Poliedros desarrollados con GeoGebra: del 3D al 2D Real Pérez, Mariano1 [email protected] Muñoz Santonja, José 2 [email protected] Resumen La versión de GeoGebra 5, aparecida el pasado mes de Octubre de 2014, nos permite trabajar en tres dimensiones con la misma facilidad que hemos trabajado hasta el momento el 2D. Uno de los aspectos que primero se trata en la enseñanza es el desarrollo de poliedros y figuras geométricas. El objetivo de esta comunicación es mostrar las actuales órdenes que lo permiten, pero sobretodo mostrar el trabajo que permite desarrollar figuras que GeoGebra no reconoce como poliedros y que, por tanto, no se les puede aplicar las órdenes básicas. Hablaremos también de las posibilidades del desarrollo para trabajar algunos problemas corrientes de matemáticas. 1. Introducción La gran novedad de la versión 5 de Geogebra, aparte de las nuevas funciones y órdenes con gran potencia, como el comando Ejecuta, es la posibilidad de trabajar en una ventana 3D. Esto nos permite trabajar, con la facilidad que caracteriza al programa, con elementos en el espacio, no solo aspectos de geometría analítica con rectas y planos, s i no también la geometría clásica dibujando con facilidad cuerpos geométricos y estudiando sus medidas. 1 2 CEP de Sevilla IES Macarena (Sevilla) Uno de los aspectos que primero aparecen en la enseñanza reglada es el reconocimiento de los figuras geométricas y posteriormente sus desarrollos plan os. Es muy corriente trabajar con esos desarrollos en cartulina para construir con ellos los poliedros y otros cuerpos geométricos. Una de las órdenes que aparecieron en los últimos meses, en la que se trabajaba con la versión no definitiva de GeoGebra 5, permite desarrollar con facilidad poliedros regulares, prismas y pirámides. Sin embargo, los que llevamos años trabajando con la versión Beta de GeoGebra 5, comenzamos desarrollando esos cuerpos de forma artesanal, girando puntos y aristas convenientemente para conseguir el desarrollo plano deseado. El objetivo de esta comunicación es presentar los procedimientos que permiten desarrollar cuerpos limitados por caras planas. Veremos la aplicación en algunos cuerpos geométricos que GeoGebra no reconocen como poliedros, por ejemplo, algún poliedro semirregular, y cómo afrontar su desarrollo. Por último veremos las posibilidades de trabajar con algunos problemas clásicos de las matemáticas recreativas, como la hormiga que recorre un paralelepípedo o algún problema de Selectividad. 2. La orden Desarrollo Uno de los comandos que se utiliza en la ventana de tres dimensiones de la versión Geogebra 5 es el comando Desarrollo, que permite conseguir el desarrollo plano de un poliedro. Es una orden que en las diferentes versiones que hemos trabajado ha ido cambiando de nombre, pero ahora ya tenemos la versión definitiva. La orden es muy simple, su sintaxis es: Desarrollo[<poliedro>,<número>] En poliedro basta poner el nombre de un poliedro regular, prisma o pirá mide. El número es un valor comprendido entre 0 y 1. Si aparece el 0 vemos el poliedro como un sólido y si escribimos 1 obtenemos el desarrollo plano. Si escribimos cualquier número menor que 0 o mayor que 1 desaparece la figura. Si escribimos un decimal c omprendido entre 0 y 1 se observa una figura semidesarrollada. Por ejemplo, en la imagen 1 aparece el desarrollo de un cubo con el valor 0.5. Imagen 1: Semidesarrollo de un cubo Esta orden se ha ampliado al pasar la versión 5 a definitiva. Pues permite mostrar distintos desarrollos planos de un mismo poliedro. Esta versión ampliada sería: Desarrollo[<poliedro>,<número>,<cara>,<arista1>,<arista2>,….] La diferencia es que podemos seleccionar una cara del poliedro sobre la que queremos desarrollar, añadiendo una serie de aristas que deseamos que queden libres y sin unir las caras por ellas. Un ejemplo los tenemos en las siguientes imágenes. En la imagen 2 aparece el desarrollo estándar de GeoGebra, en la 3 hemos utilizado la orden siguiente para desarrollar el tetraedro a: Desarrollo[a, 1, caraABC, aristaAB]. Imagen 2: Desarrollo normal del tetraedro Imagen 3: Desarrollo del tetraedro forzando que quede libre la arista AB Aunque los manuales indican que esta orden sólo funciona en el cubo, ya es posible aplicarla a cualquiera de los poliedros regulares. De momento, no está disponible para prismas y pirámides, pero imaginamos que será cuestión de tiempo el que también se puedan desarrollar de esta forma. Un ejemplo de cómo se puede aplicar la orden para obtener todos los desarrollos planos de un cubo puede encontrarse en la siguiente dirección de GeoGebraTube. http://geogebratube.org/student/m136596 3. La orden Rota Antes de aparecer la orden anterior, era necesario rotar puntos y aristas de los poliedros para conseguir girar manualmente las caras y conseguir el desarrollo plano. Aunque ahora ya no es necesario para los poliedros creados por GeoGebra, las herramientas y procedimientos, que entonces utilizábamos, siguen siendo de utilidad para hacer desarrollos de otros elementos que GeoGebra no reconoce como poliedros o cuerpos sólidos. Por ello, pensamos que es interesante repasar como se podían desarrollar los poliedros de forma artesanal y ver aplicaciones en algunos ejercicios. Actualmente podemos utilizar la orden para girar objetos de tres modos distintos. Si seleccionamos el icono correspondiente a rotar en la barra de herramientas, cuya imagen es , los pasos a seguir son elegir el objeto a rotar, el eje de rotación y por último se introduce el ángulo de rotación en la casilla de entrada que aparece. Si introducimos la orden desde la barra de entrada el orden de los elementos del comando cambia un poco y tenemos dos opciones, girar respecto a un eje o a un punto. Sus opciones concretas son: Orden en barra de entrada Rota[<Objeto>,<Ángulo>,<Eje >] Rota[<Objeto>,<Ángulo>,<Punto>,<direcc ión>] Acción Rota el objeto alrededor del eje de rotación el ángulo indicado. Si no se indica eje, gira alrededor del eje Z. Si la dirección es una recta, segmento o vector, gira alrededor del eje que pasa por el punto y tiene la dirección indicada. Si es un plano, la dirección es la del vector característico del plano. Si no aparece la dirección, se toma el eje Z como director. La principal dificultad que nos encontramos al hacer los desarrollos utilizando la orden rota es el cálculo de los ángulos de rotación y los ejes respecto de los que queremos rotar. Podemos pensar que el cubo es fácil ya que las rotaciones son de 90º y respecto de ejes de rotación claros, las aristas del cubo. Pero para girar las caras de un dodecaedro o un icosaedro la cosa ya se complica. Para poner un ejemplo, veamos como desarrollar el tetraedro regular. En esta ocasión partimos del desarrollo del tetraedro que observamos en la siguiente imagen: Imagen 4: Desarrollo de partida del tetraedro En la anterior figura vamos a mantener como triángulo base al ABC. Para formar el tetraedro vamos a utilizar la orden Rota, pero antes vamos a introducir un deslizador h que nos proporcione el efecto de desarrollo del mencionado tetraedro. Este deslizador va a tomar valores entre -1 y 1. Para proceder a formar el tetraedro debemos conocer previamente el ángulo que forman dos caras del tetraedro. En este caso, haciendo los cálculos correspondientes, ese ángulo es de α=109,471º o bien α=1.91063rad. Para nuestro desarrollo utilizaremos β=h*α Con los anteriores datos, podemos definir los puntos siguientes: E’ Punto que resulta de rotar el punto E un Rota[E, β, Segmento[A, C]] ángulo β alrededor del segmento AC N’ Punto que resulta de rotar el punto N un Rota[N, β, Segmento[C, B]] ángulo β alrededor del segmento CB D’ Punto que resulta de rotar el punto D un Rota[D, β, Segmento[B, A]] ángulo β alrededor del segmento BA Es importante tener en cuenta el orden en el que le indicamos el segmento ya que definen vectores distintos. No es lo mismo rotarlo alrededor del segmento AC que el CA. En un caso deberemos indicar que el ángulo de rotación es β y en otro – β. Para finalizar, debemos de tener en cuenta que los vértices de nuestro poliedro son A, B, C, E’, N’ y D’. Los punto primarios E, N y D solamente nos han servido para construirlo. Por tanto, a la hora de trazar el tetraedro, deberemos unir adecuadamente los vértices que lo componen. Si le damos a nuestro deslizador h el valor 0.5 observaremos lo que se aprecia en la imagen 5 y para h=1 observaremos la imagen 6. Imagen 5: Imagen del tetraedro para h=0.5 Imagen 6: Imagen del tetraedro para h=1 Este ejemplo lo puedes encontrar en la siguiente dirección: http://tube.geogebra.org/student/mM2eQWl67 El método es el mismo para desarrollar otros poliedros. Su única dificultad radica en conocer previamente el ángulo que forman dos caras consecutivas y en el número de rotaciones que debe soportar cada uno de los vértices iniciales y en conocer el segmento alrededor del que deben rotar. La cosa se va complicando a medida que nos vamos separando de cuerpos simples y buscamos otros tipos de poliedros, por ejemplo, los truncados. El primer problema al trabajar con poliedros truncados es calcular matemáticamente cuanto deben medir los lados para que las caras de ese poliedro sean polígonos regulares. Así, podemos construir, por ejemplo, un cubo truncado como el que se ve en la imagen 7. Imagen 7: Cubo truncado En este poliedro, construido a base de triángulos y octógonos, y que por tanto no es sólido para GeoGebra, hay que tener en cuenta que el lado del triángulo o del octógono es igual al lado del cubo original dividido entre 2 2 . La dificultad, al hacer el desarrollo, no suelen ser las caras ortogonales que giran siempre un equivalente a 90º, sino las caras triangulares, ya que no giran respecto a las aristas del cubo original, sino a la arista del propio triángulo y un ángulo que hay que hacer varios cálculos trigonométricos para encontrar. Aunque al final se puede conseguir como se aprecia en la imagen 8. Imagen 8: Desarrollo del cubo truncado 4. Problemas resueltos con GeoGebra Queríamos ver en este apartado un par de ejemplos de problemas que solemos encontrar en mucha documentación matemática en los niveles de secundaria, y que pueden ser abordados mediante desarrollos y verse claramente cuál es la solución al problema. El primero que queremos presentar sería el típico de una hormiga que se desplaza por el camino más corto en una caja. El enunciado concreto sería el siguiente: Una hormiga se encuentra en uno de los vértices de una caja de tetrabrik de leche cuyas tres medidas se conocen. ¿Cuál es el camino más corto que tiene que recorrer la hormiga para llegar al vértice que se encuentra más alejado del que se encuentra? En este caso, la situación de partida que se presenta es la que observamos en la imagen 9. Imagen 9: Situación de partida del problema de la hormiga En este caso nos piden el camino más corto que tiene que recorrer la hormiga para ir del punto A1 en el que se encuentra, al punto A. Si hacemos el desarrollo del tetrabrik con la orden Rota, observamos que la imagen queda de la siguiente forma: Imagen 10: Desarrollo del tetrabrik para el problema de la hormiga En este caso, solamente nos queda por trazar el camino recto y calcular esa distancia. Si inicialmente en GeoGebra creamos deslizadores para el ancho, alto y largo del tetrabrik podemos conseguir algo parecido a lo que observamos en la imagen 11. Imagen 11: Solución del problema de la hormiga o mariquita. El segundo es un ejercicio típico de Selectividad en el que tenemos un problema de optimización. Un enunciado real de ese problema es el siguiente: Lo primero es construid el cuadrado al que se le elimina el cuadrado de las esquinas y calcular el volumen del cubo según ese recorte. Podemos hacer el camino inverso, a partir de la lámina recortada construir la caja cerrando las pestañas como vemos en la imagen 12. Imagen 12: Caja recortada Sin más que ver el volumen de la caja y cambiar la medida del corte en la esquina podemos ver cuando se obtiene el máximo. Si además completamos la construcción dibujando el volumen en función del lado del corte nos aparece una gráfica donde queda evidente cuál es el valor del máximo. Imagen 13: Construcción completa 5. Conclusiones A pesar de la potencia que tiene la orden desarrollo para mostrar los desarrollos planos de los poliedros regulares y los prismas y pirámides construidos con las órdenes precisas de GeoGebra, es posible conseguir desarrollos planos de otras construcciones más elaboradas, lo único que hay que echar es tiempo y cálculos para saber exactamente como tienen que rotar los distintos elementos. Aunque aquí nos hemos reducido al caso de los poliedros, estos procedimientos se pueden ampliar a otros elementos más lúdicos, como pueden ser la construcción de aviones de papel o lámparas chinas de las que se utilizan en los festejos. Pero eso quedará para otro momento.