INTEGRACIÓN ECONÓMICA Y BARRERAS NO ARANCELARIAS

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INTEGRACIÓN ECONÓMICA Y BARRERAS NO
ARANCELARIAS
(VERSIÓN PRELIMINAR)
Aitor Calo Blanco
Universidad de A Coruña
Méndez Naya, José1
Universidad de A Coruña
RESUMEN
El objetivo de este trabajo es el de analizar en que medida la eliminación de los
aranceles, que acompaña a cualquier proceso de integración económica, entre
determinados países provocará el uso de las barreras no arancelarias como instrumento
sustitutivo de los primeros.
El principal resultado que se obtiene es que dicha sustitución no ocurrirá en
general si los países, cuando aplican dichas políticas, tratan de maximizar el bienestar
agregado y que únicamente en el caso de que los países estén especialmente interesados
en proteger a los productores nacionales se va a producir este tipo de sustitución.
Palabras clave: Integración Económica; Políticas Comerciales; Barreras no
Arancelarias.
Códigos J.E.L: F12; F13; F14.
1
José Méndez Naya; Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales; Campus da Zapateira s/n; 15071
A Coruña; Spain. Teléfono: 981-167000; Fax: 981-167070; E-mail: [email protected].
Integración Económica y Barreras No Arancelarias
2
1.INTRODUCCIÓN.
En los últimos años, la organización de la economía internacional en lo que se
refiere a las políticas comerciales instrumentadas por los países se ha caracterizado por
dos variables fundamentales:
Por un lado, los procesos de integración comercial y monetaria han ido
adquiriendo una importancia creciente en varias regiones del mundo, y dichos acuerdos
de comercio regionales incluyen a todo tipo de países, tanto desarrollados como en vías
de desarrollo.
Por otro lado, y Ligado a ese proceso de integración se ha ido produciendo
conjuntamente un fenómeno inverso, donde a medida que los acuerdos internacionales y
rondas del GATT han ido promulgando la reducción de los tipos arancelarios, los países
han reaccionado estableciendo otras medidas no arancelarias, que poseen un efecto
similar que los aranceles, intentando defender a las empresas nacionales de los
competidores foráneos.
El objetivo de este trabajo es analizar en que medida los países que llevan a cabo
un proceso de integración económica y por tanto liberalizan su comercio bilateral
tendrán incentivos a sustituir las barreras comerciales tradicionales por otras de tipo no
arancelario estudiando los efectos que este tipo de comportamiento tiene sobre las
variables relevantes de los países: niveles de precios, beneficios de las empresas,
excedente de los consumidores, bienestar agregado, etcétera.
Empezando por el análisis de los procesos de integración económica, puede
afirmarse que hasta la aparición de la obra de Viner (1950) era idea generalizada que los
procesos de integración eran siempre positivos, puesto que suponían una eliminación de
las barreras comerciales entre los países y representaban un acercamiento al libre
comercio mundial, por todo ello se suponía que sólo podía tener efectos positivos para
todos los países. Todo este planteamiento fue cuestionado por Viner, que en su trabajo
obtuvo como resultado que tras la formación de un bloque comercial se producen dos
efectos contrarios sobre el bienestar: un efecto creación de comercio que es beneficioso
y un efecto desviación de comercio que es perjudicial.
Para solucionar este problema Kemp y Wan (1976) proponen que los países
miembros reajusten sus aranceles exteriores de tal modo que el comercio con los países
miembros no se viese afectado, y por tanto el único efecto derivado del acuerdo
comercial es el de creación de comercio, aunque los países de acuerdo con la teoría del
arancel óptimo preferirían utilizar su política comercial buscando maximizar su
bienestar, y por ello no tendrían en principio incentivos para evitar el efecto desviación
de comercio.
Por otro lado, en lo que se refiere a las barreras no arancelarias decir en primer
lugar que nos referimos a este término en sentido amplio incluyendo tanto normas
legales como procedimientos administrativos basados en directivas informales de
instituciones y gobiernos. Debido a su naturaleza estas son difíciles de conocer,
interpretar y cumplir, puesto que no suelen ser transparentes y muchas veces es
complicado interpretarlas. El número y variedad de barreras no arancelarias existentes
es muy amplio, sin embargo todas tienen en común que son discriminatorias contra los
competidores extranjeros en favor de las compañías nacionales.
Integración Económica y Barreras No Arancelarias
3
En cuanto a las barreras no arancelarias más importantes, Sanna-Randaccio (1996)
destaca en su trabajo las que generalmente se reconocen como más significativas. Entre
ellas se destacan los procedimientos aduaneros, los controles en las aduanas, las
restricciones voluntarias a la exportación que un país importador fuerza a sus
exportadores, las cuotas a la importación, las regulaciones sanitarias y de seguridad, el
aprovisionamiento por parte gobierno que lo hace discriminando a favor de las empresas
nacionales y las ayudas estatales como los subsidios y los beneficios fiscales. Otros
instrumentos a destacar son el control de tipos de cambio, requisitos de empaque y
etiquetado, regulaciones ecológicas, etc.
En lo que se refiere a la proliferación de barreras no arancelarias que se está dando
recientemente, una de las características más destacadas de las últimas décadas es la
constatación de que a medida que se llevaban a cabo en el mundo diferentes procesos de
integración que han ido dando lugar a la continua reducción de las barreras arancelarias
tradicionales se ha ido produciendo paralelamente un incremento de la protección vía
barreras no arancelarias. De esta manera, dichas barreras no arancelarias en sentido
amplio, han sido utilizados como mecanismos alternativos a las políticas tradicionales
para proteger los mercados nacionales. Por esta razón la eliminación de esas barreras se
ha convertido en la última década en una de las principales metas de todo acuerdo
comercial.
Yu (2000) se centro en el análisis de este problema y propone un modelo en el
cual los aranceles son sustituidos por las barreras no arancelarias. Yu presta especial
atención a las posibles medidas de presión que pueden hacer los diferentes agentes
económicos. Así un lobby empresarial intentará influir al máximo en los gobiernos
cuando estos deciden su política comercial. Por otra parte el gobierno deberá atender a
su vez a los intereses de los consumidores, puesto que cualquier política que eleve los
precios reducirá el apoyo de la ciudadanía en el gobierno. De esta manera los dirigentes
tendrán que buscar un equilibrio entre los intereses de ambos agentes. Bajo esta
perspectiva, se justifica la sustitución de las barreras arancelarias por las no arancelarias,
puesto que estas últimas son en general mucho menos transparentes al público.
A principios de la década de los noventa Neven y Röller (1991) intentaron
comprobar si en la Unión Europea se daba realmente una igualdad entre las empresas
europeas a la hora de competir en el mercado comunitario, pero los patrones de
comercio que encontraron sugerían que esto no era así, puesto que las empresas
nacionales siempre tenían cuotas de mercado superiores a las de las empresas
comunitarias. Según ellos esto se podía deber a una determinada preferencia por los
productos nacionales, o a la existencia de mayores costes para las empresas
comunitarias, muy ligado a la existencia de barreras no arancelarias, lo que indicaría
que la integración no era completa aún. Finalmente también comprobaron como era el
comercio con el resto de países, y obtuvieron que las barreras no arancelarias
dificultaban más el comercio con los países no socios, que dentro de la unión. De esta
manera, partiendo de unas determinadas cuotas de mercado para las empresas
nacionales, para las empresas de los países socios y para las empresas de los países no
miembros, se puede decir que una medida que haga que las empresas socias vendan más
a costa de las nacionales, es una medida que revela un aumento de la integración. Si la
que aumenta es la cuota de los países no miembros, lo que está sucediendo es que el
país nacional se está integrando con el resto del mundo. Finalmente, si lo que se
produce es un incremento de las importaciones de países socios con respecto a los no
socios, revelaría una desviación de comercio.
Sanna-Randaccio (1996) introduce la novedad de diferenciar dos tipos de
empresas sobre las que recaen la aplicación de las barreras no arancelarias. Por un lado
Integración Económica y Barreras No Arancelarias
4
estarían las empresas exportadoras tradicionales, ubicadas en un determinado país e
intentan vender sus mercancías en el mercado de cualquier otro país. Por otro lado, toma
en cuenta el continuo proceso que se da en regiones como la Unión Europea, donde la
inversión directa en un país por parte de otro país miembro. De esta manera las
empresas extranjeras que se instalen en un país foráneo para vender en su mercado
estarán sujetas a la imposición de unas menores barreras no arancelarias. Partiendo así
de esos dos tipos de barreras llega a la conclusión de que el impacto de un proceso
integrador sobre el excedente del consumidor y el bienestar general estará en función de
qué tipo de barrera es la que se reduce, puesto que conllevaría un trasvase entre
exportación e inversión directa en función de cuál de ellas se reduzca.
En lo referente a la determinación de las barreras al comercio que se aplican al
país no miembro, se analiza en que medida es mejor establecerlos de forma conjunta o
delegar la política comercial en uno de los socios.
En cuanto a los problemas de delegación, Lipsey (1970) justificó que si existe la
posibilidad de transferencias entre los países miembros, la política exterior común es
aquella que maximiza el bienestar agregado de los países miembros. En caso de no
existir transferencias, Riezman (1985) argumentó que se produciría un conflicto de
intereses entre los países porque todos estarían interesados en fijar la política comercial
que maximiza su utilidad.
La formación de una unión aduanera supone la eliminación de cualquier barrera al
libre comercio entre los países miembros. Por tanto, no hay posibilidades de aplicar
políticas comerciales intervensionistas ya sean aranceles, cuotas, subsidios a las
exportación, o cualquier otra. Sin embargo, se supone que los países miembros pueden
interferir de forma indirecta en la libre circulación de mercancías aplicando este tipo de
medidas a las que antes nos referíamos como barreras arancelarias en sentido amplio.
El objetivo principal de este trabajo es analizar en que medida las barreras no
arancelarias pueden ser consideradas como un sustitutivo de las políticas arancelarias
tradicionales.
2. EL MODELO.
Se parte del modelo de dumping recíproco planteado inicialmente por Brander
(1981), asumiendo la existencia de tres países denotados respectivamente 1, 2 y 3. En
cada uno de ellos se localiza una empresa. Todas ellas comercializan un producto
homogéneo que se vende únicamente en el mercado del país 3, también llamado país
importador o consumidor.
Las empresas producen bajo rendimientos constantes a escala, y sus costes
marginales de producción son asimétricos, siendo c1, c2 y c3 respectivamente los costes
de la empresa 1, 2 y 3. Sin pérdida de generalidad, se supone que la relación de costes
es tal que c1 > c2 > c3, y con la finalidad de simplificar el análisis normalizamos el coste
marginal de la empresa del país 3 a cero (c3 = 0).
Debido a la hipótesis de rendimientos constantes a escala y al hecho de que no
existen restricciones de capacidad, los mercados estarán segmentados, lo que significa
que desde el punto de vista de las empresas los cambios que pueden ocurrir en uno de
los mercados no influyen en absoluto en las decisiones tomadas en los otros. Por lo
tanto el mercado del país 3 puede ser analizado independientemente del resto.
Se denota por x, y y z a las cantidades vendidas en el mercado del país 3 por las
empresas de los países 1, 2 y 3 respectivamente. De esta manera la cantidad total
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5
vendida en el mercado vendrá dada por q = x + y + z. En este caso, la función inversa
de demanda, que se obtiene a partir de una función cuasi-lineal de tipo:
b
U (q ) = aq − q 2
2
puede escribirse como una función lineal de la cantidad como sigue:
p = a − bq
en donde p es el precio de equilibrio del mercado.
Se supone que el país consumidor puede aplicar aranceles discriminatorios sobre
las empresas de los otros países, los cuales a su vez disponen de la posibilidad de
otorgar subsidios a la exportación de la empresa localizada en su territorio. De esta
manera las funciones de beneficios de las compañías del país 1 y 2 son respectivamente:
π1 = ( p + s1 − t1 − c1 − n )x
π 2 = ( p + s 2 − t 2 − c2 − n ) y
siendo t1 y t2 los aranceles impuestos por el tercer país a los productos procedentes del
país 1 y 2 respectivamente. Además s1 es el subsidio que otorga el país 1 a su empresa
mientras que s2 es el que concede el país 2 a la suya. El término n sería el conjunto de
barreras no arancelarias que el país consumidor impone a sus importaciones.
En cuanto a la función de beneficios de la empresa del país 3, puesto que vende en
su mercado nacional, no afrontará ningún tipo de carga arancelaria. Teniendo en cuenta
esto y que su coste marginal de producción es constante e igual a cero, la función de
beneficios queda de la siguiente manera:
π 3 = pz
El bienestar del país consumidor vendrá dada por la suma del excedente de los
consumidores, del ingreso arancelario y de los beneficios de la empresa:
b
U 3 = aq − q 2 − pq + t1 x + t 2 y + π 3
2
En cuanto al bienestar de los otros dos países, no se tiene en cuenta la utilidad de
los consumidores, por lo que el bienestar general de cada país vendrá dado por el
beneficio de la empresa nacional menos el gasto derivado del subsidio:
U 1 = π1 − s1 x
U 2 = π 2 − s2 y
Con la finalidad de desarrollar el análisis se plantea un juego en dos etapas. En la
primera de ellas los países imponen simultáneamente sus políticas óptimas, es decir, los
subsidios, aranceles y barreras no arancelarias, mientras que en la segunda etapa las
empresas competirían en cantidades. El juego se resuelve por inducción hacia atrás,
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determinando en primer lugar el equilibrio de Cournot. En dicha situación de equilibrio
las cantidades vendidas por las empresas dependerán de los aranceles, los subsidios y
las barreras no arancelarias que se encuentren imponiendo los países. A continuación,
suponiendo que los países conocen el comportamiento de las empresas, se determinan
las políticas comerciales óptimas. Por tanto el concepto de equilibrio utilizado es el de
equilibrio perfecto en subjuegos.
En cuanto a la secuencia de escenarios que se analizan, estos van a seguir un orden
concreto en función de un determinado proceso de integración económica llevado a
cabo.
3. POLÍTICAS COMERCIALES DE LOS PAÍSES.
3.1 Actuación no cooperativa sin discriminación arancelaria.
En este escenario el gobierno del país consumidor establece un arancel no
discriminatorio t sobre sus importaciones procedentes de los otros dos países, a su vez
estos otorgan subsidios a sus exportaciones.
En este caso, las funciones de beneficios están dadas por:
π1 = ( p + s1 − t − c1 )x
π 2 = ( p + s 2 − t − c2 ) y
π 3 = pz
y el bienestar de cada país:
U 1 = π1 − s1 x
U 2 = π 2 − s2 y
b
U 3 = aq − q 2 − pq + t ( x + y ) + π 3
2
Empezando por la segunda etapa, se supone que las empresas deciden vender en el
mercado una cantidad que hace máximo el valor de su función de beneficios. Así se
obtendría:
∂π1
= −2bx + a − by − bz + s1 − t − c1 = 0
∂x
∂π 2
= −2by + a − bx − bz + s 2 − t − c2 = 0
∂y
∂π 3
= −2bz + a − bx − by = 0
∂z
Las cantidades de equilibrio se obtienen resolviendo el anterior sistema y están
dadas por:
Integración Económica y Barreras No Arancelarias
7
1
(a − s2 − 2t + c2 + 3s1 − 3c1 )
4b
1
y = (a + 3s 2 − 2t − 3c2 − s1 + c1 )
4b
1
z = (a − s 2 + 2t + c2 − s1 + c1 )
4b
Como puede observarse, la cantidad vendida por la empresa del país consumidor
aumenta cuanto mayores son los aranceles impuestos por el país y menores son los
subsidios a la exportación por parte de los otros dos países. Respecto a las cantidades
vendidas por las otras dos empresas ocurre justamente lo contrario. A lo largo del
trabajo, y al objeto de garantizar que las cantidades de equilibrio sean positivas, se
asume que a>13c1-9c2.
A continuación, en la primera etapa se supone que los países, conocido el
comportamiento de las empresas, utilizan sus políticas comerciales tratando de
maximizar su bienestar:
x=
∂U 1 1
= (a − s 2 − 2t + c2 − 3s1 − 3c1 ) = 0
∂s1 8b
∂U 2 1
= (a − 3s 2 − 2t − 3c2 − s1 + c1 ) = 0
∂s 2 8b
∂U 3 1
= (3a + s2 − 10t − c2 + s1 − c2 ) = 0
∂t
8b
siendo las funciones de reacción:
a − s 2 − 2t + c2 − 3c1
3
a + c1 − 2t − 3c2 − s1
s 2* =
3
3a + s 2 − c2 + s1 − c1
t* =
10
s1* =
Tanto los subsidios a la exportación como los aranceles sobre las importaciones son
positivos, resultados que concuerdan con los obtenidos por Brander y Spencer (1984),
que argumentan que la fijación de los aranceles óptimos por parte del país consumidor
se hace con el objetivo de extraer la mayor renta posible de las empresas exportadoras,
así como con los obtenidos por Brander y Spencer (1985) que justifican los subsidios a
las exportaciones como un instrumento que utilizan los países para desviar beneficios de
las empresas hacia las empresas nacionales. Por esa razón se gravará más cuanto más
grande sea el margen de la empresa. Del mismo modo un gobierno subsidia a una
empresa para que esta gane mayor cuota de mercado, y por ello el incentivo a subsidiar
será mayor cuanto más grande sean los beneficios de la empresa.
el país consumidor impondrá mayores aranceles cuanto mayor sea el margen de
beneficios de las empresas, es decir, cuanto mayores sean los subsidios recibidos, y
menor sea el coste de producción. Algo parecido sucede con los gobiernos de los otros
dos países, que tendrán mayores incentivos a subsidiar a medida que el margen de
Integración Económica y Barreras No Arancelarias
8
beneficios de la empresa situada en su país se hace relativamente más grande en
comparación con el margen de la otra empresa exportadora.
Resolviendo las anteriores funciones de reacción se obtienen los valores de
equilibrio de los instrumentos de política comercial:
a + 9c2 − 13c1
11
a − 13c2 + 9c1
s2 A =
11
7a − 3c2 − 3c1
tA =
22
s1 A =
estos valores van a ser todos positivos siempre que a verifique la restricción impuesta.
La diferencia existente entre los subsidios a las exportaciones de los países 1 y 2 está
dada por
s 2 − s1 = 2c1 − 2c2 > 0
lo que nos indica que cuanto más eficiente sea la empresa del país 2 respecto a la
empresa del país 1, lo que significa que mayor será su margen relativo de beneficio,
mayor será la diferencia existente entre ambos subsidios.
Dadas las políticas comerciales óptimas pueden determinarse las cantidades
vendidas por las empresas, y dadas éstas, el nivel de bienestar asociado para cada uno
de los países está dado por:
3
(a + 9c2 − 13c1 )2
U1A =
484b
3
(a − 13c2 + 9c1 )2
U2A =
484b
3
U 3A =
34a 2 − 15ac2 − 15ac1 + 15c22 + 30c2 c1 + 15c12
242b
(
)
3.2.Actuación no cooperativa con discriminación arancelaria.
Ahora, se supone que el país importador puede aplicar aranceles discriminatorios
sobre sus importaciones. Por lo tanto, aplicará un impuesto t1 a los productos
procedentes del país 1 y un impuesto t2 a los procedentes del país 2. En este caso, los
beneficios del los países 1 y 2 y el bienestar agregado del país 1 están dados
respectivamente por:
π1 = ( p + s1 − t1 − c1 )x
π 2 = ( p + s2 − t 2 − c2 ) y
b
U 3 = aq − q 2 − pq + t1 x + t 2 y + π 3
2
Procediendo como en la situación anterior, la competencia a la Cournot en la
segunda etapa del juego, da como resultado, las siguientes cantidades en función de las
políticas comerciales de los países:
x=
1
(a − s2 + t 2 + c2 + 3s1 − 3t1 − 3c1 )
4b
Integración Económica y Barreras No Arancelarias
9
1
(a + 3s2 − 3t 2 − 3c2 − s1 + t1 + c1 )
4b
1
z = (a − s 2 +t 2 + c2 − s1 + t1 + c1 )
4b
y=
En la primera etapa conocida la conducta de las empresas, los gobiernos
determinan las políticas comerciales óptimas actuando del siguiente modo:
∂U 1 1
= (a − s 2 + t 2 + c2 − 3s1 − 3t1 − 3c1 ) = 0
∂s1 8b
∂U 2 1
= (a − 3s2 − 3t 2 − 3c2 − s1 + t1 + c1 ) = 0
∂s 2 8b
∂U 3
1
(3a − 7 s2 + 11t 2 + 7c2 + 9s1 − 21t1 − 9c1 ) = 0
=
∂t1 16b
∂U 3
1
(3a + 9s2 − 21t 2 − 9c2 − 7 s1 + 11t1 + 7c1 ) = 0
=
∂t 2 16b
Los valores de equilibrio para las políticas comerciales están dados por:
1
3
19
a + c2 − c1
11
44
44
1
19
3
s 2 B = a − c2 + c1
11
44
44
7
21
45
t1B = a + c2 − c1
22
88
88
7
45
21
t 2 B = a − c2 + c1
22
88
88
s1B =
Como puede observarse, el país consumidor discrimina aranceles, y lo hace de tal
manera que grava más al país con menores costes marginales de producción:
t 2 B − t1B =
3
(c1 − c2 ) > 0
4
esto es debido, tal y como se ha indicado, a que un gobierno tendrá mayores incentivos
a imponer aranceles cuanto más grande sea el margen de beneficios de la empresa.
Los niveles de bienestar asociados a este comportamiento están dados por:
3
(4a + 3c2 − 19c1 )2
U1B =
7744b
3
(4a − 19c2 + 3c1 )2
U2B =
7744b
3
U 3B =
544a 2 − 240ac2 − 240ac1 + 603c22 − 246c2 c1 + 603c12
3872b
(
)
Integración Económica y Barreras No Arancelarias
10
Los efectos relativos sobre el bienestar derivados de introducir la discriminación
arancelaria pueden deducirse a partir del análisis de las siguientes expresiones:
9
U 1B − U 1 A =
8ac1 − 8ac2 − 39c22 + 110c2 c1 − 71c12 > 0
704b
9
U 2B − U 2 A =
8ac2 − 8ac1 − 71c22 + 110c2 c1 − 39c12 < 0
704b
9 2
U 3B − U 3 A =
c2 − 2c2 c1 + c12 > 0
32b
Por tanto, los países 1 y 3 salen beneficiados mientras que el país 2 resulta perjudicado
como consecuencia de la discriminación. Esto es debido a que la discriminación
arancelaria provoca que la empresa del país 1, en la medida en la que se ve menos
gravada, venda una mayor cantidad en el mercado del país 3 mientras que la del país 2
venderá menos, pero de tal forma que la cantidad total vendida en el mercado no se verá
afectada y por lo tanto tampoco lo hará el precio de equilibrio.
(
(
)
(
)
)
3.3.Formación de una Unión Aduanera.
En este nuevo contexto se supone que el país consumidor y el menos país eficiente
que, tal y como hemos indicado, forman un club de comercio preferencial en el
escenario anterior, deciden incrementar su nivel de integración económica formando
una unión aduanera. De esta forma el país consumidor no puede poner trabas a los
productos de su socio comercial, mientras que a éste le queda totalmente prohibido
otorgar cualquier tipo de subvención a su empresa.
Los beneficios de la empresa del país 1 y las funciones de bienestar de los países 1
y 3 están dados por:
π1 = ( p − c1 )x
U 1 = π1
b
U 3 = aq − q 2 − pq +t 2 y + π 3
2
Procediendo de forma similar a los casos anteriores se obtienen los siguientes
niveles de bienestar asociado a cada uno de los países:
1
(4a − 10c1 + 3c2 )2
225b
1
(a − 3c2 )2
=
75b
1
=
57a 2 − 42ac2 + 25c12 + 63c22
150b
U 1C =
U 2C
U 3C
(
)
En lo que se refiere a los efectos relativos sobre el bienestar derivados del
incremento en el nivel de integración económica se obtiene lo siguiente:
Integración Económica y Barreras No Arancelarias
11
U 1C − U 1B =
(
)
1
530725c12 − 516920ac1 − 387690c2 c1 + 113104a 2 + 169656ac 2 + 63621 > 0
1742400b
U 2C − U 2 B =
=
(
)
1
4144a 2 − 12264ac2 − 11529c22 − 54000ac1 + 25650c2 c1 − 2025c12 > 0
580800b
U 3C − U 3 B =
=
=
(
)
1
55350c2 c1 − 12048a 2 − 27312ac2 − 87275c12 − 13707c22 + 54000ac1 < 0
290400
El bienestar de los países 1 y 2 aumentan, porque como consecuencia de la formación
de la unión aduanera se incrementan los beneficios de sus empresas. Sin embargo, el
país consumidor ve reducido su nivel de bienestar ya que la pérdida de ingreso
arancelario, que se deriva de eliminación de t1, junto con la caída del beneficio de la
empresa nacional, debido a la menor protección frente al exterior, supera el incremento
en el excedente de los consumidores debido a la caída en el precio del bien.
3.4.Introducción de las Barreras No Arancelarias.
En el apartado anterior, se ha justificado que el país consumidor se ve perjudicado
como consecuencia de la formación de la unión aduanera y la correspondiente pérdida
de un instrumento de política comercial, se supone que dicho país introduce las barreras
no arancelarias tratando de paliar este efecto.
En estas circunstancias, los beneficios de las empresas 1 y 2 se verán afectados de la
siguiente forma:
π1 = ( p − c1 − n )x
π 2 = ( p + s 2 − t 2 − c2 − n ) y
Una vez más, actuando de forma similar a los casos anteriores pueden
determinarse las políticas óptimas de los países que están dadas por:
1
1
1
a + c1 − c2
21
7
7
1
3
3
t 2 D = a + c1 − c2
7
7
7
3
5
9
nD = a − c1 − c2
14
14
14
s2 D =
Así como los niveles de bienestar asociados que están dados por:
1
(a − 3c1 + 3c2 )2
36b
1
(a + 3c1 − 3c2 )2
=
588b
1
=
6c12 − 4ac2 + 17a 2 + 4ac1 + 6c22 − 12c1c2
46b
U 1D =
U 2D
U 3D
(
)
Integración Económica y Barreras No Arancelarias
12
Los efectos relativos sobre el bienestar derivados de la introducción de las
barreras no arancelarias pueden deducirse del análisis de las siguientes expresiones:
U 2 D − U 2C
U 3 D − U 3C
(
)
1
189c22 − 39a 2 + 170ac1 + 54ac2 − 175c12 − 210c2 c1
900b
1
=
50ac1 − 57 a 2 + 342ac2 + 75c12 − 150c2 c1 − 513c22
4900b
1
=
1458ac2 − 325c12 − 243a 2 + 600ac1 − 2187c22 − 1800c2 c1
7350b
U 1D − U 1C =
(
)
(
)
El signo de las anteriores expresiones está indeterminado, lo que significa que la
introducción de las barreras no arancelarias tiene un efecto ambiguo sobre el nivel de
bienestar de los países. Sin embargo, puede afirmarse que si la asimetría existente entre
los costes de producción es suficientemente grande, las tres expresiones tienen signo
negativo lo que significa que la aplicación de las barreras no arancelarias resulta
perjudicial para los tres países. Por tanto, desde el punto de vista del bienestar agregado,
no tiene sentido que el país consumidor introduzca las barreras no arancelarias. Un
análisis a nivel desagregado, revela que a pesar de que las barreras no arancelarias
suponen una pérdida de ingreso arancelario y un perjuicio para los consumidores,
resultan beneficiosas desde el punto de vista de la empresa nacional.
4. CONCLUSIONES
Partiendo de un modelo sencillo de comercio internacional en el cual hay tres
países cada uno de ellos con una empresa que produce un determinado producto
homogéneo y en donde las tres empresas, que son asimétricas en lo que se refiere a su
eficiencia productiva, venden su producción en el mercado de uno de los países, se
analizan los efectos derivados del incremento en el nivel de integración económica entre
el país consumidor y el productor menos eficiente. En concreto, se justifica que el país
consumidor se ve perjudicado como consecuencia de la formación de una unión
aduanera excepto que utilice alguna otra medida de política comercial como son las
barreras no arancelarias.
La utilización de dichas barreras no arancelarias tiene un efecto indeterminado
sobre el nivel de bienestar de los tres países, pero puede afirmarse que si la asimetría
existente entre los costes de producción de las empresas más ineficientes es
suficientemente grande, los tres países se ven perjudicados, en términos de bienestar
agregado, como consecuencia de la introducción de las barreras no arancelarias por
parte del país consumidor. Sin embargo, la introducción de dichas barreras a pesar de
que supone una pérdida de ingreso arancelario así como un perjuicio para los
consumidores es beneficiosa si tenemos en cuenta los beneficios de la empresa nacional.
En base al anterior resultado se justifica que la proliferación de las barreras no
arancelarias que acompaña cualquier proceso de liberalización de la economía es debido
a que los gobiernos, cuando fijan sus políticas comerciales están especialmente
preocupados por los efectos de dichas políticas sobre los beneficios de las empresas.
El análisis propuesto puede completarse introduciendo de forma explícita una
función de bienestar social distorsionada en donde el gobierno pondere de forma
Integración Económica y Barreras No Arancelarias
13
diferente los distintos componentes del bienestar social, en concreto, pondere de forma
diferente los beneficios de las empresas.
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