Versión definitiva de 05/06/2008 COCOF 08/0020/04-EN Documento de orientación sobre las verificaciones de gestión que deberán llevar a cabo los Estados miembros en operaciones cofinanciadas por los Fondos Estructurales y el Fondo de Cohesión durante el periodo de programación 2007 — 2013 Índice 1 2 Introducción Requisitos regulatorios Aspectos principales de las verificaciones de gestión para los Fondos Estructurales y de Cohesión 2.1 Verificaciones de gestión: principios generales y propósito 2.2 Responsabilidades de las autoridades de gestión, los organismos intermedios y los beneficiarios 2.3 Orientación sobre verificaciones de gestión 2.4 Momento de realización de las verificaciones de gestión 2.5 Metodología y alcance de las verificaciones de gestión establecidas en el artículo 13(2) 2.6 2.7 2.8 2.9 2.10 2.11 3. Organización de verificaciones sobre el terreno Intensidad de las verificaciones Documentación de las verificaciones de gestión Subcontratación de las verificaciones de gestión Dictamen de los auditores Auditorías / verificaciones de gestión bajo la responsabilidad de la autoridad de auditoría Áreas específicas relacionadas con las verificaciones de gestión 3.1 Verificaciones de gestión de contrataciones públicas 3.2 Medio ambiente 3.3 Verificaciones de gestión en programas de ayuda estatal 3.4 Ayudas estatales 3.5 Instrumentos de ingeniería financiera 3.6 Proyectos generadores de ingresos 3.7 Invariabilidad de las operaciones 3.8 Igualdad y no discriminación 3.9 Objetivo de cooperación territorial europea (CTE) 2 3 3 5 5 6 7 7 8 10 10 11 12 13 14 14 14 17 19 20 21 23 24 24 25 Introducción El objetivo del presente documento es proporcionar orientación sobre determinados aspectos prácticos de la aplicación del artículo 13 del Reglamento de la Comisión (CE) n.º 1828/2006. Su propósito es servir de documento de consulta para los Estados miembros en la aplicación de dicho artículo. Se recomienda a los Estados miembros que apliquen la orientación proporcionada tomando en consideración sus propias estructuras organizativas y de control. Las misiones de auditoría de la Comisión llevadas a cabo durante el periodo de programación 2000 - 2006 han puesto de manifiesto las ventajas potenciales de un documento de estas características. En él se abordan los requisitos regulatorios, los principios generales y el propósito de las verificaciones; los organismos responsables de su ejecución; el calendario, alcance e intensidad de las verificaciones; la organización de verificaciones sobre el terreno; el requisito de documentar el trabajo y la subcontratación. Se proporcionan ejemplos más detallados de buenas prácticas en varias áreas específicas –a saber: contratos públicos y programas de ayuda– que en ocasiones han resultado problemáticas para los Estados miembros. Asimismo incluye información sobre las verificaciones de gestión en los ámbitos de ayuda pública, ingeniería financiera, proyectos generadores de ingresos y Cooperación Territorial Europea. También se tratan aspectos relacionados con la invariabilidad de las operaciones, la igualdad, la no discriminación y el medio ambiente. Debido a que las estructuras organizativas varían enormemente de un Estado miembro a otro, en este documento no es posible analizar cada una de las posibles situaciones. Las verificaciones de gestión son fundamentalmente responsabilidad de la autoridad de gestión, que goza de la facultad de delegar tareas en organismos intermedios. Por tanto, cuando en las notas se haga referencia a autoridades de gestión podrá considerarse que la alusión engloba a organismos intermedios a los que la autoridad de gestión haya encomendado algunas o todas las tareas de verificación. El presente documento contiene referencias a otras notas de orientación relevantes que pueden consultarse en http://www.cc.cec/vista/latestdocuments.action 1. Requisitos regulatorios El artículo 13(2) del Reglamento (CE) n.º 1828/2006 exige que las verificaciones que la autoridad de gestión está obligada a emprender conforme al artículo 60(b) del Reglamento (CE) n.º 1083/2006 cubran los aspectos administrativos, financieros, técnicos y físicos de las operaciones, según proceda. Las verificaciones deberán garantizar la veracidad del gasto declarado, el suministro de los bienes o servicios conforme a la decisión aprobatoria, la corrección de las solicitudes de reembolso por parte del beneficiario y la conformidad de las operaciones y el gasto con las normas nacionales y comunitarias1. Englobarán procedimientos diseñados para evitar la doble financiación de gastos correspondientes a otros planes nacionales o comunitarios y a otros periodos de programación. Entre las verificaciones se incluirán la verificación administrativa de cada solicitud de reembolso entregada por los beneficiarios y las verificaciones sobre el terreno de operaciones individuales. 1 Se incluye el principio de buena gestión financiera establecido en el artículo 27 del Reglamento del Consejo (CE, Euratom) n.º 1605/2002, de 25 de junio de 2002, relativo al Reglamento Financiero aplicable al presupuesto general de las Comunidades Europeas. 3 El artículo 13(4) del Reglamento (CE) n.º 1828/2006 exige que la autoridad de gestión establezca normas y procedimientos escritos para las verificaciones administrativas y sobre el terreno, y que mantenga registros para cada verificación que den cuenta del trabajo realizado, la fecha y los resultados de la verificación, y las medidas tomadas respecto de las irregularidades que se hubieren detectado2. En virtud del artículo 13(4) del Reglamento (CE) n.º 1828/2006, cuando la autoridad de gestión sea también beneficiaria con arreglo al programa operativo, la organización de las verificaciones arriba citadas respetará la debida separación de funciones entre la sección responsable de la ejecución de la operación y la sección responsable de las verificaciones. La orientación contenida en la nota se aplica tanto a los Fondos Estructurales como al Fondo de Cohesión (en adelante, "los Fondos"), salvo que se indique lo contrario. ************************************** 2. Aspectos principales de las verificaciones de gestión para los Fondos Estructurales y de Cohesión Este documento facilita orientación sobre aspectos particulares de las verificaciones de gestión. Las prácticas consideradas representativas de sistemas de control especialmente sólidos en materia de verificaciones constan resaltadas como ejemplos de “ mejor práctica”. Siempre que sea relevante, se incluirán referencias a otros documentos de orientación y notas informativas. 2.1. Verificaciones de gestión: principios generales y propósito Las verificaciones de gestión son parte del sistema de control interno3 de toda organización bien gestionada. Son los controles normales cotidianos que la dirección lleva cabo en una organización con vistas a garantizar que los procesos bajo su responsabilidad se desarrollan correctamente. Un ejemplo sencillo de verificación en el seno de una organización corriente sería comparar los bienes finalmente entregados con la orden de compra correspondiente, comprobando la cantidad, el precio y el estado de los productos. Esta verificación asegura el suministro de la cantidad real de bienes solicitados, conforme al precio acordado y la calidad deseada. Evidentemente, en procesos más complejos se ampliará el alcance de las verificaciones, pudiendo incluir la verificación del cumplimiento de leyes y reglamentos. El principio, no obstante, sigue siendo el mismo: que las verificaciones emprendidas en una organización por la dirección deben garantizar el correcto desarrollo de los procesos a su cargo y el cumplimiento de las leyes y reglamentos pertinentes. Las verificaciones de gestión establecidas en el artículo 13 no son distintas, por cuanto también se corresponden con las verificaciones de gestión cotidianas de los procesos bajo la responsabilidad de la organización, llevadas a cabo con el fin de comprobar el suministro de los bienes y servicios cofinanciados, la autenticidad de los gastos reclamados y el cumplimiento de las condiciones contenidas en la Decisión de la Comisión 2 3 El término "irregularidad" hace referencia al incumplimiento de una disposición del derecho comunitario, a raíz de un acto u omisión por parte de un operador económico, cuyo efecto real o potencial suponga un perjuicio para el presupuesto general de las Comunidades al imputar una partida de gastos injustificada (artículo 2(7) del Reglamento del Consejo (CE) 1083/2006). El control interno se define, en términos generales, como un proceso llevado a cabo por el consejo de administración, la dirección y otros miembros del personal de una entidad, diseñado para proporcionar un grado de garantía razonable en cuanto al logro de objetivos dentro de las siguientes categorías: La eficacia y eficiencia de las operaciones. La fiabilidad de la información financiera. El cumplimiento de las leyes y normativas aplicables. Fuente: definición de control interno COSO. 4 en la que se aprueba el programa operativo y el reglamento nacional y comunitario aplicable. Sin embargo, aunque los sistemas de control interno de los Estados miembros pueden ser adecuados para los programas nacionales, es posible que necesiten ser adaptados con vistas a cumplir determinados requisitos específicos de los Fondos. Las verificaciones de gestión son parte integrante del sistema de control interno de todas las organizaciones y, cuando su aplicación es correcta, también contribuyen a prevenir y detectar casos de fraude. 2.2. Responsabilidades de las autoridades de gestión, los organismos intermedios y los beneficiarios Referencia Documento de orientación sobre las funciones de la autoridad de certificación durante el periodo de programación 2007-2013 (borrador) Las autoridades de gestión4 son responsables de gestionar y aplicar los programas operativos atendiendo al principio de buena gestión financiera y en particular deben: garantizar que la selección de operaciones para financiación se lleva cabo conforme a los criterios aplicables al programa operativo y que las operaciones cumplen las normas nacionales y comunitarias pertinentes durante todo el periodo de ejecución; verificar el suministro de los bienes y servicios cofinanciados, la veracidad de los gastos declarados por los beneficiarios respecto de las operaciones y su conformidad con las normas nacionales y comunitarias; garantizar que la autoridad de certificación recibe toda la información necesaria relativa a los procedimientos y a las verificaciones realizadas en los gastos, a efectos de certificación; garantizar el cumplimiento de las obligaciones en materia de información y publicidad. La autoridad de gestión es quien tiene la responsabilidad general sobre estas funciones. Puede optar por encomendar5 algunas o todas las tareas a organismos intermedios6. Sin embargo, no podrá delegar la responsabilidad general de garantizar su correcta ejecución. Por tanto, cuando se encomienden determinadas tareas a otros organismos, la autoridad de gestión deberá, en su capacidad supervisora, asegurarse de que las funciones se han desarrollado correctamente. Esto puede hacerse de varias formas, tales como: obtener y revisar los informes pertinentes elaborados por los organismos intermedios; recibir los informes de auditoría preparados en el contexto del artículo 62.1 (a) y (b) del Reglamento del Consejo (CE) n.º 1083/2006, que deberán mencionar las revisiones de las verificaciones realizadas conforme al artículo 13(2) en el nivel de los organismos intermedios; y llevar a cabo comprobaciones de calidad en las verificaciones realizadas por los organismos intermedios. Asimismo, la autoridad de gestión se reservará el derecho de efectuar algunos controles en el nivel de los organismos intermedios de modo que, como parte de su función de supervisión ordinaria o cuando albergue dudas acerca del correcto desarrollo de las tareas, pueda evaluar cómo se están efectuando las 4 Artículo 60 (a), (b), (g) y (j) del Reglamento del Consejo (CE) n.º 1083/2006 Cuando un organismo intermedio se encargue de la ejecución de una o más tareas correspondientes a una autoridad de gestión o de certificación, se registrarán formalmente por escrito los acuerdos pertinentes. 6 Los organismos intermedios son organismos o servicios de carácter público o privado que actúen bajo la responsabilidad de una autoridad de gestión o de certificación, o que desempeñen competencias en nombre de tal autoridad en relación con los beneficiarios que ejecuten las operaciones (artículo 2(6) del Reglamento del Consejo (CE) n.º 1083/2006). Son responsables de establecer un sistema de control interno que garantice la regularidad y la legalidad de las operaciones, su conformidad con las condiciones establecidas en la Decisión de la Comisión y el cumplimiento de las normas comunitarias relevantes. Cuando la autoridad de gestión haya delegado las tareas establecidas en el artículo 13(2), el sistema de control interno ha de incluir controles de verificación aplicados por el organismo intermedio a las declaraciones de gastos presentadas por el beneficiario. 5 5 verificaciones. Se incluirá la posibilidad de examinar una muestra limitada de archivos seleccionados atendiendo a criterios profesionales. Con vistas a evitar los riesgos que surgen cuando una autoridad de gestión es responsable de (i) la selección y aprobación de operaciones y de (ii) las verificaciones de gestión, se asegurará la debida separación de funciones entre estos dos cometidos. Los organismos intermedios podrán encargarse de compilar las declaraciones de gastos recibidas de un conjunto de beneficiarios y aglutinarlas en una declaración de gastos general, que presentarán a la autoridad de gestión. En tales casos, la autoridad de gestión deberá llevar a cabo verificaciones que garanticen la exactitud de dicha compilación de gastos. Estas verificaciones pueden llevarse a cabo por muestreo sobre la base de un análisis de riesgo. En los casos en que el organismo intermedio presente las declaraciones de gastos directamente a la autoridad de certificación, las verificaciones establecidas en el artículo 13(2) deberán haber sido realizadas en el nivel de los organismos intermedios. Además, será preciso informar de todas las transmisiones a la autoridad de gestión para que ésta pueda verificar la exactitud de la compilación de gastos y sea capaz de proporcionar la garantía necesaria a la autoridad de certificación. Los beneficiarios7 son operadores, organismos o empresas, de carácter público o privado, responsables de iniciar o de iniciar y ejecutar las operaciones. Cuando el beneficiario sea un organismo público, también se entenderá por beneficiario el mismo organismo que ha sido designado para intervenir como autoridad de gestión u organismo intermedio, en cuyo caso se garantizará la separación inequívoca de funciones 8. Los beneficiarios son responsables de garantizar que los gastos que declaran a efectos de cofinanciación son legales y regulares y cumplen todas las normas nacionales y comunitarias aplicables. Por tanto, deberán contar con sus propios procedimientos de control interno, que serán proporcionales al tamaño del organismo y la naturaleza de la operación, con vistas a aportar esta garantía. 2.3. Orientación sobre verificaciones de gestión Orientación procurada por el Estado miembro a todas las autoridades Los Estados miembros deben asegurarse de que las autoridades de gestión y de certificación y los organismos intermedios reciben orientación adecuada acerca de los sistemas de gestión y control necesarios para garantizar la buena gestión financiera de los Fondos y, en concreto, para proporcionar un grado de garantía suficiente sobre la exactitud, regularidad y validez de las solicitudes de ayuda comunitaria. En esta área la mejor práctica consistiría en preparar orientación para todos los niveles (es decir, para las autoridades de gestión y los organismos intermedios) con vistas a garantizar la aplicación, en todos los organismos, de una metodología coherente en cuanto al desarrollo de verificaciones de gestión. Podría elaborarse una orientación general para las autoridades de gestión y adaptarla, en caso necesario, a los organismos intermedios a fin de cumplir requisitos específicos, orientación que debería incorporarse a los manuales de procedimientos de esos organismos. 7 8 Artículo 2(4) del Reglamento del Consejo (CE) n.º 1083/2006 Artículo 13(5) del Reglamento de la Comisión (CE) n.º 1828/2006 6 Las autoridades de gestión deberán brindar a su personal formación y orientación relacionada con las aptitudes necesarias. Concretamente, el personal de la autoridad de gestión tendrá que ser competente en la revisión de los procedimientos de contratación para poder determinar si la concesión de contratos se lleva a cabo en consonancia con las normas nacionales y europeas relevantes. Orientación procurada por la autoridad de gestión a los beneficiarios Las autoridades de los Estados miembros procurarán impedir la incidencia de errores, trabajando con los beneficiarios desde el comienzo de cada operación. Deberán facilitar a los beneficiarios formación y orientación sobre la creación de los sistemas necesarios a fin de cumplir los requisitos comunitarios y preparar las primeras declaraciones de gastos. Deberán prestar especial atención a asegurarse de que los beneficiarios conocen qué costes pueden optar al reembolso y la necesidad de mantener registros para poder demostrar cómo se calculan e imputan los gastos generales. Es preciso centrarse especialmente en dar a conocer a los beneficiarios de subvenciones del FSE la opción, ofrecida en el artículo 11.3(b) del Reglamento (CE) 1081/2006, de declarar los costes indirectos a una tarifa fija en conformidad con el plan adoptado en el ámbito nacional y comunicado a la Comisión. La autoridad de gestión es responsable de garantizar que la selección de operaciones a efectos de financiación se lleva a cabo según los criterios aplicables al programa operativo y que las operaciones cumplen las normas nacionales y comunitarias vigentes –concretamente, los criterios nacionales y comunitarios de participación– durante la totalidad del periodo de ejecución. En este sentido, cabe garantizar que los beneficiarios han sido informados de las condiciones específicas que atañen a los productos o servicios objeto de entrega en la operación, al plan de financiación, al plazo estipulado para la ejecución y a la información financiera y de otra índole que será preciso conservar y comunicar. Como paso previo a la decisión aprobatoria, la autoridad que gestión deberá comprobar que el beneficiario es capaz de satisfacer estas condiciones. Es preciso disponer de una estrategia que garantice que los beneficiarios tienen acceso a toda la información necesaria a través de, entre otros, folletos, impresos, seminarios, talleres y sitios web. Dicha información englobará en particular todos los criterios de participación nacionales y comunitarios aplicables y demás requisitos legales, tales como los de información y publicidad. La autoridad de gestión puede establecer criterios apropiados para evaluar la capacidad de los beneficiarios. Los criterios variarán dependiendo del tipo de operaciones, si bien podrán englobar, entre otros, una evaluación de la situación financiera del beneficiario, las titulaciones y experiencia de su personal y su estructura administrativa y operativa. 2.4. Momento de realización de las verificaciones de gestión Las verificaciones de gestión se llevarán a cabo antes de declarar el gasto correspondiente a la siguiente instancia superior. Por ejemplo, antes de que un organismo intermedio remita una declaración de gastos, intermedia o definitiva, a la autoridad de gestión (o una autoridad de gestión la remita a la autoridad de certificación), ya deben haber concluido las verificaciones de gestión administrativa. En cualquier caso, será indispensable haber completado todas las verificaciones administrativas (véase el artículo 2.5) 7 respecto de un gasto incluido en un estado de gastos concreto, antes de que la autoridad de certificación9 presente el estado a la Comisión. En la selección y aprobación de operaciones, la autoridad de gestión debe asegurarse de que los beneficiarios tienen capacidad para cumplir una serie de condiciones antes de tomar una decisión aprobatoria (véase el apartado 2.3). De ahí que no sea necesario realizar, inmediatamente después del inicio de la operación, a modo de medida preventiva, una verificación sobre el terreno. Las verificaciones sobre el terreno se emprenderán habitualmente cuando la operación ya se encuentre bastante avanzada, tanto en términos físicos como financieros. No se recomienda su realización únicamente cuando la operación haya llegado a su fin porque sería demasiado tarde para efectuar medidas correctoras, caso de detectar algún problema, y entretanto se habrá certificado un gasto irregular. La naturaleza y características específicas de una operación a menudo condicionarán el momento en que deban llevarse a cabo las verificaciones sobre el terreno. En el caso de grandes proyectos de infraestructuras cuyos periodos de ejecución se prolonguen a lo largo de varios años, la mejor práctica consistiría en efectuar varias verificaciones sobre el terreno a lo largo de este periodo, y una al concluir el proyecto a fin de verificar la realidad de la operación. Cuando en una convocatoria anual de manifestaciones de interés se concede el mismo tipo de subvenciones, las verificaciones sobre el terreno realizadas durante el primer año contribuirán a prevenir, en años posteriores, la recurrencia de los problemas identificados. Los acuerdos de subvención que conllevan la construcción o compra de un activo a menudo imponen, en los beneficiarios, condiciones permanentes (por ejemplo, la retención de la titularidad, número de empleados nuevos) que siguen vigentes una vez concluida la operación o la adquisición del activo. En tales casos, puede que se precise otra verificación sobre el terreno durante la fase operativa para poder garantizar que continúan observándose las condiciones de la subvención. Cuando las operaciones sean de naturaleza inmaterial y, una vez concluidas, apenas quede evidencia física o ésta sea inexistente (por ejemplo, en operaciones del FSE: cursos de formación, programas de contratación), las verificaciones sobre el terreno, de haberlas, se llevarán a cabo durante la ejecución (es decir, antes de que concluyan). Estas verificaciones sobre el terreno son cruciales para poder comprobar la realidad que tales operaciones. 2.5. Metodología y alcance de las verificaciones de gestión establecidas en el artículo 13(2) Las verificaciones establecidas en el artículo 13(2) engloban dos elementos clave, a saber: verificaciones administrativas (es decir, verificaciones documentales) de cada solicitud de reembolso presentada por los beneficiarios, y verificaciones sobre el terreno de operaciones individuales. Todas las solicitudes de reembolso entregadas por beneficiarios, ya sean intermedias o definitivas, se someterán a verificaciones administrativas que consistirán en la revisión de la solicitud y la documentación de apoyo pertinente como, por ejemplo, facturas, albaranes de entrega, extractos bancarios, informes de evolución y planillas de control de horas. La verificación de la documentación de apoyo puede efectuarse por muestreo, siempre que esté justificado (véase el apartado 2.7). La autoridad de gestión determinará la naturaleza de los documentos que han de presentarse, tomando en consideración el sistema de control general y, en particular, el nivel de verificaciones sobre el terreno. Se recomienda incluir, como mínimo, un listado descriptivo de las facturas que acompañan a la solicitud de reembolso, y una lista de los contratos adjudicados. Dependiendo de la documentación facilitada, las verificaciones administrativas deberán comprobar: 9 Artículo 61 del Reglamento del Consejo (CE) n.º 1083/2006 8 La corrección de la solicitud de reembolso; Que el gasto entre dentro del periodo de elegibilidad; Que el gasto guarde relación con una operación aprobada; El cumplimiento de las condiciones del programa incluyéndose, cuando proceda, el cumplimiento del tipo de financiación aprobado; El cumplimiento de los criterios de participación nacionales y comunitarias; La suficiencia de la documentación de apoyo y de la existencia de una pista de auditoría adecuada; El cumplimiento de las normas estatales sobre ayudas, de las normas medioambientales y de los requisitos de igualdad de oportunidades y no discriminación; El cumplimiento de las normas nacionales y comunitarias sobre contratación pública; El respeto de las normas nacionales y comunitarias sobre publicidad. Las verificaciones administrativas no bastan por sí solas para proporcionar garantías sobre todos los elementos que atañen a la legalidad y a la regularidad del gasto y, por esta razón, es esencial realizar verificaciones sobre el terreno con vistas a poder comprobar, en concreto, la realidad de la operación, el suministro del bien/servicio en pleno cumplimiento de los pactos y condiciones del acuerdo de subvención, los avances físicos, el respeto de las normas comunitarias sobre publicidad y el pleno cumplimiento de los procedimientos de contratación pública. Asimismo, también puede recurrirse a las verificaciones sobre el terreno para corroborar que el beneficiario está facilitando información precisa en relación con la ejecución física y financiera de la operación. Cuando las verificaciones sobre el terreno y las verificaciones administrativas estén a cargo de distintas personas, los procedimientos tendrán que garantizar que ambas reciben información relevante y puntual sobre los resultados de las verificaciones llevadas a cabo. Los informes de evolución del proyecto preparados por los beneficiarios, o los informes periciales en caso de que proyectos de grandes infraestructuras, pueden servir de base para las verificaciones administrativas y sobre el terreno. La autoridad de gestión, a la hora de determinar el alcance de las verificaciones establecidas en el artículo 13(2) por realizar, podrá tomar en consideración los procedimientos de control del beneficiario, en caso justificado. Por ejemplo, cuando el beneficiario sea un ministerio y los controles sobre el gasto hayan sido realizados por una parte independiente del ministerio (es decir, con la debida separación de funciones con arreglo al artículo 58(b) del Reglamento del Consejo (CE) n.º 1083/2006), la autoridad de gestión podrá considerar que los controles contribuyen al grado de garantía que ha de obtenerse en virtud del artículo 13(2), si bien continuará siendo responsable de efectuar las verificaciones establecidas en el artículo 13(2) con vistas a garantizar su fiabilidad. También podrán ser considerados los dictámenes de auditoría que el beneficiario presente a modo de acreditación del gasto declarado (véase el apartado 2.10). En los casos en que la autoridad de gestión sea también beneficiaria, cabrá garantizar la debida separación de funciones para las verificaciones que deban llevarse a cabo en virtud del artículo 13(2). Por ejemplo, se puede conseguir una separación correcta recurriendo, para las verificaciones de gestión, a un departamento distinto dentro de la misma organización, que sea independiente del departamento en el que se encuentra el beneficiario. El departamento de finanzas o la unidad de auditoría interna podrían asumir esa tarea, siempre y cuando ninguno de los dos sea beneficiario y cuando la citada unidad no lleve a cabo trabajos de auditoría con arreglo al artículo 62 del Reglamento del Consejo (CE) n.º 1083/2006. En áreas técnicas, tales como el cumplimiento de normas medioambientales, puede que existan autoridades nacionales competentes responsables de comprobar el cumplimiento y expedir los correspondientes permisos. En esos casos, las autoridades de gestión deberán verificar que el beneficiario ha obtenido todas las autorizaciones relevantes de estos organismos 9 A fin de verificar el cumplimiento de las normas estatales sobre ayudas, las autoridades de gestión también podrán utilizar como referencia el trabajo de otras autoridades nacionales con competencias en esa área. La metodología utilizada por las autoridades de gestión para efectuar las verificaciones establecidas en el artículo 13(2) debe constar en los manuales de procedimientos de cada organismo, con indicación de qué puntos se comprueban en las verificaciones administrativas y en las verificaciones sobre el terreno, respectivamente, y haciendo mención de las listas de control que es preciso utilizar en las distintas comprobaciones. 2.6. Organización de verificaciones sobre el terreno Las verificaciones sobre el terreno se planificarán con una antelación suficiente que permita asegurar su eficacia. Por lo general, se entregará un aviso previo con ánimo de garantizar que el beneficiario dispone el acceso al personal (por ej., director de proyecto, técnicos, personal contable) y a la documentación relevantes (en particular, los registros financieros, con inclusión de los extractos bancarios y las facturas) durante la verificación. No obstante, en algunos casos, cuando no sea posible determinar la realidad del proyecto una vez concluido, puede resultar conveniente efectuar verificaciones sobre el terreno durante la ejecución y sin que medie notificación previa (por ej., cursos de formación financiados por el FSE, en los que también se comprobarán las planillas de control de horas de participantes y el personal docente). 2.7. Intensidad de las verificaciones Se efectuarán verificaciones administrativas para todas las solicitudes intermedias y definitivas de reembolso presentadas por beneficiarios. Si bien el Reglamento exige que se practiquen verificaciones de gestión en el 100% de las solicitudes de reembolso presentadas por los beneficiarios, la verificación de cada concepto de gastos individual y del justificante de entrega correspondiente incluido en una solicitud, aunque deseable, puede no ser viable. Por consiguiente, podrán escogerse los conceptos de gastos objeto de verificación, cuando esté justificado, de una muestra de transacciones seleccionada tomando en consideración los factores de riesgo (el valor de los conceptos, el tipo de beneficiario, el historial) y complementadas por un muestreo aleatorio, si fuera necesario. La mejor práctica consistiría en presentar toda la documentación relevante junto con la solicitud de reembolso del beneficiario. De este modo podrían llevarse a cabo todas las comprobaciones documentales durante las verificaciones, y se reduciría la necesidad de verificar esos documentos en el acto. La documentación de apoyo incluirá, como mínimo, un cuadro de los conceptos de gastos individuales, con indicación de la suma total y del importe de gastos, las referencias de las facturas asociadas, la fecha de pago y el número de referencia de pago. Lo ideal sería entregar copias de las facturas y justificantes de pago para todos los gastos. Cuando esto imponga en el beneficiario la presentación de un volumen desmesurado de documentación, un planteamiento alternativo puede ser solicitar únicamente la documentación de apoyo correspondiente a la muestra de gastos seleccionados a efectos de verificación. Éste planteamiento tiene la ventaja de reducir el volumen de documentación que los beneficiarios deben presentar. Sin embargo, como la selección de la documentación de apoyo requerida sólo puede realizarse una vez recibida la solicitud de reembolso del beneficiario, es posible que se produzcan retrasos en la tramitación de la solicitud, en espera de la recepción de la documentación exigida. También existe un mayor riesgo potencial derivado de la conservación de documentos en el caso de que el beneficiario cese las operaciones antes de que concluya el periodo. 10 Los sistemas computarizados de algunos Estados miembros permiten que, desde el ámbito local, el beneficiario introduzca toda la documentación de apoyo –incluyendo los cuadros de gastos, las copias de facturas y los justificantes de pago– y la presente por vía electrónica. De este modo es posible examinar todos los documentos como parte de las verificaciones administrativas. Las verificaciones sobre el terreno se llevarán a cabo por muestreo. En los casos en los que se recurra al muestreo para seleccionar transacciones individuales incluidas en las solicitudes de reembolso o para seleccionar las operaciones que serán sometidas a verificaciones sobre terreno, la autoridad de gestión deberá mantener registros que describan y justifiquen el método de muestreo aplicado, así como un registro de las transacciones u operaciones seleccionadas a efectos de verificación. La autoridad de gestión determinará el tamaño de la muestra con vistas a alcanzar un grado razonable de garantía respecto de la legalidad y la regularidad de las transacciones, teniendo en cuenta el nivel de riesgo asignado por la autoridad de gestión al tipo de beneficiario y las operaciones implicadas. Cada año someterá a revisión el método de muestreo. Ninguno operación quedará excluida de la posibilidad de ser sometida a una verificación sobre el terreno. Sin embargo, en la práctica, para aquellos programas o ejes prioritarios que se caractericen por un gran número de operaciones pequeñas, las verificaciones administrativas aportarán un grado de garantía elevado (por ejemplo, cuando el beneficiario remita toda la documentación relevante a la autoridad de gestión y se facilite documentación acreditativa fiable sobre la realidad del proyecto). Las verificaciones administrativas podrán complementarse con visitas sobre el terreno a una muestra de estas operaciones, a fin de confirmar la garantía. La intensidad de las verificaciones sobre el terreno dependerá de la naturaleza de las operaciones que integren el programa (o su prioridad) y del tipo de documentación remitida por el beneficiario. La muestra podría centrarse en operaciones de gran valor, en operaciones en las que previamente se han identificado problemas o irregularidades, o en transacciones concretas, identificadas durante las verificaciones administrativas, que resulten poco habituales y precisen un análisis más pormenorizado (es decir, un análisis orientado a riesgos). Se puede seleccionar una muestra aleatoria de forma complementaria o alternativa. Para los proyectos de grandes infraestructuras cuya ejecución requiera varios años, probablemente serán necesarias tres o más verificaciones sobre el terreno durante la ejecución y tras la finalización. En los casos en los que un beneficiario particular sea responsable de varias operaciones, se practicará una verificación sobre el terreno en al menos una de ellas. Cuando se identifiquen problemas en las verificaciones realizadas en la muestra, se ampliará el tamaño de la muestra para determinar si se dan problemas similares en operaciones no comprobadas. La autoridad de gestión debe poder demostrar, por medio de la documentación correspondiente a las verificaciones de gestión realizadas, que la intensidad general de las verificaciones, tanto administrativas como sobre el terreno, es suficiente como para proporcionar un grado de garantía razonable acerca de la legalidad y la regularidad de los gastos cofinanciados en virtud del programa. 2.8. Documentación de las verificaciones de gestión Se documentarán todas las verificaciones de gestión. En los registros se indicará el trabajo realizado; la fecha de las verificaciones sobre el terreno, en su caso; los resultados de las verificaciones, incluyendo el nivel general y la frecuencia de los errores detectados, una descripción completa de las irregularidades observadas con una clara identificación de las normas nacionales o comunitarias que han sido infringidas y las medidas correctoras aplicadas. Como parte de las medidas de seguimiento puede presentarse un informe de irregularidades y/o un procedimiento para la recuperación de las sumas indebidamente abonadas. No tienen que comunicarse a la Comisión las irregularidades detectadas y corregidas por la autoridad de gestión o de certificación antes de efectuar algún pago al beneficiario de la contribución pública 11 y antes de la inclusión del gasto correspondiente en un estado de gastos presentado a la Comisión 10. Sin embargo, sí se incluirán en los registros las citadas irregularidades y correcciones. Las listas de control, que sirven de guía para llevar a cabo las verificaciones, a menudo se utilizan para registrar cada una de las acciones realizadas y los resultados. El contenido de las listas de control deberá ser lo suficientemente detallado. Por ejemplo, al registrar verificaciones relativas a la subvencionabilidad del gasto, no bastará con incluir un recuadro en la lista de control que indique que se ha comprobado la elegibilidad del gasto anotado en la declaración, sino que deberá incluirse una lista pormenorizada de cada uno de criterios de elegibilidad verificados con indicación de la base jurídica pertinente (por ejemplo, gastos abonados durante el periodo subvencionable, conformidad de la documentación de apoyo con los extractos bancarios, imputación correcta y razonable de los gastos generales a la operación). En las verificaciones más sencilla tales como comprobar la suma de un listado de transacciones, bastará con anotar un simple visto bueno junto a la cifra total para dar cuenta del trabajo de verificación realizado. Deberán registrarse obligatoriamente el nombre y el cargo de la persona que lleve a cabo las verificaciones y la fecha en que fueron realizadas. Para acreditar la verificación del cumplimiento de los requisitos publicitarios podrán utilizarse fotografías de carteles, copias de folletos promocionales, materiales de los cursos de formación y de diplomas entregados. Cada programa deberá disponer de un sistema de registro general de las verificaciones realizadas. Los registros se conservarán en sistemas informáticos de seguimiento computarizado en varios Estados miembros; de este modo, se facilita la planificación de las verificaciones, se evita la duplicación innecesaria del trabajo y se pone información útil a disposición de otros organismos (es decir, la autoridad de auditoría, la autoridad de certificación). La fecha de las verificaciones sobre el terreno realizadas en operaciones individuales debe registrarse obligatoriamente11 en el sistema de seguimiento computarizado. 2.9. Subcontratación de las verificaciones de gestión Por norma general, las verificaciones de gestión serán desarrolladas, bajo la responsabilidad de la autoridad de gestión, por el organismo directamente responsable de la gestión del programa o eje prioritario. La dotación de personal asignado a las tareas de verificación ha de ser suficiente como para garantizar un desarrollo correcto y a su debido tiempo de las verificaciones. No obstante, en aquellas situaciones en las que, debido al elevado volumen o complejidad técnica de las operaciones sometidas a verificación, las autoridades de gestión concluyan que no disponen de los recursos de personal o los conocimientos especializados suficientes como para emprender las verificaciones por sí mismas, será conveniente subcontratar, parcial o totalmente, las tareas de verificación a firmas externas. Caso de recurrir a la opción de subcontratación, será esencial exponer claramente en el mandato el alcance del trabajo. Por ende, deberán reconocerse las consecuencias de cualquier demora en el desarrollo de este trabajo, como el cumplimiento de las normas N+2 / N+3. Esto es especialmente relevante en el caso de organismos públicos, que pueden experimentar retrasos en la adjudicación de contratos para este tipo de trabajos. La entidad contratante asume, además, la responsabilidad de evaluar la calidad del trabajo subcontratado, lo que habitualmente conllevará asignar recursos de personal adicionales. Por este motivo, se estudiarán todos estos factores antes de decidir subcontratar las verificaciones de gestión. 10 Artículo 28(2) del Reglamento de la Comisión (CE) n.º 1828/2006 Artículo 60(c) del Reglamento del Consejo (CE) n.º 1083/2006 y artículo 14(1) del Anexo III del Reglamento de la Comisión (CE) n.º 1828/2006. 11 12 2.10. Dictamen de los auditores Los acuerdos de subvención pueden imponer a los beneficiarios la obligación de entregar un dictamen de auditores acompañado de las declaraciones de gastos que presentan a efectos de pago. Estos dictámenes, si bien variarán en función del alcance del trabajo realizado por el auditor, englobarán en general requisitos básicos tales como la confirmación de que el gasto se abonó dentro del periodo subvencionable y que guarda relación con conceptos aprobados en el acuerdo de subvención; el cumplimiento de las condiciones estipuladas en el acuerdo de subvención y la existencia de documentación de apoyo adecuada, registros contables incluidos. A pesar de que no es posible obtener la garantía establecida en el artículo 13(2) únicamente mediante comprobaciones llevadas a cabo por los propios beneficiarios o por terceros en su nombre (por ej., auditores), los dictámenes de los auditores servirán, siempre y cuando el trabajo desarrollado sea de calidad satisfactoria, para justificar que las verificaciones de gestión se circunscriban a una muestra suficiente tomando en consideración los riesgos conocidos, incluyéndose el riesgo de falta de independencia del organismo que expide el certificado. Sin embargo, para que los dictámenes de los auditores gocen de fiabilidad, es esencial que la autoridad de gestión proporcione, a los auditores de los beneficiarios, orientación acerca del alcance del trabajo y del informe/dictamen que deben presentar. El dictamen no podrá consistir simplemente en una frase sobre la regularidad de la solicitud del beneficiario, sino que deberá pormenorizar el trabajo llevado a cabo y los resultados. La Federación Internacional de Expertos Contables (IFAC) ha emitido una Norma Internacional de Servicios Relacionados (International Standard on Related Services, ISRS) 4400 denominada “Compromisos para la realización de procedimientos acordados sobre información financiera” (Engagements to Perform Agreed-upon Procedures Regarding Financial Information) que establece normas y proporciona orientación acerca de las responsabilidades profesionales del auditor al asumir el mandato de realizar procedimientos acordados sobre información financiera, y acerca de la forma y el contenido del informe que el auditor emitirá al respecto. Puede emplearse este tipo de procedimiento acordado en los dictámenes de los auditores que acompañen a la solicitud de reembolso de un beneficiario. El objetivo de un mandato de procedimientos acordados es que el auditor lleve a cabo procedimientos de naturaleza auditora, que hayan sido acordados por el auditor y la entidad y cualesquiera terceras partes relevantes, y que prepare un informe de conclusiones factuales. Algunas de las cuestiones que se someterán a acuerdo son: La naturaleza del mandato; El objeto del mandato; La identificación de la información financiera a la que se aplicarán los procedimientos acordados; La naturaleza, momento y alcance de los procedimientos específicos que se aplicarán; La forma prevista del informe de conclusiones factuales. El informe describirá el objeto y los procedimientos acordados del mandato con la pormenorización suficiente como para que se entienda la naturaleza y alcance del trabajo realizado. La ISRS 4400 también contiene plantillas útiles para cartas contrato e informes de conclusiones factuales. Los estados financieros anuales auditados de una entidad beneficiaria no sirven como documento sustitutorio de un dictamen de auditores preparado específicamente para una solicitud presentada por el susodicho beneficiario. 13 2.11. Auditorías / verificaciones de gestión bajo la responsabilidad de la autoridad de auditoría El personal encargado de las verificaciones establecidas en el artículo 13 no podrá participar en auditorías de sistemas o a auditorías de gastos llevadas a cabo bajo la responsabilidad de la autoridad de auditoría (artículo 62 del Reglamento del Consejo (CE) n.º 1083/2006) y viceversa. Los objetivos de las verificaciones de gestión difieren de los de las auditorías efectuadas bajo la responsabilidad de la autoridad de auditoría, ya que estas últimas se realizan ex post (es decir, después de haber presentado la declaración de gastos a la Comisión). El objetivo de estas auditorías es evaluar si los controles internos funcionan con eficacia; en cambio, las verificaciones de gestión forman parte de los controles internos. Es preciso, por tanto, distinguir claramente los dos tipos de trabajo en su planificación, organización, ejecución, contenido y documentación. Aunque deben separarse las verificaciones de gestión y las auditorías que se encuentren bajo la responsabilidad de la autoridad de auditoría, es conveniente que se produzca un intercambio de información entre el personal encargado de estos controles independientes. Por ejemplo, debe mantenerse informado al personal que participa en las verificaciones de gestión de los resultados de las auditorías, pudiendo incluso solicitar asesoramiento a la autoridad de auditoría, y ésta última deberá tomar en consideración los resultados de las verificaciones de gestión en sus análisis de riesgos y estrategia de auditoría. 3. Áreas específicas relacionadas con las verificaciones de gestión 3.1. Verificaciones de gestión de contrataciones públicas Referencias (i) Directiva 2004/18/CE del Parlamento Europeo y del Consejo, de 31 de marzo de 2004, sobre la coordinación de procedimientos de adjudicación de contratos públicos de obras, de suministro y de servicios. (ii) Directiva 2004/17/CE del Parlamento Europeo y del Consejo, de 31 de marzo de 2004, sobre la coordinación de los procedimientos de adjudicación de contratos en los sectores del agua, de la energía, de los transportes y de los servicios postales. (iii) Comunicación Interpretativa de la Comisión sobre el Derecho comunitario aplicable en la adjudicación de contratos no cubiertos o sólo parcialmente cubiertos por las directivas sobre contratación pública (2006/C 179/02) (iv) Comunicación Interpretativa de la Comisión sobre el Derecho comunitario aplicable a contrataciones públicas y concesiones a colaboraciones público-privadas institucionalizadas (2007/C 6661) General Las verificaciones relacionadas con las contrataciones públicas deben tener por objetivo garantizar el cumplimiento de las normas comunitarias sobre contratos públicos y las normas nacionales relacionadas, así como el respeto de los principios de igualdad de trato, no discriminación, transparencia y libre circulación y competencia durante todo el proceso. Deberán llevarse a cabo verificaciones lo antes posible, una vez finalizado el proceso concreto, ya que a menudo resulta difícil aplicar medidas correctoras en una fecha posterior. Durante la fase de concesión de la financiación es preciso asegurarse de que los beneficiarios conocen sus obligaciones en esta área y de que el personal ha recibido formación relevante. Algunos Estados miembro han preparado orientación específica sobre contratación pública, destinada a los beneficiarios. Esta orientación será especialmente útil cuando los beneficiarios participen en un contrato de manera excepcional y carezcan de experiencia relevante. La Comisión Europea ha preparado guías y notas 14 explicativas sobre las normas comunitarias relativas a contratos públicos, que aportan información y explicaciones útiles. (http://ec.europa.eu/intemal_market/publicprocurement/index_en.htm) Es esencial recurrir a personal cualificado y con la debida experiencia para estas verificaciones y que el personal tenga a su disposición listas de control pormenorizadas. Intensidad de las verificaciones de contrataciones públicas La autoridad de gestión determinará la intensidad de las verificaciones de gestión en función del valor y el tipo de los contratos. Se comprueba, en al menos un Estado miembro, el cumplimiento de las normas sobre contratación pública de todos aquellos contratos que sobrepasen los umbrales establecidos en las directivas comunitarias sobre contratos públicos, o los umbrales nacionales si fueran inferiores. Este enfoque puede no ser viable cuando el número de contratos que supera esos umbrales sea elevado, pero se recomienda especialmente en aquellos casos en los que tiene conocimiento de que la entidad contratante carece de experiencia relevante. Planificación Los beneficiarios son responsables de garantizar la calidad de los estudios iniciales, el diseño y la precisión del cálculo de costes. Cuando las autoridades de gestión consideren que existe un riesgo deberán, como medida preventiva, verificar estos elementos y también comprobar que las estimaciones de costes han sido actualizadas. El objetivo es evitar problemas en la licitación inicial, así como en los contratos complementarios / trabajos adicionales durante la ejecución del proyecto. Cabe prestar especial atención a la comprobación de: La idoneidad del método de contratación utilizado; La interdependencia entre las distintas fases contractuales (compras de terreno, preparación de emplazamientos, conexión a suministros básicos, etc.); Los planes de financiación y la disponibilidad de cofinanciación nacional. Licitación En contratos de valor elevado o cuando se presupone la inexperiencia del beneficiario en el campo de la contratación pública, las autoridades de gestión deberán asegurarse, antes de publicitar el contrato, de que la calidad del pliego de condiciones (incluyendo el mandato) ha sido verificada por uno de sus propios expertos o por un experto externo. Será preciso verificar especialmente que las especificaciones están bien definidas en lo que atañe a capacidades técnicas, económicas y financieras, y que van a emplearse criterios de selección y adjudicación adecuados. Si bien las normas comunitarias sobre contratación pública imponen determinados requisitos publicitarios, las autoridades de gestión también deben ser conscientes de la necesidad de verificar que, incluso cuando los contratos estén por debajo de los umbrales comunitarios o cuando los servicios únicamente estén supeditados a una aplicación limitada de la Directiva 2004/18/CE (es decir, el Anexo IIB) o de la Directiva 2004/17/CE (es decir, el Anexo XVII B), se ha llevado a una publicitación del contrato adecuada (en el contexto del tamaño y la naturaleza del contrato12) para garantizar que se respetan los principios generales 12 Caso C-324/98 Telaustria [2000] ECR 1-10745 y Comunicación Interpretativa de la Comisión sobre el Derecho comunitario aplicable en la adjudicación de contratos no cubiertos o sólo parcialmente cubiertos por las directivas sobre contratación pública (2006/C 179/02). 15 del Tratado sobre igualdad de trato y transparencia. Esto puede lograrse solicitando a los beneficiarios que entreguen una copia de las publicaciones relevantes cuando presenten las declaraciones de gastos. También deben solicitarse pruebas del envío de los anuncios de contratos de licitación adjudicados (post-award contract notices), en concreto para los servicios relacionados en el Anexo IIB de la Directiva 2004/18/CE o en el Anexo XVII B de la Directiva 2004/17/CE. Criterios de selección y de adjudicación Con vistas a verificar debidamente que los procedimientos de selección y adjudicación se han desarrollado conforme a las normas comunitarias y nacionales sobre contratación pública, las autoridades de gestión deberán obtener y revisar los informes de evaluación de la licitación preparados por comités de evaluación. Además, revisarán las quejas que los licitadores hayan presentado a la entidad contratante, por cuanto estas quejas pueden subrayar posibles deficiencias en el procedimiento de adjudicación de ofertas. Para contratos que sobrepasen los umbrales establecidos en las directivas comunitarias sobre contratación pública, las autoridades de gestión de algunos Estados miembro envían a un observador para que asista a las evaluaciones de las ofertas. Se elabora un informe en el que se detallan las conclusiones del observador sobre la evaluación de las ofertas. El observador verifica que se haya preparado un informe de evaluación de ofertas suficientemente detallado, en el que se muestre cómo el comité de evaluación ha alcanzado sus conclusiones. Este enfoque puede no ser viable cuando el número de contratos que supera los umbrales sea elevado, pero se recomienda especialmente en aquellos casos en los que se sabe que la entidad contratante carece de experiencia relevante. También podría ser utilizado sobre una muestra limitada con vistas a obtener la seguridad de que entidades contratantes más arraigadas, responsables de un gran número contratos que sobrepasan los umbrales, están cumpliendo las normas de contratación relevantes. Algunas áreas concretas de los procedimientos de adjudicación y evaluación de ofertas que las auditorías de la Comisión han identificado como problemáticas son: la no separación entre la fase de selección y la fase adjudicación del procedimiento, y la confusión entre los criterios de selección y los criterios de adjudicación; el empleo incorrecto de criterios de selección durante la fase de adjudicación; la no publicación de los criterios de selección y de adjudicación en el anuncio de licitación o su pliego de condiciones; la utilización de especificaciones técnicas discriminatorias; la utilización, durante la evaluación, de criterios de selección y adjudicación distintos de los publicados; la utilización de criterios que no cumplen los principios fundamentales del Tratado CE (transparencia, no discriminación, igualdad de trato); una documentación inadecuada de las decisiones tomadas por el comité de valuación; la adjudicación directa de trabajos complementarios/suplementarios, sin una nueva licitación; la modificación de condiciones esenciales de la adjudicación del contrato durante la fase de ejecución. Algunos Estados miembros han creado una unidad independiente de control de las contrataciones públicas facultada para desarrollar controles en todas las fases de los procedimientos de licitación, hasta la firma del contrato. Dicha unidad puede asistir a las evaluaciones de las ofertas, en calidad de observador, tanto en contratos financiados por la Comunidad como en contratos financiados por el Estado. Cuando albergue dudas respecto de algún elemento del procedimiento, informará al respecto a la entidad contratante y a la autoridad de gestión. De este modo, la autoridad de gestión tendrá conocimiento de los problemas potenciales relacionados 16 con el contrato y, antes de aprobar cualesquiera gastos declarados por el beneficiario, podrá solicitar información al beneficiario y a la unidad de control de contrataciones públicas con el objetivo de asegurarse de que los problemas identificados han sido convenientemente resueltos. Existe la posibilidad de formalizar un contrato entre la autoridad de gestión y la unidad de control de contrataciones públicas, que especifique el alcance y la cobertura de los controles de contratos financiados por la CE. Fase de ejecución de contratos Para aquellos contratos que sobrepasen el umbral establecido en las directivas comunitarias sobre contrataciones públicas, la mejor práctica incluiría un procedimiento diseñado para garantizar que se notifica a una autoridad de gestión/unidad de control de contrataciones públicas cualquier contrato complementario/suplementario significativo o modificación sustancial de contratos, antes de su firma por parte de la entidad contratante. Tal procedimiento permitiría llevar a cabo, antes de la firma de los contratos o modificaciones en cuestión, las verificaciones necesarias para garantizar el cumplimiento de las normas sobre contratación pública relevantes. 3.2. Medio ambiente El derecho comunitario incorpora más de 200 actos jurídicos en materia de medio ambiente. Estas medidas legislativas cubren todos los sectores medioambientales –tales como el agua, el aire, la naturaleza, los residuos y los productos químicos–, mientras que otras abordan cuestiones interrelacionadas, como el acceso a la información medioambiental y la participación pública en el proceso de toma de decisiones sobre el medio ambiente. Si bien todo el acervo medioambiental se aplica en actuaciones cofinanciadas, en el contexto de los Fondos son de especial relevancia las siguientes áreas temáticas: La Directiva sobre Evaluación de Impacto Ambiental o EIA13, y sus enmiendas, exige a los Estados miembro que lleven a cabo una evaluación de determinados proyectos, públicos y privados, cuyo impacto en el medio ambiente probablemente sea significativo, como paso previo a su autorización. Se trata de una directiva de procedimiento que exige la evaluación de un amplio abanico de impactos medioambientales y la consulta a autoridades medioambientales y al público (incluyéndose las consultas fronterizas). La Directiva toma en consideración las disposiciones del Convenio de Aarhus sobre participación pública y acceso a la justicia en materia de medio ambiente. La Directiva EIA contiene una disposición que regula casos excepcionales (artículo 2.3). La orientación emitida recientemente hace hincapié en la naturaleza excepcional de las circunstancias en las que puede aplicarse dicha disposición (en consonancia con el planteamiento normal del Tribunal de Justicia Europeo a la hora de interpretar exenciones). La Directiva sobre Evaluación Estratégica Ambiental (EEA), además de exigir a los Estados miembros que realicen una evaluación antes de aprobar un Programa Operativo, incluye disposiciones relativas al seguimiento de indicadores para identificar, en fase temprana, efectos nocivos no previstos y poder emprender medidas reparadoras adecuadas. Cuando proceda, podrán utilizarse las estructuras de seguimiento existentes para así evitar la duplicación. Además, es posible que deba actualizarse el proceso EEA ya concluido si se producen cambios significativos en el Programa Operativo. Si los Programas Operativos diera lugar a planes y programas adicionales, será preciso determinar si estos otros también precisan la aplicación de un proceso EEA. Por último, cabe señalar que los Planes de Gestión de Residuos exigidos en la Directiva marco sobre residuos exigen obligatoriamente una EEA. Únicamente podrán optar a financiación aquellas intervenciones y trabajos infraestructura que estén en conformidad con los Planes de Residuos notificados a la Comisión. 13 Directiva del Consejo 85/337/CEE relativa a la evaluación de las repercusiones de determinados proyectos públicos y privados en el medio ambiente, modificada por la Directiva 2003/35/CE. 17 Información medioambiental: la Directiva relativa a la libertad de acceso a la información sobre medio ambiente14 tiene por objetivo facilitar el acceso del público a la información sobre medio ambiente que obra en poder de las autoridades públicas, y garantizar que en toda la Comunidad se aplican niveles razonables de acceso a la información. La naturaleza está cubierta por las Directivas relativas a aves y habitats15, en particular en relación con las repercusiones en zonas de la red Natura 2000. Juntas, estas Directivas proporcionan un plan de protección integral para una serie de animales y plantas, así como para la selección de tipos de hábitat. Con el fin de restituir o mantener un estado de conservación favorable para las especies y hábitats naturales de interés comunitario, la Directiva sobre hábitats creó la red ecológica Natura 2000 de zonas protegidas, que se ha convertido en eje central de la política comunitaria sobre naturaleza y biodiversidad. La Directiva sobre hábitats (en su artículo 6) contiene disposiciones específicas para una evaluación adecuada de los impactos y medidas de mitigación y compensación. Agua: la Directiva marco sobre agua16 establece un marco de protección para todos los cuerpos de aguas (ríos, lagos, aguas de transición, aguas costeras, canales y aguas subterráneas) de la Unión Europea. Su objetivo central es lograr que para 2015 los recursos hídricos alcancen una calidad satisfactoria, a través de una gestión integrada organizada en torno a distritos de cuencas hidrográficas. Contiene disposiciones específicas (en su artículo 4.7) que regulan la evaluación de infraestructuras con riesgos potenciales de deterioro de los recursos hídricos, por ejemplo, en vías navegables interiores. Residuos: la Directiva marco sobre residuos17 establece los requisitos básicos de gestión de residuos (que la eliminación y recuperación de desechos no debe presentar riesgos para el medio ambiente o la salud; la prohibición de los vertidos o la eliminación de residuos no controlada; la creación de una red de plantas de eliminación de residuos; la elaboración de planes de gestión de residuos; la organización de permisos para operaciones de tratamiento de residuos), y establece la jerarquía para las opciones de gestión de residuos (en orden de preferencia decreciente: prevención, recuperación (reutilización, reciclado de materiales, recuperación energética, eliminación). Para que un proyecto de infraestructura de gestión de residuos sea cofinanciado por el FEDER o el Fondo de Cohesión, debe estar integrado en un plan coherente de gestión de residuos. La Directiva relativa al vertido de residuosl8 impone una serie de normas detalladas destinadas a prevenir o minimizar los efectos negativos de los vertederos, tales como la contaminación del suelo, el aire y el agua, y los riesgos para la salud de las personas, y a reducir las cantidades de residuos biodegradables que acaban en los vertederos. La Directiva sobre incineración19 tiene por objetivo prevenir o limitar en la medida viable los efectos negativos en el medio ambiente y los riesgos resultantes para la salud de las personas, derivados de la incineración de residuos. Impone requisitos técnicos y condiciones operacionales rigurosas y fija límites de emisión para las plantas e incineración de residuos de la UE. Varias Directivas sobre "reciclado", tales como las referentes a residuos de embalaje, equipos eléctricos y electrónicos, vehículos y baterías, fijan objetivos vinculantes para el reciclado de residuos o materiales específicos contenidos en los residuos. En la mayoría de las directivas se prevé de forma explícita que los fabricantes de los productos son responsables, en términos financieros, del correcto tratamiento de los residuos. Las verificaciones de gestión en materia de medio ambiente deberán comprobar que el beneficiario haya cumplido las Directivas relevantes, verificando que se han obtenido, de las autoridades nacionales competentes, los permisos necesarios conforme a los procedimientos aplicables. Las autoridades 14 15 16 17 18 19 Directiva del Consejo 90/313/CEE, enmendada por la 2003/4/CE. Directiva del Consejo 79/409/CEE relativa a la conservación de las aves silvestres; Directiva del Consejo 92/43/CEE relativa a la conservación de los hábitats naturales y de la fauna y flora silvestres. Directiva 2000/60/CE por la que se establece un marco comunitario de actuación en el ámbito de la política de aguas, modificada en último lugar por la directiva 2008/32/CE. Directiva 2006/12/CE del Parlamento Europeo y del Consejo relativa a los residuos. Directiva del Consejo 1999/31/CE relativa al vertido de residuos. Directiva del Consejo 2000/76/CE relativa a la incineración de residuos. 18 nacionales competentes son responsables de garantizar la correcta aplicación de la legislación comunitaria sobre medio ambiente y la toma de medidas adecuadas, en caso contrario. Con vistas a desarrollar sus responsabilidades en virtud del artículo 13(1), durante la selección y aprobación de operaciones, las autoridades de gestión deberán garantizar que tienen acceso a personal experto interno o externo adecuado, capaz de ayudarles a identificar todas las cuestiones medioambientales importantes que guardan relación con el tipo particular de operaciones en trámites de aprobación. Pueden entablarse relaciones de trabajo de estrecha cooperación con las agencias medioambientales nacionales pertinentes para que ayuden a las autoridades de gestión en este ámbito. De igual modo, a los efectos de las verificaciones de gestión establecidas en el artículo 13(2), las autoridades de gestión deberán garantizar que tienen acceso a los conocimientos técnicos relevantes, a la hora de verificar que la conformidad continuada de las operaciones con las normas medioambientales pertinentes. 3.3. Verificaciones de gestión en programas de ayuda estatal Los programas de ayuda pueden plantear problemas para los Estados miembros en lo que concierne a las verificaciones de gestión, por los motivos siguientes: mayor riesgo de control (es decir, la complejidad inherente de las normas que rigen el programa de ayuda, la naturaleza de los destinatarios –pymes– con el riesgo de un entorno de control más débil, etc.); criterios de participación específicos; disposiciones específicas relativas a la fecha límite de subvencionabilidad del gasto. Con vistas a crear un enfoque satisfactorio con respecto a las verificaciones de gestión, cabe distinguir dos tipos de programas de ayuda: 1) Cuando el papel del organismo que concede la ayuda en el contexto del programa de ayudas es simplemente de índole administrativa/gestora (es decir, que se encarga de la selección de los destinatarios, de la asignación y la administración de las subvenciones individuales concedidas, etc.) y no posee intereses financieros directos en el programa. Este es el caso cuando el organismo que concede la ayuda pertenece la administración pública. 2) Cuando el organismo que concede la ayuda posee un interés financiero en el programa o proyecto (es decir, aporta parte del capital o concede financiación mediante crédito al destinatario, que emplea los fondos para financiar la operación). Este suele ser el caso cuando el organismo es una institución financiera. En ambos casos, la mejor práctica incluiría una definición detallada de las inversiones elegibles en la decisión de subvención correspondiente a cada operación individual o en el programa de ayuda. Esto es especialmente importante cuando el organismo que concede la ayuda deposita su confianza en los dictámenes de los auditores, con vistas a aclarar el alcance de las verificaciones necesarias. La dificultad que puede plantearse concierne a la naturaleza y alcance de las verificaciones que la autoridad de gestión desarrollará, en el contexto del artículo 13, con el fin de obtener una garantía razonable acerca del correcto desarrollo de las verificaciones efectuadas en el nivel del organismo que concede la ayuda. En el primer caso, el organismo otorgante desempeña sus funciones como organismo intermedio. La autoridad de gestión podrá efectuar, por sí misma, verificaciones limitadas para obtener una garantía razonable respecto de la regularidad del gasto constatada en las verificaciones realizadas del nivel del organismo otorgante. 19 Dependiendo de la opinión de la autoridad de gestión acerca del nivel de riesgo en los sistemas de gestión y control del organismo otorgante y de los beneficiarios, esa garantía puede obtenerse mediante la presentación periódica de informes por parte del organismo otorgante, que incluyan estadísticas de los resultados de las verificaciones e información sobre quién las ha realizado, la metodología aplicada y el alcance y, en particular, el respeto de los criterios de participación para poder optar a las ayudas. Estos informes pueden combinarse con verificaciones a cargo del organismo otorgante. En el segundo caso, no se considerará que el organismo que concede la ayuda es totalmente independiente debido a que posee un interés financiero directo en la operación. La autoridad de gestión deberá respaldar la fiabilidad del trabajo realizado por el organismo otorgante llevando a cabo sus propias verificaciones sobre el terreno en el beneficiario. Dependiendo de las medidas de control tomadas por el organismo otorgante como respuesta a este presunto mayor riesgo, los procedimientos de control que deberá organizar la autoridad de gestión conllevarán un mecanismo de información periódica (que incluya la misma información mencionada para el primer caso) combinado con verificaciones sobre el terreno en el nivel del beneficiario, cuya frecuencia se determinará teniendo en cuenta el apartado 2.7 de esta nota de orientación. 3.4. Ayudas estatales Referencia (i) Vademécum de legislación comunitaria en materia de ayudas estatales con fecha 15 de febrero de 2007 (ii) Directrices sobre ayudas estatales de finalidad regional para 2007-2013 (0J C 54, 4.3.2006) Las leyes sobre ayudas estatales se aplican únicamente a las medidas que satisfacen todos los criterios relacionados en el artículo 87(1) del Tratado, a saber: que la medida conlleve una transferencia de recursos estatales; que cree una ventaja económica que la entidad no habría obtenido en el curso habitual de operaciones; que la ayuda sea selectiva y, por tanto, afecte al equilibrio entre determinadas firmas y sus competidores; y que tenga un efecto potencial sobre la competencia y el comercio entre los Estados miembros. Los Estados miembros deberán informar a la Comisión de cualquier plan de concesión o modificación de ayudas estatales, y no tendrán poder para hacer efectivas las ayudas sin la autorización previa de la Comisión. La Comisión determina si las medidas de ayuda notificadas constituyen o no ayuda estatal y, en caso de sí lo fueran, si reúnen las condiciones para acogerse a la exención estipulada en el artículo 87(2) ó (3) del Tratado. Determinadas medidas también podrán quedar exentas de la obligación de notificación sobre la base de un reglamento de exención por categorías aplicable a las ayudas estatales. En virtud de este reglamento, la Comisión puede declarar que algunas categorías de ayuda estatal son compatibles con el Tratado si cumplen determinadas condiciones, y de ese modo las eximiría del requisito de notificación previa. Actualmente, existen cinco reglamentos de exención por categorías, tres de los cuales crean exenciones para ayudas a pymes, ayudas laborales y ayudas de formación, que permiten a los Estados miembros conceder ayudas que satisfagan las condiciones fijadas en estos tres reglamentos sin necesidad de notificar a la Comisión ni de recibir su autorización. Un cuarto reglamento exime a los programas transparentes de ayudas de inversión regional, con aplicación desde 2007 hasta 2013. Un quinto reglamento se ocupa de la norma de minimis y establece que las ayudas a una empresa que no superen el umbral correspondiente (para la mayoría de los sectores, el límite vigente es de 200.000 euros) a lo largo de un periodo de tres ejercicios fiscales y que se ajusten a determinadas condiciones, no constituyen ayuda estatal. Por ende, esas ayudas no necesitan ser notificadas. Un reglamento general de exención por categorías, que previsiblemente entrará en vigor en 2008, aglutinará todos estos instrumentos. 20 En el ámbito de las ayudas estatales existen varias áreas de riesgo clave que deberán ser comprobadas mediante verificaciones de gestión, a saber: que el programa de ayuda haya sido notificado a la Comisión y haya sido aprobado, o que esté cubierto por una exención por categorías o bien satisfaga las normas de minimis20 que eximen al programa de ayudas de la obligación de notificación; que las entidades receptoras de ayudas satisfagan las condiciones del programa de ayudas en su forma aprobada por la Comisión, o que la naturaleza de las operaciones cubiertas por una de exención por categorías satisfaga las condiciones particulares de la exención; que no se solapen ayudas procedentes de distintas fuentes que pudieran incumplir la norma de minimis o las normas aplicables sobre acumulación de ayudas. La mejor práctica en verificaciones de gestión con vistas a asegurar el cumplimiento de la norma de minimis incluiría la comprobación, por muestreo, de que la ayuda concedida a la entidad durante el periodo de tres ejercicios fiscales no ha superado el umbral correspondiente. La Dirección General de Competencia ha publicado una guía21 y fichas técnicas útiles sobre las normas comunitarias relativas a ayudas estatales. 3.5. Instrumentos de ingeniería financiera Referencia Nota de los servicios de la Comisión sobre ingeniería financiera en el periodo de programación 2007-2013 DOC COCOF/07/0018/01-EN FINAL, versión definitiva del 16 de julio de 2007 Los instrumentos de ingeniería financiera22 (IIF) engloban, según el artículo 44 del Reglamento del Consejo n.º 1083/2006, los fondos de capital riesgo, fondos de garantía, fondos procedentes del crédito y fondos de desarrollo urbano. Los IIF pueden estar financiados directamente por uno o más programas operativos o a través de un fondo de cartera (holding fund). Conllevan la prestación de ayuda a empresas o proyectos urbanos en forma de inversión en acciones, préstamos y garantías. La prestación de ayuda consta de dos fases, a saber: la contribución del programa operativo al IIF y la posterior inversión del IIF en empresas o proyectos urbanos. El plan económico de los IIF candidatos deberá ser presentado y evaluado, bien por la autoridad de gestión o bien por el fondo de cartera, que deberá a continuación seleccionar los IIF y suscribir con ellos contratos de financiación. Se aplicará un procedimiento transparente a la selección de los IIF y a la toma de decisiones sobre las contribuciones procedentes de programas operativos. El procedimiento de selección se basará en criterios de selección adecuados y específicos, vinculados a los objetivos del programa operativo. Las verificaciones de gestión deberán, por tanto, incluir un examen de la transparencia del procedimiento de selección empleado. 20 El techo para las ayudas cubiertas por la norma de minimis es en general de 200.000 euros durante un periodo de tres ejercicios fiscales. 21 Vademécum de legislación comunitaria en materia de ayudas estatales con fecha 15 de febrero de 2007 y Directrices sobre ayudas estatales de finalidad regional para 2007-2013 (OJ C 54, 4.3.2006) 22 Las normas de desarrollo para estos fondos se establecen en los artículos 43 a 46 del Reglamento de la Comisión (CE) n.º 1828/06. 21 Dado que es posible que un mismo IIF obtenga contribuciones procedentes de más de un programa operativo, en esos casos, el fondo de cartera y el IIF deberán mantener cuentas separadas o un código contable adecuado para las contribuciones procedentes de cada programa operativo, a efectos de información y auditoría. La verificación conforme al artículo 13(2) deberá constar de un examen de la pista de auditoría. El beneficiario23 es o bien el fondo de cartera o, de no existir uno, el propio IIF. No obstante, como excepción24 a la norma general de que los estados de gastos deben únicamente incluir los gastos efectivamente abonados por los beneficiarios, los estados de gastos correspondientes a los IIF podrán incluir el gasto total procedente del programa operativo con vistas a la creación o contribución a tales fondos o fondos de cartera. Sin embargo, el gasto subvencionable al cierre se corresponderá con importe final abonado por el fondo de cartera o el IIF que haya sido invertido, provisionado o comprometido a modo de garantía, o costes de gestión ingresados, y no con el gasto abonado por el programa operativo. Las verificaciones de gestión de los IIF deberán desarrollarse, empero, durante todo el periodo de programación con vistas a hacer un seguimiento de las inversiones realizadas y para garantizar que los fondos se invierten de acuerdo con los objetivos de los ejes prioritarios. Deberán comprobar además que no se superen los umbrales25 fijados para los costes de gestión. El pago anticipado de los costes de gestión estará justificado en algunos casos en los que los gestores del fondo contraigan costes significativos antes de que se produzcan las inversiones. Cuando las contribuciones procedentes de programas operativos destinadas a IIF, se invierten, se ceden en forma de préstamo o se entregan a modo de garantía en empresas o proyectos urbanos, es posible que concurra ayuda estatal. Las verificaciones de gestión deberán, por tanto, comprobar que se respetan las leyes sobre ayudas estatales. El artículo 45 del Reglamento (CE) n.º 1828/2006 exige que las inversiones de IIF en pymes se realicen exclusivamente en la fase de creación, en las primeras etapas o en la fase expansiva de las empresas, y únicamente en actividades que los gestores de los IIF consideren potencialmente viables desde el punto de vista económico. No se invertirá en empresas en crisis26. En la mayoría de los casos, no es una condición que las pymes deban contraer gastos en relación con bienes o servicios concretos. A menudo se entregan acciones, préstamos o garantías para el desarrollo o expansión de las actividades económicas generales de las pymes, incluyendo el fondo de maniobra. En tales casos, las verificaciones de gestión se centrarán en comprobar la documentación de apoyo que acredita el cumplimiento de las condiciones de financiación. La documentación puede englobar modelos de solicitud; planes de negocio; cuentas anuales; listas de control e informes del fondo de capital riesgo que evalúa la solicitud; el contrato de inversión, préstamo o garantía suscrito; informes de la empresa; informes de visitas y reuniones del consejo; informes del intermediario crediticio al fondo de garantía que respalden solicitudes de reembolso; permisos medioambientales; informes sobre igualdad de oportunidades; y declaraciones formuladas en relación con el cobro de la ayuda de minimis. La entrega de justificantes de gastos en forma de facturas válidas y justificantes de pago de bienes y servicios por parte de las pymes únicamente es obligatoria como parte de la pista de auditoría, cuando el capital, préstamo o garantía entregados a la pyme están supeditados a la condición de que ésta contraiga gastos en bienes o servicios concretos. Sin embargo, en todos los casos deberá contarse con el justificante que acredite la transferencia del capital o el préstamo por parte del fondo de capital riesgo o intermediario crediticio a la compañía. El artículo 2(4) del Reglamento n.º 1083/2006 define “beneficiario” como todo operador, organismo o empresa, de carácter público o privado, responsable de iniciar o de iniciar y ejecutar las operaciones. 24 Artículo 78 (6) del Reglamento del Consejo (CE) n.º 1083/2006 25 Umbrales fijados en el artículo 43(4) del Reglamento de la Comisión n.º 1828/2006 26 En el sentido de las Directrices comunitarias sobre ayudas estatales de salvamento y reestructuración de empresas en crisis. 23 22 3.6. Proyectos generadores de ingresos (artículo 55 del Reglamento n.º 1083/2006) Referencia (i) (Borrador) Dirección General de Política Regional, nota de orientación sobre el artículo 55 del Reglamento del Consejo(CE) n.º 1083/2006 (ii) (Borrador) Dirección General de Política Regional, nota informativa sobre el artículo 55(6) del Reglamento del Consejo(CE) n.º 1083/2006 Un proyecto generador de ingresos es cualquier operación que incluya una inversión en infraestructura cuya utilización este sujeta al pago directo de una tasa por parte de los usuarios o cualquier operación que incluya la venta o el arrendamiento de terrenos o inmuebles o cualquier suministro de servicios prestados a título oneroso. Cuando se espere que una operación genere ingresos, éstos se tomarán en consideración al calcular el gasto público27. El gasto público no superará el valor corriente de los costes de inversión, de los que se sustraerá el valor corriente de los ingresos netos derivados de la inversión durante un periodo de referencia específico para las inversiones en infraestructura, u otros proyectos para los que se pueda realizar con anterioridad, de forma objetiva, una estimación de ingresos. El “método del déficit de financiación” (funding gap method), que se utiliza para determinar la contribución de los fondos a proyectos generadores de ingresos, se basa en la diferencia entre el valor corriente de los costes de inversión y los ingresos netos de la operación. Se corresponde con la parte de los costes de inversión del proyecto que necesita financiación. El objetivo general es garantizar que una operación cuenta con recursos suficientes para su ejecución y, al mismo tiempo, evitar financiar en exceso. En el cálculo de los ingresos netos, la autoridad de gestión deberá tener en cuenta el periodo de referencia adecuado a la categoría de inversión de que se trate, el tipo de proyecto, la rentabilidad que cabe normalmente esperar del tipo de inversión en cuestión, el principio de “ quien contamina paga” y, cuando proceda, las consideraciones en cuanto a la equidad. Deberá también determinar el carácter razonable de los supuestos utilizados en la previsión de ingresos y gastos de la operación. Dado que es responsabilidad de la autoridad de gestión garantizar que las operaciones cumplen las normas comunitarias, dicha autoridad deberá proporcionar a los beneficiarios orientación adecuada sobre cómo preparar su análisis financiero. La autoridad de gestión, como parte de sus verificaciones de gestión, debe comprobar que se han desarrollado correctamente las evaluaciones de las operaciones generadoras de ingresos, que ha examinado minuciosamente el análisis financiero y que las evaluaciones están totalmente documentadas. Además, la autoridad de gestión debe garantizar que, en las operaciones cuyos ingresos no puedan estimarse de forma objetiva con antelación, los ingresos generados dentro de los cinco años siguientes a la conclusión de esa operación se reducirán del gasto declarado a la Comisión28. Cuando, a lo sumo a los tres años del cierre del programa operativo, quede establecido que una operación ha generado ingresos que no se han tenido en cuenta (es decir, cuando los ingresos reales sean superiores a los estimados y ese importe de ingresos adicionales no haya sido deducido del gasto declarado), dichos ingresos se devolverán al presupuesto general de la Unión Europea en proporción a la 27 28 Artículo 55 del Reglamento del Consejo n.º 1083/2006. Artículo 55(3) del Reglamento del Consejo n.º 1083/2006. 23 contribución de los Fondos29. Deberá establecerse un sistema que permita a la autoridad de gestión hacer un seguimiento de los ingresos y cuantificarlos. Como parte de sus verificaciones de gestión sobre el terreno y después de la conclusión de las operaciones, la autoridad de gestión deberá comprobar, por muestreo, la precisión del cálculo de los ingresos declarados por los beneficiarios. Pueden adoptarse procedimientos proporcionales para hacer un seguimiento de los ingresos generados por operaciones cuyo coste total sea inferior a los 200.000 euros. Los proyectos supeditados a las normas sobre ayudas estatales no estarán sujetos a las disposiciones sobre generación de ingresos establecidas en el artículo 55(1) a 55(5). La Dirección General de Política Regional ha publicado orientación detallada independiente acerca de la aplicación del artículo 55 en proyectos generadores de ingresos 30 (borrador), junto con una nota informativa sobre el artículo 55(6)31 (borrador). 3.7. Invariabilidad de las operaciones En virtud del artículo 57 del Reglamento (CE) n.º 1083/2006, la autoridad de gestión garantizará que una operación retenga únicamente la contribución de los Fondos si la operación no sufre, en los cinco años 32 siguientes a su conclusión, una modificación sustancial: (a) que afecte a su naturaleza o a sus condiciones de ejecución o que otorgue a una empresa o un organismo público ventajas indebidas, y (b) que se derive de un cambio en la naturaleza de la propiedad de una infraestructura o del cese de una actividad productiva. Como parte de sus verificaciones y una vez completadas las operaciones, la autoridad de gestión deberá comprobar el cumplimiento de estas condiciones, incluso mediante verificaciones sobre el terreno por muestreo. Se recuperarán todos los importes identificados como abonados de forma indebida. 3.8. Igualdad y no discriminación Referencia (Borrador) Dirección General de Política Regional, nota informativa sobre el artículo 16 del Reglamento del Consejo (CE) n.º 1083/2006 En virtud del artículo 16 del reglamento (CE) n.º 1083/2006, las verificaciones de gestión velarán por que las operaciones respeten y promuevan la igualdad entre hombres y mujeres y la integración de las cuestiones de género en las diferentes etapas de la ejecución de los Fondos. Esto requiere un enfoque que integre la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres en las políticas generales, que garantice que todas las operaciones toman abierta y activamente en consideración sus efectos en la situación de hombres y mujeres, con el objetivo de superar las desigualdades. Todos los programas deberán contribuir a una mayor igualdad 29 Artículo 55(4) el Reglamento del Consejo n.º 1083/2006. (Borrador) Nota de orientación sobre el artículo 55 del Reglamento del Consejo (CE) n.º 1083/2006. 31 (Borrador) Nota informativa sobre el artículo 55(6) del Reglamento del Consejo (CE) n.º 1083/2006. 32 O tres años desde la conclusión de la operación, en el caso de los Estados miembros que hayan ejercido la opción de reducir el plazo para el mantenimiento de una inversión o de los puestos de trabajo creados por pymes. 30 24 entre hombres y mujeres, y deberán poder demostrar su impacto en este sentido antes, durante y después de la ejecución. Además, las verificaciones deberán comprobar también que se han tomado las medidas adecuadas para impedir cualquier discriminación por razón de sexo, raza u origen étnico, religión o convicciones, minusvalías, edad u orientación sexual en las diferentes etapas de la ejecución de los Fondos y, en especial, en el acceso a ellos. Por tanto, las listas de control utilizadas en las verificaciones de gestión deberán, cuando proceda, incluir preguntas relacionadas con el respeto de los principios de igualdad y no discriminación. Las verificaciones de gestión deberán comparar los resultados reales de programas y operaciones cofinanciados con los indicadores señalados como objetivo, durante todo el periodo de programación. Las autoridades de gestión comprobarán que se han tomado medidas adecuadas durante la ejecución de la operación con vistas a cumplir las condiciones relevantes establecidas en el acuerdo de subvención. Una buena práctica sería verificar, mediante la hoja de asistencia de un programa de formación que el índice de participación de hombres y mujeres coincide con el previsto en la propuesta de proyecto y obtener explicaciones para las diferencias significativas. La accesibilidad de las personas capacitadas constituye uno de los criterios que deben observarse al decidir operaciones cofinanciadas por los Fondos y que cabe tener en cuenta durante las diversas etapas de ejecución. Las disposiciones sobre accesibilidad para personas discapacitadas se mencionan en las Directivas sobre contratación pública de la UE y prevén que, siempre que sea posible, las especificaciones técnicas establecidas en los documentos de licitación –como anuncios de licitación, pliego de condiciones u otra documentación adicional– se definirán de un modo que tome en consideración los criterios de accesibilidad para personas con discapacidades o los criterios de diseño para todos. Las verificaciones de gestión deberán comprobar que las operaciones respetan las disposiciones sobre accesibilidad. Concretamente, las verificaciones sobre el terreno tendrán que comprobar si las especificaciones técnicas o cualesquiera otras disposiciones previstas en el pliego de condiciones para garantizar la accesibilidad han sido debidamente implantadas. La Dirección General de Política Regional ha publicado una nota informativa sobre el artículo 16 (borrador pendiente de preparación para el COCOF, junio de 2008). 3.9. Objetivo de cooperación territorial europea (CTE) En virtud del objetivo de cooperación territorial europea (CTE), el Fondo Europeo de Desarrollo Regional centra su atención en el desarrollo de actividades económicas, sociales y medioambientales transfronterizas; la creación y desarrollo de cooperación transnacional y el refuerzo de la eficacia de la política regional. La estructura de los Programas de CTE puede ser compleja y exigir la cooperación entre las distintas combinaciones de regiones/Estados miembro y otros Estados. Debido esta complejidad se considera conveniente proporcionar orientación sobre las verificaciones correspondientes a este campo. Conforme al artículo 15 del Reglamento (CE) n.º 1080/2006 y como excepción a las disposiciones generales sobre gestión de los programas principales en los que la autoridad que gestión es responsable de verificar la legalidad y la regularidad del gasto, en la CTE esta responsabilidad recae en los Estados miembros participantes. Deberán crear sistemas de control y designar a responsables del control que a su vez lleven a cabo la verificación de la legalidad y regularidad de los gastos declarados por cada beneficiario participante 25 en la operación. La autoridad de gestión comprobará que el gasto de cada beneficiario participante en una operación ha sido validado por el responsable del control mencionado en el artículo 16(1) del Reglamento (CE) n.º 1080/2006. A fin de validar el gasto, conforme al artículo 16 del Reglamento (CE) n.º 1080/2006, cada Estado miembro establecerá un sistema de control que permita verificar el suministro de los bienes y servicios cofinanciados, la veracidad del gasto declarado en concepto de operaciones o partes de operaciones realizadas en su territorio, y la conformidad de dicho gasto y de las operaciones, o partes de operaciones conexas, con las normas comunitarias y sus normas nacionales. A tal efecto, cada Estado miembro designará a los responsables del control encargados de verificar la legalidad y la regularidad del gasto declarado por cada uno de los beneficiarios participantes en la operación. Los Estados miembros podrán decidir designar a un único responsable del control para todo el ámbito del programa. En el supuesto de que la verificación del suministro de los bienes y servicios cofinanciados sólo pueda efectuarse respecto de la operación en su integridad, la verificación corresponderá al responsable del control del Estado miembro donde esté situado el beneficiario principal o la autoridad de gestión. Es contenido y alcance de las verificaciones que emprendan los responsables del control será idéntico a las de las autoridades de gestión en los programas de Competitividad y Convergencia 33. Los responsables de control deberán verificar el suministro de los bienes y productos cofinanciados, la veracidad del gasto declarado por los beneficiarios en concepto de operaciones y su conformidad con las normas comunitarias y normas nacionales. A este efecto, deberán llevar a cabo verificaciones administrativas respecto de cada solicitud de reembolso de los beneficiarios y verificaciones sobre el terreno de las operaciones individuales, que podrán efectuarse por muestreo. Los principios generales descritos anteriormente en este documento en lo que respecta al momento, alcance e intensidad de las verificaciones, la organización de las verificaciones sobre el terreno, el requisito de documentar el trabajo realizado y la separación funcional de tareas relacionadas con la verificación y la auditoría también son de aplicación a la labor de los responsables del control. Además, los responsables del control deberán verificar que los beneficiarios y otros organismos participantes en la ejecución de operaciones mantienen un sistema de contabilidad separado o un código contable adecuado en relación con todas las transacciones relacionadas con la operación. En virtud del objetivo de la CTE, el artículo 20 del Reglamento (CE) n.º 1080/2006 exige que para cada operación se nombre a un beneficiario principal. El beneficiario principal se cerciorará de que el gasto declarado por cada uno de los beneficiarios participantes en la operación haya sido contraído con la finalidad de ejecutar la operación y corresponda a las actividades acordadas entre esos beneficiarios, y comprobará que el gasto declarado por cada uno de los beneficiarios participantes en la operación haya sido validado por los responsables del control. El alcance del trabajo del responsable del control con respecto al beneficiario principal incluirá, por consiguiente, una verificación de cómo el beneficiario principal cumple estas obligaciones. El papel de la autoridad de gestión consistirá en comprobar que el gasto de cada beneficiario participante en una operación ha sido validado por los responsables del control. La mejor práctica en este campo consistiría en poner los datos del trabajo realizado por cada uno de los responsables del control a disposición del controlador encargado del beneficiario principal, el beneficiario principal y la autoridad de gestión. Este requisito podría incluirse en el mandato de los responsables del control. 33 Artículo 60(b) del Reglamento (CE) n.º 1083/2006 26 Cuando parte de una operación se ejecute fuera de la Comunidad Europea34 y cuando no se haya designado a un responsable del control, se tomarán medidas concretas para definir qué responsable del control o entidad se encargará de verificar la legalidad y la regularidad del gasto. Se tomarán medidas similares para la verificación del gasto realizado en la Comunidad Europea cuando se encuentre fuera del territorio de los Estados miembro participantes.35 34 35 Véase el artículo 21(3) del Reglamento (CE) n.º 1080/2006 Véanse los artículos 21(1) y (2) del Reglamento (CE) n.º 1080/2006 27