a productores pequeños y medianos, concretada a través de la creación de
colonias dio comienzo en la segunda mitad de siglo XIX, con la paradoja que en muchos casos se debían comprar
tierras para los asentimientos a precios mucho más elevados que el valor de mercado, siendo que en el mismo período y
por ley ofrecía tierras a precios de fomento.
En ese marco podemos distinguir tres períodos de distribución de tierra pública o colonizada. El primero, que
realiza mayor distribución de tierra - 60.150 has.-, se extiende entre 1868 y 1895. En el 81 la Legislatura Provincial
toma como la Ley Avellaneda, para celebrar sus contratos de colonización.
La primera Ley provincial de colonias se dicta en 1883, siendo su principal finalidad la fundación de centros
agrícolas y favorecer la inmigración, finalidad no alcanzada.
El segundo período abarca de 1903 a 1929, con una superficie total "colonizada" de 35.961 has. Las
dificultades mencionadas como marco del proceso, obligó en este período a las autoridades provinciales a sancionar una
Ley en 1928, que fue el instrumento legal de inenagenabilidad o exención de venta forzada a causa de deudas u
obligaciones de cualquier naturaleza. Incluía también la prohibición de división de bienes por deceso de un cónyuge
hasta que el hijo menor haya alcanzado la mayoría de edad.
El tercer período se extiende entre 1944 y 1983, distribuyéndose 45.874 has., en 9 departamentos, teniendo
gran incidencia la recolonización de los ex campos Sarpa, en el triángulo noroeste provincial.
Estos procesos de colonización tuvieron sistemáticamente los mismos inconvenientes, no considerando la
capacidad de uso de los suelos, superficie necesaria para una mínima evolución familiar y la distancia a los centros de
consumo. Además los procesos inmigratorios solamente lograron que un grupo reducido de italianos se asiente en
Goya, Lavalle y Bella Vista.
Es necesario destacar que las propias características de la sociedad de entonces no favorecía el ingreso del
inmigrante europeo, más en áreas rurales.
Tamaño y cantidad de explotaciones
La provincia tiene rangos o estratos establecidos a los efectos de ordenar mejor los análisis y que son:
a- De hasta 25 hectáreas
b- De 26 a 100 hectáreas
c-
De 101 a 1000 hectáreas
d- De 1001 a 5000 hectáreas
e-
De más de 5000 hectáreas
De acuerdo a las explotaciones censadas en los distintos años y con la salvedad de que ha habido
evidentemente distintos objetivos, criterios, formas de realización y sistematización de datos censales, se presentan los
siguientes valores:
Año
Explotaciones
Sup. Total Has.
1914
1969
1974
1983
1988
10.054
25.855
28.157
27.597
22.183
7.693.230
7.379.000
7.425.357
7.026.296
6.569.457
Lo que resulta importante es como se distribuyen esas superficies y explotaciones de acuerdo a la escala
precedente es que las explotaciones de menos de 25 has., representan alrededor del 60 %, abarcando una superficie de
aproximadamente el 1,4 % del total provincial y siendo la media en el tamaño de las explotaciones de 8,5.
En el estrato de hasta 100 has., están alrededor del 20 % de las explotaciones, con una media de 54 has.
En las de hasta 1000 has., su representación es de 14 % con una media que se ha mantenido a través del tiempo
en 335 has.
Hasta las 5000 has., las explotaciones representan alrededor del 4 %.
En el estrato de explotaciones que superan las 5000 has., 308, equivale al 1,1 % y representa un 44 % de la
superficie correspondiente al territorio.
Un dato general a destacar es que alrededor del 5 % de las explotaciones agropecuarias de la provincia son las
propietarias de mas de cinco millones y medio de hectáreas, es decir más del 75 % de la superficie total.
Régimen de tenencia de la tierra
Si realizamos la comparación ente los años 1914 y 1983 de propietarios podemos observar que en el primer
año considerado era del 63 % de participación, decayendo en el 83 a un 44 %, y en el caso de la categoría no
propietarios pasa del 37 % en el 14, al 56 % en 1983.
Uso del suelo en actividades productivas
La alta proporción de pequeñas explotaciones que desarrollan actividades agropecuarias, en la mayoría de los
casos se podría decir que no cubren lo que sería una unidad económica en producción a cielo abierto, para lograr algún
tipo de evolución. Pero no hay que confundir que solamente la superficie haya sido un factor limitante, sino que otros
como capacidad para el uso de tecnología alternativa, asesoramiento, capacidad asociativa, comunicación, distancia.
Agregarle la falta de legislación y aplicación en la subdivisión de parcelas por cuestiones sucesorias, lo que han
producido una mayor pulverización de las superficies.
Como contrapartida ha existido y existen grandes extensiones de campo en propiedad de pocas personas,
generalmente de uso ganadero, con poca aplicación de tecnología, proceso que sé esta revirtiendo en las últimas
décadas.
Es necesario destacar el alto porcentaje de no propietarios - 37 % - haciendo uso de tierras, donde participan
cultivos como algodón, tabaco y arroz; genera el inconveniente de la conservación de los recursos, ya que no se rigen
por norma alguna, son simples contratos entre partes, y el perjuicio si se genera puede afectar los campos linderos o la
zona inclusive.
Se puede establecer una relación entre el régimen de distribución, la tenencia de la tierra y uso del suelo, donde
podemos agrupar los departamentos sobre la base de determinadas características productivas:
-
Un primer grupo que abarca dos áreas:
"Area tabacalera" y "Área algodonera". Con alto porcentaje de no propietarios haciendo uso del suelo,
particularmente minifundistas, lindando con grandes explotaciones dedicadas a la cría extensiva de ganado.
- Un segundo grupo de departamentos caracterizados por la predominancia de explotaciones dedicadas a la ganadería
bovina-ovinaos. Con alto porcentaje de propietarios.
Un tercer grupo que incluye las áreas citrícolas, yerbatera , tealera l. Propietarios con cultivos perennes, alto
porcentaje de medianas explotaciones.
-
Un cuarto grupo dedicado a la cría extensiva de bovinos y forestación.s Libres. Con predominio de propietarios
La producción arrocera está presente en la mayoría de los departamentos, con alto porcentaje de
arrendamientos y la producción de hortalizas y flores, se realiza en los departamentos ubicados al noroeste del río
Corrientes.
DISCUSION
Si podríamos ubicar en un plano todos los mapas catastrales, se observaría grandes propiedades mechadas con
superficies de predios, que en determinadas zonas, se podría denominar sin exageración pulverizados.
Si ha ello le sumamos que nuestros ríos, lagunas y esteros, no son accidentes geográficos de pequeña escala y
que dividen la provincia en tres zonas con características propias; una nor occidental, una nor oriental y una sur. En
ninguna de ellas el uso del suelo para la producción agropecuaria, puede realizarse en pequeñas superficies con un
manejo tradicional.
Que no existen leyes o al menos no se aplican, en la división de previos, limitando una superficie mínima
indivisible, teniendo presente además que en la actualidad se cuenta con un mapa de suelos que para el caso sería de
gran utilidad, ya que indica condiciones de uso de cada tipo de suelos.
Esta condición perjudica económicamente propietario de pequeñas superficies, también le condiciona la vida
familiar y social, ya que a través del tiempo el aumento del núcleo familiar, se transforma en limitante para el
mantenimiento de necesidades básicas del grupo, con la actividad.
También está relacionado lo precedente, como uno de los motivos más importantes del éxodo rural, que origina
el despoblamiento del campo. En esta región particularmente, también afecta la mano de obra rural, ya que es difícil
conseguir del tipo calificada.
Por lo precedente, se puede observar que la discusión de un posible reordenamiento territorial, debería
plantearse en una primera instancia, desde el ordenamiento de los predios pequeños. Y el porqué esta dado en la escasa
o nula utilidad que le prestan a sus propietarios como medio de subsistencia. Y desde la conservación de los recursos
naturales, se evitaría el efecto "recolector", de este tipo de población, en los espacios linderos.
Lo expresado no significa que las grandes explotaciones o propiedades no tengan que ser reanalizadas con
diferentes criterios, ya sea económico, ambiental o social, por el solo hecho de la propia escasez de tierras; pero al
menos por el momento y desde la perspectiva de este análisis, no genera otra dificultad que su falta de uso.
Lo que es de destacar, el alto porcentaje de explotaciones que son trabajadas por no propietarios, sin
legislación que proteja los elementos naturales y que puede transformarse en una condición riesgosa. Expresándose de
esta manera por no disponer de datos concretos de afectación de suelos y vegetación, aunque son de conocimiento
público los problemas en determinadas zonas con el arroz.
CONCLUSIONES
La desordenada ocupación del territorio merece ser reanalizada, para que los futuros cambios de propiedad que
puedan ocurrir, se realicen bajo algún tipo de ordenamiento.
Deben existir leyes que permitan la subdivisión a un limite, de acuerdo a la capacidad de uso del suelo que se
trate.
BIBLIOGRAFIA
- MANTILLA, M; 1972. " Crónica Histórica de la Provincia de Corrientes. I.S.A.G.
- RAMIREZ, J; MOULIN, R; MACARREIN, O; ALTAMIRANO, H; 1990. "Análisis y Diagnóstico del Sector
Agropecuario y Forestal". Tomo II. Ministerio de Agricultura, Ganadería, Industria y Comercio. Pcia. de Corrientes.
- ROCCATAGLIATA, J; 1998. "La gestión del territorio en el nuevo contexto". Buenos Aires
Descargar