PAÍS: España FRECUENCIA: Diario PÁGINAS: 44 O.J.D.: 137791 TARIFA: 9198 € E.G.M.: 517000 ÁREA: 364 CM² - 40% SECCIÓN: SOCIEDAD 5 Septiembre, 2014 El pequeño Walid, de cinco meses, junto a su familia y el equipo médico del Hospital Vall d’Hebron ABC Primer cateterismo cardiaco a un bebé de tan solo cinco meses · El dispositivo usado por el Vall d’Hebron evita la cirugía a corazón abierto ESTHER ARMORA BARCELONA La pared que separa las dos aurículas del diminuto corazón del pequeño Walid era defectuosa, lo que hacía que su órgano vital central y sus pulmones estuvieran sometidos a un estrés permanente y que precisara de fármacos de forma crónica. Gracias a una intervención pionera realizada por un equipo de cardiólogos pediátricos del Hospital del Vall d’Hebron de Barcelona, que le han implantado un minúsculo dispositivo mediante un cateterismo cardiaco, la vida de este pequeño, que no había respondido a ningún tratamiento, será ahora totalmente normal. Es la primera vez que se realiza una intervención de estas características a un niño tan pequeño, según han precisado fuentes de este hospital barcelonés. Pese a la medicación que se le dispensó al bebé en los primeros meses de su vida, su estado no mejoraba, por lo que con cinco meses de edad le practicaron un cateterismo cardiaco para corregir la malformación. Según los médicos de Vall d’Hebrón, este nuevo dispositivo tiene un diseño muy innovador, ya que contiene muy poco metal en su estructura y está recubierto de un material especial que lo hace muy flexible, lo que permite poder utilizarlo en pacientes muy jóvenes. La intervención la realizó el cardió- logo pediátrico Pedro Betrián y, pocos minutos después de la intervención, ya se observó una mejora del funcionamiento del corazón del bebé. Cinco días más tarde, el niño recibió el alta hospitalaria y en los controles posteriores los cardiólogos constataron que su corazón había recuperado la función normal. Según los responsables del hospital, Walid, que ya tiene más de un año, actualmente se encuentra bien y se ha suspendido toda la medicación que necesitaba. El caso de Walild es excepcional y supone «una alternativa al uso de dispositivos convencionales más rígidos, o a la necesidad de recurrir a la cirugía cardiaca a corazón abierto», destacó el jefe de Servicio de Cardiología Pediátrica del Área Maternoinfantil del Hospital Universitario Vall d’Hebron, Ferran Rosés. Hospital Vall d'Hebron; Salut; Sanitat