REVISTA MEDICA DE CHILE ERRORES EN EL LENGUAJE MEDICO

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APARTADO
REVISTA MEDICA DE CHILE
A Ñ O L X X Í V - O C T U B R E DE 1946 - №
Imp. y Lito. " S T A N L E Y " — Manuel Rodríguez 852 —
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Santiago
ERRORES EN EL LENGUAJE MEDICO
Dr. О к е F r a n c e
ERRORES EN EL LENGUAJE MEDICO
En este segundo artículo continuamos la
revisión de aquellos términos médicos que por
negligencia o desacuerdo se dicen y se escriben mal, se acentúan peor o se interpretan
erróneamente, derivando de esto último una
mala aplicación de ellos. Comenzaremos con
el caos que hay en la cuestión acentos.
Son de acentuación esdrújula las siguientes palabras: mesénquima,
parénquima,
alvéolo y uréteres, no debe, por consiguiente,
decirse parénquima, mesenquíma, alveólo y
uretéres, como habitualmente oímos.
De acentuación grave: ectopia y kilogramo, no hablar, entonces, de ectopia y kilógramo. Los nombres de medidas terminadas
en gramo, la Academia los reputa por graves, v. gr.: decigramo, centigramo. De acentuación aguda: disentería y lientería, no decir, por ello, disentéria y lientéria.
Es corriente el mal uso de muchos vocablos por cambio arbitrario del género de ellos.
P o r ejemplo, debe decirse, porque son de
género femenino: las hemorroides, la ascitis,
la púrpura y la corea (con acentuación grave,
no córea).
Enviemos al enfermo al Policlínico, no señores, enviémoslo a la Policlínica. De paso recordamos que Policlínica no significa muchas
clínicas, sino clínicas para los enfermos de la
ciudad, en oposición a los enfermos interna-
dos. Pólis en griego es pueblo, ciudad, de ahí
Petrópolis, ciudad de Pedro. Hemos oído rechazar el término obrar por defecar, en circunstancia que es correcto, porque obrar en
su quinta acepción es exonerar el vientre.
Calofrío o escalofrío, pueden usarse indistintamente, pero esta última voz úsese más en
plural.
Juan se enfermó. Es una construcción viciosa que debe evitarse por uso indebido de
un complementario reflejo con este verbo,
que es enfermar. Basta con J u a n enfermó.
Ectasia sanguínea. Forma de uso incorrectísima; debe decirce éxtasis sanguíneo, pues
éxtasis en su acepción médica, no es otra cosa que paralización de la sangre o disminución de su marcha en el cuerpo. Ectasia es
correcto si se refiere a dilatación de u n órgano hueco, p. ej.: ectasia gástrica, ¡incidencia
refiriéndose a porcentaje está mal empleado,
dígase frecuencia. Igualmente no decir menopausa por menopausia.
Sondaje gástrico o duodenal. Es sondeo
tal o cual; deriva del verbo sondar que en su
cuarta acepción, en el ejemplo citado, significa introducir en el cuerpo, por un conducto
natural, una sonda para extraer líquido.
Alguien discurrió que los dolores se cansaban, pero decir dolor cansado es emplear u n
vulgarismo al que hay que ponerle atajo; si
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CRONICA
queremos aludir a un dolor latente, digamos
dolor sordo, o sea un dolor que no es agudo,
pero molesta sin interrupción, con ello damos
un significado preciso a la vez que quedamos
bien con la Academia.
Hablar de evolución arrastrada es recurrir
a otro vulgarismo, es más breve y académico
decir evolución lenta. Referirse a evolución
larvada está bien, siempre que se aplique a
una enfermedad que se presenta con síntotomas que ocultan su verdadera naturaleza,
pero es una expresión errónea si se usa en el
sentido de evolución lenta.
Esquelencia. Mal dicho; dígase esquinencia. Esquinencia es ya una forma desusada.
Las erupciones cutáneas se llaman, salpullidos y no sarpullidos.
Parece que por elegancia en el decir se
habla a menudo de neumonía a virus, sepsis
a estreptococo, etc.; pero tales expresiones no
son donosas, sino perfectamente descuidadas
en el uso de las preposiciones. Menos donaire
y más gramática: neumonía por virus, sepsis por estreptococos.
Hay una fractura de la doceava vértebra
dorsal. Felicitamos a aquél que en una parte
de las doce en que dividió la vértebra, al expresarse así, logró ver el rasgo de fractura.
No hay para que usar un numeral partitivo
existiendo los numerales ordinales (adjetivos
que significan orden numérico): primera, décima, décima segunda, etc.
¿Y qué decir de los antecedentes etílicos
cargados? ¿No pueden ser más bien evidentes
o francos?
En próxima oportunidad esperamos continuar esta ingrata tarea de saneamiento de
nuestra tan vapuleada lengua.
Para aquellos que movidos a curiosidad
(aquí está bien la preposición a ) , quieran repasar el tema, le recomendamos las siguientes
fuentes de información:
Real Academia Española. — Diccionario
de la Lengua Española. Madrid. 1939. Espasa
Calpe.
Enciclopedia Universal Ilustrada. — J. Espasa e hijo.
Diccionario Latín Español Etimológico. —
Raimundo de Miguel. Madrid. 1924.
Etimología griega y latina para el uso médico. — J. Boettner. El Ateneo. 1942.
Gramática Castellana. <— Andrés Bello.
1928.
Enredos etimológicos. — J. Sacón. El día
Médico. № 29. Jul. 45.
Ortografía y Acentuación. Ё. Flores. Nascimento. 1934.
Dr. Оке France.
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