Relaciones íntimas

Anuncio
Relaciones íntimas
Jorge Zabalza :: 29/07/2011
Los tres comandantes: “pedimos protección protección para nuestra gente porque así quedó
acordado en el Club Naval”. El general Seregni se apresuró a corroborar
El viernes 15 de julio, exactamente a las 18:29, veinte horas antes de su fallecimiento, Jorge Beca
Tessa envió un mail titulado “Por las dudas”... Enterado de que Eleuterio Fernández Huidobro, seria
designado Ministro de Defensa, el querido Chiquito advertía escuetamente: “Sería aconsejable tener
pasaporte al día, un bagayito básico y algo de guita”. Mensaje en código carcelario, sólo para
entendidos, me lo imagino rascándose la mejilla con el dedo índice, “¡araca, compañeros!. Genio y
figura. El sarcasmo del Chiquito no era de boliche, por el contrario, en él se pueden reconocer
profundas raíces ideológicas. Jorge pertenecía a una vieja estirpe, los tupamaros que nunca creyeron
ni creen en el sistema, es una desconfianza congénita, nacimos con ella. Es cierto que muchísimos
de ellos votaron por Mujica, para las internas se autoconvencieron de que representaba un proyecto
opuesto al de Astori, el padre de todos los males,y para las nacionales supusieron que un gobierno
del Pepe sería menos de derecha que uno de Lacalle. Se alegraron con el triunfo electoral del viejo
tupamaro y algunos de ellos siguen esperando un giro a la izquierda que no llega nunca y que,
seguramente, nunca llegará. Sin embargo, hasta los más ciegos y sordos de ellos, piensan que la
democracia burguesa no es un camino apropiado para poner fin a las trágicas consecuencias
sociales del capitalismo, que por ahí no se resuelve nada. Ese convencimiento profundo en la
necesidad de una revolución los convierte en una estirpe imposible de redimir, diferente de las
otras, las que ya encontraron la redención y pertenecen de cuerpo y alma a alguna iglesia
parlamentaria y a sus santos patrones. La ironía refleja, además, el profundo conocimiento de la
individualidad del personaje en cuestión, ese conocimiento adquirido en años de vida clandestina,
intimidad de berretines y fraternidad de calabozos. Se termina conociendo al compañero o
compañera más de lo que uno pueda conocerse a sí mismo. Así jugaba de memoria Beca Tessa con
su viejo amigo y compinche el Ñato Huidobro, de ahí que haya considerado oportuno prepararse
“por las dudas” y recomendárselo a la vieja cofradía de irredentos e insoportables. Desde el Club
Naval a Eleuterio En entrevista concedida a Búsqueda hace años, Carlos Julio Pereira,relató lo
sucedido en una reunión “reservada” que el 1º. de diciembre de 1986 convocó Julio María
Sanguinetti, entonces presidente del Uruguay. Invitados el ministro del Interior Antonio
Marchesano, el secretario de la Presidencia Miguel Semino, los comandantes de las Fuerzas
Armadas, Medina, Ricardo Largher y Fernando Arbé y los principales líderes de los partidos
Colorado, Nacional, Frente Amplio y Unión Cívica. En cierto momento de la tertulia, el general
Medina –que ya había escondido las citaciones judiciales en el coffre fort de la Comandanciareconoció que los militares “habían perdido los puntos de referencia”, eufemismo que significa
desaparecer, asesinar y torturar mucha gente, pero enseguida dejó los subterfugios a un lado y puso
la verdad verdadera sobre la mesa, los tres comandantes “pedimos protección protección para
nuestra gente porque así quedó acordado en el Club Naval”. Se hizo un espeso silencio. Lo rompió
Julio María, recordando a los contertulios que de “eso” se había hablado en el Club Naval, pero no
sabía si el acuerdo había quedado formalmente establecido. El general Seregni se apresuró a
corroborar que no hubo acuerdo formal, pero “eso” estuvo subyaciendo en las conversaciones. El
delegado de la Unión Cívica la remachó: “sí, probablemente no quedó establecido pero... estuvo
sobrevolando las conversaciones”. Así funcionan las cosas cuando la democracia es burguesa y las
grandes decisiones se toman entre cuatro paredes con sobrentendidos que sobrevuelan o subyacen.
Eran los “padres de la patria”, los que luego del NO en 1981, del 1o de mayo de 1983 y del Obelisco
en 1984, supieron encauzar la bronca popular hacia una salida “civilizada” a la dictadura, es decir,
sin que cambiara de manos el monopolio de las armas, que es el principal resorte de poder. Veinte
días más tarde, el 22 de diciembre, con los votos blancos y colorados, el parlamento aprobaba la ley
lahaine.org :: 1
de la caducidad de la pretensión punitiva del Estado, ley inconstitucional, inmoral y contraria a los
principios del derecho internacional, aprobada para darle formalidad jurídica a los acuerdos de
impunidad que “subyacían o sobrevolaban” el Pacto del Club Naval. El “retorno a los cuarteles”
incluía el compromiso de los partidos políticos de “proteger” a los terroristas de Estado. Si no se
cumplía, los que retornarían serían los brujos. La impunidad de los crímenes de lesa humanidad es
la doctrina militar para mantener espacios de poder mientras soportan pacientemente el repliegue y
la legalidad vigente. Es un objetivo tan cívico militar como la dictadura. Julio María Sanguinetti, Luis
Alberto Lacalle y Jorge Batlle hicieron lo imposible para que el movimiento popular organizado
renunciara a luchar por Verdad y Justicia, La impunidad venía envuelta en el mismo paquete
posdictadura con el modelo extractivo y depredador de los recursos naturales, extranjerizador de la
propiedad de la tierra y de la banca, privatizador de las empresas públicas y pagador puntilloso de la
deuda externa. Los “padres de la patria” dieron una batalla a brazo partido por ese paquete, para
doblegar la conciencia de la gente, para apagar la llamita que hacía resistir y resistir. En el 2002
llegó el convidado de piedra, la crisis. Nadie creía en el parlamento ni en el gobierno y en la cola de
los repartos de alimentos la gente no soportaba más. La crisis económica acarreó el desprestigio del
régimen y abrió la posibilidad de que se transformara en crisis política con desborde popular como
ocurría en la Argentina. Sin embargo, el sistema ha demostrado poseer muchas vidas y sabe
reacomodarse para salir indemne, el progresismo vino a salvarlo, se le dió una mano a Jorge Batlle y
a Atchugarry para zafar del mal momento y retomar el control de la conciencia bajo nueva forma.
Los dueños del poder se pueden sentir bien satisfechos del curso de las cosas desde el 2005, el 25%
de la tierra está en manos extrajeras, hay récords de ventas de cero quilómetros, de
electrodomésticos, de ganancias de los bancos, de exportaciones agropecuarias que no pagan
impuestos, Botnia se lleva más de 500 millones de dólares libres por año, pagamos casi 2.500
millones de dólares al año por intereses y amortizaciones de deuda externa, el gobierno progresista
se abraza con los EEUU por detrás de las caricias con Venezuela.... y hasta se logró el objetivo
político para la etapa, pues el progresismo ha hecho aceptar la impunidad derrotando la lucha por
Verdad y Justicia de manera tal vez irremediable. El paquete completo sin oposición alguna, o mejor
aún, llevado adelante con aire de “yo no fui” y “como te digo una cosa hago lo contrario” por quienes
históricamente se le opusieron hasta que llegaron al gobierno. Con un discurso antineoliberal, el
antineoliberalismo se encargó de aplicar el modelo neoliberal dejando contento al pueblo, paradoja
de paradojas! Y ahora... Eleuterio al Ministerio de Defensa. Un “combatiente” entre “combatientes”,
experto en relaciones íntimas con los militares, poseído por el deseo de que todo el mundo se abrace
y se bese con los criminales más perversos. Víctima del terrorismo de Estado defensor voluntario del
olvido y el perdón a los terroristas. luchador incansable por “más presupuesto para los militares”,
soldado del presidente de la República, nada mejor, el operador ideal para consagrar
definitivamente la impunidad. Mejor que Sanguinetti, la excelencia, la frutillita en la torta. Punta
Carretas, celda 262 Era la celda de Eleuterio, el Pepe Mujica y el flaco David, ... ahí se fabricaron
la línea de “justicia popular” y el Plan Satán, secuestros al por mayor para canjear los presos
políticos por un “seleccionado” de secuestrados. En ella se ideó el Plan Cacao destinado a terminar
con el balconeo de la oligarquía, llevando la lucha guerrillera a sus barrios y lugares de diversión, al
que luego Raúl Sendic se opuso por el uso indiscriminado de los explosivos, haciendo necesario el
Plan Remonte para remontar el desastre que nos costó las vidas de Roberto Rohn y Carlos López.
También en dicha celda se creó la idea de una “noche de San Bartolomé” con el Escuadrón Caza
Tupamaros, la que se concretaría con las operaciones del 14 de abril de 1972. En ella se esbozaron
el Plan Hipopótamo para la “toma de Montevideo” por el aparato guerrillero tupamaro y el Plan ’72
para preparar el asalto al poder y de ella surgió también el Plan Collar, que luego Huidobro
impulsaría personalmente con la toma de la ciudad de Soca. Una verdadera usina de planes
militaristas esa celda, aunque los ideólogos que encerraba ahora se hagan los chanchos rengos. Fue
asimismo la celda donde se produjo el proyecto de documento No. 5 del MLN (T), que en uno de sus
puntos decía que “Las FFAA de algunos países han demostrado que frente al atraso de las masas y a
la inexistencia de un fuerte proletariado pueden asumir el rol de vanguardia y de partido (por ser el
lahaine.org :: 2
sector más poderoso, moderno, templado, coherente y disciplinado), desempeñando un buen papel
en la defensa de la soberanía, la independencia y el desarrollo”. Hasta el documento No 5, en el
MLN(T) nadie tenía dudas al servicio de cuales intereses estaban las fuerzas armadas en la sociedad
de clases. En realidad, hasta la toma del Centro de Instrucción de la Marina y la expropiación de
todas sus armas sin efectuar un sólo disparo ni lastimar a nadie, el movimiento tupamaro había
evitado el enfrentamiento directo con ellas, pero no se las atacara frontalmente simplemente por
táctica, esperando que la guerrilla lograra acumular la capacidad militar para hacerlo. El MLN(T)
siempre tuvo una política muy afinada hacia el ejército, pero sin confusiones sobre su rol en el
sistema ni con falsas expectativas políticas. Los tupamaros fuimos educados en el ejemplo de los
guerrilleros cubanos que conquistaron el poder luego de derrotar la ejército de Batista, una
revolución hecha “contra” las fuerzas armadas. En ese sentido, el documento No 5 introdujo la
posibilidad de hacer la revolución “con” las fuerzas armadas, idea que determinó un cambio muy
significativo entre las que se manejaban al interior de la organización. Dicha tesis sería cultivada
durante las conversaciones con los altos y bajos mandos en el cuartel del Batallón Florida pero, sin
embargo, en el cotejo con la práctica, no logró el éxito esperado. Al final de “La tregua armada”, en
la página 178, Eleuterio evalúa que “Nuestro error en 1972 fue haber creído que era posible influir
sobre un sector muy grande. Los antecedentes que citamos anteriormente y ciertos hechos que
transcurrían ante nuestros ojos, daban para pensar en ello, Nos equivocamos. La experiencia enseñó
que si bien es necesaria y debe ser permanente la labor política en el seno de las FFAA, las fuerzas
populares no debemos hacernos ilusiones en cuanto a lograr, en base a ello, ganar para el pueblo a
sectores importantes y orgánicos de las FFAA. Éstas están concebidas y montadas de tal modo que
las rosca dominante nunca va a perder su control. Otra cosa sería suicida. Dicho aún más
claramente, ellas son la garantía real y de última instancia que tiene la rosca para cimentar su
poder”. Era previsiblemente ilusorio creer que se podía incidir en la interna militar, apoyarse en un
grupo peruanista –o que se deseaba creer que era peruanista- para influir sobre otros y llegar a
desalojar del mando del ejército a los presuntamente más fachos. La historia del terrorismo de
Estado mostró que esa división en buenos y malos era más bien subjetiva , que todos ellos
torturaron, asesinaron y desaparecieron forzosamente, que todos secuestraron niños y todos
metieron la mano en la lata. ¿Dónde estaban los preocupados por los intereses populares? ¿En qué
quedó el anunciado programa de los documentos 4 y 7? Vulgares maniobras, operaciones de
inteligencia para confundir y dividir las filas populares. Es cierto que al interior de las filas militares
hubo -y todavía hay- pujas entre logias, grupos de interés, bandas de ladrones, personajes y etc.,
pero a la hora de los hornos todos unidos en el terrorismo y todos fielmente subordinados a la
estrategia mundial que elucubran las computadoras del Pentágono. Durante los primeros años del
proceso de reorganización del MLN(T) de 1985 en adelante, Huidobro debió dejar su tesis militar en
estado latente o larvado. Además de haber reconocido su equivocación, ella no tuvo receptividad
entre los tupamaros liberados y regresados del exilio. Recién después de la muerte de Raúl Sendic
en 1989, la tesis reverdeció, recobró vida activa y se concretó en forma de relaciones íntimas con
distintos actores de la interna militar. Ahora con el Pepe en la presidencia y el Ñato en Defensa, la
tesis del documento No 5 parece haber encontrado grandes espacios para echarse a volar y
desarrollarse en todo su esplendor. De sus dichos se infiere que siguen pensado lo mismo, que los
militares están en condiciones de desempeñar un papel de vanguardia en la defensa de la soberanía,
la independencia y el desarrollo. Los que continúan fieles a Marenales, Huidobro y Mujica, están
convencidos que los cambios en serio sólo pueden concretarse con el respaldo de ese partido
disciplinado y vertical, otro gigante estúpido, pero acostumbrado a obedecer y mandar sin chistar y
sin escrúpulos.. Los paradigmas ya no son, como en 1971, Velazco Alvarado en Perú y Torres en
Bolivia, ahora se esgrime el ejemplo del compañero Chávez, borrando de un plumazo las
especificidades del proceso venezolano, una historia muy diferente a la de los ejércitos del Cono Sur,
y olvidando además lo ocurrido a Zelaya en Honduras y a Correa en Ecuador. Matrimonio por
conveniencia “En un mundo como en el que estamos viviendo con graves problemas, vamos a
necesitar la colaboración estrecha entre militares y civiles”, fundamentó Huidobro en sus
lahaine.org :: 3
declaraciones a “El Observador”. En realidad, el mundo siempre estuvo lleno de gravísimos
problemas y los militares, precisamente, han sido los encargados de resolverlos por la fuerza,
reprimiendo a las grandes mayorías para beneficio de los pocos y poderosos. La defensa de la patria
es asunto fundamentalmente civil y sólo en parte militar, argumenta por ahí en la entrevista que le
hiciera Búsqueda. Muy bien, pero ¿cuál es el enemigo? Tendría que aclararlo antes de invitar a
defenderse de él. Si el problema es la catástrofe medioambiental, los enemigos de la humanidad son
muy concretos, porque quienes la provocaron son las inversiones capitalistas del tipo Botnia, del tipo
Aratiri, acumuladas durante siglos en todo el planeta. No veo a Huidobro y sus asociados dispuestos
a arremeter contra las inversiones extranjeras, más bien todo lo contrario, son sus protectores. Es
más probable que quieran defenderse de las organizaciones ambientalistas que denuncian la
depredación capitalista. Si el problema es defenderse de una posible agresión armada, habría que
prepararse para enfrentar a los EEUU y sus socios de la OTAN, incluyendo el Estado de Israel. No
queda otra, En el mundo no hay otros agresores, los demás son víctimas indefensas, niños y mujeres
asesinados a quienes se entierra bajo el rótulo de “daños colaterales”. No lo he oído a Huidobro
preocuparse por el pueblo palestino, ni denunciar que los barcos con ayuda solidaria son abordados
por piratas israelíes en aguas internacionales, no lo he oído agraviarse por las heridas infinitas de
los pueblos de Irak y Afganistán. En el Pentágono está sentado el único enemigo del pueblo
uruguayo. ¿Nuestras fuerzas armadas defenderán un proyecto nacional contra los principales
centros exportadores de armas y guerra? La historia enseña que nos espera todo lo contrario y que
Eleuterio se subirá a las relaciones íntimas con el Comando Sur del Pentágono, participará de todas
las misiones represivas contra los pueblos, como la de Haití y de todas las maniobras con las fuerzas
armadas de los EEUU. Como contrapartida, podrá exhibir con orgullo alguna policlínica o un campus
deportivo. Los pactos o contratos matrimoniales por conveniencia no necesitan ser formalizados por
escrito y firmados por los contrayentes....no siempre hay un besito para la foto, cuando son espúreos
y vergonzosos se los oculta bajo dilemas falsos y falaces, sobrevuelan o subyacen como la impunidad
en el pacto del club naval. Más allá del grado de intimidad al que puedan haber llegado, las mutuas
conveniencias los unen. Por un lado nadie mejor que Huidobro, con su pasado, el que lo legitima a
ojos del común, como operador asociado a los uniformados en la batalla por su impunidad. Y, por el
otro lado, para cualquier proyecto o aventura política que pueda nacer de un cerebro en estado
febril, no hay aliado más contundente que el partido militar. ¿Se imaginan la presión que pueden
meter en la interna frenteamplista los favorecidos por la intimidad con los Tenientes de Artigas? ¿Se
imaginan la “pesadez” conque el novel ministro de defensa puede reclamar un pedazo más grande
de la torta presupuestal?. El Apocalipsis, sin embargo, no está a la vuelta de la esquina. O, por lo
menos, eso esperamos. En cambio, es posible pronosticar que el nuevo matrimonio cívico militar
ocupará espacios cada vez más importantes en el escenario político del Uruguay Progresista y será
protagonista de pulseadas de poder e incidentes hoy increíbles. Como tengo el pasaporte vencido,
voy a seguir el consejo de mi hermano, Jorge Beca Tessa, el Chiquito. Semanario Voces
_______________
http://www.lahaine.org/mm_ss_mundo.php/relaciones-intimas
lahaine.org :: 4
Descargar