HAPPENING Boletín del Instituto Oscar Masotta Nº 23 Viernes 15 de noviembre de 2002 Directores de la publicación: Samuel Basz, Jorge Chamorro, Germán García y Stella Palma Responsable de la publicación el Comité de Iniciativa del IOM (S.Basz, J.Chamorro, G.García, J.C.Indart, R.Mazzuca y M.Torres) Editorial Encuentro Americano del Campo Freudiano, 2003. Cada Delegación, cada Centro de Investigación y Docencia del Instituto Oscar Masotta tendrá una oportunidad excepcional en el próximo Encuentro Americano del Campo Freudiano, que se realizará en septiembre de 2003 en la ciudad de Buenos Aires. Del mismo participarán las diferentes organizaciones del Instituto del Campo Freudiano. Además, el Centro Descartes en tanto que asociado. El IOM tendrá ocasión de disponer de media jornada de trabajo, que podrá compartir con la Escuela Brasilera de Psicoanálisis y con la Nueva Escuela Lacaniana (NEL) que, como saben, agrupa a ciudades de diversos países de Latinoamérica. El Comité de Iniciativa del IOM propone un tema general: El psicoanálisis y las diversidades terapéuticas. La razón de este tema está en la "diversidad" que compone al IOM - en particular, mediante sus grupos de investigación -, pero también en el hecho de que esa diversidad no es dispersión ecléctica, ya que está vertebrada por el Seminario Clínico que orienta nuestras actividades. Hay un psicoanálisis, hay diversidad en sus aplicaciones terapéuticas. En las próximas jornadas de la EOL, a realizarse en Buenos Aires los días 23 y 24 de este mes, que giran en torno a esta problemática, tendremos ocasión de intercambiar información con los colegas que vengan desde las diferentes ciudades del país, a la vez que trataremos de dar los primeros pasos hacia la conformación de grupos de trabajo que orienten la producción que expondremos en el Encuentro Americano, 2003. Mientras tanto esperamos que la sección Ida y Vuelta sirva para las consultas y propuestas que serán bienvenidas. Germán García por el Comité de Iniciativa Noticias CID-Bariloche Pablo Russo (27 y 28 de septiembre) empezó subrayando la importancia del recurso del “rodeo” como modo aplicable tanto a la teoría psicoanalítica en general, como a su propia presentación, mostrando desde varias aristas cómo dicho concepto es aplicable tanto en Freud (con la misma palabra de Freud die Wege) como en Lacan en múltiples instancias. Subrayó también la importancia del Seminario 11 como seminario fundamental y fundacional de la obra de Lacan, ciertamente aludiendo a la ruptura tanto con lo IPA, como con toda su enseñanza anterior y también, en cierta medida, con Frued mismo. Dicha ruptura señala un punto en que Lacan empieza a hablar menos de “los síntomas”, en plural, y a partir del cual, su obra se dirige a conceptualizar “el síntoma” en su dimensión singular. Para ilustrar esto, Russo expuso varias interpretaciones sucesivas del grafo conocido como “el peine” , tomado de Psicología de los Procesos Oníricos, y elaboró sobre los mismos refiriéndose también a la Conferencia 23 de Introducción al Psicoanálisis. Señaló interesantes paralelos entre las diversas etapas de la obra de Freud y aspectos de la primera etapa mencionada de la enseñanza de Lacan, en algunos casos, aportando ideas de elaboración propia, como el concepto de “lo zonático” que busca condensar el aspecto zonal o parcial de la pulsión con lo somático referido a los síntomas. En dichos esquemas, enfatizó la importancia del camino regrediente, como correspondiente a la represión, como esencial en la formación de síntomas, al intentar reencontrarse con el fantasma, pero señalando que dicho camino regrediente es lo que posteriormente servirá de base para toda la conceptualización del retorno que caracteriza a la última parte de la enseñanza de Lacan, y que le permite articular el síntoma, no como un conjunto de efectos aislados y contingentes, sino como principio causal que integra la dimensión del sentido junto con la pulsión. Habló finalmente de la función síntoma y lo ejemplificó con El hombre de las ratas, en que la palabra alemana ratten, sirve a un doble propósito - por una lado como instancias significantes en tanto elementos del dominio simbólico de la función , que remiten individualmente a los diversos significados particulares de la vida de dicha personaje, y por otro lado, como destinatario del rango real de la función síntoma, en la conformación de un único síntoma en tanto singular. Es en dicho punto singular en que se anudan lo sostenido por el fantasma y lo irreductible o irrepresentable del goce en tanto real. F. J. Sáenz CID-Corrientes-Chaco Tuvo lugar la 6ª. Clase del Seminario Clínico del CID Corrientes-Chaco, La angustia y la construcción del objeto a, que estuvo a cargo de Luis Polo y Moira Gover. En la clase del viernes 27 de Septiembre, en la ciudad de Corrientes, Luis Polo abordó la conceptualización de la pulsión operada por Jacques Lacan a partir del Seminario XI, como modo de introducir la noción de un objeto a cernido por el circuito pulsional; pulsión que posee una construcción gramatical, de acuerdo a Freud, de tres tiempos verbales, voz activa, refleja y pasiva (voz pasiva que para Lacan es también activa), que se satisface en el circuito a través del objeto, no en el objeto, y que retorna a la fuente por encontrarse con la castración. Del matema de la pulsión, $ D, destacó a la demanda del Otro produciendo a la pulsión al no dar nunca con el objeto del deseo, dimensión real del objeto, en relación con un sujeto en fading. La madre, en el lugar del Otro, erotiza el cuerpo del hijo con sus cuidados maternos. Moira Mascheroni presentó la teoría de la angustia en Freud. El primer momento, el de la teoría económica de la angustia y el segundo momento, ligada a la castración y también a la pérdida. Continuó el desarrollo desde la perspectiva de Lacan. La angustia con su doble señal, en tanto es presencia del deseo del Otro y de lo real. La angustia es “señal” de un modo peculiar de lo real, a, en la experiencia. La función angustiante del deseo del Otro está ligada al hecho de que el sujeto no sabe qué objeto a es para ese deseo, en virtud del desconocimiento de lo que es el a en tanto que real. El sábado 28, en la ciudad de Resistencia, Luis Polo abordó brevemente el concepto de Das Ding en Freud y Lacan, pasando luego al desarrollo del objeto en Lacan, en la dimensión imaginaria en el eje a----a´ del Esquema L, en la dimensión simbólica como objeto de deseo del Otro y luego la dimensión real como objeto causa del deseo. A continuación abordó al fantasma como una respuesta frente al deseo del Otro, respuesta que intenta dar una cierta fijeza al objeto, destacando la articulación que hay en el grafo del deseo entre $ a, matema del fantasma, y S (A), una de las formas de escritura del síntoma. Planteó las diferentes estructuras clínicas como un modo de respuesta al deseo del Otro. Por último diferenció a los fantasmas del fantasma fundamental, siendo este último el resto de la operación analítica. Moira Mascheroni continuó con el desarrollo de la angustia, desde la perspectiva de Lacan, como función media entre el deseo y el goce. La estructura del fantasma es la que lo protege de vivir angustiado permanentemente. Puntuó algunas consideraciones sobre la angustia para terminar mostrando, a partir de un recorte de un caso clínico, cómo el analista instaura el acto analítico, toma su posición, hace semblante del a del analizante, se especifica el movimiento del análisis, en tanto allí el sujeto se separa decisivamente y se reconoce como causado por este objeto. Luis Polo CID-Pergamino-Junín Junín Los temas de la clase del 3 de agosto fueron: Elaboración del fantasma a lo largo de la enseñanza de Lacan. El fantasma en la dimensión imaginaria y en el grafo del deseo. La angustia y la construcción del objeto a. El hilo de Ariadna que propuse para atravesar el laberinto fantasmático fue una frase de Lacan de 1958, de su escrito Observación sobre el informe de Daniel Lagache: Psicoanálisis y estructura de la personalidad, (Escritos 2, p. 638). En ese momento dice estar impresionado por la indiferencia combinatoria que se impone en la pulsión y pregunta: ¿Es tanto como decir que todo es allí significante? Sin duda que no, sino estructura. Con esta clave, se fueron desgranando los diferentes planteos y soluciones a la cuestión propuesta. Idas y vueltas que se podrían resumir en el sintagma Lacan contra Lacan pero, sin dejar de agregar, que Lacan contra Lacan termina en Lacan. El fantasma da cuenta de cómo se elabora un concepto “dentro de una enseñanza que no puede ser detenida sino sobre su propio movimiento” (J. Lacan, “La instancia de la letra...”, p. 477.) Se impone una lógica más allá de los vaivenes argumentativos. Los dos elementos implicados en el fantasma, sujeto - objeto, y “la relación” que se establece entre ambos, fueron situados tanto en su especificidad como en su originalidad lacaniana. Así, bajo el mandato de lo simbólico, deseo, falo y castración (El seminario 4), se organizan en el registro imaginario hasta culminar en la fórmula del fantasma en el grafo, donde los matemas de Lacan son presentados -si se puede decir así- en sociedad, en la polis del psicoanálisis para quedar definitivamente en su historia. Toma aquí lugar “la estructura más ampliamente práctica de los datos de nuestra experiencia”, datos que se organizan en torno a la pregunta por el deseo y a la respuesta de la falta del significante en el Otro. Al margen del grafo queda escrito lo que hace que el mundo no sea vano: el goce (Subversión del sujeto...”, p. 784, 794 ss., en: Escritos 2). Álvaro y Biondetta, los personajes de El diablo enamorado de J. Cazzotte, entran en escena y la angustia se hace presente. Se baraja y se da de vuelta. Tiempo intermedio, de espera, de división con resto. Entramos en el Seminario 10, donde Lacan evoca lo ominoso freudiano, los espejos se desvanecen y los vampiros realizan su danza. Se establecen de este modo las condiciones de posibilidad de la construcción del objeto a, con sus dos caras, lógica y corporal. En el marco de los fundamentos del psicoanálisis, de Lacan fuera de la comunión internacional y de sus preguntas: “¿A qué se refieren las fórmulas en psicoanálisis? ¿Qué motiva y modula ese deslizamiento del objeto? ¿Hay conceptos analíticos formados de una vez por todas?” (El seminario 11, p.18), se utilizaron los señuelos de la pantalla y el velo, para extraer la función del objeto a como mirada. Se concluyó en el “te amo... te mutilo” (ídem, 271 ss.), propio del análisis, en el que se trata de dejar constancia hasta donde el lenguaje alcanza. G Graciela do Pico Pergamino La clase del 6 de septiembre del CID-Pergamino-Junín en la ciudad de Pergamino estuvo a cargo de Stella Palma, quien abordó los temas: El síntoma como función y como modo de gozar y el sinthome. A partir de Freud sabemos que los síntomas son interpretables. Lacan al comienzo de su enseñanza piensa el síntoma como un mensaje del Otro, que debe interpretarse, dice que el inconsciente está estructurado como un Lenguaje y al final de su enseñanza nos habla del síntoma como escritura. La identificación al síntoma como fin de análisis que no está en contradicción con el atravesamiento del fantasma es complementaria de este atravesamiento. El sinthome nos acerca a lo que tienen en común el síntoma y el fantasma; el goce, que hace que el síntoma resista e insista. La consecuencia de vincular el síntoma con la escritura es que el inconsciente deje de estar definido a partir de la palabra para estar determinado por la función de lo escrito. Entonces su definición es la de saber cifrado. Y la interpretación es concebida como un trabajo de desciframiento. Lacan dice que la sutura, Joyce, la arma con la escritura, sostiene con su ego este anillo, entonces el imaginario se sostiene, con la referencia que es su escritura. Para trabajar el tema: “Joyce el síntoma“ Stella Palma trajo una traducción de “Finnengans Wake”, que es el último libro de Joyce donde se ve claramente una prueba de su escritura, este libro hasta hace unos años no tenía ninguna traducción porque es imposible de traducir, ya que la posibilidad de darle significación es tan variada y personal que una traducción es imposible Joyce el síntoma va ha formular un rasgo unario totalmente nuevo ya no designa al sujeto como efecto de significante sino como una respuesta de lo real. Lacan presenta a Joyce como desabonado del inconsciente es lo que permite esa escritura privándose del sentido, lleva el síntoma puro al lenguaje y a pesar de eso no es analizable. Su escritura obstaculiza la aparición del SsS y pone en contacto el S1 y el a, tomados como letra, en el lugar de SsS. No existe nada que sea analizable, hay un goce del inconsciente en tanto amo. Con el gran interés de los participantes, demostrado en la atención sostenida y las preguntas formuladas se desarrollo esta clase que nos permitió acercarnos a la última enseñanza de Lacan. María Laura Darder CID–Salta El fantasma el la concepción Freudiana. Julio 2002 Gabriela Vuistaz para el desarrollo de su exposición va a considerar las siguientes nociones: Trauma: En la enciclopedia del Psicoanálisis (Kaufmann) señala que “ en Freud, siempre se trata de trauma, no de traumatismo” y distingue ambos términos. Traumatismo se aplica al hecho exterior que golpea al sujeto, y Trauma al afecto producido por ese hecho en el sujeto y mas específicamente al dominio psíquico. El Trauma en las primeras épocas del psicoanálisis ocupa un lugar importante, esta ubicado como un hecho real, causa de las neurosis y especialmente relacionado a la escena de seducción. Teoría de seducción: a partir de sus pacientes Freud escucha que todos los neuróticos habrían padecido en su niñez los asaltos sexuales de los padres o de algún adulto. Si la experiencia es displacentera es el caso de los histéricos y si la experiencia es una satisfacción conduce a la neurosis obsesiva ( Carta 64 a Fliess). La terapéutica de esta época consistía que a través de la hipnosis y la catarsis se podía recordar y revivir el hecho traumático. Freud va a abandonar la teoría del trauma por la noción de fantasías. Carta a Fliess 69 La seducción ya no es un acontecimiento vivido por el niño sino fantaseado. Diferencia entre exactitud y verdad. Este pasaje de la teoría del trauma a la teoría de las fantasías no significa que Freud haya abandonado ni el concepto de trauma, ni la teoría de seducción. Desde una perspectiva histórica podemos ver que el término trauma en distintos momentos de su obra relacionado con la neurosis de Guerra, con el desamparo infantil y en Mas allá del principio del placer con la repetición. En el artículo de 1908 Fantasmas histéricos y su relación con la bisexualidad es un texto donde Freud relaciona en forma mas evidente el síntoma histérico y las fantasías. Es decir que supone que las fantasías determinan el síntoma. Planteamos que el descubrimiento de la teoría de las fantasías no invalida a la teoría de seducción para Freud. A través del análisis de los neuróticos adultos lo que va a descubrir es la sexualidad infantil. En su artículo de 1905 Tres ensayos para una teoría sexual es donde plantea tal descubrimiento y define a la sexualidad infantil como autoerótica. De esta forma el adulto queda excluido de ella. El niño se queda solo con su cuerpo, que le basta ampliamente. Pero en esta economía de placer la presencia del Otro sigue siendo necesaria, la madre que presta el pecho, recibe las heces o simplemente mira o escucha, va erogenizando el cuerpo del niño. ( El Otro introduce la sexualidad) En este mismo artículo el sujeto infantil es definido como el perverso polimorfo, es decir que éste se mantiene aún mas acá del reconocimiento de la diferencia de sexos y de la castración materna. El Otro testigo del autoerotismo, puede ser complaciente, ya que no le falta nada. Pero ¿ qué es lo que va a obstruir esta sexualidad masturbatoria? El autoerotismo encuentra un tope con el complejo de Edipo y su corolario la Castración. Este tránsito de la sexualidad infantil entre la seducción y el autoerotismo – a la sexualidad adulta podemos ver que la sexualidad siempre es traumática. Cuando el niño se enfrenta con la castración materna, va a responder con la fantasma. Volviendo a los términos Fantasías (plural) Fantasma (singular), son términos de una amplitud que puede resultar engañosa, por ello se hace necesario realizar algunas precisiones. El término fantasía es de la lengua alemana Phantasie, de la lengua inglesa fantasy. Fantasma es de la lengua francesa. El equívoco estaría dado más del lado del uso en plural o singular. Para ello nos van a ser útiles las categorías Lacanianas de los tres registros: Imaginario, Simbólico, Real. Las fantasías (plural) las ubicaríamos en el registro de lo imaginario. Al fantasma (singular) en el orden simbólico. Las fantasías es lo que Lacan denomina “la selva del fantasma” y lo que él llama fantasma fundamental es un efecto de construcción propio del análisis, como resultado de la decantación de esos fantasmas. En el análisis “ la selva del fantasma” se va despejando en dirección a una formalización, una singularización. Esto lo desarrollaremos posteriormente a partir del texto de Freud Pegan a un niño de 1919, donde esta decantación nos lleva a construir un axioma. Freud en su artículo de 1907 El poeta y los sueños diurnos plantea que el fantasma es el tesoro, la propiedad mas íntima de las personas, pero también lo mas evidente en su comportamiento. Freud ubica en este texto los caracteres del fantasma y dice “ las pulsiones insatisfechas son las fuerzas impulsoras de las fantasías y cada fantasía es una satisfacción de deseo.....” Freud plantea en este párrafo la relación entre la pulsión , el fantasma y el deseo. Un sujeto al inicio de un análisis relata su historia, la construcción de su novela familiar, que es la historia del yo moi , y de lo que se trata en un análisis es conmover este “saber sabido” y que pueda desplegarse el saber del inconsciente. En 1908 en Fantasmas histéricos....”el síntoma, por vía del significante, todo es interpretable pero la clínica demuestra que del lado de la pulsión de muerte no todo es descifrable. Para concluir nos queda plantear las protofantasías o fantasías originarias, concepto teorizado por Freud. Hay que entenderlo como una matriz genética que es anterior a la experiencia y que organiza la misma. Freud plantea tres protofantasías: - seducción, escena primaria, castración, son tres respuestas a tres preguntas, por el origen del deseo, el origen de la vida y por la diferencia sexual. M Ma. Marcela Hessling CID-Tucumán Exposición de Graziela Napolitano acerca del tema “La angustia y el objeto” en el Seminario Clínico del CID- Tucumán del Instituto Oscar Masotta , el 10 de septiembre de 2002. En su exposición, Graziela Napolitano comenzó situando histórica y teóricamente el tema que abordó en la exposición, acerca de la angustia en la teoría de Jacques Lacan. Inició su desarrollo indicando el viraje dentro de la enseñanza de Lacan hacia la década del sesenta, a lo largo de los seminarios sobre La Identificación y La Angustia. En este momento comienza también una recurrencia a la lógica y a la topología a la vez que hay un “segundo retorno a Freud”, haciendo una lectura crítica de los textos freudianos, y un cuestionamiento del deseo de Freud, de la figura de Freud como padre, aparece una declinación del concepto del Nombre del Padre, y una adopción del de Los Nombres del Padre, significando un corte con la construcción freudiana. Haciendo un seguimiento de la enseñanza de Lacan, se encuentra que algunos conceptos desarrollados ampliamente en la época referida se encuentran anunciados anteriormente, como el concepto de Das Ding, referido en el Seminario Las Formaciones del Inconsciente como “la otra cosa”, externa a la red de significantes. Empieza a presentarse la dimensión de lo Real y el concepto de Objeto a, comienza a observarse una presencia de lo Real en lo Simbólico y una presencia de los Simbólico en lo Real. Aparece un aspecto que los críticos de Lacan habían recalcado por considerarlo faltante dentro de la teoría, que es el tema del afecto, relacionado ahora con la dimensión de lo Real. Así, la angustia aparece como asociada a lo Real, aparece como una respuesta a lo inasimilable, a lo que no puede atraparse en la cadena significante. Lacan, basándose en los textos freudianos de Análisis terminable e interminable e Inhibición síntoma y angustia desarrolla el tema de la angustia. Mientras que en Freud aparece la misma como una señal de peligro en relación con el miedo al padre, en Lacan aparece el peligro en relación con el deseo del Otro, observamos en este caso un encuentro con el deseo del Otro que se manifiesta como causa de la angustia. La angustia surge cuando aparece el resto, al perderse el objeto que toma el lugar de falo imaginario, esta cesión del objeto provoca una abertura entre deseo y goce, por lo que cambia la relación fantasmática, reguladora del deseo con respecto al Otro. La segunda parte de la exposición estuvo centrada en torno al concepto de inconsciente, del modo en que Lacan lo desarrolla a partir de su Seminario Los cuatro conceptos fundamentales, el inconsciente como saber, el inconsciente como sujeto, un inconsciente evanescente, con el estatuto de lo no realizado. Dentro de este marco se desarrolló el concepto de trauma como Real, como algo inasimilable y como imán de todo recuerdo, y se explicó a partir de este hecho la repetición del fracaso en el lugar de lo sexual, acerca del encuentro fallido con lo sexual. La eficacia de la exposición de Graziela Napolitano se comprobó al observar la participación de los concurrentes, con preguntas y comentarios referidos al tema. Exequiel Jiménez Delegación San Luis Las dos primeras clases sobre La dirección de la cura y los principios de su poder se realizaron el día 28 de Septiembre. Estuvieron a cargo de Fabián Schejtman, quien inició su exposición proponiendo un desglosamiento lógico del texto. La primer clase fue titulada: “El Trípode lacaniano: tres registros en la acción analítica”. Durante la misma desarrolló los capítulos I y IV del texto La dirección de la cura... Comenzó ubicando los tres registros (Simbólico, Imaginario y Real), trípode presente en la Introducción de dos maneras: 1º Trípode: con relación a “los pagos del analista”: - El analista paga con palabras, con su interpretación (Simbólico); “paga con su persona” en la transferencia (Imaginario); y “paga con el ser”, ya que la dirección va del ser a la falta en ser (Real). 2° Trípode: Ordena la acción analítica distinguiendo: Táctica Interpretación Estrategia Transferencia Política Falta en el ser. A partir de plantear la lógica del texto, desarrolló cada uno de los conceptos mencionados y su articulación con la dirección de la cura. Como telón de fondo estuvieron los textos de Freud: Consejos al médico... y Sobre la dinámica de la transferencia. A su vez Fabián Schejtman comentó un caso clínico que permitió situar su desarrollo teórico en la práctica analítica, en especial en lo relativo a la transferencia y a la posición del analista en la cura. Luego de esta introducción, planteó la relación entre La dirección de la cura..., el Seminario V y La subversión del sujeto..., ambos contemporáneos a este texto y sostenidos en el Grafo del deseo. A partir de esta articulación se pudieron establecer dos modos de pensar la dirección de la cura: ser identificación falta en ser. desidentificación A continuación comentó los tres tipos de identificaciones planteados por Freud y situó la fórmula del fantasma: $ a para dar cuenta del modo en que el sujeto se da un ser a través del fantasma, lo cual garantiza un ser consistente, aunque se trate de un falso ser. El análisis abre a la apertura de ese falso ser, provocando el atravesamiento del fantasma, ya que la interpretación apunta a ese “horizonte deshabitado del ser” que es la falta en ser. La Segunda Clase tuvo como título: "Interpretación y Transferencia". Trabajó sobre los capítulos II y III del texto La Dirección de la Cura.... Planteó el tema del deseo neurótico como un deseo inestable, dudoso o fijado al fantasma. A su vez estableció la diferencia entre las dificultades del deseo como dificultad estructural, del deseo de dificultad propio de la neurosis, donde se redobla la dificultad estructural del deseo. Desde esta diferenciación se orientó la clase hacia la cuestión del deseo del analista, como aquel que supone haber ido más allá del falso ser neurótico, en tanto ha dejado caer la identificación a un objeto como identificación fantasmática. Luego desarrolló la importancia de la interpretación, y cuál es su estatuto para el psicoanálisis, en tanto ésta apunta al agujero que la neurosis quiere colmar. La interpretación entonces fue articulada al acto analítico, en cuanto es éste el que trata de producir el agujero y la introducción de algo nuevo. Finalmente desarrolló el tema de la transferencia. Hizo referencia a la dinámica pero también a la estática de la transferencia, en cuanto el analista se convierte en un determinado momento en núcleo de la resistencia (presencia del analista), en la medida que el analista es localizado como lo imposible de decir, encarnación del objeto a. Esta no es una resistencia a vencer en el orden de lo imaginario, sino que se trata del real de ese amor de transferencia, que es por un lado obstáculo para el análisis pero también lo que puede permite su avance. Esto nos conduce al último capítulo del texto Hay que tomar el deseo a la letra, para ubicar la vía por la cual el análisis puede ir más allá de ese punto de obstáculo transferencial. Estas clases junto con las dos clases que dictará Ernesto Derezenzky serán publicadas por la delegación del IOM San Luis. Norma Alicia Sierra Jorge Rodríguez Alejandro Fernández Celeste Romá Delegación San Nicolás El síntoma infantil y su inscripción en la época. ADHD, fracaso escolar, trastornos de conducta En San Nicolás, el viernes 20 de septiembre, y a pedido de los integrantes del IOM de esa localidad, dicté una clase acerca del síntoma infantil y su inscripción en la época. Comencé planteando que Jacques Lacan sostenía que para que el psicoanálisis siga existiendo, y tenga el lugar que le corresponde en el mundo, debe poder responder al malestar en la cultura de su época, que en nuestro caso es la del vertiginoso avance de la ideología científica y de la tecnología, que genera un mercado global, que tapona, calla, obtura, sutura, forcluye con modalidades cada vez más apremiantes al sujeto en su particularidad, en función de un ideal de universalidad promovido por el discurso de la ciencia. Y sabemos que el síntoma se presenta como aquello que desde el sufrimiento afecta a un cuerpo, interpela al ideal, a la norma; es lo que se pone a contramano del discurso del amo, impidiendo que eso marche. Es por ello que se puede pensar a los nuevos síntomas, como respuestas frente a un malestar en la cultura, provocado en gran medida por el propio discurso científico, que intenta la medicalización de las síntomas, como respuesta frente a las preguntas que no desea escuchar. Si bien no hay en el niño una demanda articulada, hay algo en su hacer que causa a los padres. En general, son éstos los que son puestos en falta por un tercero: la escuela, el pediatra, o el juez por ejemplo. Y aún así, donde parece que no hay ningún enigma, algo los trae a la consulta. Es común que sea el punto de partida para la consulta el "problema de conducta" (especialmente el que se juega en la escena doméstica o escolar) que deja en falta a los padres dentro del escenario social, la escuela, la familia ampliada, los lazos sociales. ¿Pero qué se puede esperar del psicoanálisis de un niño? En primer lugar, obtener una rectificación de su relación con su propio síntoma. Es necesario que el niño llegue a plantearse la pregunta acerca de qué significan determinadas cosas que le suceden y se repiten en su vida. Y para ello, es como sujeto del inconsciente que debe entrar en el dispositivo. Y si bien, obviamente, no hay nada malo en la educación, la rehabilitación, la terapia o la prevención, el psicoanálisis debe ser otra cosa, y sostener otra posición frente a los mismos síntomas que esas disciplinas, muchas veces intentan "acallar". Alejandra Glaze Ida y Vuelta Ida: MUY IMPORTANTE Invitamos a todos los participantes del IOM a la reunión plenaria que se realizará el domingo 24 de noviembre a las 13 horas en el Salón Fiesta del Marriot Plaza Hotel de Buenos Aires. En esa ocasión se firmarán los certificados (que deberán traer completos), que, recordamos, deberán tener al menos dos firmas de los miembros del Comité de Iniciativa. Sugerimos que traigan las publicaciones para hacerlas conocer por el resto de los integrantes del IOM y también los que no lo son. Estarán a disposición de los concurrentes los Index 01. Recordamos que la intención es que cada alumno y docente del IOM pueda contar con un ejemplar. Anunciamos nuevamente que las Jornadas anuales de la EOL que se desarrollarán en Buenos Aires los días 23 y 24 de noviembre tienen una costo de inscripción de $ 80. Para los alumnos del Instituto del Campo Freudiano (incluido el IOM) costará $ 40. Stella Palma Vuelta: Después de esta reunión esperamos un fuerte intercambio. Lecturas sugeridas EL DESTINO DE LAS ALMAS Graciela Abraham Editorial ATUEL Año 2002 Decir novela psicoanalítica es un pleonasmo, como decir novela policial. No porque las novelas usen explicaciones psicológicas o motivaciones pulsionales (también lo hacen) sino porque el psicoanálisis –como la página de crímenes- es una de las mayores novelas modernas. Puig fue el primero que entre nosotros percibió las posibilidades literarias de ese modo de narrar. El psicoanálisis es uno de los relatos básicos de la cultura de masas, el bovarismo es uno de sus grandes motivos, en definitiva, decía Puig, el inconsciente está estructurado como un folletín. Graciela Avram sigue el impulso de Puig pero es demasiado inteligente y decidida para volver sobre sus pasos. En la compleja red de estilos narrativos implícitos en el relato psicoanalítico, Avram retoma el modelo del caso, el procedimiento de la transmisión y del control, la forma de la historia clínica, el juego verbal –a la vez único y siempre igual- que se juega en la sesión analítica y en los laberintos de la transferencia. Nada mas novelístico que la condensación de una experiencia en una serie de datos dispersos que se anudan en una explicación que está ausente. La hermosa secretaria con zapatos a lo Carmen Miranda que sólo se enamora de hombres casados, el seductor que abandona a su esposa por su joven amante y a quien de inmediato la joven abandona por su mejor amigo, la muchacha que no puede salir de su departamento, ni subir escaleras, ni dejar de ahorrar y que sueña con comprarse una casa en el suburbio para poder al menos salir al jardín, la mujer que conversa con un extraño en una plaza de la ciudad. Y en el centro secreto de esa trama donde circulan y se anudan diálogos, destinos, diversiones, dramas, hay un enigma: una serie enexplicable de perturbadoras llamadas telefónicas. Una respiración apasionada, la pasión sofocada de una mujer (quizá) acechan al protagonista: Zomer es sorprendido por esas llamadas y el suspenso crece. El desenlace es –como todo el libro- un ejemplo de ironía y de destreza narrativa. Graciela Avram ha escrito una excelente novela, intrigante y nítida, fluida como el relato íntimo que todos oímos, al soñar, en el silencio de la noche. Ricardo Piglia Nota: Toda la información para publicar deberá ser enviada a [email protected] con copia a [email protected] Incluso las que son para La Carta de la Escuela y la EOL Postal..