1 Comisión Nº 14: ICP y doctrina social SINTESIS DEL ESTADO DE SITUACION Estamos próximos a reunirnos en Congreso, y en este trabajo previo, pretendemos confrontar las distintas experiencias llevadas adelante en este proceso de comunión, que nos ha posibilitado congregarnos desde las distintos puntos, lugares y regiones de nuestra hermosa Argentina, mediante trabajos individuales compartidos a través de la web. Cada experiencia pastoral / catequética, tiene sus propias riquezas y fortalezas, porque han sido fruto de la consulta de miles de catequistas que, de norte a sur, y de este a oeste, se han congregado y realizado su aporte en el camino de la catequesis. Como se ha señalado en varias oportunidades, los dos ejes centrales que atraviesan los núcleos temáticos de este congreso nacional, son la Renovación de la Iniciación Cristiana y las posibilidades de afianzar el Itinerario Catequístico Permanente. En la comisión que nos convoca, ICP y DS, si bien su contenido es desarrollado con mayor fuerza dentro del proceso que denominamos: Itinerario Catequístico Permanente, no podemos dejar de hacer notar, que muchas experiencias catequísticas, y de las muy buenas, han sido iniciadas como experiencias comunitarias, con una fuerte marca social, sectorial, a partir de necesidades, intereses o conflictos, que luego derivaron en un proceso de IC de buena parte de los integrantes de los grupos. Esta experiencia, más profundamente identificada en las áreas más postergadas de nuestro país, ha tenido un marcado protagonismo: presente, acompañante y componedor, de catequistas comprometidos con la realidad social, económica y política de la comunidad, y a través de ello, ha posibilitado llegar con un mensaje profundamente cristiano sobre el ser humano y su dignidad. En el camino recorrido en las instancias parroquiales, zonales, diocesanas y regionales, los catequistas hemos tenido la oportunidad de señalar, aquellas cuestiones que contribuyen (positivo) o entorpecen (negativo) el proceso catequístico, teniendo en cuenta la finalidad primordial de nuestra acción evangelizadora: encontrarnos y permanecer en Cristo: Camino, Verdad y Vida. A estas acciones, las clasificamos en luces, en cuanto contribuyen al proceso y sombras, en cuanto dificultan, desvían o entorpecen. Específicamente, en cuanto al tema que nos toca desarrollar, podemos señalar: LUCES Desde el magisterio de la iglesia, es relevante la importancia del hombre como individuo, familia y comunidad política. En cada lugar, es importante el nacimiento de diversas asociaciones intermedias e instituciones con una finalidad de bien común e integración. 2 Hay un gran esfuerzo de equipo de pastoral Social que tiende a intervenir en la vida cívica de la comunidad. Cada vez más los textos utilizados en la Catequesis, tienen en cuenta la DSI para debates y reflexión de los catecúmenos y sus familias. Cuanto mayor es el compromiso de la Catequesis con la DSI, más creíble resulta el mensaje salvífico, haciéndonos corresponsables de los problemas de la comunidad, el ambiente y la necesidades sociales. Es importante el aporte de los catequistas a la reflexión. La presencia maternal de María, que nos acompaña y fortalece con una vida de servicio esperanzador, constante y permanente. La catequesis en general ve una necesidad de cambio pascual. No podemos seguir haciendo lo mismo si queremos resultados diferentes. Nos sentimos llamados a mostrar un Jesús VIVO presente e interviniente en la historia pasada, presente y futura de la humanidad. SOMBRAS Desconocimiento de DSI por parte de muchos catequistas y agentes de pastoral en las Parroquias y comunidades, privando de la riqueza de la participación en la vida de la Iglesia y su Misión Evangelizadora. Los programas para la formación de catequistas (en aquellos lugares que existe un programa o sistema en forma orgánica), no demuestran preocupación en profundizar en la DSI y en los graves problemas sociales que padece nuestro país. Muchos catequistas sienten la soledad pastoral de la catequesis; sin un proyecto eclesial que dé sentido y finalidad a lo que se hace. Al no contar con una cosmovisión eclesial definida, la catequesis no tiene rumbo, no cuenta con objetivos claros. La catequesis se redujo a la preparación inmediata para los sacramentos. Para muchos, sobre todo para los catequistas y comunidades comprometidas socialmente, la catequesis se aparta peligrosamente del mensaje evangélico. Falta de respuesta adecuada y convincente de la jerarquía, sacerdotes y catequistas, frente a una sociedad consumista y sin valores Cristianos, aún en nuestra propia Iglesia. Relativismo peligroso que acentúa el descuido y deterioro de las familias, en sus relaciones básicas, las cuales muchas veces conducen y sufren los terribles daños que provocan las crecientes adicciones. La falta de respuesta adecuada a las nuevas uniones, libertades sexuales y desintegración de las familias, tal cual se encuentra sustentada evangélicamente. El ICP no se encuentra asumido por la comunidad parroquial; los sacramentos de iniciación, lo son de inicio y conclusión del camino de fe. Los padres sienten una carga en la participación del proceso de iniciación de sus hijos. La temática y metodología no los anima al compromiso evangélico y social. Mayormente tenemos una catequesis intraparroquial, en un salón detrás de una mesa y un pizarrón. Padecemos una catequesis aislada de la realidad, como un espacio de reserva moral y social de la comunidad. El mensaje muchas veces es condenador y excluyente. Es un mensaje unilateral de preceptos, dogmas y obligaciones y no un dialogo fecundo de liberación y entrega fraterna. No se acepta la vida de otros de forma evangélica. Lo más peligroso es la INDIFERENCIA SOCIAL. Todo nos paraliza, enfría y adormece, nos convierte en momias. No vivimos la realidad como un tiempo propicio para el Encuentro con el Señor. LA COMUNIDAD TIENE PUESTAS SUS ESPERANZAS 3 1-UN NUEVO CATEQUISTA En esa construcción se percibe la necesidad de UN NUEVO CATEQUISTA, con una NUEVA MIRADA DE LA REALIDAD, que sea capaz de celebrar y jugarse en la defensa de los valores, especialmente de la vida, TAL CUAL SE PRESENTA. No es posible quedarse en la realidad deseada y esperada, es necesario partir de la realidad que es vivida por nuestro pueblo, según su contexto socioeconómico.Catequistas que celebren la posibilidad del encuentro y que se sientan parte actual del proyecto de salvación, con una decidida intervención de DIOS en nuestra historia presente, en nuestra realidad.Catequistas contenidos en una pastoral orgánica, desarrollando un ITINERARIO CATEQUISTICO PERMANENTE, que los oriente y sostenga. CATEQUISTAS DISPUESTOS, ATENTOS A LOS SIGNOS DE DIOS EN LA COMUNIDAD Y EN LA HISTORIA, ENAMORADOS DE CRISTO, POSITIVOS, COMPAÑEROS, AUDACES, INGENIOSOS, PROFUNDAMENTE SENSIBLES, Y PROFUNDAMENTE COMPROMETIDOS en vida sacramental, social y política, al servicio del bien común. 2-UN PROYECTO PASTORAL BASTA DE KIOSCOS DE CARISMAS, FUNCIONES Y CARGOS… la comunidad necesita profundizar la maternal contención de la comunidad en un proyecto pastoral que custodie y promueva el valor de la vida de los hermanos. No podemos permanecer ajenos a las necesidades, triunfos y proyectos de la comunidad en su conjunto. Necesitamos buscar que nuestros párrocos participen en el impulso, la animación y la contención de los laicos en el proceso catequístico, pero sabiendo profundamente que la responsabilidad del anuncio es de la comunidad. Cada comunidad debe hacer su aporte en el proceso permanente y acogedor de la comunidad. Busquemos siempre una metodología permanente de complemento y estimulo. 3- IMPULSO CATEQUISTICO DE CONTENIDO SOCIAL Necesitamos definir un esquema o esqueleto básico, orientador, abierto, sobre la fundamentación, importancia y principales temas de la DSI, en orden a enriquecer el itinerario catequístico permanente, a la vez que aportar una visión común para toda la catequesis del país. Rescatar la visión social de aquellos obispos que a lo largo de la historia, con su magisterio y su vida, han orientado y orientan la labor social en la Evangelización y promoción de nuestro pueblo. Instar a la comunidad a tomar un protagonismo social, entendiendo que el silencio, el miedo o la inacción, contribuyen a impulsar el pecado social. 4- UN CRISTIANO COMPROMETIDO SOCIAL Y POLITICAMENTE CON SU REALIDAD. La catequesis, orientadora de la relación del hombre con Dios y con los hermanos, debe estar imbuida de una clara visión de vida en comunidad. La historia de la Salvación y el mensaje evangélico se recibe y se vive en comunidad; de allí que la doctrina social es esencialmente motivadora de la acción evangelizadora y humanizante de las realidades temporales. 4 La doctrina la Iglesia necesita enseñar un saber teórico-práctico de actuación inescindible, que sostenga el compromiso de transformación de la vida social, para hacerla cada vez más conforme al diseño divino. Debemos impulsar una catequesis social que apunte a la formación de niños y hombres que, respetuosos del orden moral, sean amantes de la genuina libertad, hombres que « juzguen las cosas con criterio propio, a la luz de la verdad, que ordenen sus actividades con sentido de responsabilidad y que se esfuercen por secundar todo lo verdadero y lo justo asociando de buena gana su acción a la de los demás » Buscar profundamente convencidos la vida comunitaria de la santidad, capaz de hacer resplandecer a tantos miembros del pueblo de Dios, frecuentemente humildes y escondidos a los ojos de los hombres, que construyen dia a dia un camino simple y fascinante del compromiso social .5- USO DE LAS COMUNICACIÓNES MASIVAS Y LAS REDES SOCIALES La acción evangelizadora requiere un impulso a la CREATIVIDAD, sin abandonar el contacto personal que estimula y contiene, buscando siempre un uso adecuado de las redes sociales, asumiendo en forma personal el desafío mi disposición a entender y participar con las nuevas formas de comunicación. Debemos ser capaces de plantear estrategias y modos nuevos de evangelización. Superar el siempre se hizo así… dejar el aislamiento y salir al encuentro. Desde ICP y contenido del primer anuncio (kerigma y pascua) nos dicen: - Deseamos comunidades pascuales que se pongan al servicio de los más necesitados. Desde ICP y educación religiosa escolar nos dicen: - El ámbito escolar es una oportunidad para descubrir la necesidad de los hermanos más necesitados y poder dar respuesta organizando campañas solidarias, visitando hogares de niños, de ancianos… Desde IC y catequista inicial y su formación nos dicen: - Respeto y amor fraterno por las personas a las que llevamos el mensaje. Basta ya de una catequesis que no interpele al compromiso, la solidaridad y la misión Desde IC y signos de los tiempos nos dicen: - Fortalecer y concretar el compromiso con los espacios sociales, políticos, culturales; Desde IC y religiosidad popular nos dicen: - - El Evangelio encarnado en nuestros pueblos, esta Fe vivida preferentemente por los pobres y sencillos pero que abarca a todos los sectores sociales siendo a veces uno de los pocos vínculos que reúne a los hombres de nuestras naciones a pesar de estar políticamente divididos… Recordar que la fe y la vida van juntas… la piedad popular mucho puede ayudar que la fe sea generadora de transformación y compromiso social - Desde IC y familia nos dicen: - La violencia verbal, psicológica y física que se da hoy más visiblemente en el seno de las familias y se ejerce en particular sobre las mujeres y los niños, que tiene una clara raíz en una cultura machista e impide el desarrollo sereno de la vida, reclama que nuestra catequesis la aborde con urgencia.