Davidson: Requisitos para una teoría del significado del - Sdf

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FREGE Y DAVIDSON: DOS INTERPRETACIONES DEL PRINCIPIO
DE COMPOSICIONALIDAD
Miguel Martínez Rodríguez.
Filosofía – Grupo 26
Curso 2007-2008
[email protected]
Resumen
Frege propone el principio de composicionalidad para su teoría del significado. Para
Davidson la estrategia fregeana recurre a un repertorio de entidades que crean más
problemas de los que solucionan al internar explicar el significado. La propuesta de
Davidson consiste en una interpretación alternativa del principio de composicionalidad,
que desde una perspectiva holista cumpla con los requisitos exigibles a una teoría del
significado. El presente trabajo es una comparación del principio de composicionalidad
en Frege y Davidson. No pretende analizar al completo los artículos Verdad y
significado y Sentido y referencia, sino solamente esclarecer los aspectos de Frege a los
que Davidson alude; principalmente las entidades que postula para explicar el
significado (sobre ellas haremos una exposición más detallada, pues son el núcleo
contra el que Davidson dirige su mirada). Queremos ver como la crítica de estos
aspectos sienta las bases para una teoría veritativa del significado. Así pues, tratamos de
comprender la teoría veritativa del significado de Davidson desde la crítica del principio
de composicionalidad fregeano.
***
Davidson: Requisitos para una teoría del significado.
Al comienzo del artículo Verdad y significado, Davidson expone el problema
principal al que pretende dar solución:
“Una teoría satisfactoria del significado debe dar una explicación de cómo
los significados de las oraciones dependen de los significados de las
palabras” 1
Se trata de explicar cómo “el significado de las oraciones se construye a partir de
los elementos que las componen” 2 de forma que con un número finito de elementos del
lenguaje puedan construirse un número infinito de oraciones significativas. En esto
consiste lo que se ha llamado naturaleza composicional del lenguaje. Dar cuenta de tal
1
DAVIDSON, Truth and meaning. 1967.
FRÁPOLLI, M. J. y ESTHER ROMERO: Una aproximación a la filosofía del
lenguaje, Madrid, Síntesis, 1998. pp., 115
2
situación supone explicar “cómo los significados de un número de oraciones
potencialmente infinito dependen de los significados de un número finito de vocablos y
de un conjunto de reglas de formación de expresiones complejas a partir de los
vocablos, expresadas las reglas de un modo finito” 3. Una explicación de este fenómeno
consiste en el principio de composicionalidad, un algoritmo recursivo que según un
número finitos de elementos da lugar a un número infinito de combinaciones. Según
este principio es posible explicar aspectos fundamentales del lenguaje como el hecho de
que es posible su aprendizaje así como la creatividad a la que da acceso.
“A menos que tal explicación pueda proporcionarse para un lenguaje
particular, se arguye, no se habrá explicado el hecho de que podemos
aprender el lenguaje: no se habrá explicado el hecho de que, al dominar un
vocabulario finito y un conjunto finitamente enunciado de reglas, estamos
preparados para producir y entender cualquiera de un número
potencialmente infinito de oraciones” 4
El número finito de elementos que forman un lenguaje determina la posibilidad
de que, a partir de tales elementos, el lenguaje pueda ser aprendido por los hablantes. La
combinación de tales elementos llega a generar un número infinito de oraciones. Si el
aprendizaje tuviera que ser de una cantidad infinita de elementos, sería imposible
terminar tal aprendizaje. El principio de composicionalidad ofrece una explicación a
esta cuestión: un algoritmo recursivo con elementos finitos y por tanto posibles de
aprender, que pueden generar un número infinito de oraciones.
Frege y el compromiso con el significado de las partes
Según el principio de composicionalidad, sólo es posible dar cuenta del infinito
número de oraciones según un número finito de elementos “si se admite que los
significados de las oraciones dependen de los significados de las partes que lo
componen” 5. Esto, sin embargo, “no implica que uno deba comprometerse con ofrecer
el significado de esas partes más básicas” 6, es decir, el principio de composicionalidad
no exige decir cuál es el significado de todas las partes que forman la oración. Esta, sin
embargo, es la estrategia que sigue Frege.
Frege: las entidades que componen el significado.
En este apartado analizamos las entidades que Frege utiliza para construir una
teoría del significado. Tanto Davidson como Quine critican el repertorio de nociones
fregeanas que permiten construir el significado. Para ver en qué consisten estas
nociones, analizamos las dicotomías que Frege traslada de lenguajes matemáticos al
lenguaje natural para explicar el significado. En virtud de estas dicotomías, es posible
construir un significado según el principio de composicionalidad. Davidson, sin
embargo, sin recurrir a las entidades fregeanas, interpretará el significado según este
mismo principio.
En Conceptografía Frege adopta la distinción entre función y argumento en
lugar de la más tradicional entre sujeto y predicado. Esta última tiene una función
3
Frapolli, 1998, pp., 116
Davidson, 1967.
5
Frapolli, 1998, pp., 117
6
Frapolli, 1998, pp., 117
4
psicológica que Frege rechaza. Una función es “una expresión incompleta” 7, es decir,
que tiene lugares para argumentos que necesiten determinarse para así definir el valor
de la función. Éste no es más que el objeto señalado por la función cuando se saturan
sus lugares de argumento por argumentos apropiados.
A las expresiones incompletas, Frege las llama expresiones no-saturadas
diferenciándolas así del resto de expresiones a las que llama saturadas. La dicotomía
saturado y no-saturado proporciona la base a toda la semántica de Frege. Es exhaustiva
en cuanto que todas las expresiones deben ser de una de las dos formas; excluyente,
pues o es de una u otra forma, pero nunca de ambas; y absoluta puesto que las
expresiones no varían su carácter de saturación o no saturación. 8.
Esta distinción que se proyecta sobre toda la teoría del significado de Frege,
hace de esta una teoría homogénea en dos sentidos:
-
Las expresiones matemáticas y las expresiones del lenguaje natural no presentan
diferencias entre la estructura y forma de significar.
-
“Todas las expresiones significan, en cierto sentido, de la misma manera” 9.
Esta dicotomía contribuye a que la expresión del significado de un todo se
realice de manera sistemática en función de sus partes:
“La sistematicidad de la contribución del significado de las expresiones en la
teoría de Frege es el fundamento de un Principio de composicionalidad que
es el eje de su teoría del significado y que puede formularse como sigue: el
significado de una expresión compleja es una función del significado de las
partes que la componen” 10
Este tipo de análisis sistemático, que tiene su origen en desarrollos del lenguaje
matemático que Frege, a su vez, traslada al lenguaje natural, vale tanto para términos
singulares como para oraciones completas. Así, una función –p. ej: “la capital de (…)”–,
toma como argumento “Francia”, determinando el valor “París”. La función no-saturada
pasa a ser saturada y entonces, la expresión resultante deja de ser functorial para
convertirse en una expresión completa y saturada que Frege llama nombre. Esto ocurre
de forma análoga cuando tratamos con funciones no saturadas que tienen más de un
argumento (si tienen dos argumentos siguen un esquema análogo al de la identidad, “()
= ()”). En este caso el predicado –la función– recibe el nombre de “relación”; cuando se
saturan los lugares del argumento de una relación, el complejo se convierte en un
nombre de verdad. En el caso de que se sature uno sólo de los argumentos de la relación
–que llamamos n-ádica–, se obtendría una relación (n-1)-ádica.
Ontológicamente Frege sostiene dos tesis fundamentales: La primera le
caracteriza como realista semántico al sostener que “los significados de las expresiones
en general (que a menudo son entidades abstractas) tienen una existencia independiente
7
Frapolli, 1998, pp., 49
En Frapolli, 1998, pp., 50.
9
Frapolli, 1998, pp., 50
10
Frapolli, 1998, pp., 50
8
de la mente de los sujetos que las piensan” 11. Según la segunda tesis “el lenguaje es un
fiel reflejo de la realidad, aunque la realidad no se reduce al mundo físico” 12. Esta
segunda tesis abre la pregunta sobre qué viene primero, si el lenguaje o la realidad. A
este respecto, la postura de Frege es que el mundo tiene una estructura que refleja los
rasgos que el encuentra en el lenguaje.
Por lo tanto, si en el lenguaje es válida la dicotomía saturado/no-saturado, en el
mundo, todas las entidades deben ser igualmente saturadas/no-saturadas. Las primeras
son objetos y las segundas funciones.
“Todo lo que hay en el mundo son o bien funciones o bien objetos. A las
funciones (functores), entendidas como entidades no saturadas de un
lenguaje, les corresponde en la realidad funciones, entendidas como
entidades no-saturadas. A los nombres, entendidos como expresiones
saturadas del lenguaje, les corresponde en la realidad objetos, entendidos
como entidades saturadas” 13
Esta dicotomía saturado/no-saturado que Frege toma de las matemáticas, que
posteriormente traslada al lenguaje natural y que finalmente sirve para entender el
mundo, es aplicable igualmente a la noción de significado. Frege distingue en esta
noción entre sentido (Sinn) y la referencia (Bedeutung). Pues bien,
“todos los tipos de expresiones de un lenguaje admiten el análisis de sus
significados en sentido y referencia. Dicho de otro modo, las funciones
tienen un sentido y una referencia, y lo mismo vale para los nombres (…) las
funciones (expresiones functoriales) refieren a funciones (entidades no
saturadas) y los nombres (expresiones saturadas en general) refieren a
objetos (entidades saturadas).” 14
En relación al significado, Frege introduce la dicotomía sentido/referencia que es
aplicable a todos los contextos en los que opera el significado:
“es natural considerar entonces que a un signo (nombre, unión de palabras,
signo escrito), además de lo designado, que podría llamarse referencia del
signo, va unido lo que yo quisiera denominar el sentido del signo, en el cual
se halla contenido el modo de darse” 15
Toda expresión es o una función o un nombre, y a la dicotomía saturado/nosaturado, también se le aplica la distinción entre sentido y referencia. El carácter
homogéneo de la semántica fregeana obliga a que toda expresión con significado tenga
sentido y referencia: las expresiones no-saturadas tendrán por sentido y referencia
entidades no-saturadas y las expresiones saturadas tendrán por sentido y referencia
entidades saturadas.
11
Frapolli, 1998, pp., 57
Frapolli, 1998, pp., 57
13
Frapolli, 1998, pp., 58
14
Frapolli, 1998, pp., 61
15
FREGE. Sobre sentido y referencia. 1892. pp., 25 (para la paginación seguimos la
copia dejada en reprografía)
12
Las funciones “refieren a funciones, esto es, a entidades extralingüísticas y
extramentales no saturadas y también tienen sentido, aunque no se puede decir mucho
acerca de qué es el sentido de una función, salvo que dicho sentido es objetivo” 16.
Frege no es muy claro en la explicación sobre qué puedan ser el sentido y la referencia
de las funciones. “Está claro, sin embargo, que la distinción se aplica también a ellas
(1982-1985:85) y que los sentidos y referencias de las expresiones predicativas deben
conservar el carácter no saturado de éstas” 17. Esta condición impide que las referencias
de los predicados sean los objetos que puedan caer bajo ellos –es decir, los objetos que
tienen las propiedades expresadas por los predicados–.
Los nombres pueden ser, según Frege, de tres tipos, nombres propios,
descripciones definidas y oraciones declarativas. 18. Sobre el sentido, diremos que es el
modo de darse de la referencia; explicaremos en cada uno de los tres casos en qué
consiste esto. La referencia de los nombres será un objeto, acerca de los cuales dice
Frege:
“un objeto es algo que pertenece a una categoría última del análisis, y que,
en consecuencia, no puede ser ulteriormente analizado ni admite
descomposición lógica. Y por tanto no puede ser definido. Lo único que
puede decirse es que un objeto es todo aquello que, a diferencia de una
función, es designado por una expresión completa, por una expresión que no
muestra ningún lugar vacío, por una expresión que funciona como sujeto de
una oración” 19
Frege distingue diversos tipos de objetos:
“No son objetos solamente las realidades físicas, como los organismos, las
personas, las cosas, o sus componentes fisico-químicos, sino que también
son objetos las entidades matemáticas, como los puntos, líneas, figuras, las
diferentes clases de número, etc. Incluso la verdad y la falsedad son objetos”
20
En el caso de los nombre propios el sentido es el modo en que la referencia se da
para cada sujeto, las características que acompañan a la referencia, y la ésta es el objeto
al que señala el nombre. En los otros dos casos se esclarece el sentido y la referencia de
forma compleja a través del Principio de composicionalidad de la referencia –“la
referencia de una expresión compleja es una función de la referencia de sus partes
constitutivas” 21– y del Principio de composicioinalidad del sentido –“el sentido de una
expresión compleja es una función del sentido de sus partes constitutivas” 22–.
En el caso de las descripciones definidas, el sentido “dependerá del sentido de
las expresiones que forman parte de ella y del sentido de la oración a la que pertenece”
16
Frapolli, 1998, pp., 69
Frapolli, 1998, pp., 69
18
Frege se refiere a esta distinción como palabras, expresiones o frases enteras, pero
parece más clara la traducción que hace Frapolli, 1998, pp., 69
19
J. HIERRO, Principios de la Filosofía del Lenguaje. Alianza Editoria. Madrid. 1989.
pp., 182
20
Hierro, 1989, pp., 180
21
Frapolli, 1998, pp., 70
22
Frapolli, 1998, pp., 70
17
23
. La referencia, será el objeto al que señala la descripción. El sentido del todo viene
dado por el sentido de las partes y por el contexto –la oración– en el que tal expresión
estuviera incluida, y la referencia es el objeto (en el caso de la expresión “la capital de
Francia”, la referencia es el objeto París)
En las oraciones declarativas, el sentido “es una función del sentido de sus
términos componentes” 24 y expresa el pensamiento de una oración. Frege dice, “el
pensamiento no puede, pues, ser la referencia del enunciado; por el contrario,
deberemos concebirlo como su sentido” 25.. El pensamiento –el sentido– sólo no nos
basta, y en la medida en que buscamos el valor veritativo de una oración, nos
interesamos por su referencia: “es la búsqueda de la verdad lo que nos incita a avanzar
del sentido a la referencia” 26 . La referencia “es una función de las referencias de las
expresiones que la forman” 27 y expresa un valor de verdad. Tal referencia no es sino lo
verdadero o lo falso. Frege admite “el valor veritativo de un enunciado como su
referencia” 28, por lo que “la referencia, caso de que exista, es o bien lo verdadero o bien
lo falso” 29. Frege añade algunas variaciones sobre esta estructura cuando se trata de
contextos oblicuos o indirectos que no analizaremos pues ya estaban tratadas en un
comentario anterior que las comparaba con Russell.
Acerca del pensamiento, cabe señalar que no se trata de una noción subjetiva o
psicológica. La posición realista de Frege determina su existencia objetiva: “Los
pensamientos son objetivos, iguales para todos e independientes de nuestro
conocimiento de ellos” 30. Frege dice al respecto:
“Los pensamientos no son entidades psicológicas y no consisten en ideas en
sentido psicológico. El pensamiento del Teorema de Pitágoras es el mismo
para todos los hombres; se enfrenta a todo el mundo de la misma manera
como algo objetivo, mientras que cada hombre tiene sus propias ideas,
sensaciones, y sentimientos, que le perteneces sólo a él. Captamos los
pensamientos, pero no los creamos” 31.
Aunque podemos tener representaciones subjetivas, éstas son prescindibles a la
hora de determinar el significado. Interesan a cuenta del significado las nociones con
carácter universal. Sobre la objetividad del sentido y su importancia dice Frege:
“la representación esencialmente del sentido de un signo (…) puede ser
propiedad común de muchos (…), por tanto, no es parte o modo de la mente
23
Frapolli, 1998, pp., 70
Frapolli, 1998, pp., 71
25
FREGE. Sobre sentido y referencia. 1892. pp., 29 (para la paginación seguimos la
copia dejada en reprografía)
26
Frege, 1892, pp., 30
27
Frapolli, 1998, pp., 71
28
Frege, 1892, pp., 30
29
Frege, 1892, pp., 31
30
Frapolli, 1998, pp., 73
31
Frege. A brief Survey of my logical Doctrines” (1969:198). Cita recogida en Frapolli,
1998, pp., 73
24
individual; pues ciertamente no se podrá negar que la Humanidad tiene un
tesoro común de pensamientos que transmite de una generación a otra” 32.
Hasta aquí hemos analizado las diferentes entidades a las que se refiere Frege
para explicar el significado. Para ello hemos explicado las dos dicotomías a las que
recurre, por un lado la distinción saturado/no-saturado, por otro, la distinción entre
sentido y referencia. Tanto las funciones como los nombres tienen sentido y referencia
que en unos casos son más claros y en otros más oscuros. Según estas nociones, y a
partir del principio de composicionalidad, Frege construye una teoría del significado. La
crítica a estas entidades que explican el significado, primero en Quine y posteriormente,
en Davidson, abre el camino para una interpretación del principio de composicionalidad
sin contar con ellas; serán reemplazadas al adoptar una perspectiva semántica holista.
Davidson: crítica de la interpretación fregeana del Principio de Composicionalidad
Para Frege está claro que “los significados de las expresiones son entidades
saturadas o no saturadas, según sean las expresiones saturadas o no” 33. El principio de
composicionalidad exige construir el significado de las oraciones de acuerdo a sus
partes, pero para Davidson no es necesario decir cual es el significado de todas las
partes que forman la oración. En su artículo Verdad y significado antes de presentar su
interpretación alternativa del principio de composicionalidad critica la interpretación
fregeana de este principio.
La primera posibilidad consiste en “comenzar asignando a cada palabra (u otro
rasgo significativo) de la oración alguna entidad como su significado” 34. Así,
descomponemos la oración “Teeteto vuela” en Teeteto, que asignamos a “Teeteto” y la
propiedad de volar que asignamos a “vuela”. Pero esto da lugar al problema de “cómo a
partir de esos significados se genera el significado de cada oración” 35. La estrategia de
referir el significado al significado de las partes da lugar a un regreso al infinito que
hace imposible comprender cómo es posible el aprendizaje de un lenguaje, pues el
procedimiento que explique cómo funciona el significado –aunque explique una
variedad infinita de significados– debe a su vez ser finito.
El problema que se plantea una vez aceptados los significados de las partes, es
que, “cuando tenemos los significados de las expresiones más simples de una oración,
nos queda aún por explicar cómo contribuyen éstos al significado total de la oración” 36;
es decir, “si los significados de las partes más simples de una oración son entidades,
¿cómo se compone la entidad resultante o el significado de la oración?” 37. Pues bien,
para resolver el regreso al infinito que acabamos de ver, Frege plantea la dicotomía
saturado/no-saturado: “Frege buscaba evitar el regreso diciendo que las entidades que
corresponden a predicados (por ejemplo) eran «insaturadas» o «incompletas» en
contraste con las entidades que corresponden a nombres” 38. Según esto, el significado
de la expresión “el padre de Annette” depende del término “Annette” que se refiere a
32
Frapolli, 1998, pp., 27
Frapolli, 1998, pp., 117
34
Davidson, 1967. pp., 314 (seguimos la paginación del artículo dejado en reprografía)
35
Davidson, 1967. pp., 314
36
Hierro, 1989, pp., 436
37
Frapolli, 1998, pp., 118)
38
Davidson, 1967. pp., 314
33
Annette y de la entidad insaturada o incompleta “el padre de”. Sin embargo, para
Davidson, las expresiones que se refieren a entidades no-saturadas pueden explicarse
extensionalmente pero sin necesidad de recurrir a entidades no saturas que les
correspondan.
Otra situación problemática a la que se llega en relación a la referencia de las
oraciones es que todas las que son verdaderas, son para Frege sinónimas, y lo mismo
ocurre para las oraciones falsas: “Si el significado de una oración es aquello a lo que se
refiere, todas las oraciones que tienen el mismo valor de verdad tienen que ser
sinónimas –un resultado intolerable–“39. Por otro lado, en relación al sentido, tenemos
que, el sentido de la función “era muy puntual” cuando toma como valor “Kant”, nos da
como valor el sentido de “Kant era muy puntual”. Pero con esto, queríamos saber el
sentido de la oración completa, lo hemos identificado con las partes y estas a su vez las
remitimos al sentido de la oración original. Se trata de un bucle sin utilidad explicativa
para el significado. “Hablar de la estructura de la oración y del significado de las
palabras era ocioso, pues estos no desempeñaban ningún papel en la descripción dada
del significado de la oración” 40
Por estas razones, Davidson concluye que “el cambio de referencia a significado
no lleva a ninguna explicación provechosa de cómo los significados de las oraciones
dependen de los significados de las palabras (u otros rasgos estructurales) que las
componen” 41 Para Davidson, por tanto, “tratar los significados como entidades es
innecesario para unas teoría del significado, independientemente de que se distinga o no
entre entidades saturadas y no saturadas” 42 Si bien Quine ya ha sostenido este rechazo
de los significados, lo hace en virtud de que estos son abstractos y de que sus
condiciones de identidad son oscuras 43. Davidson alega en cambio razones de utilidad
explicativa: “la única cosa que los significados no parecen hacer es engrasar las rueda
de una teoría del significado” 44. Recurrir al significado de las partes para explicar el
significado del todo es para Davidson, un procedimiento vacuo que no aclara cómo
resolver el significado de la oración. Los significados de las partes “carecen de
aplicación a las oraciones como tales”45.
Davidson: una interpretación holista al principio de composicionalidad.
Puesto que postular significados de las partes de las oraciones para explicar el
significado de estas no supone ninguna ventaja explicativa, Davidson opta por otra
dirección explicativa que consiste en una “cierta visión holista del significado” 46:
“Si las oraciones dependen para su significado de su estructura, y si
entendemos el significado de cada elemento de la estructura solamente como
una abstracción a partir de la totalidad de las oraciones en las que desempeña
un papel, entonces podemos dar el significado de cualquier oración (o
palabra) dando solamente el significado de toda oración (y palabra del
39
Davidson, 1967. pp., 316
Davidson, 1967. pp., 317
41
Davidson, 1967. pp., 317
42
Frapolli, 1998, pp., 120
43
Davidson, 1967. pp., 318
44
Davidson, 1967. pp., 318
45
Hierro, 1989, pp., 436
46
Davidson, 1967. pp., 319
40
lenguaje). Frege dijo que solamente en el contexto de una oración tiene
significado una palabra; podría haber añadido, en la misma vena, que
solamente en el contexto del lenguaje tiene significado una oración (y por lo
tanto, una palabra)” 47
La alternativa que Davidson plantea para resolver los problemas derivados de la
interpretación fregeana del principio de composicionalidad, es una concepción holista
del significado que consiste en “tomar el significado de cada oración como algo unitario
y propio de ella, que tiene en la medida en que pertenece a un determinado lenguaje” 48.
Según una visión holista del significado: “se puede ofrecer el significado de cada
oración dando el significado de todas las oraciones del lenguaje o, lo que es lo mismo,
dando una teoría del significado de las oraciones de un lenguaje natural” 49. Si para
Frege, las expresiones sólo tienen significado en el contexto de las oraciones, para
Davidson, las oraciones sólo tienen significado en el contexto del lenguaje en su
conjunto. Esto supone una ampliación del principio del contexto de la oración a todo el
lenguaje. En una interpretación holista de este principio.
Davidson: Una teoría veritativa del significado.
Aceptar una concepción holista del significado supone tomar el significado de
cada oración como algo unitario dentro del lenguaje, es decir, una teoría holista del
significado “debe ser tal que de ella puedan deducirse todas las oraciones de la forma
«X significa s» para el lenguaje de que se trate (siendo «X» cualquier oración de dicho
lenguaje y «s» su significado)” 50. Estas oraciones son teoremas que proporcionen el
significado de todas y cada una de las oraciones significativas del lenguaje estudiado51.
La idea de utilizar estos teoremas para definir el significado permite evitar la
circularidad que supone recurrir a otras nociones para definir el significado. Se trata de
diseñar una teoría que permita comprender el significado “sin presuponer aquello que
pretende describir” 52; la idea es “una explicación del significado que no haga un uso
esencial de términos lingüísticos no explicados” 53. Para ello, Davidson debe definir la
forma de los teoremas que componen una teoría holista del significado.
La forma «X significa s» hace necesario el significado de s, que es justo lo que
Davidson trata de evitar. Además, según una teoría con teoremas de esta forma,
obtendríamos una teoría de la traducción y no una teoría genuinamente interpretativa
que es lo que busca Davidson. Opta por tanto por la forma «X significa que p». El
compuesto «significa que» permite realizar el giro para dejar a un lado la noción de
significado. La expresión «significa que» es sustituida por «es verdadera» y por «si y
solo si». De esta forma tenemos una expresión de la forma: «X es verdadera si y sólo si
p». Por «p» entendemos una oración, y por «X» la descripción estructural de esa
47
Davidson, 1967. pp., 319
Hierro, 1989, pp., 436
49
Frapolli, 1998, pp., 117
50
Hierro, 1989, pp., 436
51
MANUEL HERNÁNDEZ IGLESIAS, La semántica de Davidson. Visor. Madrid.
1990 pp., 33. La cita no es textual.
52
Davidson, Inquires into Truth and Interpretation. 1984. Cita en Manuel. Hernández
Iglesias, 1990 pp., 28
53
Davidson. Reply to Foster. 1976. Cita en Manuel. Hernández Iglesias, 1990. pp., 29
48
oración. La oración-T “expone en qué consiste que dicha oración tenga significado” 54.
Con esto queda definido el concepto de verdad para un lenguaje natural según Tarski:
“En la medida en que la definición de Tarski suministra condiciones
necesarias y suficientes para la verdad de cada oración, dar dichas
condiciones es una manera (sic en Davidson) de dar el significado de cada
oración” 55
Davidson lo expresa de la siguiente manera: “la definición funciona dando las
condiciones necesarias y suficientes parar la verdad de toda oración, y dar las
condiciones de verdad es una manera de dar el significado de una oración. Conocer el
campo semántico de verdad para un lenguaje es saber en qué consiste para una oración
–para cualquier oración– ser verdadera, y esto equivale, en un buen sentido que
podemos dar a la frase, a comprender el lenguaje” 56
Conclusión
La crítica de Davidson al la interpretación fregeana del principio de
composicionalidad apunta a una sistematización de la semántica para los lenguajes
naturales. Tanto Frege como Russell tienen una teoría del significado, pero no una
semántica sistematizada. Su concepción del significado es mentalista, es decir, remite a
los contenidos mentales del hablante. Para Frege, el comprender el significado está
relacionado con captar las condiciones de verdad de una oración. Por su parte
Wittgenstein mantiene esta perspectiva: una proposición muestra como son las cosas
cuando son verdaderas (4022). El significado establece una conexión entre la oración y
el mundo en ese caso. Entender una proposición es saber qué es el caso si es verdadera
(4024). Para dar las condiciones de verdad de una oración hay que estar en la posición
de saber qué condiciones la hacen verdadera. Davidson, sin embargo, no va a
especificar las condiciones de verdad de cada oración de esta forma. En su programa, no
contempla, como hace Frege, objetos abstractos que determinan el significado. Las
entidades extralingüísticas no son útiles explicativamente del significado. Davidson, en
lugar de asignar entidades al significado, va a hacer una traducción del significado a un
predicado que permita obtener todos los teoremas de una teoría semántica que permite
conocer el significado de los enunciados que pertenecen a un lenguaje natural. La teoría
semántica va a ser la que permita derivar teoremas que permitan conocer las
condiciones de verdad de las oraciones. Conocer estas condiciones es una forma de dar
el significado de las oraciones de un lenguaje.
La semántica de Davidson pretende dar cuenta de la riqueza del lenguaje a partir
de elementos finitos. Es esta estructura finita/infinita la que permite su aprendizaje y el
posterior uso ilimitado. Y ello es posible explicarlo a partir del principio de
composicionalidad. Pero, para Davidson, la interpretación fregeana, al comprometerse
con el significado de las partes y al postular entidades extralingüísticas como
54
Hierro, 1989, pp., 437
Hierro, 1989, pp., 437
56
Davidson, 1967. pp., 321. La última oración parece no estar traducida con mucha
fortuna
55
explicación del significado genera más problemas de los que explica. Frege, recurre a la
dicotomía saturado/no-saturado que permite evitar el problema de tratar con relaciones
de significados. Consigue así explicar el significado, pero deja sin aclarar las nociones
que explican el significado.
Davidson recurre al predicado verdad de Tarski para construir una semántica de
condiciones de verdad. La idea es que el significado puede ser explicado en términos de
predicado-verdad. Es posible así construir una teoría finitamente axiomatizable de la
verdad para un lenguaje. Esta se compone de oraciones-T de Tarski que especifican las
condiciones de verdad de ese lenguaje. Al formular la teoría se están dando las
condiciones de verdad para dar el significado. Y ello es compatible con el esquema
elementos finitos / oraciones infinitas del lenguaje. Una semántica sistemática
compatible con este esquema finito/infinito debe seguir el principio de
composicionalidad, y para hacerlo sin comprometerse con entidades sin utilidad
explicativa, es posible recurrir a las condiciones de verdad para explicar el significado.
De esta forma, la reinterpretación del principio de composicionalidad de Frege, abre las
puertas a una semántica sistemática como la de Davidson.
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