INNOVEMOS: “EDUCACIÓN Y CULTURA” La identidad cultural como dimensión del currículum y de las prácticas pedagógicas TALLERES DE ACCION COMUNITARIA, TAC Los Talleres de Acción Comunitaria nacen a mediados de los años 80 por iniciativa de la Asistente Social Patricia Castillo Iribarren. Originalmente se ubican en el Cerro Perdices. Luego, con el apoyo de un Organismo No Gubernamental se establecen en el Cerro Cordillera de la ciudad de Valparaíso. Hoy día los Talleres de Acción Comunitaria ostentan personalidad jurídica y funcionan bajo la orientación de un directorio en que están sus fundadores además de los directores de una serie de instituciones que adhieren al trabajo que allí se realiza: escuelas, juntas de vecinos, consultorios, jardines infantiles y otros. Reunir a la comunidad en torno a tareas de crecimiento y desarrollo A pesar del paso del tiempo, los Talleres de Acción Comunitaria (TAC) no han perdido su sentido original: reunir a la comunidad en torno a tareas de crecimiento y desarrollo. Hay una búsqueda permanente de crear espacios de confianza y unidad. La intención es hacer que las personas e instituciones se conozcan y salven las distancias que las separan invitándolas a sumarse en un esfuerzo colectivo que beneficia el desarrollo particularmente de niños y jóvenes del sector. El TAC como se le conoce se ha constituido en un importante centro cultural, un espacio de encuentro y educación activa al que acuden muchas personas, particularmente los niños y jóvenes de las escuelas del sector. En relación al patrimonio y la cultura local el TAC realiza talleres de conocimiento y respeto por el entorno y actividades de rescate de la historia local. En relación con los aprendizajes esperados, el TAC propone una educación activa basada en el propio trabajo de quienes aprenden. La recuperación del lugar en que hoy día funciona y el impulso a talleres de creación y expresión hablan de un aprendizaje realizado a través de la acción. Una característica es la voluntariedad de los profesores y la red de profesionales, estudiantes, artistas y escritores. El TAC comienza recuperando para la comunidad una quebrada en que antes había un basural. La quebrada se convierte con el tiempo en un anfiteatro. Luego surgen el huerto educativo y el reservorio ecológico. Funciona también hoy día una biblioteca que presta servicio a niños, jóvenes y adultos del sector. Un Directorio integrado por las distintas instituciones y organizaciones que integran el TAC determina anualmente un plan de trabajo. En él se contemplan talleres de desarrollo personal, expresión y creación, dirigidos a los niños y jóvenes de las escuelas del sector. Otros talleres se realizan en el huerto educativo. Una característica del trabajo es la voluntariedad de los profesores y la red de profesionales, estudiantes, artistas y escritores que apoyan las distintas iniciativas. Actualmente el TAC recibe colaboración de las universidades de la ciudad. Todo ello lo ha convertido en el espacio cultural que pretendía ser, rescatando la cultura local, la identidad del barrio y de la ciudad y promoviendo el desarrollo personas de quienes participan en las actividades que allí se desarrollan. Una de las más significativas este año, fue la inauguración del año escolar para la escuelas del sector. www.innovemos.unesco.cl INNOVEMOS: “EDUCACIÓN Y CULTURA” La identidad cultural como dimensión del currículum y de las prácticas pedagógicas Entre otras instituciones hoy participan en el TAC: la escuela Blas Cuevas; el Jardín Infantil Bambi; el Centro Laboral para Discapacitados Agustín Tamer, de la Corporación Municipal; el colegio particular Windsor School; la escuela República del Salvador; el Centro Laboral Florida y la Escuela Luis Galdámez. Junto a las actividades diseñadas para los alumnos y alumnas en el TAC se realizan durante todo el año eventos abiertos a todo público. El espacio cultural que constituye el TAC es utilizado permanentemente por los vecinos, quienes han hecho de este lugar una instancia de encuentro y de conocimiento y valoración de la propia cultura, esto último particularmente, a través de los talleres de conocimiento y respeto al patrimonio y el entorno. Lo mismo los talleres de historia local. Son frecuentes las exposiciones, los talleres de plástica y la representaciones teatrales y musicales que aquí encuentran su lugar. Los más beneficiados son los niños y jóvenes de las escuelas del sector Los Talleres de Acción Cultural han impactado en varias dimensiones a la comunidad local. Por una parte la transformación del espacio físico (que antes era un basural y ahora un parque y centro ecológico y cultural) y su recuperación para la comunidad ha significado que la gente cuente hoy con un espacio de encuentro que ellos mismos ayudaron a construir y que hoy cuidan y mantienen. Por otro lado los múltiples aprendizajes que se desprenden de las actividades comunitarias y los eventos que en el TAC se realizan, han significado un mayor desarrollo personal para quienes han participado en ellos. Los más beneficiados son los niños y jóvenes de las escuelas del sector. Por un lado porque cuentan con un espacio privilegiado de aprendizaje y, por otro, porque el tipo de aprendizaje allí realizado los hace a ellos protagonistas de su historia y del mismo procesos de aprender. Otro aprendizaje tiene que ver con la capacidad de autogestión que ha demostrado el grupo responsable de la experiencia y la incorporación que a esta gestión se ha hecho de los habitantes del sector. Dichos aprendizajes hablan de la posibilidad de que la misma gente pueda hacerse cargo de su desarrollo a través del conocimiento, cuidado y mantención del patrimonio local. www.innovemos.unesco.cl