PROYECTO DE DECLARACION AUTOR: Senadora María Inés

PROYECTO DE DECLARACION
AUTOR: Senadora María Inés Fagetti (PJ- Frente para la Victoria)
TEMA: Declarar el beneplácito por la Aprobación de la Resolución N°
68/304 de la Asamblea General de Naciones Unidas en la que se
establece la prioridad de la construcción de un marco legal regulatorio
para la reestructuración de deudas soberanas.
FUNDAMENTOS:
Desde hace más de una década, la República Argentina junto a otros
países miembros de Naciones Unidas, venían reclamando en el seno de
ese Organismo Multilateral, la necesidad de construir un marco jurídico
regulatorio de los procesos de reestructuración de deuda soberana.
Año tras año, Argentina ha reclamado en los plenos de la Asamblea
General de Naciones Unidas que la ausencia de legislación internacional
que regulara los procesos de reestructuración de la deuda de un Estado
soberano, era la situación propicia para la acción especulativa de
capitales financieros (fondos buitres), cuyo mecanismo de acumulación
se basa exclusivamente en la especulación financiera.
En estos días, ha quedado perfectamente visible que el vacío legal que
daba lugar a los reclamos de la República Argentina no estaba cubierto
por la comunidad internacional debido a fuertes lobbys de los capitales
especulativos, como también de países que constituyen las plazas
financieras más importantes, en las cuales precisamente se negocia la
deuda externa de los Estados.
En momentos en que Argentina está siendo fuertemente atacada por
los fondos buitres, mediante sentencias amañadas obtenidas en la
justicia de Estados Unidos, impidiéndole cumplir con sus compromisos
de pago de la deuda externa, buscando claramente hacer caer las
restructuraciones conseguidas en los años 2005, y 2010, resulta muy
satisfactoria la solidaridad de la mayoría de los países del mundo.
Esta solidaridad, quedó expresamente manifestada en la histórica
sesión del 9 de Septiembre de 2014, cuando a instancias de una
presentación del Grupo G77 + China, del cual la Argentina forma parte,
fue tratada y aprobada por amplia mayoría ( 124 votos positivos, 11
votos negativos y 41 abstenciones) en la Asamblea General de Naciones
Unidas, la Resolución N°68/304, que establece la prioridad para esa
Asamblea la construcción y el tratamiento de una Convención que
contenga un marco jurídico multilateral para la reestructuración de las
deudas soberanas.
La importancia histórica de esta sesión de Naciones Unidas, y en
especial de la Resolución N° 68/304, reside no sólo en el reconocimiento
de la necesidad de cubrir la ausencia de regulación en materia de
reestructuración de deuda soberana, sino por varios motivos, todos de
igual significación.
En primer lugar, es de enorme importancia el hecho de que se pudiera
lograr que la ONU tratara el tema, ya que se trata de la instancia más
democrática del sistema multilateral, y por lo tanto la más legítima,
donde cada Estado representa un voto, independientemente del volumen
de su economía, del armamento con que cuenta, de su población o
extensión de su territorio, y no en los organismos financieros
internacionales como el FMI, donde resulta clara la preeminencia de los
intereses de los pocos países más poderosos.
En segundo lugar, y en directa relación con el punto anterior, la
conceptualización de que la deuda externa de los países, no constituye
un problema estrictamente financiero, sino que se trata de una cuestión
política, económica y social, que tiene que ver con el crecimiento, con el
desarrollo sostenible y con los derechos humanos de los países.
En tercer lugar, el juicio valorativo que la Resolución hace, en su parte
considerativa, sobre los fondos buitres, dejando en claro la actitud
depredatoria hacia las sociedades que tiene la especulación financiera,
permitida por la ausencia de regulación, y que por lo tanto el marco
legal que se pretende sancionar debería dejar esas acciones
especulativas fuera de la ley.
Y finalmente, lo más relevante es sin dudas que no se trata de una
norma internacional meramente declarativa, ni enunciativa, sino que
por el contrario le fija la clara responsabilidad a la Asamblea de dar
prioridad al tratamiento del tema y establece plazos muy definidos para
avanzar en la construcción del texto que finalmente será acordado y
aprobado como Convención.
Al igual que cuando fueron aprobadas las Convenciones sobre los
derechos humanos, sobre la protección de la infancia, o sobre la
regulación de las armas nucleares, entre muchísimas otras, debemos
reconocer la trascendencia del momento actual en la historia del
multilateralismo, que ha tenido una señal muy fuerte a través de la
Resolución N°68/304, de 124 países contra 11, expidiéndose en el
sentido de la búsqueda de un mundo más justo y en contra de “la ley
del más fuerte.”
POR ELLO
LA HONORABLE CAMARA DE SENADORES
DE LA PROVINCIA DE CORRIENTES
DECLARA
Su Beneplácito por la aprobación por amplia mayoría,
de la
Resolución N° 68/304 emitida por la Asamblea General de Naciones
Unidas, en la histórica sesión del día 9 de Septiembre de 2014, a
instancias del Grupo G-77 más China y de la República Argentina como
integrante de ese bloque, que establece -como prioridad de esa
Asamblea- la construcción de un marco jurídico multilateral que regule
los procesos de reestructuración de deuda soberana; entendiendo dicha
Resolución el reconocimiento de las Naciones Unidas como el ámbito
legítimo y democrático donde debe tratarse el tema de la deuda, así
como el derecho soberano de los Estados a negociar sus deudas libres
del ataque del capital financiero especulativo, causa que venía siendo
reclamada por nuestro país, en conjunto con otras naciones, desde hace
más de una década.