COMUNICADO DE A.C.A.A.T. PROPUESTA PARA UN DEBATE ENERGÉTICO EN CANTABRIA Tanto la Administración central como el Gobierno de Cantabria, actuando de modo coordinado, nos bombardean con innumerables proyectos eléctricos, que tratan de justificar siempre en base a un vago, supuesto y no explicado refuerzo del actual sistema eléctrico, vaguedad justificativa que nos parece evidencia del intento por parte de ambas Administraciones de ocultar la verdadera razón de tan urgente como agresivo e inexplicado crecimiento de las infraestructuras eléctricas. A efectos meramente indicativos y a partir de la troncal línea a 400 kV Soto de Ribera-Penagos-Güeñes/Itxaso, que en realidad es Soto de Ribera-Penagos-AbantoGüeñes/Itxaso, y las subestaciones de Penagos y Aguayo, ambas a 400 kV, señalamos como parte de los proyectos de importantes infraestructuras relacionadas con la energía eléctrica aparecidos en las ultimas fechas los siguientes: Instalación Parques Eólicos en nuestra comunidad autónoma hasta 1.400 MV de potencia Subestación Eléctrica de Solórzano a 400 kV Subestación Eléctrica de Solórzano de 220 kV Subestación Eléctrica de Labarces de 220 kV Subestación Eléctrica de Cicero de 220 kV Nueva Subestación Eléctrica de Aguayo de 220 kV Todo ello con sus correspondientes líneas eléctricas, entre otras: Linea a 400 kV desde línea Penagos-Abanto hasta subestacion de Solórzano Linea a 400 kV desde línea Penagos -Abanto hasta subestación de Udías Linea a 220v desde subestación de Solorzano hasta subestación de Cicero Linea de 220 kV desde subestacion de Aguayo hasta nueva subestacion de Aguayo Ninguno de tales proyectos, todos ellos ambiental y socialmente muy agresivos, está incluido en los recientes Planes de Infraestructuras y Energético del Gobierno Regional. Sorprende tan agresiva actividad cuando, debido a la crisis, el descenso de los consumos energéticos ha sido más que notable y, por ello y por la cada día mayor evidencia del cambio climático, crece la razonable idea solidaria de que es urgente la exigencia de reducir aún más esos consumos, adecuándolos a las reales necesidades y posibilidades de todo el mundo. No vemos ni se nos da razón alguna que, desde el punto de vista del interés general, nacional o regional, justifique tan desaforadas iniciativas para multiplicar nuestras infraestructuras eléctricas y cuya información se refugia en los poco visitados Boletines Oficiales, salvo que se trate del mero interés económico que se vincula a las subvenciones que afectan a las energías renovables y la evacuación de la energía que produzcan los tan renovables y limpios como ambientalmente agresivos campos eólicos, al parecer previstos en nuestra región, cuya necesidad no se ha justificado en forma alguna. Si son ciertos nuestros temores, nos encontramos ante una maniobra de enormes proporciones, que pretende ocultar, moviéndose al tiempo en varios frentes con apariencia inconexa, las intenciones del pretendido entramado eléctrico, pues no parece razonable que si es cierto que aun no se conocen los lugares en que se van a instalar los parques eólicos, ya se sepa donde vienen bien las subestaciones, cuyos terrenos ya han sido adquiridos al menos parcialmente, lo que convierte los trámites que promueven el Ministerio de Industria y el Gobierno de Cantabria en mera parodia de lo que debe ser una eficaz información pública de las necesidades energéticas y una real valoración de los impactos de cada infraestructura y sus sinergias en conjunto. Entiende, pues, ACAAT que se debe abrir un inmediato periodo eficazmente informativo, con amplia participación ciudadana, que cumpla la exigencias de información que establece el fundamental convenio Aarhus con relación, en concreto en este caso, al conjunto de las actividades pretendidas en materia de producción, transformación y transporte de energía eléctrica, explicando Administraciones y empresas eléctricas, documental y detalladamente, en especial, 1) las reales necesidades energéticas que justifican la implantación de todas las infraestructuras pretendidas, 2) la valoración de los impactos de todas ellas en conjunto e individualmente, tal como exigen las Directivas europeas, especialmente en las afectaciones que producen en LICs y espacios especialmente protegidos, 3) la necesidad o no de los fragmentarios e inconcretos pasos iniciados por el Gobierno de Cantabria en la aparente dirección de convocar concursos para la implantación de industrias eólicas capaces de producir hasta 1.400 MW de potencia, 4) las líneas directivas de, en caso de que el mismo resulte necesario, un Plan Eólico que ordene el sector, regido por criterios de sostenibilidad ambiental e interés general y, también, 5) las líneas directivas de un Plan Regional de Ordenación del Territorio en el que se dé coherencia a todo este tipo de planes sectoriales, tan agresivos ambiental y socialmente. A tenor en especial de la evidencia del cambio climático, la actual situación de crisis y su incidencia en el futuro de todos nosotros, INTERESAMOS, de la Administración nacional y autonómica la paralización cautelar de los proyectos citados y de todas aquellos otros de importancia que estén en relación con la producción, transformación y consumo de energía eléctrica en nuestra región a gran escala, todo ello a expensas de la realización de los obligados trámites de información, evaluación y participación ciudadana que más arriba se señalan. La Junta Directiva