Nº 83/Diciembre 2009 Entrevista FRANCISCO CAAMAÑO, MINISTRO DE JUSTICIA 36 “Los procuradores pueden asumir en la ejecución nuevas y decisivas tareas en beneficio de sus clientes” Procuradores Tras participar en la sesión de apertura de las VI Jornadas de Juntas de Gobierno de Colegios de Procuradores, y entre viaje y viaje, en pleno proceso de preparación de la presidencia española de la UE, Francisco Caamaño responde al cuestionario elaborado por esta revista. Como tantos otros sectores, la Justicia vive un momento de cambio en el que se juega dar el salto adelante que tanto necesita. El ministro es consciente de ello, e intenta acometer el proceso de modernización desde varios frentes. En lo que afecta a la Procura, así dibuja al profesional del futuro: competitivo, con conocimientos jurídicos y técnicos, y conocedor de las nuevas tecnologías y de las redes de intercomunicación tanto españolas como comunitarias. “Los procuradores, no lo dudo, estarán ahí y sabrán hacerlo, como siempre, muy bien”, afirma rotundo. –Estamos, sin duda, en un mo­ mento muy importante. En enero se pone en marcha la nueva ofi­ cina judicial. ¿Qué cambios nota­ rán los procuradores, cuando esta nueva oficina judicial esté plena­ mente operativa? –Gran parte de su trabajo de co­ municación procesal se llevará a cabo por medios telemáticos y los nuevos servicios comunes darán una mayor agilización a los trámites procesales. –A grandes rasgos, ¿qué as­ pectos le gustaría destacar de este nuevo modelo de oficina ju­ dicial? –El juez se centrará en el desem­ peño de sus cometidos constituciona­ les y la especialización de los servicios comunes, unida a la utilización de las nuevas tecnologías de la información, acortará los tiempos de respuesta judi­ cial, de modo que la tutela será, como quiere el artículo 24 de la Constitu­ ción, verdaderamente efectiva. –¿Hay plazos para la implan­ tación real de los cambios previs­ tos en la ley? ¿Cuál es el calenda­ rio previsto? –La ley entra en vigor la próxima primavera y ya estamos todos traba­ jando en el despliegue de la nueva oficina. Digo todos, porque ésta es una tarea en la que están implicados no sólo el Ministerio de Justicia sino también las Comunidades Autónomas con competencias asumidas en la materia y el Consejo General del Poder Judicial. –Permítame la ‘maldad’. ¿Tan mal está la Justicia, que incluso en tiempos de crisis su presupuesto crece más del 13 por ciento? –La Justicia necesita muchas re­ formas, procesales o de organización, pero también más recursos y medios. Invertir en Justicia es invertir en segu­ ridad jurídica, es dar confiabilidad a nuestro sistema judicial y, por tanto, hacerlo más previsible y atractivo. Y ése es un hecho crucial para contar con una economía más competitiva, imprescindible para salir con funda­ mentos más sólidos de la difícil si­ tuación económica en la que nos en­ contramos. Por eso, el incremento del presupuesto en materia de Justicia obedece a la imprescindible mejora de un servicio público esencial pero también al robustecimiento de una pieza clave, imprescindible para relan­ zar nuestra economía. –Desde estas mismas páginas, hemos apoyado el esfuerzo que supone el Plan de Modernización que usted anunció el pasado 18 de septiembre. Sin embargo, hay sectores que ven demasiado op­ timista el anuncio de un aumento del 19% de la planta judicial. –El Plan de Modernización se cum­ plirá porque ya se está cumpliendo, como lo demuestra el hecho de que la programación de plazas para el pró­ximo año ya se ajuste a sus previ­ siones. –Algunas voces advierten de que si aumenta el número de jue­ ces, pero no el de órganos judi­ ciales, seguiremos en la misma situación. ¿Cuántos nuevos órga­ nos judiciales se crearán en rea­ lidad en los próximos tres años, descontando jubilaciones, falle­ cimientos o bajas de jueces y ma­ gistrados? –Es evidente que no se puede dar un número exacto, pero tampoco se puede confundir el número de jueces y magistrados con el de unidades ju­ diciales. Nosotros hemos calculado que en los próximos tres años creare­ mos 600 unidades judiciales nuevas, y convocaremos 750 nuevas plazas de jueces. Es una cifra ambiciosa pero al tiempo realista. Procuradores Entrevista Nº 83/Diciembre 2009 En enero cumplirá 47 años. Nacido en Cee (A Coruña), está casado y es padre de dos hijas. Desde abril de 2008 y hasta su nombramiento como Ministro de Justicia el 24 de febrero de 2009, Francisco Caamaño ocupaba el cargo de secretario de Estado de Asuntos Constitucionales y Parlamentarios. Licenciado y doctor en Derecho por la Universidad de Santiago de Compostela, ha sido profesor ayudante y profesor titular de Derecho Constitucional en dicha Universidad. En 1993 fue designado letrado del Tribunal Constitucional y en octubre de 2002 obtuvo la plaza de catedrático de Derecho Constitucional de la Universidad de Valencia. En abril de 2004 fue designado secretario de Estado de Relaciones con las Cortes. Como profesor universitario, ha ejercido la docencia ordinaria de Derecho Constitucional y Derecho comunitario y autonómico. Ha dirigido y participado en diversos programas de investigación, tanto nacionales como comunitarios, así como en programas de cooperación jurídica con el exterior, principalmente con países centroamericanos. Producto de esta actividad ha sido su especialización en temas de derecho parlamentario y jurisdicción constitucional. 37 Entrevista Nº 83/Diciembre 2009 38 –Con carácter previo, el Go­ bierno quiere elaborar una nueva Ley de Planta y Demarcación Ju­ dicial que fije, con criterios acor­ des al actual mapa sociológico, el número de órganos judiciales necesarios y su localización. Eso obligará, necesariamente, a fa­ vorecer algunas poblaciones en detrimento de otras a la hora de ubicar los juzgados. ¿Será muy conflictivo el desarrollo de esta ley? ¿Puede ser uno de los gran­ des obstáculos a salvar? ¿Qué actitud le gustaría encontrar en los distintos entes autonómicos y locales? –Adaptar nuestro mapa judicial al “mapa” de la España real es una tarea difícil pero obligada. El viejo diseño de los partidos judiciales responde a las necesidades de organización terri­ torial de la España del primer tercio del siglo XIX, bien distintas de las actuales. Por tanto, aunque sea una tarea difícil que exige el logro de con­ sensos, es imprescindible acometer un proceso de racionalización y adap­ tación de la planta. –LexNet, la herramienta para las notificaciones y comunica­ ciones telemáticas, sigue avan­ zando. ¿Cuándo estará operativo en todo el territorio? –A finales de este año lo estará al 100 por cien en todo el ­territorio del Ministerio de Justicia y en la pri­ mera mitad del próximo también en el territorio de muchas Comunidades Autónomas con competencia en la materia. LexNet es ya una herra­ mienta de trabajo imprescindible. –¿Qué ocurre con aquellas co­ munidades que tienen sistemas de gestión procesal propio? ¿Se­ rán compatibles con LexNet? –Lo serán, pero también con los demás programas de gestión proce­ sal, a través de ese gran conversor al que llamamos EJIS. –¿Tiene el dato, en número o porcentaje, de las notificaciones que ya se realizan por vía tele­ mática? –En este mes de diciembre esta­ mos en torno al millón de actos de comunicación procesal. Procuradores “LexNet es ya una herramienta de trabajo imprescindible” “Aunque sea una tarea difícil que exige el logro de consensos, es imprescindible acometer un proceso de racionalización y adaptación de la planta” “Nuestro modelo de juez de instrucción es una pieza única en el panorama del Derecho Comparado” –¿Cuándo será realidad el expediente judicial digital, que acabe con las montañas de papel? –Queremos implantarlo desde la experiencia como se está ha­ ciendo en otros países europeos. En este sentido acabamos de sus­ cribir un convenio con la Audien­ cia Nacional para que a finales del próximo año su orden jurisdiccio­ nal penal funcione con juzgados “cero papel”, una experiencia que generalizaremos a otros órganos judiciales. –Coincide con el fiscal general del Estado, cuando afirma que la instrucción, la investigación del proceso pe­ nal, debe recaer en los fisca­ les. ¿Por qué? –Porque quien tiene que es­ clarecer los hechos delictivos y buscar elementos de incrimina­ ción en relación con las personas investigadas difícilmente puede ser, al tiempo, el garante de sus derechos fundamentales. Por eso, nuestro modelo de juez de ins­ trucción es una pieza única en el panorama del Derecho Com­ parado. Sólo el modelo francés se aproxima un poco y en ese país están reformándolo en la línea de deslindar mejor las funciones de investigación de las de garantía, es “Hasta ahora hemos encontrado los consensos políticos necesarios para reformar nuestra Administración de Justicia desde un suelo común y compartido” RAÚL DE ANDRÉS Procuradores Entrevista “Creemos que precisamente en la ejecución los procuradores pueden asumir nuevas y decisivas tareas en beneficio de sus clientes pero también en beneficio de una mayor eficiencia de nuestro sistema de Justicia” ción al que también ha de saber adaptarse, asumiendo nuevos re­ tos y tareas. –Los procuradores se han mostrado dispuestos a asumir más competencias, en su dimensión de colaboradores del órgano judicial, en mate­ rias como la ejecución o las no­ tificaciones. ¿Hay campo para avanzar en tal sentido? –Sin duda, y en ello estamos trabajando. –A la hora de diagnosticar la Justicia española, siempre se llega a la conclusión de que las resoluciones judiciales son de calidad, pero pierden su eficacia al llegar a la fase de ejecución. ¿Qué se puede hacer para mejorarlo? ¿Pue­ den ayudar más los procuradores a arreglar esta si­ tuación? –Creemos que precisamente en la ejecución los pro­ curadores pueden asumir nuevas y de­ cisivas tareas en be­ neficio de sus clien­ tes pero también en beneficio de una mayor eficiencia de nuestro sistema de Justicia. –Por último, defínanos cómo debe ser, a su jui­ cio, el procurador del siglo XXI. –Competitivo, conocedor de las nuevas tecno­ logías y de las redes de interco­ municación tanto españolas como las que ya se están estableciendo a nivel europeo. Auxiliar al cliente en esta tarea, con conocimientos jurídicos y técnicos, será una fun­ ción de asistencia imprescindible en el futuro más inmediato. Los procuradores, no lo dudo, estarán ahí y sabrán hacerlo, como siem­ pre, muy bien. q Nº 83/Diciembre 2009 decir, en sintonía con lo que nosotros también pensamos hacer. –¿Tiene previsto acometer una reforma de la Ley de Enjui­ ciamiento Criminal en tal senti­ do en un futuro próximo? –Es un compromiso que vamos a cumplir, porque no se puede ha­ blar de modernizar nuestro sistema de Justicia sin reformar nuestra legis­ lación procesal criminal. En efecto, cerca del 70 por ciento de los asuntos que se tramitan en nuestros juzgados y tribunales son de carácter penal. Por tanto, actualizar nuestro sistema penal es actualizar nuestro sistema de Justicia. –¿En qué fase se encuentra la relación del Gobierno, en mate­ ria de Justicia, con el principal partido de la oposición? ¿Hay margen para nuevos pactos o acuerdos, como ha ocurrido con la reforma de la oficina judicial? ¿En qué materias? –Hasta ahora hemos encontrado los consensos políticos necesarios para reformar nuestra Administración de Justicia desde un suelo común y compartido. Nuestro propósito es se­ guir trabajando así, aunando esfuer­ zos a través del diálogo. –Se ha destacado de usted su actitud conciliadora y dialogan­ te. Pero pese a sus esfuerzos por amansar las aguas de la Justicia, que bajaban un tanto revueltas, si me permite esta metáfora, la asociación mayoritaria de jueces ya hecho una huelga durante su mandato. ¿Se la esperaba? ¿Fue para usted una decepción? –Nunca compartimos su ­posición, sobre todo en un momento en el que todos estábamos trabajando por bus­ car soluciones y establecer los funda­ mentos para el cambio. En todo caso, aquella fue su decisión y, a la vista de los resultados, no parece que fuera la más acertada. –¿Qué espera de la Procura en este ambicioso proceso mo­ dernizador de la Justicia que ha emprendido? –Que, como siempre, sea un in­ terlocutor y un colaborador indispen­ sable en este proceso de moderniza­ 39