daños y perjuicios rechazo de excepción de falta de legitimación

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DAÑOS Y PERJUICIOS RECHAZO DE EXCEPCIÓN
DE FALTA DE LEGITIMACIÓNLESIONES PRODUCIDAS POR CAIDA AL
TOPARSE CON LA BASE –RUEDAS CEMENTADAS
–DE SEÑAL INDICADORA DE PROHIBICIÓN DE
ESTACIONAR EN GARAGE DE INSTITUCIÓN
BANCARIA.RESPONSABILIDAD DEL BANCO Y
CONDUCTA NEGLIGENTE DE LA ACTORA QUE
COADYUVÓ A LA PRODUCCIÓN DEL DAÑO.
INTENTÓ DE TRASVASAR LA CALLE POR UN
LUGAR NO APTO PARA ELLO.DAÑO MATERIAL,
MORAL Y PSICOLÓGICO.
PODER JUDICIAL DE LA NACIÓN Rtro.S.3T.159 f*25/33
// la ciudad de La Plata, a los once días del mes de
septiembre del año dos mil ocho, reunidos en Acuerdo
los señores Jueces que integran la Sala Tercera de
esta Cámara Federal de Apelaciones de La Plata,
toman en consideración el expediente N° 15.449/08
caratulado: "CARRIZO, Zulema Beatriz c/ Banco de la
Nación argentina s/ daños y perjuicios", procedente
del Juzgado Federal N° 3 de Lomas de Zamora,
Secretaría contratada. Practicado el pertinente
sorteo el orden de votación resulto el siguientes:
doctores Carlos A. Vallefin, Antonio Pacilio y
Carlos A. Nogueira .
EL DOCTOR VALLEFIN DIJO:
I. La decisión recurrida y los
agravios.
Llega el expediente a esta Alzada con motivo del
recurso de apelación deducido(...)contra la
sentencia(...)por la que el a quo hizo lugar a la
excepción de falta de legitimación pasiva deducida
por el Banco de la Nación Argentina, y en
consecuencia, rechazó la acción entablada por C.
contra la aludida entidad financiera. Por último,
impuso las costas del proceso por su orden.
En su memorial, la recurrente se agravia en el modo
en que el señor juez de grado ponderó la prueba
aportada a la causa y por la imposición de costas
fijada en su contra, solicitando que se haga lugar a
la acción articulada y que se ordene la
indemnización del daño demostrado (...).
De los agravios formulados, obra la respuesta del
Banco de la Nación Argentina (...).
II. Antecedentes.
La causa se inició con la demanda promovida por C.
en la que dio cuenta de que el día 19 de enero de
1998, siendo las 17 horas y en ocasión de intentar
cruzar la calle Leandro N. Alem entre Arana e
Hipólito Yrigoyen de Lomas de Zamora, desde la
vereda donde se ubica el garage del Banco de la
Nación Argentina, ella detuvo su marcha porque se
aproximaba un colectivo de la línea 501.
Según relató en su presentación, al retroceder hacia
el cordón se topó con una cubierta de automóvil que
contenía cemento en su interior y un caño cuyo
extremo superior lucía la señal de Aprohibido
estacionar@, colocada en los extremos de la entrada
al garage del Banco de la Nación Argentina. Como
consecuencia de ello, cayó de espaldas hacia el
ingreso de la cochera y al apoyar la mano sufrió una
fractura grave. De tal modo, fundó la
responsabilidad del demandado en las previsiones del
art.1113 del Código Civil y estimó los daños
padecidos en la suma de $ ... comprensiva de gastos
médicos, daño moral y daño psicológico. En apoyo a
sus dichos, acompañó fotografías del lugar en el que
acaecieron los hechos (...).
El Banco de la Nación Argentina contestó la demanda
(...), ocasión en la que además de negar las
circunstancias fácticas invocadas por la actora,
señaló que Adichos carteles no fueron colocados por
personal alguno que represente a la Institución, no
conociendo tampoco quien pudiera colocarlos@.
Remarcó que aquella no intentó cruzar la calzada por
la vía peatonal -contrariando normas de tránsito
vigentes-, que los carteles señalizadores no
contenían leyenda alguna que permitiera inferir que
eran de propiedad del banco y que oportunamente se
había cursado una nota al municipio con el fin de
que se instalen en el garage indicadores de la
prohibición de estacionar, la cual también acompañó.
Consecuentemente, opuso excepción de falta de
legitimación pasiva por cuanto Aen autos no se
desprende que (...) sea propietario o guardián de
las cosas que provocaron el daño@.
A (...)la actora contestó el traslado de la
excepción opuesta, remarcando que los elementos que
motivaron las lesiones Aeran sacados al cordón de la
acera (...) por el personal de maestranza del banco
demandado@ y que al no ser Abienes registrables@,
no se le puede exigir que acompañe documentación
atinente a la titularidad de los mismos, resultando
suficiente Asu explotación@ para la atribución de
responsabilidad.
El a quo entendió que la defensa de falta de
legitimación no resultaba manifiesta y postergó su
tratamiento al momento de dictar sentencia (...),
abriendo la causa a prueba (...).
En ese marco, declararon (...), todos testigos
ofrecidos por la actora. Absolvió posiciones C.
(...) y declararon(...)testigos propuestos por el
demandado.
A su vez, se agregaron informes de la Municipalidad
de Esteban Echeverría (...) y del Policlínico S.T.
de Santamarina de Monte Grande (...). Por último, se
incorporaron los informes periciales psicológico y
médico de C. (...).
III. Consideración de los agravios.
1. La falta de legitimación pasiva del Banco de la
Nación Argentina.
1.1. Con el examen de la prueba testimonial y de los
informes agregados a la causa, el señor juez de
grado estimó que Ano se encuentra acreditado en
autos que el Banco de la Nación Argentina revista el
carácter de dueño o guardián de las ruedas o
cubiertas con cemento ubicadas en los dos extremos
del garage situados al lado de la sucursal Monte
Grande al Banco de la Nación Argentina@. Y por
tanto -concluyó- Ala mencionada entidad bancaria no
se encuentra legitimada para ser demandada en las
presentes actuaciones@ (...).
En lo sustancial, la actora predica que el a quo Aha
errado su análisis de la testimonial en forma
general@, sin advertir las contradicciones entre
los testigos del demandado.
1.2. Pues bien, de la compulsa de las actuaciones
que conforman el sub judice surgen extremos que se
hallan suficientemente probados, a saber: a) el día
19 de enero de 1998 C., en ocasión de intentar
cruzar la calle Leandro N. Alem entre Arana e
Hipólito Yrigoyen de Lomas de Zamora, retrocedió
hacia el cordón y se topó con una cubierta de
automóvil que contenía cemento en su interior y un
caño cuyo extremo superior lucía la señal de
Aprohibido estacionar@, b) la mentada cubierta
estaba colocada sobre el pavimento en un extremo de
la entrada al garage del Banco de la Nación
Argentina, c) como consecuencia de la caída, la
actora sufrió la fractura de la mano izquierda por
lo que debió ser enyesada.
Todo ello se desprende conjuntamente de las
fotografías(...)de las declaraciones testimoniales
(...)de la absolución de posiciones(...)y de la
historia clínica (...).
1.3. Teniendo ello presente y dado el temperamento
adoptado por el a quo y los alcances de los agravios
formulados, corresponde elucidar si del marco
cognitivo del expediente surge si la cosa dañosa
pertenecía o no al Banco de la Nación Argentina.
Para ello, estimo oportuno recordar que Alos jueces
no están obligados a expresar en la sentencia la
valoración de todas las pruebas producidas, sino
sólo la de aquéllas conducentes a su decisión@
(AFallos@ 306:395, 306:1290, entre otros).
Desde esa perspectiva, para el examen del punto en
debate escogeré las declaraciones testimoniales y el
informe producido por la Municipalidad de Esteban
Echeverría, los cuales serán examinados a la luz de
las pautas brindadas por la lógica y la experiencia,
como proceso de valoración que constituye -en
palabras de Eduardo J. Couture- la vía idónea para
Aregular la actividad intelectual del juez frente a
la prueba@ y tiende a Aasegurar el más certero y
eficaz razonamiento@ (Fundamentos del Derecho
Procesal Civil, 3ra. edición, Buenos Aires, 1993,
Depalma, p. 270 y 271).
1.4. En efecto, (...) adujo que Alas ruedas estaban
en la calle (...) como para que si viene el camión
de caudales, pueda entrar por el garage que
pertenece al banco de la Nación@ o Aquizás es para
que estacione el camión@. A su vez, agregó que Ahe
visto en oportunidades que las entran al garage del
Banco de la Nación@ (...). (...)manifestó con
contundencia que las ruedas le pertenecían a la
entidad bancaria, subrayando que Ayo vivo ahí y paso
siempre y he visto a la mañana las sacaban (sic), de
esas puertas negras de vidrio gruesas, que
pertenecen al banco, están pegadas al banco@ (...).
Por último, (...)invocó que Alo que puedo suponer,
es que yo he visto que sale personal del Banco
Nación y las guardan, no puedo especificar el
horario justo, pero a la tardecita, y las guardan en
el garage del banco de la Nación@, remarcando que
Aes de público conocimiento de todo Monte Grande que
pertenecen al Banco@ (...).
Cierto es que tales expresiones contrastan con las
declaraciones de los testigos propuestos por el
demandado, ya que (...) coincidieron en que las
ruedas cementadas no eran de propiedad del banco. A
su vez, los testigos añadieron que las cubiertas no
eran guardadas en el garage de la entidad y que a
dicha cochera solo tenía acceso un funcionario del
Banco de la Nación Argentina que vivía en(...)(d)el
edificio.
1.5. Ahora bien, en el cuadro de discrepancias
fácticas que plantean los testimonios, estimo que
las versiones brindadas por (...)obtienen -a la luz
de la sana crítica y de la experiencia- mayor fuerza
de convicción a poco que se los complementa con el
informe municipal (...).
En efecto, la comuna de Esteban Echeverría comunicó
que en agosto de 1996 se había recibido una nota en
la que el Banco de la Nación Argentina -Sucursal
Monte Grande- solicitaba Ala colocación de carteles
que prohíban el estacionamiento por uso exclusivo de
camión blindado en el horario de 08,00 a 18,00
horas@ (...).
Tal pedido revela -como expresa el recurrente- que
un año y medio antes del infortunio el banco tenía
la necesidad de contar con una señalización que le
garantice el estacionamiento de los vehículos de
caudales. Sin embargo, al menos hasta enero de 1998,
los carteles requeridos no habían sido instalados ya que así lo muestran las fotos (...), lo cual a mi
juicio habilita a concluir que con el fin de no
tener más inconvenientes de aparcamiento en el
lugar, la entidad utilizó las ruedas cementadas en
la entrada de su garage.
1.6. En abono a tal conclusión merecen destacarse
varios extremos. En primer lugar, no resulta
verosímil que tanto (...)-gerente de la sucursalcomo (...) -empleados del banco- nunca hayan tenido
el interés por averiguar el origen de una cosa que
diariamente veían emplazada en la puerta del garage
de la entidad. Organismo que, incluso, seguramente
contaba con una vigilancia permanente a la que
tampoco pudo pasársele por alto la existencia de
dichos elementos.
En tal sentido, no constituye el comportamiento
ordinario -menos en esta clase de reparticiones- que
una persona ajena a las mismas coloque una cosa en
el perímetro de su propiedad y nadie indague sobre
tal circunstancia.
A su vez, de las fotografías (...) surge que en las
inmediaciones del banco no hay ámbito -como predios
de estacionamiento, hoteles, colegios u otra
institución pública- que amerite la restricción de
la detención de vehículos. Por el contrario, a lo
largo del espacio involucrado se visualizan el Banco
de la Nación Argentina, su garage y luego lo sigue
un comercio.
1.7. Este marco cognitivo evidencia, pues, que la
rueda cementada con la señal indicadora de
Aprohibido estacionar@ era de propiedad de la
Sucursal Monte Grande del Banco de la Nación
Argentina, que la explotaba y aprovechaba como
herramienta provisoria para asegurar la
disponibilidad de espacio de estacionamiento para lo
que fuera necesario.
Consecuentemente, siendo que el demandado reviste la
condición de sujeto idóneo o habilitado por la ley
para discutir sobre el objeto del litigio,
corresponde en esta cuestión hacer lugar a la
apelación de la actora, revocar el punto A1" de la
sentencia (...) y rechazar la excepción de falta de
legitimación pasiva opuesta por el Banco de la
Nación Argentina.
2. La responsabilidad civil.
2.1. Demostrado el carácter de dueño de la entidad
financiera respecto de la rueda cementada habida en
el ingreso a su garage, el caso debe examinarse en
el marco de un factor objetivo de atribución de
responsabilidad civil, concretamente, en el riesgo
creado con una cosa. En consecuencia, para que el
demandado pueda quedar exonerado de responsabilidad
debe acreditar la ruptura del nexo causal,
demostrando que el daño provino de un hecho de la
propia víctima o de un tercero por el que no debe
responder (art.1113, segunda parte, del Código
Civil).
2.2. Como se dijo, se halla suficientemente
acreditado que el Banco de la Nación Argentina era
dueño de la señalización con la que C. tropezó al
volver sobre sus pasos cuando intentó cruzar la
calle.
Si bien cabe afirmar que una rueda cementada es una
cosa inerte que por sus cualidades no es riesgosa en
sí misma, no puede soslayarse que el modo y la
situación en que fue colocada por el demandado para
servirse de ella, hizo que adquiriera el carácter
nocivo. Y uno de los deberes mínimos de quien
aprovecha el uso de una cosa, es evitar que ésta se
transforme en una fuente de daño para terceros.
2.3. En el caso en examen, pues, quedó demostrado
que la actora al retroceder hacia el cordón y no
advertir la existencia del cartel cayó al suelo y
sufrió lesiones en su muñeca. Ello, en parte,
ocurrió por la inadecuada colocación de la cosa en
un lugar que la convirtió en riesgosa.
A su vez, del informe del municipio de Esteban
Echeverría (...) surge que el demandado no se
hallaba autorizado para el uso de las cubiertas en
tela de juicio, con lo cual, cabe concluir que su
presencia allí era irregular.
Desde la perspectiva construida, estimo que
concurren en la conducta del Banco de la Nación
Argentina los presupuestos necesarios para
endilgarle responsabilidad en los hechos que aquí se
ventilan, esto es, antijuridicidad, factor de
imputación, un daño y la relación de causalidad
adecuada.
2.4. Ahora bien, no escapa a mi atención que el modo
en que sucedió el accidente revela simultáneamente
una conducta negligente de la actora que coadyuvó a
la producción del daño.
En efecto, C. intentó trasvasar la calle Leandro N.
Alem de Lomas de Zamora por un lugar no apto para
ello, es decir, a mitad de cuadra. Asimismo, un
mínimo de prudencia indica que -como recaudo- ella
debió girar todo su cuerpo para retornar al cordón
de la vereda y no retroceder sin mirar, como lo
terminó haciendo. Queda entonces a mi juicio
acreditada la conducta imprudente de la víctima en
los términos del art. 512 del Código Civil, por lo
que corresponde otorgarle un 40 % de responsabilidad
en la producción del hecho.
3. El daño reclamado.
3.1. El reclamo formulado en la demanda ascendió a $
..., discriminado del siguiente modo: $ ... por daño
material, $... por daño moral, $ ... por gastos de
asistencia y $ ... por daño psicológico.
En punto al primer rubro, la actora invoca que la
Afractura grave en muñeca y mano izquierda@ y sus
secuelas la afectaron en todos Alos aspectos de su
vida en relación@. Con respecto al daño moral alegó
Asentimientos de inseguridad, de incertidumbre, de
no saber como va a quedar, como va a seguir adelante
su vida, como va a conseguir trabajo o alcanzar el
sostén propio y de su grupo familiar@. En atención
al perjuicio psicológico, remarcó que Aa raíz del
hecho (...) ha sufrido una alteración de la
estructura de su personalidad (...) con tendencia a
autoaislarse de sus amigos, de sus propios
familiares; evitando salir a la calle@.
3.2. Pues bien, de acuerdo al modo y los alcances
con que la actora introdujo en su demanda el daño
material, en él se incluyen las lesiones propiamente
dichas y el perjuicio generado en su vida en
relación.
Así, conforme se infiere conjuntamente de la
historia clínica expedida por el Policlínico S.T. de
Santamarina (...) y del informe médico (...), como
consecuencia de la caída C. sufrió fractura
metafisiaria de radio de muñeca izquierda -por lo
que debió ser enyesada- con una limitación de
movilidad en 10° en su flexión extrema como secuela,
todo lo cual le ocasionó una incapacidad parcial y
permanente del 12 % del valor obrero total y total
vida.
Consecuentemente, teniendo en cuenta que C.
actualmente posee 53 años de edad y que es ama de
casa, estimo prudente conceder una indemnización de
$ ... por este concepto.
3.3. Con respecto al daño moral, debe recordarse que
el monto pecuniario fijado debe guardar razonable
proporción con la entidad del agravio. Esta tarea de
cálculo no se hace en abstracto, sino que varios son
los parámetros que concurren a fin de señalar los
alcances de una adecuada indemnización, entre ellos,
la gravedad de la ilicitud, el factor de imputación
y la situación patrimonial del ofensor (conf.
Zannoni, Eduardo A., El daño en la responsabilidad
civil, 2da. edición, Buenos Aires, 1987, Astrea,
p.351).
Dada la entidad de las lesiones sufridas, la
incapacidad física generada y el estado patrimonial
de la entidad demandada, juzgo adecuado fijar la
suma de $... por el daño moral sufrido por C..
3.4. Otro tanto ocurre con el daño psicológico,
distinguible del anterior en las manifestaciones
sintomáticas de uno y otro, toda vez que si bien el
perjuicio psicológico también es un sufrimiento
subjetivo, no necesariamente se expresa a través de
síntomas o cualquier otra alteración
psicopatológica. En otras palabras, el dolor, la
angustia, puede permanecer en la esfera interna del
damnificado, sin manifestaciones que puedan tener
entidad clínica.
Así entendido, el daño psíquico puede producir un
verdadero colapso en la autoestima, circunstancia
que resulta idónea para frustrar todo proyecto de
futuro y que puede generar como sensación inmediata
la imposibilidad de desplegar habilidades vitales
por siempre (conf. Milmaniene, José E., El daño
psíquico, publicado en ALos nuevos daños. Soluciones
modernas de reparación@, Buenos Aires, 1995,
Hammurabi, p.63 y siguientes; Tkaczuk, Josefa, Daño
psíquico, Buenos Aires, 2001, Ad-Hoc, p. 39; Cámara
Nacional Civil, Sala B, autos ACoulon, Federico R.c/
Monsa y otro s/daños y perjuicios@, sentencia del
17/2/05, publicada en AEl Derecho@ 213, 332 y esta
Sala en autos AGonzález, Liliana Lucía c/ Estado
Nacional Argentino-Servicio Penitenciario Federal s/
Daños y perjuicios@, sentencia del 13/02/2006)(1).
Ahora bien, con relación al caso sub examine, la
perito psicóloga concluyó que a raíz del accidente
C. presenta un trastorno de stress postraumático
crónico de carácter moderado que la incapacita
parcial y permanentemente en un 20 % del valor
obrero total y total vida. Por tanto, aconseja un
tratamiento psicoanalítico (...).
En tales condiciones, atento el costo de las
sesiones terapéuticas y las secuelas generadas por
el infortunio, juzgo correcto establecer la suma de
$ ... por este concepto.
3.5. Por último, en lo que atañe a los gastos de
asistencia médica, farmacológica y de traslados,
ellos resultan consecuencia natural y lógica de un
evento dañoso. En tal sentido, siendo que uno de los
facultativos estimó correctos las erogaciones
presupuestadas en la demanda (...), contestación a
los puntos de pericia de la parte actora),
corresponde fijarlos en el monto de $....
4. La indemnización y los intereses.
De consuno con lo expuesto y en atención a la
distribución de responsabilidad en la producción del
hecho, el Banco de la Nación Argentina deberá abonar
a C. la suma de $.... A este monto deberán
adicionársele intereses -desde la fecha del hecho y
hasta el efectivo pago- de acuerdo a la tasa pasiva
promedio mensual que publica el Banco Central de la
República Argentina, de conformidad al fallo
plenario dictado por la Cámara Federal del circuito
en los autos AGómez, Ricarda c/ ENTEL s/
Indemnización por despido@, expte. N° 625, Sala II
(2). Ello hasta la fecha de corte y observando las
previsiones de las leyes 25.344 y 25.175 y del
decreto 1116/00.
3. La imposición de costas.
Por último, dada la solución que se alcanza y lo
establecido por el art. 68 y concordantes del Código
Procesal Civil y Comercial de la Nación, corresponde
que las costas de ambas instancias sean afrontadas
por el demandado vencido.
IV. Conclusión.
El día 19 de enero de 1998 C., en ocasión de
intentar cruzar la calle Leandro N. Alem entre Arana
e Hipólito Yrigoyen de Lomas de Zamora, retrocedió
hacia el cordón y se topó con una cubierta de
automóvil que contenía cemento en su interior y un
caño cuyo extremo superior lucía la señal de
Aprohibido estacionar@.
El marco cognitivo del expediente evidencia que
dicha rueda era de propiedad de la Sucursal Monte
Grande del Banco de la Nación Argentina, que la
explotaba y aprovechaba como herramienta provisoria
para asegurar la disponibilidad de espacio de
estacionamiento para lo que fuera necesario.
Consecuentemente, siendo que el demandado reviste la
condición de sujeto idóneo o habilitado por la ley
para discutir sobre el objeto del litigio,
corresponde rechazar la excepción de falta de
legitimación pasiva opuesta por el Banco de la
Nación Argentina.
Sentado ello, y examinando el caso en el marco de un
factor objetivo de atribución de responsabilidad
civil, cabe afirmar que una rueda cementada es una
cosa inerte que por sus cualidades no es riesgosa en
sí misma. Sin embargo, no puede soslayarse que el
modo y la situación en que fue colocada por el
demandado para servirse de ella, hizo que adquiriera
el carácter nocivo. Y uno de los deberes mínimos de
quien aprovecha el uso de una cosa, es evitar que
ésta se transforme en una fuente de daño para
terceros, como ocurrió en el caso.
Asimismo, estimo que el modo en que sucedió el
accidente revela simultáneamente una conducta
negligente de la actora que coadyuvó en un 40 % a la
producción del daño.
Teniendo ello presente, y en función de las lesiones
y secuelas que arrojó el accidente, juzgo que
corresponde revocar la sentencia (...)en todo lo que
decide, hacer lugar a la acción promovida y condenar
al Banco de la Nación Argentina a abonar a C. la
suma de $ ..., con más intereses de acuerdo a lo
establecido en el considerando A4".
Por último, dada la solución que se alcanza, las
costas de ambas instancias deben ser afrontadas por
el demandado vencido.
Así lo voto.
LOS DOCTORES PACILIO Y NOGUEIRA DIJERON:
Que Adhieren al voto precedente.
Con lo que termino el acto firmando los
señores Jueces intervinientes y la Secretaria
autorizante. Fdo.: dres. CARLOS ALBERTO VALLEFIN –
ANTONIO PACILIO – CARLOS ALBERTO NOGUEIRA
(Concepción Di Piazza de Fortín – Secretaria).
// Plata, 11 de septiembre de 2.008.
Y VISTOS.
Por tanto en mérito de lo que resulta del
Acuerdo cuya copia autenticada antecede, SE
RESUELVE: 1) Revocar la sentencia (...)en todo lo
que decide; 2) Hacer lugar a la acción promovida y
condenar al Banco de la Nación Argentina a abonar a
C. la suma de PESOS ..., con más los intereses de
acuerdo a lo establecido en el considerando "4"; 3)
Costas de ambas instancias al demandado vencido
(art. 68 y conc. del CPCC).
Regístrese, notifíquese y devuélvase. Fdo.:
dres. CARLOS ALBERTO VALLEFIN – ANTONIO PACILIO –
CARLOS ALBERTO NOGUEIR
Dra Concepción Di Piazza de Fortín.Secretaria.
NOTAS: (1)publicada en el rubro FALLOS DESTACADOScarpeta temática CIVIL (FD.150)-del sitio
WWW.PJN.GOV.AR.Cliquear:1)Fueros Federales;2) justicia Federal
La Plata y fallos destacados-carpeta
temática;(2)idem en el RUBRO FALLOS PLENARIOS –(FP
6)- .
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