Entrevista a Francisco Arteaga, (AD-1, Sevilla, 98) Director general de Endesa en Andalucía y Extremadura “ Ser competitivos es una obligación permanente de la empresa” Francisco Arteaga nació en Sevilla, el 21 de agosto de 1960. Licenciado en Ciencias Económicas y Empresariales por la Universidad de Sevilla, pasó por las aulas de San Telmo cuando decidió, en 1998, cursar el AD-1. Ejerció como auditor en la firma Price Waterhouse hasta que ingresó en Sevillana de Electricidad en 1986 donde ha desempeñado distintos cargos, llegando a ocupar la Dirección Económica-Financiera de Sevillana Endesa. En 1999 fue nombrado Subdirector General del Negocio de Distribución de Endesa, puesto en el que se responsabilizó de la constitución de Endesa Red y de la integración societaria de las distribuidoras de Endesa en España. También ha sido Administrador de Endesa Distribución Eléctrica, y consejero de Endesa Energía. Actualmente es miembro del Comité Ejecutivo de la Confederación de Empresarios de Andalucía, de la Cámara de Comercio de Sevilla y de los consejos de administración de Eléctrica de Cádiz, Electricidad de Puerto Real y Endesa Network Factory. El pasado mes de marzo, fue nombrado Director General de Endesa en Andalucía y Extremadura. Mamen Gómez [email protected] Hace sólo unos meses que asume la dirección de Endesa en Andalucía y Extremadura. ¿Cómo ha asumido esta nueva etapa y qué objetivos persigue? La he asumido como un gran reto profesional y con el deseo de contribuir a trabajar cada vez mejor para la sociedad a la que servimos. He tomado el relevo de personas que han tenido en nuestra compañía una gran relevancia profesional y personal como ha sido, en la última etapa, José Antonio Martínez, lo que supone para mí una gran responsabilidad, al tiempo que un gran orgullo. Por otra parte, en cuanto a lo personal se refiere, volver a Sevilla me ha hecho mucha ilusión. He estado residiendo en Madrid durante diez años, donde también he vivido una etapa muy bonita a todos los niveles, aunque me apetecía 50 empresas y empresarios volver a mi tierra natal. Si a este último aspecto, le unes, además, el hecho de ocupar el cargo de máxima responsabilidad ejecutiva en Sevillana Endesa, se convierte en un sueño aún mayor, teniendo en cuenta que, profesionalmente, me permite afrontar unos retos muy apasionantes. En esta misma línea y haciendo alusión a estos retos u objetivos, me gustaría señalar varias ideas que persigo. La primera, dar continuidad y potenciar lo mucho y bueno que se ha hecho hasta ahora. Existe un bagaje de trabajo, de buen hacer y de profesionalidad que hemos recibido y que tenemos que cuidar e incrementar. En segundo lugar, no hay que acomodarse, sino tener ambición y aspirar a hacer una aportación adicional, mediante una visión de empresa que no sólo ha alcanzado grandes metas, sino santelmo 33 // junio 2009 que todavía tiene un camino importante por desarrollar. Y en tercer lugar, no hay duda de que Endesa en Andalucía y Extremadura ha hecho una gran labor en estos años para conseguir que los índices de calidad del servicio eléctrico en Andalucía sean equiparables al de las regiones europeas más desarrolladas. Considero importante hacer llegar esta realidad a la sociedad por lo que seguiremos dedicando nuestros mayores esfuerzos para integrarnos e implicarnos más en la sociedad en la que estamos presentes. ¿Cree, por lo que me comenta, que Endesa no tiene buena imagen? No, lo que sucede es que existe, como he dicho anteriormente, un gran desconocimiento. Nuestro negocio sólo se nota cuando algo no funciona. Na- die dice: “que bien, hay luz, funciona el ordenador”. El uso de la electricidad es algo tan cotidiano, que muy pocas personas se cuestionan lo que supone llegar con electricidad, en el caso de Andalucía, a más de cinco millones de puntos de suministro. En cambio, sí transciende cuando hay algún elemento que falla, una incidencia en el suministro. En la línea de lo que me comenta, quizás muchos sevillanos tengan aún en su retina los apagones que sufrieron en el 2004 ¿En la actualidad, está la red bien preparada para soportar “las puntas” de verano o, por el contrario, habrá también apagones? A lo largo de la historia de nuestra empresa, las incidencias que ha habido en el suministro eléctrico, rara vez han sido derivadas de falta de capacidad. En la inmensa mayoría de los casos, han sido provocados por fenómenos atmosféricos extremos, excavadoras o impactos de terceros en nuestra propia red. No obstante, en algunos casos puntuales, como el que se refiere a lo ocurrido en 2004, la demanda se incrementó muy por encima de las previsiones oficiales más optimistas, y se saturaron puntualmente algunas instalaciones, produciendo molestias a los ciudadanos, aunque mucho más leves que los grandes incidentes que por aquel entonces se produjeron en países como Italia o Estados Unidos. No obstante, en la actualidad, estamos perfectamente preparados para la época estival. Hemos hecho un esfuerzo inversor enorme que nos permite tener una capacidad que duplica la que teníamos hace escasamente cinco o seis años, teniendo, por consiguiente, una red mucho más robusta que en el pasado. Por otra parte, la demanda está bajando, con lo cual el uso de las instalaciones es menor y nos permite tener mucha más holgura. Además, hemos dotado a la red de un centro de control único y hemos intensificado labores de mantenimiento preventivo, lo que ha permitido una bajada de más del 50% del tiempo de interrupción. ¿Considera que Endesa invierte lo suficiente en Andalucía? El plan Alborada, que se puso en marcha en el periodo comprendido entre el 2004 al 2008, supuso en la red andaluza una cantidad de recursos, tanto económicos como de capacidad eléctrica, sin precedentes en la historia del sector eléctrico de la Región. Además de eso, seguimos apostando por este santelmo 33 // junio 2009 empresas y empresarios 51 Endesa en Andalucía y Extremadura ha hecho una gran labor en estos años para conseguir que los índices de calidad del servicio eléctrico en Andalucía sean equiparables al de las regiones europeas más desarrolladas. proceso inversor, de forma que las inversiones que tenemos previstas representan un crecimiento de nuestro activo que triplica el aumento de la demanda. Por tanto, considero que nuestro nivel inversor es más que suficiente. El 1 de julio entra en marcha la plena liberalización del sector. ¿Qué cree que va a ocurrir? Ya hace varios años que comenzó este proceso. Los grandes clientes tienen el derecho a elegir suministrador desde 1999 y los clientes domésticos desde, prácticamente, el año 2003. Lo novedoso del 1 de julio es que todos los consumidores tendrán que contratar la electricidad con un suministrador. De cualquier modo, habrá muchas personas que, por falta de información o tiempo, no lo hagan. En este caso, pasarán automáticamente a la tarifa de último recurso (TUR) encomendada a las comercializadoras vinculadas a los grupos actualmente existentes, que en el caso de Andalucía es Endesa. En cuanto a mi opinión sobre lo que puede ocurrir, es muy probable que en el mercado residencial doméstico haya muy poca propensión al cambio de suministrador, por varias razones. La primera, por falta tiempo o información y, en segundo lugar, porque el margen de mejora del precio es muy limitado, ya que resulta complicado bajar los precios al cliente final, cuando existe un déficit de partida. Además, el consumo doméstico en un hogar andaluz está por debajo de los dos euros al día, un precio muy bajo que no motiva a buscar otras ofertas. En este sentido, ¿tenéis previsto una nueva estrategia para ser más competitivos? Para nosotros, ser competitivos es una obligación permanente de la empresa, ahora y siempre, que se traduce en ser más eficientes, en tener unos costes menores y, por supuesto, en no quedarse fuera del mercado. Con lo cual, apostamos por la eficiencia por vocación y con el convencimiento de que es una exigencia empresarial, independientemente del contexto económico en el que nos encontremos. De cara a los nuevos retos del mercado liberalizado en Endesa, disponemos del mejor equipo de profesionales, la experiencia, la vocación de servicio y la capacidad para ofrecer lo que mejor se adapte a nuestros clientes. 52 empresas y empresarios santelmo 33 // junio 2009 He leído recientemente que Endesa ha cerrado el primer trimestre de 2009 con una bajada del 2.9% de la energía suministrada y un beneficio neto de 509 millones de euros en el primer trimestre de 2009, inferior en 153 millones de euros respecto del obtenido en el mismo periodo del año anterior ¿Ha obligado esta crisis a frenar las inversiones? ¿Qué medidas piensan tomar? La demanda no sólo ha bajado casi un 3% en el primer trimestre, sino que ha seguido bajando y, hoy por hoy, estamos con una reducción a nivel peninsular del 6%, aproximadamente. Con lo cual, es evidente que el consumo eléctrico en España ha disminuido drásticamente. Lo que si puedo afirmar es que estamos soportando razonablemente bien esta situación de crisis, porque, afortunadamente, los impactos que hemos tenido por reducción de ingresos estaban siendo compensados, en gran parte, con medidas de ahorro ahorros de costes que estamos implantando progresivamente en todos los campos de nuestra actividad. Las medidas que ya se han tomado se orientan fundamentalmente a seguir profundizando en los planes de eficiencia, incluso, incorporando planes de sinergias, derivados de la colaboración con Enel, nuestro accionista de referencia. Por otra parte, ¿ha concluido ya la “refacturación” por errores en los recibos? Realmente, ¿en qué ha consistido? En primer lugar, me gustaría señalar que no ha habido errores en los recibos, sino que, en todo momento, lo que se ha hecho es llevar a cabo una aplicación estricta de la legislación vigente. De hecho, las empresas eléctricas ya advertimos cuando se publicó la nueva normativa que nos obligaba a facturar mensualmente, que se debían establecer los criterios de estimación. Al final hemos “refacturado” a 2,6 millones de clientes, atendiendo a los criterios que nos marcó la Junta de Andalucía, con una devolución media de 0,49 céntimos por factura. El diferencial, sumados los impuestos, ha sido de dos millones de euros, aunque quiero precisar que ese dinero no ha ido a parar a las cuentas de Endesa. Nosotros somos recaudadores, lo ingresamos en las arcas totales y es la Administración quién reliquida y distribuye el dinero entre los distintos agentes. Sin embargo, los costes en que hemos incurrido, se elevan a más de 6 millones de euros. Este coste viene de los refuerzos de plantilla, con trabajadores eventuales para atender dudas y reclamaciones de clientes, sobrecostes por emisiones de nuevas facturas y cartas informativas, de los centros de atención telefónica que se tuvieron que duplicar, etc. Por tanto, el esfuerzo económico que ha habido que hacer ha sido muy desproporcionado respecto a las causas que lo motivaron. Sin lugar a dudas, esto ha tenido un impacto muy negativo, tanto en nuestras cuentas de resultados, como en nuestra imagen. Según el protocolo de Kyoto, se han endurecido las emisiones de CO2, especialmente en el sector energético. ¿Qué medidas están tomando para cumplir las exigencias establecidas? El sector eléctrico es sólo una parte del sector energético y de los sectores que pueden, de alguna manera, generar emisiones a la atmósfera. Pero, al final, hay una demanda de energía que hay que cubrir con las fuentes disponibles. La sociedad ha tomado conciencia de que los combustibles fósiles, en su sistema de combustión tradicional, tienen una emisión determinada, y le ha exigido a las administraciones y a las empresas que tomen medidas para limitarlas o reducirlas al mínimo posible. La cuestión es cómo se puede lograr esto. En primer lugar, reduciendo el consumo energético, mediante el uso racional y eficientemente de la energía. En segundo lugar, lo que se pretende es que cuando se recurra a sistemas de producción de energía con emisiones, se mejoren esos sistemas, incrementando la eficiencia energética. En tercer lugar, cambiando el mix de producción, incorporando para ello tecnologías basadas en energías sin emisiones. No obstante, el problema de estas energías renovables y limpias es, por un lado, la disponibilidad de la garantía de suministro y, en segundo lugar, el coste económico, ya que pueden llegar a ser ocho o diez veces más caras de producir que la energía convencional. Evidentemente, todos apostamos por las energías renovables, pero tenemos que pensar si eso es sostenible, desde el punto de vista de la factura eléctrica. Al final, lo más responsable es hacer un mix adecuado entre las distintas fuentes energéticas. En el caso de Endesa, se trata de una empresa que, efectivamente, tiene fuentes de generación de muy distintos tipos, y un mix energético equilibrado, responsable y racionalmente limpio. Ahora que Endesa es italiana, ¿mantendréis el mismo planteamiento estratégico? Endesa es andaluza en Andalucía, extremeña en Extremadura, española en España y multinacional desde hace ya muchos años. El hecho de que Enel, nuestro accionista mayoritario, sea una empresa eléctrica, nos da gran confianza y la seguridad de que se van a obtener muchos beneficios de esta colaboración. Evidentemente, estamos en un grupo empresarial que tiene dimensión, no sólo europea, sino mundial y eso nos permite acceder a los mercados multinacionales, tanto de materias primas como de fuentes energéticas, con una capacidad de compra y de negociación mucho mayor. Por otra parte, Enel es una empresa muy sensible a la idiosincrasia de cada mercado en el que opera, teniendo una relación fluida con los ciudadanos y con las autoridades que lo representan. Por lo tanto, estoy convencido de que la integración o la participación de Endesa dentro de ese gran grupo no va a traer consigo una pérdida de identidad y de vinculación con el terreno. santelmo 33 // junio 2009 empresas y empresarios 53