BOLETÍN MENSUAL Boletín número 81. Enero 08 1.- Artículo del mes: EL PLACAJE DE MÁSCARA 2.- Producto recomendado. RELOJ-ORDENADOR MARES NEMO. Dos en uno. 3.- Consejos prácticos: – – CONSEJOS BÁSICOS PARA EL MANTENIMIENTO DE LA LINTERNA CONSEJOS BÁSICOS PARA EL MANTENIMIENTO DEL TRAJE 4.- Novedades a-alvarez.com 5.- Especies: – – Ficha nº 161: PULPO DE VELOS Ficha nº 162: GOBIO DE BATH Envíe este boletín a un amigo ----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------- 1.- ARTÍCULO DEL MES: EL PLACAJE DE MÁSCARA H ace algún tiempo (no demasiado), se consideraba que el buceador que salía del agua con la nariz sangrando debía ser incluido entre los “buceadores más experimentados”... Por suerte, las cosas cambian y, para este caso, se ajustan más a la realidad. En nuestros días, el placaje de máscara que suele tener como resultado el sangrado de nariz se asocia a los buceadores principiantes, que son quienes realmente sufren con más asiduidad este problema. A continuación profundizaremos en el tema del placaje de máscara, ¿por qué sucede?, ¿cómo evitarlo?, ¿cómo actuar ante él?... Trataremos de dar respuesta a todas estas consultas. QUÉ ES EL PLACAJE DE MÁSCARA El placaje de máscara es un “barotrauma hipobárico” (traumatismo debido al cambio de presión), directamente relacionado con la conocida “Ley de Boyle-Mariotte”. Para resumir por qué se produce un placaje de máscara debemos comentar que, durante el descenso, la presión aplasta la máscara y comprime el aire que se encuentra en su interior debido a que, de esa manera, se equilibran las presiones entre el aire dentro de la máscara y el agua. Pero llega un momento en el que el faldón de la máscara alcanza su límite de deformación, no puede deformarse más y, si continuamos descendiendo, el aire del interior de la máscara se encontrará en depresión respecto al exterior. Este hecho provoca un “efecto ventosa” sobre nuestra piel. El efecto ventosa producirá una “aspiración” de la cara y de los órganos que se encuentran en el interior de la máscara; esto son: los ojos y la nariz. Aunque no suele tener mayores consecuencias posteriores, lo cierto es que el aspecto del buceador que ha sufrido un placaje suele resultar, cuanto menos, desagradable: rostro enrojecido, hematomas, sangrado de nariz, rotura de vasos oculares... Dicho todo esto, resulta evidente señalar que este accidente no puede suceder cuando nos encontramos ascendiendo, ya que cuando subimos, el aire que se encuentra en la máscara se expande y acaba saliendo al exterior por los bordes del faldón flexible de la máscara. Cuando esto sucede se provoca lo que se denomina un “equilibrado pasivo”. Resulta muy importante saber que el placaje de máscara puede suceder incluso cuando descendemos a tan sólo 3 metros de profundidad (hay quien lo ha sufrido durante el Bautizo de buceo). PREVENCIÓN Resulta imposible sufrir un placaje sin haber sentido antes ciertas molestias “típicas”, por eso se asocia este accidente a los buceadores menos experimentados, faltos de seguridad o de la formación necesaria para manipular correctamente la máscara en el momento en que se empiezan a notar estos síntomas. Existen una serie de consejos de sencilla realización que nos serán de gran ayuda para prevenir un placaje de máscara. Téngalos muy en cuenta: – Soplar regularmente dentro de la máscara durante el descenso, algo que resulta fundamental durante los primeros 10 metros. Al soplar provocamos un equilibrio activo muy importante. – El descenso deberá ser siempre lento y progresivo. Tenga mucho cuidado durante los descensos “rápidos”. Por ejemplo, durante los pozos de entrenamiento de inmersión. – Especial precaución deberemos tener si estamos medicándonos con anticoagulantes, especialmente si tomamos aspirina, ya que aumenta la posibilidad de sangrado. – Atención especial deberá tener todo aquel que utilice máscaras de volumen reducido, donde el riesgo de placaje aumenta considerablemente. En caso de que tenga cierta facilidad para el sangrado nasal, se recomienda que utilice gafas de gran volumen interior. Por último, no queremos dejar de mencionar la importancia de informar bien a buceadores, pescadores y apneistas principiantes, sobre este tipo de accidentes, para que estén prevenidos sobre su posible aparición y sobre la forma correcta de reaccionar ante él. SÍNTOMAS Aunque el placaje de máscara es un accidente de los considerados “benignos”, es decir, no suele tener mayores consecuencias, es importante que todo buceador conozca los síntomas que pueden llevarle a preveer lo que va a suceder. De esta forma podrá minimizar las consecuencias. Entre los síntomas que debemos tener muy en cuenta están: – Dolores a nivel de la cara, los ojos y/o la nariz. – Edema facial. – Hemorragia sub conjuntival (esto es, ojos rojos, como inyectados en sangre). – Problemas de visión. – Ojos amoratados. – Epistaxis (hemorragia por las fosas nasales). – Rinorrea sanguinolenta (flujo abundante de moco nasal con presencia de sangre). – El aumento de presión sobre los globos oculares, puede provocar un aumento o una disminución del ritmo cardíaco. CÓMO ACTUAR En caso de que aprecie que se dan cualquiera de los síntomas antes comentados, conviene que sea capaz de mantener la calma y sepa cuál es la forma adecuada de proceder. Los pasos a seguir son: – Mientras se encuentra bajo el agua: – Ascienda. – En ningún momento intente separar la máscara de la cara, con ésto sólo conseguirá agravar la depresión dentro de la máscara, y, en consecuencia, el daño será mayor. – Levante el faldón de la máscara y deje que se llene de agua, después proceda al vaciado. – Tras salir del agua, en la superficie, en caso de que la víctima continúe sangrando por la naríz, deberemos seguir los siguientes pasos: – Coloque a la persona con la cabeza inclinada hacia delante y hacia abajo, para evitar que trague sangre. – Ponga hielo protegido con un paño en la nuca, o bien procure que mastique hielo (produce una vasoconstricción refleja). También suele dar resultado la colocación de una gasa o algodón impregnados en agua oxigenada en la fosa nasal, comprimiendo digitalmente las alas nasales durante unos 5 a 10 minutos, de forma firme y constante. – En caso de que el sangrado sea mucho o dure mucho tiempo, habrá que realizar un examen médico en el que se controle la tensión arterial y la frecuencia cardiaca. Además deberá valorarse la necesidad de introducir líquidos por vena. – Si el sangrado no remite transcurrida media hora, habrá que buscar ayuda médica de forma urgente. – El afectado deberá intentar permanecer sentado, o en cama semi-incorporado. – Evitar el consumo de aspirinas, tabaco y alcohol. – Durante varios días no se realizará ningún ejercicio físico que pueda suponer esfuerzo. – Evitará, en la medida de lo posible, los estornudos fuertes. Por último, señalar que, en caso de rotura de capilares oculares, se recomienda la visita a un oftalmólogo para que realice los adecuados análisis y comprobaciones. Además, se deberán suspender las inmersiones hasta que las lesiones hayan sanado completamente, puesto que de otra manera podríamos acabar provocando un accidente de consecuencias mucho más serias. 3.- CONSEJOS PRÁCTICOS Todos sabemos lo complicado que puede resultar encontrar un equipo que se adecúe a nuestras necesidades y a nuestro bolsillo. Mantenerlo como nuevo por el máximo tiempo posible depende de cada uno. Nosotros le damos los mejores consejos para conseguirlo. CONSEJOS BÁSICOS PARA EL MANTENIMIENTO DE SU LINTERNA Además de las normas habituales que seguiría con cualquier otra linterna normal, deberá tener en cuenta estas sencillas normas para mantenerla como el primer día: – Aclararla con agua dulce después de cada inmersión. – Procurar secarla bien antes de guardarla por largo tiempo. – Lubricar las tuercas con silicona de vez en cuando,. – Resulta conveniente tener las juntas tóricas bien lubricadas, aunque nunca en exceso. Antes de lubricar la junta, resulta necesario limpiarla bien. Hay que tener en cuenta que la junta es la parte que evita que entre el agua en la linterna. Al cerrarla deberá resbalar para que asiente bien, algo de lo que deberemos asegurarnos cada vez que la utilicemos. CONSEJOS BÁSICOS PARA EL MANTENIMIENTO DE SU TRAJE Supone un importante desembolso de dinero, por lo que nos conviene que su duración sea la mayor posible. Para conseguirlo deberemos: – Lavarlo con agua dulce tras su utilización (el agua salada es enormemente corrosiva). En esta operación se deberá tener mucho cuidado con las válvulas de inflado y de desinflado. – Secarlo a la sombra, en un lugar ventilado. Durante el secado, tendremos especial atención en colocar la capucha hacia abajo, de manera que no se formen cúmulos de agua. – Rociaremos las cremalleras con silicona líquida o con parafina. – Si no lo va a utilizar durante un periodo relativamente largo de tiempo, antes de guardarlo deberá limpiarlo por dentro – Guárdelo colgado de una percha, para evitar la formación de pliegues.