212 FERDINANDO CASADIEGOS CÁCERES d) Latini Veteres. El Lacio se componía de muchas ciudades, que formaban una reunión poderosa, cuya capital era Alba. Después de la desaparición de esta ciudad, Roma pretendió reemplazarla. Se celebraron tratados de alianza; pero un día los latinos quisieron gozar de los honores del consulado y del senado romano, pretensión que fue la causa de una guerra sangrienta, y con la victoria de Roma, 416, se puso fin a la confederación. A pesar de estas luchas continuas, los latinos estaban unidos a los romanos por la vecindad, el idioma y el origen. Tuvieron una gran participación en el derecho de ciudadanía, los derechos privados, y, entre los derechos públicos, el jus suffragii en los comicios por tribus; pero el beneficio de la ley les daba tres medios especiales para conseguir la ciudadanía romana: • Dejando en su aldea un hijo y viniéndose a vivir en Roma (modo suprimido en 659 a.u.c., por la Ley Licinia Mucia que fue una de las causas de la guerra social). • Acusando y haciendo condenar a un ciudadano romano como concusionario (concusión). • Ejerciendo una magistratura en su país o también haciendo parte del Senado Municipal simplemente, como decurión si su ciudad gozaba del jus latium, pero si no tenía sino el minus latium, se requería el ejercicio de una magistratura. Este derecho de latinidad desapareció de Italia cuando Julio César, después de la guerra social, dio el derecho de ciudadanía a toda la Italia; pero en todas las colonias se le vuelve a encontrar. e) Latinos colonos. Al principio, el pueblo romano fundó colonias romanas para extender a lo lejos de su influencia y dar albergue a la población de Roma, que había llegado a ser demasiado compacta. Más tarde, se establecieron colonias latinas, cuyos habitantes tenían un derecho de latinidad inferior al de los antiguos latinos, pero superior al derecho de los peregrinos ordinarios. Los latinos colonos no tenían en Roma ni los derechos políticos ni el jus connubii; solamente disfrutaban del jus commercii, pero podían llegar a la ciudadanía