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Asociación Andaluza de Profesores de Informática
Estimado padre o madre:
Desde la Asociación Andaluza de Profesores de Informática, AAPRI, queremos ponerle al
corriente de una serie de circunstancias que se vienen repitiendo desde hace ya años, aunque
en los últimos tiempos se han agudizado si cabe más aún. Para describir brevemente la
situación actual podríamos enunciar los siguientes hechos:
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La competencia digital es una de las competencias básicas que debe adquirir
todo el alumnado al finalizar la ESO, junto con otras tan importantes como la
competencia matemática o la competencia lingüística (Real Decreto
1631/2006, de 29 de diciembre, por el que se establecen las enseñanzas
mínimas correspondientes a la Educación Secundaria Obligatoria, BOE nº 5 de
2007).
El sistema educativo andaluz está conformado de tal manera que sólo hay dos
asignaturas específicas donde se trata de manera directa esta
competencia: "Informática" de 4º de la ESO y "Tecnologías de la Información
y Comunicación" en 2º de Bachillerato, siendo ambas optativas.
Sólo el profesorado de la especialidad de Informática tiene aprobadas unas
oposiciones con un temario de más de 70 temas específicos de informática, y
no existe ninguna otra especialidad de secundaria que tenga más de 2 o 3 temas
de informática en su temario. Es decir, si algún profesor de otra especialidad
distinta a Informática asegura estar capacitado para impartir estas asignaturas,
no podríamos asegurar que eso no es cierto, pero lo que está claro es que no ha
sido seleccionado mediante un concurso-oposición para este tipo concreto de
materias.
Si ya es grave que en pleno siglo XXI la mayoría de los alumnos, debido a
cómo está configurado el sistema educativo andaluz, pueda terminar la ESO e
incluso el Bachillerato sin recibir formación específica de Informática (siendo
imprescindibles como son hoy en día conocimientos acerca de bases de datos,
tratamiento digital de la información, creación y procesamiento de contenidos
multimedia, redes de ordenadores, Internet y Web 2.0, etc.), a esto se une la
circunstancia de que estas asignaturas no están adscritas en exclusiva al
profesorado de la especialidad de Informática, como sería lo lógico, de la
misma manera que el resto de asignaturas están adscritas a una única
especialidad, precisamente la que tiene un conocimiento más profundo de la
materia en cuestión (las matemáticas a la especialidad de matemáticas, la
lengua a la especialidad de lengua, etc). Pero lo más inaudito es que toda una
asignatura de segundo de bachillerato, "Tecnologías de la Información y de las
Comunicaciones", no está adscrita a ninguna especialidad, con lo que cualquier
profesor puede impartirla sin impedimento legal alguno. Está claro que no se
aplica la misma vara de medir a la especialidad de Informática que a las demás,
que sí que tienen atribuídas de manera exclusiva sus asignaturas.
A esto se une la amplia autonomía de los centros para crear modalidades o
agrupaciones de optativas en cuarto de ESO, estando en muchos casos la
informática ausente de la mayoría de ellas.
Y a esto se une el mandato legal de que todos los alumnos bilingües deben
estudiar una segunda lengua extranjera (ORDEN de 24 de julio de 2006,
BOJA 156/2006). En gran cantidad de centros donde antes los alumnos de 4º
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Asociación Andaluza de Profesores de Informática
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de la ESO podían elegir entre informática y segunda lengua extranjera, se ha
tomado una decisión drástica: los alumnos bilingües no pueden estudiar
informática. Pero pensamos que la obligatoriedad de una segunda lengua
extranjera no debería ser a costa de la informática, ya de por sí tan maltratada y
con tan escasa presencia en los planes de estudio. Además, eliminar la
optatividad en cuarto de ESO para los alumnos bilingües es dudosamente legal.
Con todo esto no es de extrañar que, en la Andalucía de los centros TIC y los
portátiles para todos, en muchos centros de secundaria no exista ni un solo
profesor de la especialidad de Informática, dado que no hay suficientes horas
de sus asignaturas para completar el horario de un profesor, e incluso, en el
caso de haberlas, los centros pueden asignar las asignaturas de informática a
cualquier otra especialidad. En estos centros la informática la acaba enseñando
un profesor cualquiera. De ahí el tópico, cierto en muchos casos, de que
muchos alumnos saben más de informática que los propios profesores, incluso
que el que les enseña informática.
Desde la AAPRI llevamos dialogando con el Ministerio de Educación y la
Consejería de Educación desde hace muchos años para mejorar esta
deplorable situación, cuya consecuencia final es que el alumnado andaluz de
muchos centros recibe una precaria formación. Como puede comprobar en
nuestra web, dentro de nuestras reivindicaciones está la implantación de
asignaturas de informática en todos los niveles de la ESO, la implantación de
asignaturas de informática en la modalidad de bachilerato tecnológico y la
adscripción de estas asignaturas al profesorado de la especialidad de
Informática, entre otras.
Por lo tanto, solicitamos su apoyo, para que compruebe si en los centros de Educación
Secundaria donde están escolarizados sus hijos e hijas existe profesorado de la
especialidad de Informática, para que, en caso necesario, pueda exigir a las distintas
autoridades educativas (dirección del centro, consejo escolar, delegación educativa, etc.)
que en el centro de sus hijos la calidad en la impartición de la informática esté
garantizada por profesorado de la especialidad de Informática, así como para asegurarse
de que sus hijos puedan elegir las asignaturas de Informática (lamentablemente de
carácter optativo, hoy por hoy) independientemente de la modalidad que hayan escogido,
incluso si son alumnos bilingües, tal y como en teoría le garantiza la legislación actual,
aunque pocas veces se cumple.
Sin más, reciba un cordial saludo. Estamos a su disposición para recibir sugerencias y
aclararle las dudas que desee.
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