dominado en ella. Dentro de este tipo de an~lisis se enmarcan los estudios de Bolivar Echeverria sobre el barroco mexicano y de Carlos Espinosa sobre la religiosidad en el periodo colonial ll. Para el Ecuador, no hay trabajos historicos especificos s obze el tema de los santuar ios, cuenta de la perspecti va a no ser aquellos que dan insti tucional c a t o Li c a , y que se limitan al plano descriptivo, sin ofrecer un an~lisis del tema enfocado desde el problema del poder y de la pr~ctica popular. En ese sentido, el el Ecuador un an~lisis campo historico de los santuarios, es en todavia virgen, pero investigadores empiezan a acercarse. Para teoricamente y necesario el estudio entonces bibliograf ia de la a recurrir secundar ia, Virgen los que los fundamentar santuarios, es y a sobre el propuestas .de la literatura fundamentalmente al teorica europea, tema. 3. La Virgen sociologia el y de la Santuario Religion. Un desde las acercamiento teorico a la religiosidad popular. El tema de la religiosidad popular dentro del cual se enmarca este estudio, presenta multiples y ricas posibilidades de lndagar no solo en discursos y simbolos, sino en toda una 11 Por ejemplo, Bolivar Eheverria, "El Ethos Barroco", en: Nariz del Diablo, No. 20, FLACSO - CIESE, 1994, pp.26-45. Carlos Espinosa Fern~ndez de Cordova, "Cuerpo, Vision e Imagen en el Barroco", Ibid., pp. 46-63, y el articulo ya ci tado sobre la racionalidad religiosa. 12 , , gama de practicas que se relacionan can e110s y tambien escapan de e110s. Pero, a que me refiero can los conceptos de religion y religiosidad? articulado de es i nd i v i du a l e s y la colectivos, y sienten pr~cticas y manera religion la principio, instituciones, religiosidad viven En practicas en en la Y que sistema creencias, tiempos r e l i g i o s i d ad La un sujetos distintos la religion. es la y historicos e spa c i os , y popular abarca significados, textos y acciones concretas, imagenes y devociones, enunciados y ritos, que nos acercan a colectiva y de reforzamiento de identidades, la acci6n al desarrollo de la subjetividad individual a traves de la busqueda de alivio a necesidades existenciales, y a formas de comunicaci6n entre 10 humano y 10 temporalidades divino. en Desde los que el espacios multiples los estudio de la religiosidad y nos situa, es posible explorar las formas de ver, vivir y huir del mundo, las redes de estrategias de poder y y socializaci6n las comunicaci6n, los proyectos de dominaci6n, valores, jerarquias, alternativas de resistencia y desestabilizaci6n. El estudio de la religiosidad nos ace rca a 10 publico a y 10 privado, a 10 cotidiano y a 10 excepcional, a la solidaridad la exclusion. En fin, al pensar la r e Li g i ori como un y hecho social, la religiosidad nos ofrece un marco conceptual desde el cual es posible abordar, con una perspectiva distinta, el an6lisis de aspectos no religiosos de la sociedad. Un an6lisis descripci6n de 10 de este teo16gico tipo 0 no de puede 10 limitarse no rma t i v o . a Tampoco una es posible, en nombre de un materia1ismo estructural, deshechar el 13 e s t ud i o de r e Li g i o s i d ad la y dej ar de preguntarnos por las dimensiones reales de la vivencia religiosa, cuando pensamos en una sociedad colonial tan profunda y dramaticamente marcada por esa experiencia. relativamente Meyer 12, no dividida, Aunque hoy s e cu l a r i z ad a , es una ausencia con profundas seamos parte que v i v i mo s , 10 de huellas integrada en la religion. de una como sociedad dice Jean r e Li g i o n , sino una sociedad de fue como sociedad 10 que Las preguntas que desde hoy podemos h ac e r no s sobre 10 que de Certeau llama una "a p r op i ac i on creativa de la locales r e Li g i on y dominante"13, regionales, a nos acercan respuestas religiosos universales, y sin duda, a especificidades particulares de sistemas son escenciales para poder entender los valores, el imaginario y el comportamiento de los actores sociales dentro de nuestra peculiar modernidad andina. No hay que religiosidad son suponen un perder recorte de categorias de la vista que tanto culturalmente real i d ad . Es por religion construidas eso que en como que este trabajo estas categorias no van a ser usadas como rigidos-marcos c onc e p t ua 1 es que desemboquen en una re i f i cac ion de los f e nome no s estudiados, sino que ]a delimitaci6n que de elIas se ha hecho par parte de las sociologias de la religion, ha servido como punto de apoyo y guia a 10 largo de toda la investigaci6n. 12 Jean Meyer, art. cit. p. 714. 13 En: Michel de Certeau, The Mystic Fable, University of Chicago Press, Chicago, 1992. 14 3.1~ Propuestas te6ricas generales.­ Frente al postulado iluminista de que la religi6n es un simple conjunto de creencias a punto de desaparecer bajo la egida de la razon, la educaci6n y la ciencia, Weber, Durkheim y Eliade, entre otros pensadores, sostienen que la religion esta indisolublemente unida a la mentalidad del hombre y al funcionamiento de la sociedad. Ellos construyen sociologias de las religiones que ofrecen categorias analiticas especialmente utiles y para el anal isis andina. En un pertinentes r e Li g i o s i d ad popular hist6rico estudio como la de el que me propongo hacer sobre la imagen de la Virgen y los santuarios, conviene definir y confrontar las premisas te6ricas con las que seran enfrentadas exposici6n las completa fuentes. s ob r e el No pretendo pensamiento de ofrecer e s t os y una otros autores en torno al tema, me limite a exponer las categorias que of r ecen posibilidades de iluminar el acercamiento al tema concreto de estudio. Durkhe i m1 4 : La idea de autoridad y la nocion de comunidad son dominantes en la sociologia positivista de Durkheim. El plantea que ninguna sociedad puede prescindir de una disciplina moral, porque los intereses de los individuos no son, necesariamente, los del grupo al que pertenece. Tiene que haber un sistema que recuerde al sujeto los intereses colectivos para 14 Me he basado fundamentalmente en: EmilIe Durkheirn/ Las Formas Elementales de la Vida Reliqiosa/ Madrid, Akal Editores, 1982; y Robert Nisbet, La Formacion del Pensamiento Socio16gico 2/ Buenos Aires/ Amorrortu Editores, 1977. 15 que este no desordene sistema moral, en cada una la sociedad de la que es miembro. centrado en la autoridad, de las asociaciones actua constantemente intermedias de desde el parentesco, pasando por la comunidad religi6n g r ad o la sociedad, local, hasta la el gobierno politico. 0 Para que los grupos sociales funcionen, un Este de consistencia tal que los estos deben tener individuos se sientan firmemente vinculados a ellos, deben sentirse solidarios con un col~ctivo que los precede y los sobrevive, va mas alIa de sf mismo y da sentido a su vida. Durkheim distingue entre 10 sacro y 1'0 p r o f a no , y vincula, social. Los objetos sacros, inseparablemente, a aquel con 10 tienen una superioridad natural en dignidad y poder sobre 10 profano y en relaci6n al hombre, quien s i emp r e est a en un estado de I nf'e r i o r i d ad . Esa superioridad nacida de 10 sagrado es fundamental en cualquier acercamiento a ]a religiosidad popular andina. A partir de la universalizaci6n de su an a l Ls i s de la religi6n totemica, Durkheim sostiene que la religi6n va mas alIa de las creencias religiosas, supera el plano c o g n i t i vo , practica y acci6n con una clara funcionalidad: reproducci6n social a traves del rito. y es la cohesi6n y la Esa comunidad unida en torno a una creencia comun y que expresa esa creencia con una practica ritual, es la iglesia. El rito, por su eficacia, es la escencia de la vida religiosa como acci6n, como ayuda del vivir coti~iano. cole.ctivas A traves del rito, que cohesionan a la religi6n refuerza las normas la 16 sociedad y hacen a esta consciente de S1 misma por medio de la accion comun, oponiendose al sustrato individual que puede subvertir 10 social. "Las ideas y los sentimientos colectivos solo son posibles gracias a movimientos externos que s i. m b 0 Lii z a n . . . los ,,1 ~ el "; los ritual reimpone la norma. Podemos decir entonces que los santuarios son espacios en los que se reproduce 10 colectivo, el sentido de 10 social. Las imagenes de la Virgen Maria y de los Santos funcionarian como o bi e t o s t o t ern i c o s reproducen la que 10 c o Le c t i vo , objetivizan comunidad, son "sentimientos condensan o bj e t Lvado s "!" y en cuanto que esconden operaciones mentales de disciplina. fA pesar de que el analisis de Durkheim es especialmente pertinente en el papel de los santuarios y, mas concretamente de las apariciones de ]a Virgen, como medio de identidad y de status colectivos, es importante acercarse cr1ticamente a el, para evitar caer en la reificacion de ciertos conceptos que nos impida comprender imagenes y los e s p e c.i f i ci dad la polivalencia y santuarios l local de 7, asi las polifuncionalidad de como la practicas riqueza concretas de de las la la religiosidad como apropiaci6n y recreaci6n. Durkheim no explora la influencia del pensamiento teo16gico y del contexto 15 I bid., p. 3 90 . 16 Ibid., p. 391. U Sobre 10 polivoco y polifuncional del culto a la Virgen Maria, asi como la construcci6n hist6rica del mismo, ver el exhaustivo y valioso trabajo de Marina Warner, Tu Sola entre las Mujer~s. El Mito y el Culto de la Virgen Maria, Madrid, Taurus, 1991. 17 so~ial ideo16gico, politico y en la practica de la religi6n. En nuestra historia colonial, las discusiones teo16gicas en torno a la naturaleza de los indios, el caracter de la Evangelizaci6n y La Extirpaci6n de tuvieron una gran Idolatrias, influencia en pueden pasarse por alto, permanente que informe as f como la Contrarreforma, la p r a c t i c a r e Li g i o s a , y no en nombre de un sustrato colectivo univocamente la pr ac t i ca del cul t o . Du r k he i m ad erna s ignora las fuentes existenciales de 10 r e Li g i o s o y eso cierra las puertas para un interesante camino de acercamiento a la religiosidad. Por otro lado, al reificar la comunidad no es posible acercase a ella como proyecto inacabado en el que se manifiestan estrategias y relaciones de poder que a menudo se imponen a trav~s de la religi6n, y se consolidan, reproducen, resisten 0 negocian, a Weber 1 8 ; r e l igiones El y vasto las naturaleza, su econ6micas, y el analisis estructuras vinculaci6n p ap e l que que de la religiosidad. Weber hace sobre las sus origenes y instituciones sociales y s oc i a l e s , con la trav~s religi6n cumple en el cambio social, nos ofrece la posibilidad de estudiar hist6ricamente la religi6n y la religiosidad, de acercarnos a las creencias y las pr act i ca s religiosas en s u e s pe c i f i c i da d hi s t or i ca y en su densJdad simb6lica. Weber provee elementos para un analisis de la religi6n que, a diferencia de Durkheim, va mas alIa de su funci6n como reproductora de identidades y de normas sociales. 18 Max Weber, Economia y Sociedad, 1964. 18 Torno I, Mexico, FeE, '. Este autor se ace rca al estudio de la sociedad a traves del uso de categorias oposici6n a Marx s o c i.ed ad , Weber resultado del religiosas. qu i e n para Esto la busca demostrar es posible religi6n que es ref lej o t i po de el porque, de sociedad tipo de religi6n que hist6ricamente definia en la era su racionalidad y su comportamiento. Weber concibe una sociedad compleja en la que una gama de grupos interactua difu80S. de multiples Son las clases y tienden a reproducirse, maneras dentro c a r i sma t i po como no comunidades de limites los tipos de comportamiento los que como entes Dentro de esta sociedad no reificada, estudia el de comportamiento fundamentalmente las y unitarios. religiones de salv8ci6n a traves de las cuales interpreta el advenimiento del capitalismo. Por religi6n de s s Lv s c ion'", se entiende aquella d i r i g i d a a la liberaci6n de la muerte y del sufrimiento a traves de la r u r i a i z ac ion de un comportamiento e t i c o . El est a en el impacto organizaci6n de sociedad, las ideas efectivas de las religiones la vida econ6mica y en de Interes salvaci6n de Weber sobre la la racionalidad de la sobre todo a partir de la Reforma Protestante cuando religiosas que se intervienen convierten en la en fuerzas expansi6n del hist6ricas espiritu capitalista en el mundo. Weber enfrenta la mistica irracional y excepcional con el ascetismo sistematico y rutinario, el comp6rtamiento dirigido al mundo con el extramundano, el carisma ~ Ibid., pp. 328-492. 19 con la institucion. Este enfoque es relevante para el tema de este trabajo en cuanto las i ma g e ne s , sobre todo la de la Virgen, y los santuarios, son claves dentro de la economia de salvacion de la religion catolica antes y despues de ver¢mos la Virgen es y a t r av e s de necesidades ella la Contrarreforma. Como la intercesora entre Dios y los hombres, po s i b l e es existenciales c on s e g u i r siempre y la s at i s f acc i on cuando se sigan de unas practicas de devocion que ciertamente contribuyen a definir la racionalidad y el comportamiento de la sociedad. Me interesa ademas el reconocimiento que hace Weber de la d i s tr i buc i on religion. desigual Plantea del que la saber vida y del poder religiosa dentro es un de la permanente conflicto entre la exigencia de especialistas religiosos y la vivencia popular de la religion. Desde este planteamiento es posible acercarse al santuario como proyecto de dominacion que se enfrenta con la respuesta y la recreaci6n popular. Por otro lado, en el r e Li g i o s a , f avo r'e c e Estado. y protestantismo est a s e gun Esa se Weber convierte el virtuosidad democratizarse, se democratiza en racionalidad surgimiento religiosa la de la virtuosidad e co nom i c a , c i ud ad an i a protestante, da paso, del al a un comportamiento ascetico intramundano que sublima el lucro y se dirige al bienestar social. El el anorro, y y la riqueza y el trabajo, lucro son exaltados desde el punto de vista etico y moral y convertidos en vocacion, en un deber con Dios. En el catolicismo en cambio, la practica econ6mica ha 20 ido a espaldas de la religion: cuando los paises catolicos se secularizan, se rompe la adherencia a las normas de comportamiento extramundano, y el lucro, condenado eticamente, toma una forma desorganizada depredatoria. y EI fundamento r a c i o na I del catolicismo da Lug a r a un comportamiento i mpu Ls i vo , no racional, al saqueo, al desorden, comportamiento que explicaria el desarrollo de una economia rentista alejada de un ascetismo economico racional. Esta mi rada weberiana sobre racional idades v a Lor e s , y comportamientos e impulsos, es una forma rica y productiva de acercarnos a nues t ros procesos his tor i cos. Ofrece 1a posibilidad, con un uso critico y no rigido de las categorias, de mirarnos desde dentro y responder a la eterna pregunta de por que somos diferentes a partir de nuestra especificidad cultural, una .e s pe c i ficidad que no puede ignorarse en nombre del peso de la influencia y la manipulaci6n externas. Dentro de especificidad c uy a racionalidad p r op i a hay que encontrar, esa la r e 1 i.g i os i dad como un conj un to de enunc i ados y p r a c t i cas, cre i dos y vividos profundamente en nuestra historia colonial y repwblicana, abre un campo inmenso de investigacion en el que el uso de la teoria weberiana puede ser particularmente util. Tanto en el barroco, como en el proceso de construccion de la nac ion , hay un s u s t r a t o de valores y comportamientos que s e manifiestan en la actitud religiosa y que pueden decirnos mucho s o br-e el suj e t o , la comunidad y el poder, y sobre la especificidad de nuestra modernidad. Esta modernidad aunque de lasespaldas a la racionalidad 21 e co nom i c a , no p o r ella e s t a e x e n t a de su p r op i a racionalidad, una racionalidad local en cuya Virgenes constituci6n y santuarios pueden c ump Li r un papel fundamental; una racionalidad en la que la satisfacci6n de las necesidades existenciales se centra en la confianza absoluta en la mediaci6n de la Virgen ante Dios zo. Mircea Eliade y Michel Foucault son otros autores cuyas p r opu e s t a s me han ayudado a mirar de cerca los santuarios y las imagenes de la Virgen. Eliade 2 1 ; La obra de Eliade ofrece t amb i e n c a t e go r i a s de ana Li s i s u t i Le s para acercarse a 10 religioso como experiencia Y, sobre todo, s an tua r i o para comprender los significados que rodean el la y forma en la que es t e ac t u a como vector de comunicaci6n entre 10 humane y 10 divino. Ademas, sus propuestas sobre los s ug i e r e un e s p ac i o s en estudio de los la que se imagen hace en si present e como 10 divino, sustituto de 10 divino, una posible teoria de la imagen. Segun Eliade, el hombre de las sociedades premodernas tiene conocimiento de 10 real en cuanto que este es repetici6n de un arquetipo 0 una acci6n primordial. Dentro de ese esquema, hay tres grupos de hechos que Eliade toma de culturas diversas para i I ust r ar 1. la ontologia a r c a i c a/": Elementos cuya realidad es funci6n de la repetici6n e H Ver Marina Warner, op. cit., sobre todo el desarrollo que hace de Maria como mediadora, , pp. 369 y sigs. 21 Ver po r ejemplo, Mircea Eliade, Reto rno, Madrid, Alianza-Emece, 1985. 22 Ibid., pp.15-39. 22 El Mito del Eterno imitaci6n del arquetipo celeste. Los templos y santuarios, por ejemplo, tienen un prototipo, un modelo celestial. Las regiones no habitadas por el hombre, las regiones salvajes y desconocidas se asimilan al caos que precede a la creaci6n. Cuando cualquier e s p ac i o es pe r t.e ne c e r ocupado al cosmos para y habitarlo amb i to de al transformarlo, 0 10 real a t r av e s pasa a de 10 ritual. Lo real por excelencia es 10 sagrado. 2. Espacios como ciudades, t emp Lo s , casas, que son reales en cuanto simbolizan el centro supraterrestre que los transforma en "e en t r o s del mundo". Existe todo un simbolismo arquitect6nico del "centro" que parte desde la Montana Sagrada que une al cielo con la tierra y por extensi6n abarca todo templo, p a l ac i o que se asimilan a la Montana Sa g r ad a . santuario El Ll e g a r 0 al "centro" que es la zona sagrada por excelencia supone un camino dificil. Este puede estar simbolizado en la practica de peregrinaciones en cuyas dificultades se marca el paso de 10 profano a 10 sagrado, a una existencia "duradera y eficaz". 3. Los rituales y actos profanos que repiten hechos que en el o r i g eri plantearon d ioses, heroes 0 antepasados. Toda .ac c ion humana adquiere su eficacia en tanto que repita una acci6n que se realiz6 en el origen. El cristianismo como practica propone la repetici6n constante de la vida de Jesus. El ritual de la misa reactualiza la vida y la Pasi6n de Jesus, anula el tiempo profano y la duraci6n y reactualiza el momento inicial. Si tomamos los centros simb61icos de orden, y, islas s a g r ad a s en un sagrados andinos como centros en ese sentido, a los santuarios como cosmos que 23 tiende al caos, es posible v i nc u l a r Lo con teo16gico y evidencias pr ac t i ca la de hist6ricas sobre Evangelizaci6n de el pensamiento la Colonia que afirmaban que en los Andes habia un caos de origen dem6nico, que se manifestaba a traves de los indigenas. Desde esa perspectiva es posible interpretar que los santuarios fueron fomentados por la Iglesia como Islas del orden dentro de ese caos de 10 profano. Por otro lado, a] pensar los santuarios como espacios en los que 10 divino se hace presente, es posible extender la misma teoria a la funci6n de las imagenes como vectores de 10 divino. Mas aventurado es preguntarse si los santuarios marcan la continuidad de una mentalidad aut6ctona, una menta1idad que traspas6 10 sacro de sus huacas, el simbolismo de centro de sus mon t afra s , tumbas y templos, a los santuarios ca t6l i cos en un intento desesperado por mantener un orden, un cosmos, brutal y repentinamente desfigurado por el caos de la conquista. Por otro lado, si las categorias propuestas por Eliade son tomadas como dadas se y enfatiza una continuidad en las motivaciones religiosas y sus manifestaciones, puede perderse, como ocurriria tambien con el uso reificado de durkheimninas, religiosa y mucho de su las categorias 1a riqueza especifica de asociaci6n con valores e la practica instituciones hist6ricas. Al trabajar con Eliade se debe tener cuidado con el e nf a s I s que experiencia el pone r e l i gi osa , en la la ausencia cual arquetipo primordial. 24 de seria un historicidad continuo de la retorno al bien Si en su obra Foucault espec1ficamente el tema de la religiosidad, conceptual para acercarnos a la imagen no aborda S1 ofrece un marco como modalidad de significaci6n, es decir como relaci6n entre simbolo y referente, y a la transformaci6n hist6rica de esa significaci6n. Tambien, con sus propuestas te6ricas, ilumina la lectura del santuario como proyecto de dominaci6n en el que se incluye la imposici6n y el.reforzamiento de formas de s u b j e t i v i d a d c a r a c t e r i s t i c a s del i nd i v i d uo moderno autorregulador. Esta perspectiva es pertinente en cuanto considero que el espacio colonial exhibe rasgos de una en la que las instituciones religiosas modernidad alternativa imponen formas de s ub j e t i v i d a d , mas adelante impuestas po r 3.2. Acercamientos especificos a la Virgen> el santuario y las instituciones seculares. apariciones.­ A partir de autores, se han las propuestas te6ricas ofrecidas por estos desarrollado estudios mas especificos sobre santuarios e imagenes que es necesario mencionar, en cuanto que t amb i-e n me han servido como sustentos te6ricos importantes para aproximarme a las fuentes. Usar e 1 esquema de Eli ade para d i s efia r una t eor i a ten tat iva del santuario puede ser muy provechoso, como 10 demuestra Juan 2~ Fundarnentalmente Las palabras y las Cosas, M~xico, Siglo XXI, 1985, y Discipline and Punish. The Birth of the Prison, New York, Vintage Books, 1979. 25 Maria Diez T'abo ad a/". El parte de la dificultad que hay en definir 10 que es un santuario por las multiples funciones que estos cumplen. Sin embargo, el trasfondo segun que, Diez Taboada, siempre esta presente, es que el santuario es un lugar santo en donde el hombre se encuentra con la divinidad. A partir de una e n t o nc e s hierofania 0 configurado, una el teofania el espacio caos da paso a religioso es un orden cargado de significado, al que el hombre responde con un culto formado por ritos. £1 autor c r i s t i ano , reconoce explora que la trascendente. habria origen estado presencia hist6rico en el cercana de pueblo un Cristo y la Virgen Maria del de Dios Con el nacimiento de Jesus y el cristianismo, santu~rios el se santuario Israel quien invisible y desarrollo del convierten en vivos, en el nucleo central del templo en el que se concentra el conjunto de fieles que constituyen la Iglesia. Los santuarios surgen en torno a sepulcros, reliquias, imagenes y o t'r o s o b j e t o s sagrados a los que se suman exvotos de c u a lqu i e r tipo, cuadros, certificados, fotografias, etc. En los Andes, y e s p e cd f i cament e en el Ecuador como veremos, predomi nan los santuarios que se construyen a raiz de apariciones que, en la ausencia de reliquias, se constituyen en el medio fundamental de acceso, de acercamiento a 10 divino. de la imag~n De ahi la importancia como simulacro de 10 divino. 24 Juan M. Diez Taboada, "La significacion de los santuarios", en; Carlos Alvarez Santalo, Maria Jesus Buxo y Rey Salvador Rodriguez (coords.), La Reliqiosidad Popular I I I , Hermandades, Romerias y Santuarios, Barcelona, Anthropos, 1989. 26 La estaria santuario del existencia ademas irremediablemente unida a la fe de los devotos que los lleva a el en peregrinaci6n. Al santuario se asocia una densa noci6n de espacio, en cuanto que es un espacio cargado de significado al contener una imagen en su interior, al ser un lugar en donde se ha manifestado 10 sagrado y en donde el hombre puede comunicarse con el. Al mismo tiempo, las de devoci6n pe r e g r i nac i on , Espacio y hacia que tiempo significados des t a c a l a de a este espacio se asocian practicas, la imagen, constituye se enorme e fie a cia la santuario al conjugan y en conjunto en Como riqueza. practica din am i cad e 1 de Eliade, santuario, meta de la s a g r ad a . p r a c t icas Di e z y Taboada eficacia para satisfacer las necesidades fisicas y existenciales compartidas por la comunidad. El autor resalta el c a r a c t e r colectivo del hecho r e Li g i o s o , En ese sentido se ace rca a Durkheim, ya que, aunque el culto individual es posible y de hecho se da, esto se produce dentro de un marco religioso colectivo, y es ese sentido de comunidad el que mas eficacia otorga al ritual, a la p e r e g r i na c i on . La divinJdad pareceria comunicarse ante todo con la comunidad, con el pueblo, y esa comunicaci6n forma parte la cultura local. La Lo ca l i d ad es parte de la escencia de los santuarios, una localidad que en la practica del rito se vuelve universal. Hay en e s t a idea una referencia al status que despliega el santuario no pl~namente cuenta. La desarrollada, pero que de hecho hay que tener en aparici6n sagrada en una localidad demuestra Ja preferencia de 10 sagrado por ella. E1 punto es interesante si 27 se 10 estudia a 1a 1uz de condiciones hist6ricas concretas en las que preeminencias locales, regionales 0 nacionales, disputan 0 se imponen a partir de apariciones, santuarios se y el desarrollo de tradiciones de devoci6n. El problema es ver c6mo las identidades locales 0 globales son reproducidas po r el santuario. Diez Taboada resalta ademas el que las peregrinaciones y s an t u a r i o s como manifestaci6n parte de pararela, la a r e Li g i o s i d ad veces popular, marginal, de la son una religi6n oficial. La tradici6n del culto se vuelve secular al crear en t o r no al popular s an t u a r i o toda una c u Lt u r a popular. es un compendio de La religiosidad manifestaciones, creencias y v i ve nc i a s r e Li g i o s a s , de expresiones artisticas y culturales que el pueblo ha ido recreando y fundiendo. Por eso no tiene interes ~l s610 santuario y las celebraciones en su interior, sino que parte de ese tipo de manifestaci6n religiosa son tambien las fiestas, las ferias, r e cue-r d o s , los bailes, fuera espacio del la g a s t r on omi a , la p l a s t i c a , sagrado. En ese la etc. a r qu i t e c t u r a , los que se desarrollan sentido, los santuarios expresan valores culturales, son focos de expresi6n de 10 que un pueblo es y siente. Esta mirada nos acerca al santuario desde una perspectiva weberiana en la que, como hernos visto, se toma en cuenta 10 que valores y comportarnientos, diferencias estatus, de saber y de privilegios, pueden decirnos de ace rca de la racionalidad de la sociedad. Tanto en el libro ya citado de Marina Warner como en el de 28 JulJa Kristeva sobre el amor 2 5 , se analiza el transcurrir de la Virgen Maria a traves del cristianismo, conjugando el analisis de imagenes y discursos tanto populares, a I La de las ernb l erna t i c a s f u nc i on e s como teol6gicos. Mas co l ec t i va s , estos textos resaltan toda la complejidad de la devoci6n a ]a Virgen. Ambas autoras muestran c6mo la hist6ricamente construida, enfasis varia y se devoci6n y turna a la Virgen ha side c6mo dentro de esa historia, entre distintos aspectos de el la Mariologia, afectando las practicas devocionales y los simbolos a s o c.i ad o s a ella. Es as! como el arte y la iconografia, nos revelan muchisimos aspectos del cu]to a la Virgen a 10 largo de la historia, y sobre todo su inestable y parad6jica construcci6n hist6rica. El analisis hist6rico que Warner hace sobre las funciones de 1. Virgen se centra en el papel que ella cumple en el alivio de ne c e s i d ad e s ex i s t e nc i a Le s , y como med i o para reforzar c i e r t a s normas sociales relacionadas con la sexualidad, y el matrimonio la maternidad. A partir de alIi, Warner hace una periodizaci6n de la funcionalidad mariana y destaca las distintas percepciones quese han tenido de la Virgen en diferentes momentos hist6ricos. Warner aborda la virginidad de Maria, su cuerpo, su identificaci6n con la luna y las estrellas, su llanto, su leche, su perfecci6n, su sensualidad, su maternidad .... Kristeva se centra en su cuerpo, en su maternidad, su virginidad, asociados a la feminidad. Warner llega a la conclusi6n, despues revisada 25 Julia Kristeva, Historias de Amor, Mexico, Siglo XXI, 1987. Especificamente el capitulo "Stabat Mater", pp.209-231. 29 en el ap e nd i c e , de que su devoci6n satisface ante todo la necesidad exitencial de superar el dolor y la muerte, y en ese sentido enfatiza su papel maternal, mediador ante Dios, en la economia de la existenciales salvaci6n c r i s t i aria . se la adora tambien Junto a por esas necesidades favores mundanos y beneficios terrestres. Los cuadros, las imagenes y los santuarios forman parte de un lenguaje de oraci6n que comunica al cielo con la tierra y que hace mas f aci I siguiendo a esa comunicaci6n. Weber, dentro de Desde la esta estrategia c a t o Li c a , hay dirige un tipo de comportamiento devocional. comportamiento la necesidad de una mediaci6n El de salvaci6n hacia Este y la que se impulso al devocional, viene dado en 1563 por el Concilio de Trento y marca una separaci6n con el Reforma. perspectiva, Concilio fomenta la comportamiento de la veneraci6n de las seg~n porque en elIas se adora a Cristo. De alIi que, I ma g e n e s la autora, toda la energia del Barroco se volc6 en el engrandecimiento de los o b j e tos s ag r ad o s , I mag ene s y 1 ug a r e s de cu 1 to. Era un esfuerzo epico de la Iglesia por renovar el dialogo con Dios a traves de 10 sagrado en un momenta de caida y desesperaci6n. Por otro a ce r cam i e n t o a provo~ar est a lado, fue 10 sagrado: inaugurado la o r a c i on , un c uy a nuevo camino de intensidad podia visiones. Las visiones y apariciones proliferaron en epoca en la que emp e z a ba 30 a sentirse la aus<fencia de Dios 2 6 . del Se g u n Warner, mundo donde las apariciones ocurrian con santificaban permanente efectos la porci6n v i v i f i co s , Coincide con Eliade y Diez Taboada en que la duraci6n y eficacia de la hierofania instaura el orden y el cosmos en donde antes reinaba el caos. Ademas esa bendici6n de la localidad es parte sustantiva del poder y prestigio que despliega el santuario en la localidad. Para Warner, a traves de una experiencia extatica personal, el pueblo entero es bendecido, y para este el poseer un dbjeto 0 suceso sagrado, llena de poder. 10 Esa bendici6n incrementa la confianza del pueblo en la Iglesia, 10 cual era crucial en uno de sus mas serios momentos de fragilidad. Hay otro factor al que se asocia la Contrarreforma que hay que tener en cuenta. es una guerra santa, de e s a batalla. E] Virgen en la La Contrarreforma y la practica religiosa es un estandarte modelo que se repi t e en la e poc a , y que Warner senala, es la entrega de un objeto sagrado por el cielo a la humanidad a traves de una aparici6n. Este se difunde y se convierte en milagroso, en emblema de solidaridad, y en derecho divino de batalla contra el e n em i g o/ ". Necesidad existencial, identidad y poder son categorias que se despliegan a partir de este modelo y que no deben descuidarse en ningun anal isis de la religiosidad. Aunque Warner enfatiza en la funci6n que la Virgen cumple en el esquema cat6lico de salvaci6n, como liberadora del sufrimiento despues de la muerte, llega a la conclusi6n de que 26 Michel de Certeau, The Mystic Chicago Press, Chicago, 1992, pp. 4-7. 21 Warner, op. cit., p.398. 31 Fable, University of es un mito polimorfo, multifuncional para la vida cotidiana y sujeto a la autoperpetuaci6n. Dentro funciones que cumpliria este mito, de la jerarquia de reconoce que despues de la supremacia en fe popular que Ie otorga su poder mediador sobre la muerte, esta su papel en la definici6n de identidades. El hecho de que los santuarios se conviertan en empresas, como senalan Warner y Diez Taboada, no reduce la capacidad de lectura de los mismos. Para Df e z T. esto es parte deformaci6n de la practica perc no raz6n de la misma. de la En todo c a s o esa act ividad econ6mica que rodea al santuario puede s e r vista de como popu~ar, una las manifestaciones la religiosidad y como tal es parte de la racionalidad y de los valores que icon forman a n a Li s i s de se los e nunc i ad o s buscan dar y pr a c t i ca s explicaciones a ma s t r av e s amplias de cuyo sobre la sociedad y la cultura. 4. El orden sabre el caos. La Virgen y el santuario en los afios de la conversion. Cuando en 1598 el franciscano Fray Jer6nimo Ore escribe su Simbolo Cat61ico Indiano 28 , se i n s i s t La aun en la i.mpo r t a nc i a de la palabra, en la necesidad de que los indios oigan sobre las cosas maravillosas espectaculo, Ore de Dios. insiste Mas en que que se en el debe mon t a j e de adoctrinar un con simplicidad y prudencia, y que el bautismo es la via por la cual 28 Luis Jeronimo Ore, Simbolo Catolico Indiano, en el cual se dec\laran los misterios de la Ie contenidos en los tres 5 imbolos catolicos ... , Impreso en Lima por Antonio Ricardo, 1598. 32 s e "recibe el orden politico de vivir"29. Aunque las decisiones tomadas por el Concilio de Trento en 1563 ya habian empezado a imponerse, durante el siglo XVI y principios del XVII estamos hab1ando de un mundo indigena todavia no completarnente conocido nl oorninado, y de una iglesia de conversi6n en la que la mayoria de las doctrinas estaban en manos de religiosos. Es por todo esto que para comprender el papel de la imagen de la Virgen y de los santuarios en estos aftos, es fundamental tener en cuenta estos tres aspectos que estan interrelacionados y que modelan el proceso de evangelizaci6n: en primer lugar que los espaftoles estaban en pleno esfuerzo por organizar y aprehender el mundo andino; en segundo lugar que la iglesia americana todavia no era una instituci6n normalizada, y par ultimo, que la g i g an t e s c a tarea de conversi6n de los indigenas estaba, en su mayorta, en manos de las ordenes religiosas, no del clero. Los espaftoles, y mas especificamente la Iglesia, llegaron a 10$ Andes con la experiencia que les habia dado la conquista y organizaci6n de la Nueva Espana. Si bien el mundo andino les planteaba preparo innumerables las mi s i one r o s hech~, mentes y novedades, el para enfrentar animo 10 la de experiencia funcionarios, mexicana curas diferente y 10 desconocido. y De todo el esquema sobre la naturaleza de los indigenas y sobre la idolatria fue parte del equipaje cultural que trajeron consigo los c16rigos y regulares que iniciaron la conversion espiritual de los Andes. en e so s b au 1es es que Una de las ideas que llego guardada el espac io 29 Ibid., p. 37v. 33 y e1 t i empo en d orid e se desenvolvia la vida indigena y sus pr'cticas idol'tricas eran ca6ticos, y que una de las tareas iniciales de los espafioles era imponer un orden sobre el caos reinante. Parte de ese esfuerzo de dominar y aprehender un espacio, para los espafioles ca6tico, fueron las reducciones ordenadas por el Virrey Toledo a partir de 1570 andino. las y que tan t as consecuenc i as tuv i e r ori sobr e e 1 mundo Directamente relacionada con el esfuerzo ordenador de reducciones do c t r i na s , espatio que a toledanas, adem's partir p e rmane n t eme n t e s ob r e de estaba la par t i c i par organizaci6n en de esquemas la d i s t r i buc i o n la de las organizaci6n del espafioles, y el intervenia ordenamiento del tiempo en la vida cotidiana de los Andes. Por otro lado, al ser una Iglesia en pleno esfuerzo de conversi6n, en una situaci6n e x t r ao r d i n a r i a como la que era evangelizar a todo un continente, sus esfuerzos coincidian con ese intento general por aprehender, a traves del ordenamiento, un mundo desconocido. Eliade, las hierofanias 0 manifestaciones instauran el orden en un espacio salvaje 0 de Como plantea 10 sagrado, desconocido que se asimila al caos que precede a la creaci6n. Como vimos mas arriba, el bautismo es uno de los sacramentos que se consideran cruciales para introducir un orden en la vida indigena. Todavia Trento y su enfasis en la confesi6n no er~n determinantes en las acciones de la 6rdenes religiosas en la Real Audiencia de Quito. Mas 0 menos la misma posici6n prudente con respecto a la imagen del franciscano Ore es la que 34 se marie j a en el Primer Concilio de Quito celebrado en 1570 3 °, una epoca que la en todavia gran parte del esfuerzo evangelizador estaba en manos de religiosos. Pero ademas de la dimensi6n sacramental, un acto performativo a traves del cual obj et i vamen te se ej erce un cambia s o b r e Concilio se palabras insiste en que el de los doctrineros 1a pe rsona, e j ernpl o de es en es te la vida y de las fundamental para que los indigenas alaben aDios. El aida y la visi6n son los sentidos en lbs que maS se enfatiza en esta primera etapa como medios eficaces de conversi6n. Pero no se insiste tanto en la visi6n de imagenes del espectaculo barraco, como en la posibilidad 0 de qlle los indigenas vean ejemplos de vida "pues en estas cosas exteriores ponen los indios los ojos y hacen mayor reflexi6n, mayor aprovechamiento y devoci6n u 3 1 • En esta primera etapa, la Virgen Maria se perfila ya como un elemento crucial dominaci6n coloni a L. en el Pe r-o , p r oy e c t o si de evangelizaci6n y de bien se po s t u La su papel como intercesora ante Dios, su importancia en este periodo radica en las Pbsibilidades que su figura maternal ofrece en el esquema de c onv e r s i on s a l v a e i on . Mas y no tanto como mediadora en la economia de que como canal de comunicaci6n con D'io s , la Virgen y su imagen son manejadas como medio de conversi6n y como elemento ordenador. Los santuarios mas significativos del espacio de la Real Audiencia, aparecen en el ultimo cuarto del 30 "Primer Concilio de Quito de 1570", reproducido por Jose Maria Vargas en: Revista del Instituto de Historia EClesiastica Ecuatoriana, nos. 3 y 4, PUCE, Quito, 1978, pp.17-65. 31 Jer6nimo Ore, op . cit., p. 51. 35 siglo XVI asociados a hierofanias de la Virgen en lugares claves para la empresa de conversi6n y de ordenamiento de la sociedad colonial. Es asi que estas primeras manifestaciones de la Virgen se dieron para una poblaci6n fundamentalmente indigena bien 0 en donde debian convivir espanoles e indigenas. En cambio, las apariciones de la Virgen a partir de la segunda mitad del siglo XVII tienden a suceder en medios en donde la conversi6n es mas firme, y a favorecer a una poblaci6n criolla y mestiza en la busqueda veremos, de una identidad individual y colectiva 32. Como las estrategias de una iglesia ya normalizada y bajo control seglar son distintas. 4.1. La Virgen y el Santuario de Guapulo.­ El primer santuario erigido en honor a la Virgen en la Real Audiencia fue el de Guapulo. Desde 1561 ya se veneraba en 10 que hoy es Guapulo una pintura de la Virgen. Hacia 1581 un grupo de vecinos comerciantes y notables de Quito, fund6 una cofradia en honor de la Virgen de Guadalupe, po r un favor hecho a un comerciante que viajaba de Panama a Guayaquil. La fundaci6n del pueblo en 1587 consta en un Virgen esta representada lienzo de como madre la epoca en el que la compasiva y me l a nco Li c a frente a un grupo de espanoles y de indios arrodillados a sus p i es3~. La imagen de bul to de 1 a Vi r ge n , que desaparec i6 en un n. Algunos de e l l.as son: Nuestra Senora del Buen Suceso (1640)7 Nuestra Senora del Amparo (1689), Nuestra Senora de la Consolacion de Guangacalle (s.XVIII), Nuestra Senora de la Nube (1696), Nuestra Senora del SaIto de Latacunga (s. XVIII). 33 La informacion sobre este cuadro consta en diversos libros t desgraciadamente esta en manos de particulares, y no ha sido posible ubicarlo. 36