Tema Gratuito Jurídico - Derecho Civil Mexicano, Raquel Sandra

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El hecho y el acto el acto jurídico, conforme a la sistematización de la Teoría francesa y
alemana
Dra. Raquel Sandra Contreras López 1.
Índice.- I.- El hecho jurídico en sentido amplio. II.- Sistematización del hecho jurídico en sentido
amplio, tanto en la doctrina francesa como en la alemana. III.- Distinciones fundamentales entre la
Teoría francesa y la Teoría alemana, del hecho jurídico en sentido amplio o lato sensu, y su
regulación en el Derecho civil mexicano.
I.- El hecho jurídico en sentido amplio.
El hecho jurídico como categoría conceptual, tiene un significado en sentido amplio, en el que
se puede comprender a todo fenómeno de la naturaleza o conducta humana, que el legislador
considere para atribuirle consecuencias jurídicas. De ahí, que el hecho jurídico como género
jurídico tenga dos grandes especies, el acto jurídico y el hecho jurídico en estricto sentido.
Ahora bien, en el conocimiento y estudio de la categoría conceptual hecho jurídico en su
sentido amplio, hay en la doctrina dos corrientes: La francesa y la alemana.
A.- En la doctrina francesa. El conocimiento y estudio del hecho jurídico como categoría
conceptual o en un sentido amplio, surge a partir de la creación del Código civil de los franceses de
1804, o conocido también, como Código Napoleón.
B.- En la doctrina alemana. Inicia este estudio y conocimiento del hecho jurídico a partir del
Código alemán.
II.- Sistematización del hecho jurídico en sentido amplio, tanto en la doctrina francesa como
en la alemana.
Ahora bien, la doctrina francesa como la alemana, al hacer el estudio y comprensión del hecho
jurídico en un sentido amplio, comprenden en él a todo evento o fenómeno de la naturaleza o
conducta del ser humano lícita o ilícita que el legislador de cada época y lugar considera para
atribuirle efectos jurídicos, y por lo tanto, comprenden como especies de este fenómeno jurídico a
los actos jurídicos y a los hechos jurídicos en un sentido estricto. Sin embargo, las dos doctrinas son
divergentes en el análisis que hacen una y otra, de la especie, ACTO JURÍDICO.
A.- El hecho jurídico en sentido amplio en la doctrina francesa.
En la doctrina francesa el hecho jurídico en lato sensu, se clasifica en la especie a).- Acto
jurídico, unilateral y bilateral, y en la especie b).- Hecho jurídico en sentido estricto, el que
subdivide a su vez en: Conductas o hechos del ser humano, que pueden ser tanto lícitos como
ilícitos, y en eventos o hechos de la naturaleza. Lo anterior, se puede apreciar mejor en el siguiente
cuadro sinóptico:
1
Cfr. Para el presente tema, la tercera obra de Raquel Sandra Contreras López, intitulada Derecho Civil.
Derecho de Personas y Teoría Integral del Acto Jurídico. Editorial Porrúa. México, D.F. 2016.
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De acuerdo con Bonnecase(2) , el acto jurídico es:
“…una manifestación exterior de voluntad, bilateral o unilateral, cuyo objeto directo es
engendrar, fundado en una regla de Derecho o en una institución jurídica, en contra o a
favor de una o varias personas, un estado es decir, una situación jurídica permanente y
general, o por el contrario, un efecto jurídico limitado que se reduce a la formación,
modificación, o extinción de una relación de derecho.”
Conforme al anterior concepto, el autor Ernesto Gutiérrez y González( 3), propone su concepto
en los siguientes términos:
“…La conducta del ser humano en que hay una manifestación de voluntad, con la intención
de producir consecuencias de derecho, siempre y cuando una norma jurídica sancione esa
manifestación de voluntad, y sancione los efectos deseados por el autor.”
En cuanto al hecho jurídico en sentido estricto, Gutiérrez y González(4) lo define como
“…Una manifestación de voluntad que genera efectos de derecho independientemente de la
intención del autor de la voluntad para que esos efectos se produzcan, o un hecho de la
naturaleza al que la ley vincula efectos jurídicos.”
2
BONNECASE, Julien. Elementos de Derecho Civil. Trad. Lic. José M. Cajica Jr. Tomo II. Derecho de las
Obligaciones de los Contratos y del Crédito. Cárdenas Editor Distribuidor. Tercera Reimpresión. México, D.F.
2002. P. 223.
3
GUTIÉRREZ Y GONZÁLEZ, Ernesto. Derecho de las Obligaciones. Vigésima Primera. Edición adicionada
y puesta al día por Raquel Sandra Contreras López. Editorial Porrúa. 2015. Apartado 79. P. 109.
4
Ibídem. Apartado 86. P.112.
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Por lo anterior, el hecho jurídico en sentido estricto tiene dos especies: Por conductas del
ser humano y eventos de la naturaleza. En el primero de los supuestos, por conductas del ser
humano, la doctrina francesa, la subclasifica en: a).- Hechos o conductas lícitas, y b).- Hechos o
conductas ilícitas. Las segundas a su vez, se subclasifican, en civiles y penales.
De donde resulta que, el legislador de cada época y lugar, considera ciertas conductas del ser
humano, en las que en forma independiente de la existencia de voluntariedad en ellas en producir
los efectos que se generan con su conducta, el legislador, en el supuesto de darse la conducta,
determina ciertos efectos jurídicos.
Como un ejemplo de las primeras, se tiene el supuesto de la gestión de negocios, hipótesis
normativa en la que el legislador dispone efectos jurídicos, independientemente, de que el gestor de
negocios y el dueño del asunto, desee las consecuencias previstas en la ley. Como ejemplos de las
segundas, se tiene a los ilícitos civiles y penales.
En cuanto a los eventos de la naturaleza, el legislador considera verbigracia, entre otros, el
nacimiento y la muerte de los seres humanos, para atribuirles efectos jurídicos, los que se generan
en forma independiente de que esos sujetos deseen o no que se produzcan en su esfera jurídica.
También, se tiene como ejemplo, de estos hechos jurídicos en sentido estricto por eventos de la
naturaleza, al caso fortuito, el cual como tal, constituye un supuesto de irresponsabilidad civil, al
contrario de la fuerza mayor, que si bien, es una excluyente de responsabilidad civil, su naturaleza
jurídica conforme a la interpretación de la tesis francesa, es la de ser un hecho jurídico en sentido
estricto, por conductas del ser humano de carácter lícito.
B.- El hecho jurídico en sentido amplio en la doctrina alemana.
En la doctrina alemana el hecho jurídico en sentido amplio, se clasifica en dos especies: a).Acto jurídico en sentido amplio, el que subclasifica a su vez, en acto jurídico en sentido estricto y
en el negocio jurídico; y en b).- Hecho jurídico en sentido estricto por eventos o hechos de la
naturaleza que el legislador considera para atribuirle consecuencias jurídicas. Lo anterior, se aprecia
mejor en el cuadro sinóptico siguiente:
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Es así, como el acto jurídico en la doctrina francesa es siempre lícito, al ser una conducta del ser
humano, en la que su autor desea las consecuencias de la misma, y éstas se encuentran previstas en
la ley, en cambio, en la Teoría alemana, el acto jurídico tiene dos especies, ya que, en un sentido
restringido puede referirse tanto a conductas lícitas como a ilícitas, en el que las consecuencias se
derivan no de la voluntad del autor o autores de la conducta, sino en lo dispuesto por la propia ley,
al igual que sucede en el hecho jurídico en sentido estricto de la doctrina francesa, por conductas del
ser humano, pero el acto jurídico de la Teoría alemana será considerado negocio jurídico, cuando al
igual que en la Teoría francesa, se trate de una conducta siempre lícita, dándose así, a través del
elemento de la licitud una coincidencia en la sistematización que la Teoría francesa y alemana, le
dan al acto jurídico y al negocio jurídico, respectivamente.
De tal manera que, la doctrina alemana a diferencia de la francesa, considera que al acto
jurídico clasificado en lato sensu o en sentido amplio, subgénero que, a su vez, presenta dos
subespecies:
a).- El acto jurídico en sentido estricto, el que puede tener el carácter de lícito e ilícito, y
b).- El negocio jurídico, el que para que surta los efectos deseados por su autor o autores, deberá
tener siempre un carácter lícito. Éste, a su vez, podrá referirse a Negocios jurídicos unilaterales o a
Negocios jurídicos bilaterales o plurilaterales.
Lo anterior, queda claramente expuesto, en la obra Teoría del Negocio Jurídico de Giuseppe
Stolfi(5), cuando manifiesta que:
“Dentro de los hechos jurídicos, es decir, de aquellos eventos o circunstancias y
situaciones de hecho de las que derivan consecuencias conforme a derecho o en contra
del mismo, se encuentran los llamados “actos jurídicos” que son producto de la actividad
del hombre, por lo cual es necesario aclarar o exponer las razones que justifican la
inclusión desde el punto de vista técnico de esos actos, sólo en parte, en la categoría del
negocio jurídico, dejando fuera los demás no obstante ser todos resultado de una
determinación de la voluntad humana directa.”
El autor en comento( 6), señala que los actos lícitos se distinguen según que el efecto jurídico sea
consecuencia de una manifestación de voluntad directamente encaminada a producirlo o que no lo
sea. De ahí, agrega, sólo los primeros se consideran negocios jurídicos, porque tienen de común
la nota esencial de ser queridos por su autor para conseguir un cierto efecto, el cual si se verifica es
consecuencia inmediata de la voluntad. Por lo contrario, agrega el autor en cita(7), el resto de los
actos lícitos, no son susceptibles de idéntico estudio porque su efecto jurídico no va
necesariamente adherido a la voluntad de sus autores y muchas veces es independiente de ella.
III.—Distinciones fundamentales entre la Teoría francesa y la Teoría alemana, del
hecho jurídico en sentido amplio o lato sensu, y su regulación en el Derecho civil
mexicano.
Las distinciones fundamentales, entre la doctrina francesa y la alemana, respecto al acto jurídico,
se tiene:
5
STOLFI, Giuseppe. Teoría del Negocio Jurídico. Trad. Jaime Santos Briz. Editorial Revista de Derecho
Privado. Madrid, España. 1959. P.2.
6
Ídem.
7
Ibídem. P. 3.
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1° La doctrina francesa, clasifica al hecho jurídico en: Acto jurídico y en hecho jurídico en
sentido estricto. El acto jurídico puede ser unilateral o bilateral, el que se encuentra
contemplado por el legislador, y sus efectos se producen por la voluntad del autor o de los
autores de la conducta; a su vez, en el hecho jurídico stricto sensu, se contemplan todas
aquellas conductas del ser humano, en el que los efectos jurídicos se dan por imposición del
legislador, ya sean éstas lícitas o ilícitas, y como una segunda subespecie del hecho jurídico
stricto sensu, se tiene a los hechos o eventos de la naturaleza.
En la doctrina alemana, si bien, contempla las mismas especies que la doctrina francesa,
esto es, al acto jurídico y al hecho jurídico en sentido estricto, esta tesis sistematiza a la
figura del acto jurídico en un sentido amplio, en el que contempla a toda conducta humana,
ya sea que la misma, sea lícita o ilícita o de que los efectos jurídicos se den por imposición
del legislador, o bien, por la voluntad del autor o de los autores de la misma; a las primeras,
las denomina “actos jurídicos en sentido estricto”, a las segundas, “negocios jurídicos”,
cuyos efectos son deseados por el autor o los autores de la conducta, se encuentran
previstos por el legislador y son esencialmente, de naturaleza lícita, de ahí que, esta figura
sea el equivalente al acto jurídico de la Teoría francesa. Y sólo considera como hechos
jurídicos en sentido estricto, a los hechos o eventos de la naturaleza.
2° El acto jurídico en la doctrina francesa es siempre lícito, al ser una conducta del ser humano, en
la que su autor desea las consecuencias de la misma, y éstas se encuentran previstas en la ley, el que
puede ser unilateral o bilateral.
En la tesis alemana, la figura equivalente al acto jurídico de la tesis francesa, se le denomina
negocio jurídico, el que puede ser unilateral o bilateral, pero, siempre lícito, en el que los efectos se
producen por la voluntad del autor o autores de la conducta.
3° En la tesis francesa, aquellas conductas lícitas o ilícitas, en las que los efectos se producen por
imposición del legislador, se denominan hechos jurídicos en sentido estricto, los que pueden ser
lícitos, como la gestión de negocios o la responsabilidad civil objetiva, o bien, ilícitos, como los
delitos civiles y penales
En cambio, en la Teoría alemana, toda conducta humana sea ésta LÍCITA O ILÍCITA, se le
considera un acto jurídico, en sentido estricto si se refiere a aquellas conductas cuyos efectos se
imponen por el legislador, y negocio jurídico, si los efectos se derivan de la voluntad del autor o
autores de la misma.
4° En la doctrina francesa, a los eventos de la naturaleza se les considera la segunda subespecie de
los hechos jurídicos en sentido estricto.
En la doctrina alemana, los únicos hechos jurídicos en sentido estricto, son los hechos o eventos
de la naturaleza.
Y si bien, a través del elemento licitud, se presenta una similitud entre las Teorías francesa y
alemana, en cuanto a la sistematización que realizan del acto jurídico y del negocio jurídico,
respectivamente, al referirse éste último, siempre a una conducta lícita, al igual que lo debe ser el
acto jurídico en la tesis francesa, no se deben emplear ambas teorías, en un mismo sistema jurídico,
a riesgo de ser ello, una fuente inagotable de graves contradicciones conceptuales.
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Ahora bien, el sistema jurídico mexicano sistematizó el hecho jurídico en sentido
amplio, conforme a la Teoría francesa en mención, y con ello, se regula al acto jurídico
como la conducta humana unilateral o bilateral lícita, en la que su autor o autores quieren
sus efectos jurídicos y los mismos se encuentran previstos por la ley, ello es así, desde el
Código civil para el Distrito Federal y la Baja California, del año de 1870, posición
doctrinaria que se confirmó más adelante, en los Códigos civiles de 1884, 1928 y en los del
año 2000, tanto para el Distrito Federal, como el Federal, sin embargo, la anterior
sistematización se rompió por el legislador del Código civil de Quintana Roo, en el año de
1980, y luego, por los legisladores del Código civil de Coahuila de Zaragoza, el Código
familiar de Michoacán de Ocampo, y el Código de Familia de Sonora, los cuales han
regulado la conducta del ser humano, conforme a la Teoría alemana.
Como ejemplo de lo antes dicho, se tiene que, en el Código civil del Estado de Quintana
Roo, en su LIBRO PRIMERO, PARTE GENERAL, se denomina DE LOS HECHOS,
ACTOS Y NEGOCIOS JURÍDICOS, y enseguida, en su TITULO PRIMERO,
Disposiciones Preliminares, en su artículo 34, se establece que:
“Supuesto jurídico es la hipótesis prevista por la ley, de cuya realización depende el
nacimiento, la modificación, la transmisión o la extinción de derechos y obligaciones o de
situaciones jurídicas concretas.”
Enseguida, en el artículo 35 del Ordenamiento civil en cita, el legislador de Quintana Roo,
regula al hecho jurídico, en los términos siguientes:
“Artículo 35. Cuando el supuesto se realiza sin intervenir la voluntad del hombre ni en tal
realización ni en la producción de sus consecuencias de derecho, el acontecimiento se llama
hecho jurídico.”
Y en el artículo 36, finalmente, se hace referencia al acto jurídico en sentido estricto, esto es,
aquel que, en la tesis alemana, hace referencia a una conducta humana, en la que los efectos se dan
por disposición del legislador, y no por voluntad de la persona creadora del acto jurídico, lo anterior,
conforme al texto siguiente:
“Cuando el hecho es realizado voluntariamente por su autor, sin intención de producir
ninguno de los efectos jurídicos que menciona el Artículo 34, no obstante lo cual se
producen, se llama acto jurídico.”
Y es en el artículo 37, del Ordenamiento civil en comento, que el legislador de Quintana
Roo, determina que se entiende por negocio jurídico, en los siguientes términos:
“Cuando el acto es lícito y se realiza con el propósito de producir cualquiera de las
consecuencias a que se refiere el Artículo 34, se llama negocio jurídico.”
En mi opinión, se podría emplear en el tratamiento de las conductas humanas,
cualquiera de las dos posiciones doctrinarias antes mencionadas, ya sea la francesa o la
alemana, sin embargo, es necesario tener presente en el estudio del hecho jurídico en
sentido amplio, la circunstancia histórica se haber sido en el ámbito del sistema jurídico
mexicano, la Teoría francesa del hecho jurídico lato sensu, la que inspiró el primer Código
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civil de los Estados Unidos Mexicanos, publicado en el año de 1870, y que luego, ha sido
confirmada por los siguientes Códigos civiles mexicanos de los años 1884, 1928 y 2000.
Por lo anterior, no resulta plausible el emplear en un mismo sistema jurídico ambas
posiciones doctrinarias, al ser una fuente inagotable de contradicciones y confusiones, pero,
menos concebible resulta desde la más elemental técnica jurídica, el emplear dos Teorías
irreductibles en cuanto a la sistematización del acto jurídico, en un mismo Ordenamiento
jurídico, como de manera desafortunada se emplea en el Código Civil del Estado de
Sonora(8), en el que en su Libro Primero titulado Disposiciones Preliminares. Hechos y
Acto Jurídicos, en su Título Segundo, denominado Disposiciones Generales para los hechos
jurídicos, dispone en sus artículos 23 al 35 lo siguiente:
“Artículo 23. Para los efectos de este Código, se entiende por hecho jurídico todo
acontecimiento natural o del hombre que produzca consecuencias de derecho, consistentes en
crear, transmitir, modificar o extinguir derechos u obligaciones, o situaciones jurídicas
concretas.”
“Artículo 24. Los hechos jurídicos se clasifican en hechos naturales y hechos del hombre.”
“Artículo 25. Los hechos naturales a su vez se subdividen en hechos simplemente naturales y
hechos naturales relacionados con el hombre. Los primeros son todos los fenómenos de la
naturaleza que producen consecuencias de derecho, y los segundos aquellos acontecimientos
naturales relacionados con el hombre, en su nacimiento, vida, facultades o muerte, que a su vez
originen consecuencias jurídicas.”
“Artículo 26. Los hechos jurídicos del hombre a su vez se subdividen en hechos voluntarios,
involuntarios y contra la voluntad.”
“Artículo 27. Los hechos voluntarios se clasifican en lícitos e ilícitos. Son lícitos aquellos
hechos voluntarios que produciendo consecuencias de derecho se ejecutan sin dolo o culpa y
no violan ni son contrarios a normas de orden o de interés público, sean éstas prohibitivas o
imperativas, o a las buenas costumbres. Son ilícitos los hechos voluntarios que se llevan a cabo
con dolo, culpa, falta de previsión o de cuidado, así como aquéllos que por sí mismos o por las
consecuencias que producen, violan o son contrarios a las normas de orden o de interés
público, o a las buenas costumbres.”
“Artículo 28. Los hechos involuntarios y los ejecutados por el hombre contra su voluntad, sólo
producirán consecuencias de derecho cuando expresamente así lo declare la ley en cada caso.”
“Artículo 29. Los derechos a que se refiere el artículo 23, pueden ser privados o públicos
subjetivos, patrimoniales o no patrimoniales.”
“Artículo 30. Para que se produzcan las consecuencias previstas en las normas de derecho, los
hechos jurídicos que se realicen deberán estar supuestos en ellas mismas o en otras normas de
derecho.”
8
Para que Usted lector(a), pudiera apreciar por sí mismo, lo que antes afirmado, le transcribí los artículos
relativos del Código civil del Estado de Sonora, en los que el legislador sonorense, regula lo relativo al hecho
jurídico en sentido amplio, con sus supuestas especies, y luego me refiero al Título Tercero, del Código
sustantivo en cita, en donde en forma particular, en sus artículos 36 y 37, se hace la regulación del acto
jurídico unilateral y bilateral.
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“Artículo 31. Los hechos voluntarios a que se refiere este Código, sólo suponen la
existencia de fenómenos volitivos manifestados a través de hechos exteriores, sin que se
requiera la existencia de la intención o del fin en el sujeto, para producir consecuencias
de derecho.” (El remarcado en negritas es de la autora)
“Artículo 32. Las consecuencias de derecho, cuando se trate de hechos voluntarios, se
producen independientemente de la edad, la capacidad mental o el discernimiento del sujeto,
salvo cuando la ley exija alguno de dichos requisitos.”
“Artículo 33. Cuando en los hechos voluntarios la ley tome en cuenta la intención o fin del
sujeto, para que se produzcan las consecuencias de derecho, se tratara de actos jurídicos en
sentido estricto.” (El remarcado en negritas es mío)
“Artículo 34. Salvo disposición expresa en contrario, cuando por hechos involuntarios o contra
la voluntad se cause daño a otro, sólo se responderá con la indemnización correspondiente, si
con el daño se enriqueció el autor del mismo, caso en el cual se aplicarán las disposiciones de
este Código para el enriquecimiento sin causa.”
“Artículo 35. Se entiende que el hecho jurídico se ejecuta en contra de la voluntad del sujeto,
cuando éste lo lleva a cabo por coacción irresistible al hallarse privado de la libertad; o cuando
se vea compelido por caso fortuito o de fuerza mayor.”
Y luego, el legislador civil sonorense, en el Título Tercero, denominado Disposiciones
Generales para los Actos Jurídicos, Capítulo I, titulado De la existencia y validez de los
Actos Jurídicos, en sus artículos 36 y 37, determina que:
“Artículo 36. Para los efectos de este Código, se entiende por acto jurídico toda declaración o
manifestación de voluntad hecha con el objeto de producir determinadas consecuencias, las
cuales son reguladas por el derecho.”
“Artículo 37. Dichas consecuencias pueden ser reguladas por el derecho para la creación,
trasmisión, modificación o extinción de derechos y obligaciones o de situaciones jurídicas
concretas.”
Como se puede apreciar de lo anterior, el legislador civil sonorense, por falta de un
conocimiento de las Teorías francesa y alemana, que han sistematizado el hecho jurídico en
sentido amplio, hizo un tremendo revoltillo de las dos importantes especies de éste, del acto
y del hecho jurídico en sentido estricto.
Reactivos con relación al tema anterior:
1.- La mayoría de los Códigos civiles de los Estados Unidos Mexicanos se rigen, por la teoría
francesa del hecho jurídico, y por lo mismo, como figura principal para la sistematización de las
conductas humanas lícitas, se refieren al:
A.- Acto jurídico, en sentido amplio.
B.- Acto jurídico.
C.- Negocio jurídico.
D.- Acto jurídico, en sentido estricto.
2.- La diferencia fundamental entre la tesis francesa y la alemana del hecho jurídico en sentido
amplio, estriba en que:
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A.- El acto jurídico de la tesis francesa, puede ser lícito o ilícito.
B.- Todas las conductas del ser humano en la tesis alemana, se refieren a un acto jurídico.
C.- Todas las conductas del ser humano en la tesis alemana sean éstas lícitas o ilícitas, se refieren a
un acto jurídico.
D.- En la tesis francesa, algunas conductas del ser humano son actos jurídicos, y otras son hechos
jurídicos en sentido estricto.
E.- Las respuestas contenidas en los incisos C y D, son las correctas.
3.- La conducta del ser humano, en la que hay una manifestación de voluntad, con la intención de
producir consecuencias de Derecho, cuando una norma jurídica así lo prevé y sanciona, se refiere:
A.- A un hecho jurídico estricto sentido.
B.- A un acto jurídico.
C.- A un deber jurídico en sentido amplio.
D.- A un derecho subjetivo.
4.- La doctrina alemana de los hechos jurídicos, clasifica a los actos jurídicos en estricto sentido y
en negocios jurídicos.
A.- Cierto.
B.- Falso.
C.- En algunas ocasiones.
5.- En el marco de la Teoría francesa del hecho jurídico, la gestión de negocios tiene la naturaleza
jurídica de ser.
A.- Un acto jurídico en sentido estricto.
B.- Un hecho jurídico en sentido estricto, de carácter lícito.
C.- Un acto jurídico del tipo obligacional.
D.- Un hecho jurídico en sentido estricto, de carácter ilícito.
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